Partida Rol por web

3000 nuevosdolares? Una gran suma...

Yo estoy con Alice, puedes contar conmigo. Dice mientras coge su parte de la paga. Realmente disparar a los centinelas no era algo que le quitase el sueño.

Y Ahora? Cual es nuestro siguiente paso?

Me observo a los mercenarios abalanzándose como cerdos al maíz y frunció el labio en una mueca despectiva. Por su parte, lo pensó con detenimiento. La suma distaba mucho de ser despreciable, y ya podía imaginar sus usos… Le daría un buen impulso a la investigación. Además, debía admitir que era una teoría intrigante. Y una oportunidad de ampliar el negocio.

Observo a Kellerman, todavía sin moverse.

- Admito que ahora tiene algo más de sentido. Sin duda nos estas mandando a un riesgo importante… pero el precio parece acorde. No obstante, para dejarlo claro, solo estas interesado en un trozo grande del cráneo de ese supuesto fósil, ¿verdad? Podemos quedarnos con cualquier otra pieza que encontremos, supongo. 

El resto de sus compañeros parecían pensar, pensar y pensar. Tom era un orco. Había pedido dinero y se lo habían enseñado. No necesitaba más.

Cuenta conmigo. Tienes dinero, tienes mis manos.

Estupendo, sabía que podía contar con vosotros- eso, y el dinero ayudaba a convencer a la gente- hay un distinguido coleccionista de antigüedades en esta ciudad llamado Francis Wincleman, que está especializado en antiguos templos yuritas. Quizás él pueda ayudarles a encontrar algún emplazamiento relacionado con los adoradores del cristal azul. Y no, no tengo ni idea de donde vive el hombre, pero el pago que os hago es bastante generoso como para que os busquéis algo la vida para encontrarlo, ¿no creéis?

Resoplo, dando por sobreentendido que entonces era tal como él lo decía. Bien, antigüedades yuritas y quizás algo más. Se humedeció los labios, y con pasos lentos, fue el último en tomar el dinero, que desapareció en su bolso...

- Tal vez. +replico+ De momento, lo mejor será movernos. Si encontraron esa reunión, puede que no tarden en venir a golpear esta puerta.

Había que separarse y empezar a buscar al tal erudito. Por suerte eso descartaba muchos lugares.

- Creo que es por dónde empezar, pero no podemos ir todos. A lo sumo, uno o dos de los que parezcan menos sospechosos.+ observo detenidamente a sus “compañeros y una mueca sardónica se hizo presente en sus labios. ¿Como habia acabado juntandose con tal ralea?+... o quizás mejor yo solo. El resto deberían prepararse para viajar cuanto antes.

Puede ser que no sepas en donde está Kellerman, pero si sabes lo que tiene, es porque tienes una idea aproximada de por dónde empezar. Cuanta más información nos des, antes tendrás lo que buscas. Es tu decisión.

Se que Winckleman es un reputado coleccionista que ha salido en bastantes ocasiones en la prensa. Quizás buscando a través de alguna biblioteca podáis dar con mas información que os ayude en vuestro objetivo.

Ahí estaba el dinero. Esa cantidad no estaba nada mal, daba para cubrir algunos gastos (quizás alguno pequeño para la nave). Se acercó y cogió el dinero, el cual no tardó mucho en guardar. Se encogió de hombros y miró a sus compañeros - no soy mucho de investigar, pero quizás incluso los yuritas sepan donde hay cementerios de esos bichos.

Se cruzó de brazos y se apoyó en una pared - habrá que aprovisionarse para ir al desierto, quizás tratar algún tema personal, ¿qué os parece que cada uno se disperse y encontrarnos mañana a una hora y lugar para partir?

Tampoco soy mucho de investigar. Cuenta conmigo para esa excursión que planeas Arrah. Los cuatro ojos pueden ir a la biblioteca.

Por lo visto, aquí casi todo el mundo era hombre de acción, parece ser que pocos se encontrarían a gusto entre estanterías llenas de libros.

Yo tampoco me muevo bien entre libros... Max se quedo mirando a August, parecía el más culto de todos.

A usted se le da bien eso de buscar entre libros, August?

Resoplo quedamente, cruzando las manos tras la espalda. Ya estaba preparado para salir, puesto que iba ligero.

-Justamente, a eso me refería. Ya imaginaba por donde iban los tantos con la búsqueda de tal personaje. Por eso, como dije, a lo sumo deberían acompañarme uno o dos... si bien dudo que ninguno de ustedes pueda pasar siquiera levemente inadvertidos en esos lugares. Si he de ir solo, tanto mejor. ¿Dónde nos reuniríamos?

Obviamente, antes de ir en busqueda, debia pasar a cambiarse. Incluso el seria mal visto si iba con la mugre que traía...

Escuchando las palabras de August, responde.

Bueno, si nadie más se ve cómodo en una biblioteca, yo puedo acompañarle. Soy una persona...discreta.

Hola, ya hace una semana que estoy sin conexión de Internet y solo estoy con los datos móviles del celular (había dejado un mensaje en el foro). En cuanto se solucione el problema me pondré al día. Disculpen las molestias! 

- Tengo mi nave... ¿Que te parece Arrah si vamos juntas para acondicionar todo y prepararnos para viajar? Si ellos van a la biblioteca, necesitamos dos que recorran los bares de la ciudad preguntando por este sujeto mientras que nosotras nos dedicamos a lo que mejor sabemos hacer. ¿De acuerdo? - pregunto y espero la respuesta ya con muchas ideas en mente, solo esperaba que la chica venga conmigo. 

Miro a Max de arriba-abajo, sin disimulo. Discreto. Sus ojos verdosos giraron en las orbitas. Pero no rechazo la ayuda, si las fuerzas de seguridad volvian a encontrarlos, mejor tener alguien mas cerca.

-De acuerdo, vamos. El resto, nos vemos en la nave entonces...

Saludo con un cabeceo al resto e hizo señas a  Max de que salieran. Antes que nada necesitaba ir a su alojamiento a cambiarse y acto seguido podrian comenzar a revisar las bibliotecas de la ciudad. Seria bueno si tambien habia alguna cercana a un museo. Si era un raton erudito, seguro no buscaria saber solo en libros, sino tambien en muestras.

Con un leve gesto de la cabeza asiente y sale detrás de August.

Si no te importa Alice, no eres la única que sabe de bares. Iré con vosotras.