Partida Rol por web

Aeropuerto Elen Church. Cresco. Mediados de Junio. Soleado.

El vuelo ha sido bastante tranquilo. La maleta como siempre ha tardado en salir y ahora estas en la cafeteria del pequeño aeropuerto mirando por la ventana los aviones despegar. Hace un par de horas que amaneció. Probablemente ella este de camino al colegio.  Das otro trago de cafe que te ayuda a despertar. Distraidamente te fijas en la television, que como las ultimas semanas, sigue hablando de lo mismo.

"...las fronteras de kazakhstan siguen cerradas y los paises cercanos como rusia o uzbekistang siguen en estado de alerta roja. Todavia no se sabe muy bien que es lo que esta ocurriendo puesto que la información que sale de estos paises es con cuentagotas. Nuestras tropas estacionadas en Afghanistan se enfrentan a grupos rebeldes. Hablamos con el Sargento Michaels del 3er regimiento de infanteria.

-En efecto, es extraño, llevabamos meses sin enfrentarnos con...insurgentes per....arece que se han vuelto a poner en activo...o lo esperabamos,y estamos luchando duramente contra ellos pero resistimos.

Ya han oido amigos parece que de momento nuestras tropas situadas en territorio afghano mantienen la situacion bajo control."

Terminas el cafe y dejas unas monedas en la barra. Arrastras la maleta hasta la salida de la terminal, justo hasta la parada de taxis. Miras la direccion y vuelves a pensar en ella...

William observa durante un tiempo la dirección de la casa de su anciana madre, tras una foto de Claudia en la cual la tenía apuntada, quedando absorto en sus pensamientos -Claudia ... han pasado ya seis años desde la última vez que te ví ... he sido un mal padre, no seguí los pasos del mío y no he estado ahí para educarte como es debido, ... me recordabas demasiado a tu madre ... espero que puedas perdonarme- El sonido de la bocina de un taxi que acaba de llegar y pide hueco en la parada hace que William reaccioné.

Se guarda rapidamente la foto en un bolsillo y se dirige a un taxi libre -Perdone ... ¿Podría llevarme a la avenida Wamer este?, por favor- le dice al taxista de forma educada -y ... abra el maletero si no le importa ... llevo equipaje- añade con un quejido mientras le señala la gran maleta llena de ropa, libros sobre medicina, etc. que levanta con esfuerzo. Tras cargar las maletas William entra al taxi -¿Hace mucho sol aquí en Cresco no?- dice con una falsa sonrisa intentando entablar conversación con el taxista- ... la verdad es que no lo recordaba así ... son ya muchos años sin venir- añade mientras se ajusta el cinturón de seguridad - pues lo dicho ... a la avenida Wamer este, si hace el favor.

 Cuando llegas a casa de la abuela tu hija esta en el colegio. Ella te invita a pasar, aunque no de muy buena gana. Te cuenta que Claudia esta estudiando, y que le queda poco apra que llegue el verano. Puedes ver su cuarto, decorado con posters de cantantes. Al parecer saca buenas notas y ha aprendido a tocar el piano. Tiene uno electrico en su habitacion.

Cuando la vas a recojer ella te mira sorprendida, el camino hacia casa se hace largo, pues los silencios forzosos os incomodan a ambos. Pero poco a poco notas que se va soltando y cojiendo confianza contigo. Mientras cenais  podeis ver un boletin especial en la television

Hoy nuestras tropas en Afghanistan han sido retiradas. Rusia y china han cerrado las fronteras pero no hay ninguna informacion al respecto. Parece que los combates se han intensificado en las ultimas semanas. Las tropas replegadas serán devueltas a sus familiares asi como los multiples heridos que hay, que serán llevados a los hospitales de sus estados correspondientes..

No le haces mucho caso, pues estas pendiente de cada una de las palabras que dice tu hija, el cambio que se ha dado en ti en unos pocos dias se hace mas que patente.

William come con ganas la comida de su madre -Ya no recordaba lo sabrosos que le salían los bistecs en salsa a mamá ... he sido un mal hijo ... y peor padre, abandonándolas a las dos ... en fin- piensa mientras degusta un nuevo bocado del bistec - ... por fin vuelvo a verla, es tan guapa como su madre, los mismos ojos ... - discurre mientras queda embobado escuchando la voz de su hija, la cual comienza a conmover a William - ... Sarah, ¿porque me dejaste? - El sonido del televisor llama la atención de William, gracias a lo cual evita soltar una lagrima delante de su hija, tras escuchar de nuevo la noticia del ejercito en territorio asiático se dirige a Catherine -Cada vez es peor la televisión, ... ya siempre hablan de esos militares en afghanistan, parece que no hay ninguna otra noticia- tras esto pincha otro pedazo de bistec con su tenedor - ... en fin que se le va ha hacer- añade e introduce el pedazo de bistec en su boca, tras esto come en silencio hasta acabarse el bistec, el cual termina practicamente frio.

Una vez ha terminado de comer William se pone en pie y recoge de la mesa todos los platos, sonriendole a Claudia cuando levanta el suyo, una vez a recogido toda la mesa -Bueno, ¡ha llegado la hora de los postres!- exclama con una sonrisa complice dirigida a Claudia - ¿te gustan los helados?- pregunta esperando un sí por respuesta, deseoso de llevar a su hija a la heladeria, tras esto mira a Catherine -¿Puedo sacarla a tomar unos helados, verdad?- le pregunta - seguro que se muere de ganas de tomar un helado, ... ¡eso ha tenido que sacarlo de su padre!- exclama señalandose a si mismo con el dedo pulgar.

