Partida Rol por web

 Cresco. Mediados de junio. Soleado

La pequeña ciudad de Cresco empezaba a despertar. La gente se despertaba, se daba una ducha, comia unas tostadas, y salian en su coche en dirección a su trabajo. El sol empezaba a iluminar la ciudad tiñendola de dorado. Un cielo azul salpicado con nubes saluda a sus habitantes. 
Pero no a ti. En un pequeño callejon, situado en la zona sur de la ciudad. La luz aun no alcanza aquel lugar y aunque asi lo hiciera solo serviría para mostrar lo caotico y destrozado que esta. Alli debajo de una manta, aun con el frio de la noche en la piel se remueve el Señor Jack. Veinte años lleva viviendo en aquel lugar. Se remueve y se gira maldiciendo la claridad que lo empieza a despertar. Aunque por otro lado, el calor de la mañana hace que se le desentumedezcan los huesos. 

Una lengua aspera pasa por la cara del hombre. Él ni siquiera abre los ojos. Ya sabe que es lo que busca, pero ni siquiera tiene comida para si mismo. Aun asi sonrrie, aquel perro es su amigo. El unico que tiene. 

Poco a poco Jack se va desperezando. Maldice entre dientes y estira un brazo, aun sin abrir los ojos, rascando las orejas al perro. Poco a poco se incorpora, despacio, mientras lso huesos de su espalda emiten sonoros crujidos.

Otro dia mas...-piensas con desanimo.

Un nuevo día asoma en la lastimosa vida del señor Jack. En realidad no se llamaba Jack, pero había tomado tanto whisky Jack Daniels que los pocos que le conocían, vagabundos y calaña en general, ahora le llamaban así. A él no le importaba, es más, su nuevo nombre le ayudaba a olvidar el doloroso pasado de un tiempo mejor donde aún era feliz.

Hacia 20 años que no sabía nada de sus hijas, había pensado en ir a visitarlas pero no encontraba la excusa ni el valor suficientes para acercarse. Quizá no le reconocieran, o lo hicieran y renegaran de él con asco. A saber lo que les habría contado su madre en todos estos años.

Ahora se levantaba todas las mañanas sin una razón de ser, esperando que la vida acabara ya de una vez con él. Tampoco tenía el valor para suicidarse así que solo podía esperar y ver pasar los dias lenamente. 

Los lametones de su fiel amigo terminan por despertarle, acaricia el pelo sucio y enredado de su cabeza y le rasca detras de la oreja. 

Ya voy, ya voy salchicha.. 

Salchicha quizá era el motivo por el que se levantaba todas las mañanas. Cuidando de él se sentía útil, aunque no estaba claro quién cuidaba más del otro.

Finalmente se puso en pie y carraspeo frotandose las manos y poniendose unos guantes sucios. Se toco la vieja espalda renqueante y miró alrededor. 

Veamos que podemos encontrar hoy por ahí.. -comentó mirando a su perro y recogiendo lo poco que tenía en el carrito echó a andar por las callejuelas revolviendo la basura en busca de comida, agua o algo de valor que poder vender a los chatarreros.

 Cuando te estas incorporando, un hombre joven te lanza una moneda y sigue caminando. Es un hombre bastante grande ancho de espaldas. Lo ves alejarse por la calle.

Jack se agacha con esfuerzo a recogerla.

Empezamos bien el dia -sonrie a salchicha y sigue arrastrando su carrito para revolver en un contenedor cercano. 

 En efecto aquel dia parecia ser un dia bastante propicio. Dedicas la mañana a recorer los contenedores buscando algo que comer, algo util o bonito. Junto a un banco encuentras una hamburguesa metida en una bosla. Alguien la ha dejado ahi,cerca del callejon donde vives. Tambien encuentras algunas monedas, casi dos dolares y encuentras tambien una silla en bastante buen estado, solo parece tener arañazos. 

Jack sonríe cansado y recoge la hamburguesa. Quizá alguien se la olvido con las prisas o quizá alguien la compró y la dejo ahí para él. Prefería pensar lo segundo - Mira Salchicha, hay alguien que se acuerda de nosotros - le muestra la bolsa al perro que la olfatea con curiosidad pero la retira antes de que lanze un bocado - luego, luego.

