Partida Rol por web

Los Lamentos de la Naturaleza

2. Serias picaduras

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07/06/2010, 21:41
Director

Henry acude al cuarto de baño a toda prisa, obedeciendo a su madre. Rebusca entre los pocos frascos que allí se encuentran, y localiza alcohol etílico, yodo, gel de baño, champú, espuma de afeitar, y una especie de pomada para quemaduras, así como gasas y vendas, algodón... Pero ningún tipo de repelente de insectos o similar.

Tras inspeccionar la casa por alto, Sammy se percata de que no hay teléfono. Aquel hombre, más que probablemente un leñador a juzgar por alguna de las fotos del dormitorio, vivía algo aislado, quizás era un amante de la soledad, un naturista viviendo en comunión con la naturaleza.

La puerta de entrada fue cerrada tras volver al interior de la casa, y ahora escucháis a Roger aporrear la puerta como buenamente puede, mientras llora y suplica vehementemente que le ayudéis.

-¡¡¡¡AAAIUUUUUDAAAAAAAAAAAA!!!!!!!!!!

Seguido de un horrible grito de dolor.

-¡Mataaaaaaadmeeeee!!!!!! ¡Mat...d..mee....!!!!!

Al entrar en el dormitorio, Sammy ve que hay algunas hormigas por la cama, ascendiendo por las patas de ésta, así como alguna entrando por la ventana abierta, desde una rama del árbol vecino.

Vuestras picaduras son horribles, os miráis y se ven infectadas. Está claro que si lográis salir del bosque, debéis acudir al hospital a que sean tratadas de inmediato. Afortunadamente, no se ven rastros de hormigas bajo la piel, pero antes de cantar victoria, vale más acudir al hospital.

Sólo que la única puerta de la casa, una casa en la que hay hormigas, como acabas de comprobar en el dormitorio, está Roger Evans, medio muerto, suplicando ser asesinado.

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10/06/2010, 16:22
Samantha Stuart, "Sammy"

Mierda, mierda, mierda... Mi cabeza no da más de sí. Demasiadas cosas de golpe... demasiado peligro... pero tengo que salvar a mi pequeño, por encima de todo. - Henry, aléjate de las hormigas... procura que no se te suba ninguna encima. No te acerques a paredes ni a muebles ni a comida... ¡A nada! - y me lanzo a recorrer la casa a todas prisas, intentando no escuchar los fuertes alaridos que aquel moribundo profesaba a la madera de la puerta... tenía que salir de allí corriendo, y la cosa no pintaba nada bien. Rebusqué por armarios y estantes. Aquel hombre quizás tenía una escopeta, lo cual iría demasiado bien para poder avanzar por el bosque. Una linterna... algo de pan o comida de cualquier tipo...

El tiempo corría, y yo tenía que salir de esa casa como fuera posible. Intenté evitar aquellas hormigas. Después de un tiempo prudencial, agarré todo lo que había recolectado de la casa e intenté buscar una puerta trasera o, de no ser así, una ventana por la que salir con seguridad.

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12/06/2010, 17:27
Henry Stuart Jr

 

El niño mira con miedo las paredes, el lavabo, la bañera, todo lo que se encuentra a su alrededor, temiendo encontrar en ellos hormigas, u otros insectos. Aunque no es realmente consciente del peligro que representan, la advertencia de su madre es suficiente para que provoquen en él un gran temor.

- Mami, aquí hay muchos botes, pero no repelente - dice desde el cuarto de baño. Después sale y sigue a su madre, estará más seguro con ella.

 

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14/06/2010, 23:09
Director

La comida está toda llena de hormigas, toda. No hay nada que no tenga bichos. Se ve que no sólo de seres vivos se alimentan. Casi cualquier cosa parece servirles de sustento.

Sin embargo, pese a que escopeta no encontráis, sí que localizáis en la cocina el hacha del hombre. Es el único arma, además de los tradicionales cuchillos de cocina, que hay en toda la casa.

También habéis encontrado varias linternas, así que de las que funcionaban, que no todas lo hacían, habéis tomado dos, una para cada uno.

Explorando la casa, quizás la ventana más segura por la que salir, para que no os vea ni el hombre, ni estéis próximos a la zona por la que las hormigas están entrando, es por la ventana del salón. Podéis bordear la casa, y salir en dirección norte, alejándoos de la vivienda, casi sin ser vistos a lo más seguro.

 

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17/06/2010, 15:05
Samantha Stuart, "Sammy"

Maldición - pienso con rabia cada vez que un posible alimento aparece chafado por la presencia de esos insectos... - Tenemos que salir ya - Las cosas iban demasiado deprisa, estar en la casa era peligroso, así que agarré las dos linternas, rezando para que tuvieran suficiente energía, y agarré el hacha del leñador... por si aparecía otro lobo y no podía correr, aunque las posibilidades de supervivencia serían igualmente bajas, pero ahora no tenía tiempo de pensar en alternativas.

Agarré con todo lo que pude y con mi pequeño, abriendo la ventana del salón y ayudándole a salir primero a él para luego salir yo, y empezar a correr por el bosque, en línea recta, tirando de la mano de henry. 

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18/06/2010, 12:08
Henry Stuart Jr

 

El niño sale por la ventana, apremiado por su madre, que aún desde dentro, le ayuda a salir. El niño intenta darse toda la prisa que puede: no quiere que su madre esté separada de él mucho tiempo.

Una vez ella también ha salido, ambos comienzan a alejarse de la cabaña lo más rápido que pueden.

 

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19/06/2010, 02:33
Director

Salís corriendo de allí. A los pocos pasos, entornáis un poco la cabeza, y veis al moribundo hombre intentar correr hacia vosotros.

Su ojo derecho se está hinchando...

...Y de pronto, estalla, salpicando sangre hacia todas partes. DE la cuenca ocular vacía comienzan a salir hormigas por docenas. El hombre, tras un alarido que resuena prácticamente en todo el bosque, cae de rodillas, y luego, finalmente, al suelo. Ya no se mueve.

Notas de juego

Fin de la escena 2.