Partida Rol por web

Tu celda huele a mierda y esos cabrones de aspirantes a policías- pues sólo un tal Perry, un tipo delgaducho con un largo mostacho blanco y muy mala uva es policía- no te dejan salir ni a estirar las piernas.

Todo comenzó en el extremo Oriental de la isla, estabas allí en una expedición cortando leña con  Matt, Percyval y Anderson como de costumbre cada uno contando sus historias, borracheras, ligues con isleñas o turistas cuando escuchásteis gritos que venían de la pequeña carretera que iba hasta Coral Bay.

Os mirásteis extrañados y os acercáisteis a echar un vistazo, al llegar a unas decenas  de metros vistéis el horror: centenares de personas en una procesión horrenda iban por la carretera, con la salvedad de que esas personas estaban algunas de ellas destrozadas, con miembros amputados y desde luego muertas, pero sin estarlo del todo y los gritos era de los ocupantes de un turismo que se cruzó en el camino de la horda y estaban siendo devorados. Era el Día Z.

Anduviste por el bosque, sólo durante más de una semana, todos tus compañeros fueron alcanzados uno a uno por los "podridos" como acostumbras a llamarlos  que infestaron el bosque y devoraron al resto.

Tú sobreviviste, sólo... matando zombies con un hacha y una sierra, mataste docenas de formas muy diversas... eso te trastornó y te cambió para siempre. Cuando llegaste a los límites de Cruz Bay ya no eras un leñador.

En seguida ayudaste a las escuadras de exterminio pero una vez la ciudad y los alrededores estuvieron libres de zombies comenzaste a aburrite, entonces luchaste en el ejército - o ejércitucho- de Cruz Bay en la guerra contra Coral Bay en el Lagor Burdeux, fuiste uno de los soldados más destacados y te dieron una mierda de medalla que vendiste para comprar cerveza.

El caso es que después te metiste en problemas, una pelea en un bar con un tipo que resultó ser uno de los lugartenientes de Ricky Sánchez, el líder de Cruz Bay que apunto estuvo de ejecutarte aunque a última hora se echó a trás misteriosamente y ordenó que te metieran aquí en el calabozo hasta que encontrase otro destino mejor para ti.

Das un golpe en los barrotes de tu celda, huele a sudor- a tu sudor - llevas dos semanas allí encerrado sin salir ¡ no te pueden tratar así ! ¡ eres un jodido héroe de guerra!

Intento llamar la atencion de alguna persona que este alli.

Intentas llamar la atención de Perry o de algún otro guardia, pero los cabrones no te hacen ni puto caso. Pataleas, gritas, silbas, cantas, les insultas, insultas a sus madres pero nada... no hay manera de que te hagan caso.

Finalmente, te sientas en el suelo apoyando la espada contra la pared con las piernas recogidas y empiezas a quedarte dormido, cuando ya casi estás en el mundo de Morfeo, alguien grita tu nombre y te despiertas sobresaltado.

- Cristopher Jarey! o Julu! como coño te llames ! ¿ me escuchas muchacho ? ¿ estás ahí ? - pregunta una voz desde el otro lado.

- Te escucho.Aqui estoy en una celda.¿Quien habla?¿Como sabes mi nombre?

La puerta de la celda, se abre y del otro lado aparece ese cabrón de Perry y un tipo vestido de bombero, por los galones es sin duda un capitán, te preguntas qué querrá de ti.

Entra poniendo cara de asco, parece que tu celda huele a rayos, pero afortunadamente, el capitán de bomberos es un hombre discreto y no dice nada sino que prefiere ir al grano

- Buenos días muchacho, ¿ Quieres salir de aquí ? Ricky Sánchez* quiere verte. Tiene un negocio que proponerte que quizás te interese, desde luego aliviaría mucho tu presente situación. ¿ Qué me dices ? te vienes conmigo al ayuntamiento a ver a Ricky o prefieres quedarte aquí a oscuras.

Ricky Sánchez es el líder de Cruz Bay, es un guerrillero que junto con una pandilla de hombres que le apoyan, se armaron el día Z y proclamaron a Ricky como líder de la ciudad. Gobierna con mano de hierro.

-Por supuesto haria cualquier cosa para salir de esta celda putrefacta.

Enarca las cejas

- Caray! no me esperaba que fuera a ser tan fácil. Perry saca a este hombre de aquí, abre ahora mismo la celda y que salga- Perry obedece y por fin en muchos días la puerta se abre.

- De acuerdo, ven conmigo.

Sigues al capitán Sawnsee al exteriory ambos váis al ayuntamiento.