SANIA VALIANT
KARA-LUHAR Y ALREDEDORES
NINGUNO
NINGUNO
Alojamiento bueno en la posada El Cisne Gris. Habitacion doble con camas separadas y con baul propio para pertenecias.
- Camisa
- Chaqueta
- Pantalon
- Botas
NINGUNO
NINGUNO
SALUD
SANO
1 moneda de oro
- No tienes ropas de invierno suficientes, urge que compres algo de abrigo
La habitación no estaba mal despues de todo y a pesar de lo que se podía pensar en un principio. Había otras dos camas pero ninguna estaba ocupada. Sobre el suelo de madera reblandecido, seguramente por goetras y humedad, había una bonita alfombra sobre la que se proyectaba la luz de la luna que se asomaba por la unica ventana de la estancia. Estaban las camas cubiertas por unas mantas de colores algo desgastados bajo las que había unas sábanas muy blancas que olián a algún tipo de hierba dificil de reconocer, pero de muy agradable aroma.
A los pies de la alta cama había un pequeño baul encadenado a una argolla que estaba bien fijada en el suelo. la cerradura parecía medainamente resitente y el posadero te había entregado la llave antes de dejarte.
Observó todo con tranquilidad, los detalles del lugar y se dijo que no estaba tan mal, además, por lo pronto no tenía que compartir el lugar con nadie más. Se sentó sobre la cama, se quitó las botas y luego, caminó por aquella alfombra y sintió una agradable sensación en los pies. Tomó su pequeño bolso de viaje y la capa y se dispuso a ponerlos en el baúl. Sonrió al ver cómo el baúl estaba anclado al piso, hombre prevenido el posadero Dumfa, si los hay.
Luego se tiró en la cama, de verdad estaba cansada y ni aquel olor extraño pero no desagradable, podía quitarle el sueño en ese momento. Con gran esfuerzo levantó su menudo cuerpo para meterse debajo de las cobijas y poco a poco se durmió.