 La mujer permanece seria y seca durante esos dias. No parece perdonarte lo que hiciste pero aun asi es correcta y se comporta de manera cordial siempre que esta la niña delante. Por el contrario tu hija es muy feliz, se rie todo el rato y cada vez se anima mas y habla mas contigo. Los dias trancurren y vas haciendo tu vida paternal. Para tí son unos de los dias mas felices de tu vida. Por lo demas el mundo sigue igual y  las noticias sobre la guerra se sucedian.

William intenta pasar todo el tiempo que puede con su hija y hacerla feliz; además durante estos días le habla de lo bonita e inmensa que es Nueva York comparada con Cresco y que algún día la llevará allí, lo cual emociona a la niña a pesar de apenarla al no querer abandonar a su abuela.

- Princesita - dice William desde un sillón, llamando así la atención de su hija - ... me han dicho que eres muy buena estudiante, y por esó algún día vendras a Nueva York conmigo ... - las palabras de William emocionan a la niña, la cual corre hacia su padre y de un brinco se sienta en sus piernas, pidiendole que le cuente más sobre Nueva York - ... pues verás, en Nueva York están las mejores universidades de todo el país - le explica - ... por eso una buena estudiante como tú, estudiará allí, ... ¿que te gustaría estudiar?, médico es un trabajo muy bonito, ayudas a la gente y las haces felices- le explica con un tono persuasivo, imitando la educación que le dió a él Joseph solo que un poco más flexible - Papá, espero llegar a ser algún día la mitad de buen padre que tu fuiste ... por eso seguire con Claudia el mismo camino que seguiste conmigo- piensa mientras echa un vistazo a la tele, quedando soprendido por las notícias - ... ¡no puede ser posible! ... - exclama mientras se ajusta las gafas con el dedo - ... disculpame un segundo hija quiero ver la notícia - le comenta a su hija la cual se queda abrazada al padre porque no quiere mirar la tele - Parece como si fuese a llegar una 3ª guerra mundial  ... no se nombraban tantos Paises como participantes de un mismo conflicto desde 1939 ... esto realmente me preocupa, y además por lo que se vé cuando acaben mis vacaciones tendré un grupo de soldados a los que atender ... ¿que podrían atacarme en cualquier momento? ... ¡lo que me faltaba! - discurre con un gesto de preocupación que acaba transformandose en uno de indignación - ... Bueno Claudia es hora de irse a la cama, ahora subo y te arropo , ¿vale? - le ordena de forma cariñosa.

Una vez Claudia está arropada y se ha quedado dormida, William se dirige al salón y busca por los libros de medicina sobre aquel extraño Síndrome del golfo.

                                                                                                                   ----------------El principio del fin---------------

Pasaron un par de dias y las cosas no iban para nada mejor. Las redes de informacion(television, internet, la radio) estaban colapsadas debido al exceso de informacion. Al menos en america, en europa y asia ocurria exactamente o contrario. Desde hacia casi una semana, los paises de centro europa habían dejado de emitir señales y poco a poco los paises fronterizos se iban "apagando". Nadie tenia ni idea de lo que ocurria alli, algunos mensajes de alerta y socorro salian de inglaterra o japon. Pero nada quedaba en claro. En internet circulaba todo tipo de noticias y videos. Algunos mostraban multitudes de gente por las calles de ciudades practicamente en ruinas, disturbios en Madrid, paris y Roma. Carreteras llenas de coches abandonados. Disparos en china y Korea. No paraban de crecer las noticias sobre ataques violentos en todas las ciudades y la carretera de la informacion se iba colapsando.

Realmente no os hace falta ver estas noticias, puesto que antes de que nadie se diera cuenta la infeccion ya habia llegado a todo el mundo. Dos dias despues de que los heridos de Afghanistan llegaran a los hospitales empezaron a surgir los primeros brotes. Nadie sabía lo que ocurría y cuando el ejercito de los Estados unidos quisieron darse cuenta ya era demasiado tarde. Cientos de coches huyendo de las principales ciudades y miles de coches llendo hacia ellas buscando un refugio. Aeropuertos bloqueados. Miles de heridos, incontables muertos...

Lo primero que se escucho oficialmente fue que la gente fuera a las grandes ciudades y las autoridades emitieron un comunicado con las principales de cada estado. En tu caso era Mineapolis Pero nadie consiguió llegar alli. Las carreteras enseguidase colapsaron y los primeros disturbios empezaron a formarse. El aeropuerto se bloqueo a las 6 horas de empezar a evacuar. A los dos dias las autoridades ordenaron la ley marcial, que nadie saliera de casa si no era necesario y que no mantuviese contacto con nadie que presentara signos de violencia o algun comportamiento extraño. En realidad aquello era imposible de discernir puesto que aunque todavia no se sabía que ocurria en la ciudad la histeria colectiva reinaba las calles y las autoiridades eran las minimas pues habian sido requeridas en las ciudades principales, donde la infeccion empezó a manifestarse. 

Tres dias mas pasaron entre la incertidumbre. La radio no se escuchaba y la television solo era estatica. Desde la casa podiais escuhar gritos, disparos insultos hasta que...