Partida Rol por web

Dejais con la palabra en la boca al aldeano y decidis acurrucaros en la noche, nerviosos, tensos, dispuestos a descansar algo, aun es pronto, asi que podeis aprovechar bastantes horas para descansar. Mientras los esclavizados y confusos pueblerinos, liberados por vosotros del poder del erratico flautista, se marchan andando en la noche. Al parecer conocen estas tierras bastante bien y no parecen tener demasiados miedo, de hecho, dan la sensacion de que desean alejarse de las tierras en las que estais a punto de adentraros, avanzando en direccion opuesta a vuestro camino.
Una vez envueltos en vuestro petate, todo parece mas seguro. Poco a poco el sueño os acecha, cerrando vuestros cansados ojos y sumiendoos en un sueño reparador.

Al ver como parten los pueblerinos, se me ocurre una idea, que por impetuosa, he de llevarla a cabo.

Invierto unos segundos en analizar criticamente al grupo, buscando una persona que nos pueda guiar por esta mierda de terreno, y quiza, con suerte nos pueda servir para encontrar el escondite. Selecciono a la persona que mejor se ajuste a lo que busco, me acerco y le digo:

Jefe, necesitariamos de uno de ustedes para que ejerza de guía para nuestra expedición durante unos días, nosotros no conocemos muy bien esta zona, la paga no será mala, ¿podria indicarnos quien es la persona adecuada para este fin?

nota: si esto funciona y acaba aceptando alguien , pienso explicarle claramente los riesgos que conlleva, pero priemro y apra tantearlos, no dire nada.

Te acercas a un hombre, de complexion fuerte y que parece sano. Al mencionarle tu idea sonrie y te dice:
Nadie de nosostros les servirá como guía, señora. Somos gente mayor y lo unico que deseamos es volver a nuestro hogar y seguir con nuestra vida. Conocemos bien esta zona y podemos indicarles si lo desean, pero me temo que ninguno se adentrará en la dirección en la que ustedes van. Es zona maldita, plagada de demonios en la noche, nadie sale con vida de alli. Cenagal maldito.
Mientras dice estas ultimas palabras hace un signo de proteccion con las manos.

Le pregunto si por la direccion que marca nuestra brujula, hay algo a destacar, como una cueva, o cualquier cosa que nos ea mas cenagal

El hombre os observa con una mezcla de admiracion y asombro.
Por alli solo hay muerte... Dice en voz baja. Luego se vuelve hacia vosotros, algo menos serio. En esa dirección existe una carretera, se la encontraran en el camino, no hay pérdida, atraviesa la cienaga en dirección a Grimpengratz. Pero no salgan de la carretera, alrededor hay fosas y pozas mortales, y algo mucho peor al caer la noche...
Grimpengratz es un asentamiento seguro por esas tierras, pueden llegar en una sola jornada, antes de que el sol desaparezca y los demonios os cacen.
Si no desean nada mas...
Al deciros esto, se vuelve hacia su grupo, que ya empieza a marchar, con la intencion de alejarse de nuevo a su hogar.

Opino que lo mas seguro seria ir al pueblo que nos ha dicho el hombre y alli descansar y meditar sobre nuestro viaje.Incluso arriesgarnos a usar el diente otra vez, ya que nos podriamos haber saltado nuestro destino, o haber pasado cerca sin percatarrnos.

Asiento conforme al plan de Soeman. Durmamos, y personalmente, pasaria de hacer guardias.

Pienso lo mismo

Sin decir prácticamente nada, me acuesto. Tengo los músculos cansados por el baile, pero la mente bastante relajada, aunque confusa. Me cuesta dormir, no paro de darle vueltas a lo ocurrido... mientras estaba poseído me sentía algo incómodo, violentado... pero a la vez ha sido agradable dejar de pensar un momento en los graves acontecimientos en los que me he visto envuelto estos últimos días. Mientras mi cerebro paladea los últimos coletazos de esa extraña sensación, me voy dejando atrapar por el sueño.