Sigue andando y recoge con esfuerzo las monedas del suelo, despues sube aquella silla al carro. Pasa cerca de aquel negocio con las televisiones y niega con la cabeza - Guerras, guerras y más guerras.. ¡ojalá se fuera todo a la mierda! El mundo sería más justo salchicha.. cada uno buscandose sus habichuelas sin ricos dominando a los pobres ni gaitas...-salchicha suelta un cochambroso gemido, de hambre quizá.

Cuando llega al callejón se sienta en su nueva sila junto a los cartones y abre la hamburguesa. La divide concienzudamente en dos y le da la mitad al perro poco a poco, para que le dure más a pesar de que la come con ansia.

Despúes se queda mirando la zona sin nada que hacer mientras mastica su parte.

 El dia pasa tranquilo, inexistente al igual que el resto de los dias. Das una vuelta, miras buscando algo. Te sientas en una sombra y la gente te echa algunas monedas y por fin vuelves otra vez a tu callejon, junto con Salchicha. Es casi como el volver a casa, con alguien querido esperandote. Alli te vuelves a arropar con tu manta, una de las pocas cosas que tienes, y descansas para al dia siguiente volver a rebuscar en la basura encontrando nuevos tesoros. Asi pasan los dias....

Los dias van pasando y Jack se levanta mecanicamente, incluso él , un vagabundo, tenía su rutina como todo ciudadano - Maldito Estado ¡yo soy librrre!!-empezó a gritar y a pelearse con una farola. La gente le miraba al pasar y salchicha parecía disculparse con la mirada a los viandantes que observaban el espectáculo como diciendo " mi amo a veces pierde la cabeza " lo que les dio unas monedas de más en el vaso de las limosnas. 

Cuando termino de pelearse con la farola gruñó y entro al supermercado con el vaso de su dinero, a comprar su amado whisky y algo de comida para los dos. La cajera arrugó la nariz al atenderle y se rio con sus compañeras cuando Jack se marchó haciendo caso omiso a sus comentarios- ""Qué asco, no se como consienten que pordioseros así ensucien nuestras calles ""-decían.

Ya con la botella se sentó de nuevo y comenzó a beber un poco, no mucho, tenía que durarle.

Sabes salchicha, un día deberíamos coger nuestras cosas y marcharnos a ver mundo. ¡Llevamos demasiado tiempo en este sucio callejón"! Tu te mereces correr por el campo y... ¡hic! 

Al rato cayo redondo dormido hacia otro nuevo dia.

 Los dias pasan. Para tí todos iguales. Con Salchicha te dedicas a mendigar y a beber. Parece que el mundo sigue igual, aunque eso tu ya lo sabes. La guerra parece que va peor en europa y las tropas americanas hace un par de dias que regresaron de Afghanistan.Tu continuas tu vida, olvidandote de todo lo que te rodea, simplemente sigues ahi, como has hecho siempre. 

Un dia oyes a una mujer que te deja una moneda hablar de lo que dicen las noticias, algo sobre que los soldados sufren una especie de brote psicotico algo como el sindrome del golfo pero mas violento. No haces mucho caso, nunca sueles hacerlo. Te estiras y rascas a tu perro detras de la oreja.

Un brote psicotico... joder, están todos locos, todos locos...

¿Ves Salchicha? Por eso los animales sois mejores que nosotros. Si os peleais lo haceis con honor y por un pedazo de carne que necesitais para la manada. Esos soldados solo son crios que no saben que coño hacen alli ni porque luchan.. o bien les han comido el coco.

Vuelve a darle al whisky hasta caer redondo. 

                                                                                                                    ----------------El principio del fin---------------

Pasaron un par de dias y las cosas no iban para nada mejor. Las redes de informacion(television, internet, la radio) estaban colapsadas debido al exceso de informacion. Al menos en america, en europa y asia ocurria exactamente o contrario. Desde hacia casi una semana, los paises de centro europa habían dejado de emitir señales y poco a poco los paises fronterizos se iban "apagando". Nadie tenia ni idea de lo que ocurria alli, algunos mensajes de alerta y socorro salian de inglaterra o japon. Pero nada quedaba en claro. En internet circulaba todo tipo de noticias y videos. Algunos mostraban multitudes de gente por las calles de ciudades practicamente en ruinas, disturbios en Madrid, paris y Roma. Carreteras llenas de coches abandonados. Disparos en china y Korea. No paraban de crecer las noticias sobre ataques violentos en todas las ciudades y la carretera de la informacion se iba colapsando.

Realmente no os hace falta ver estas noticias, puesto que antes de que nadie se diera cuenta la infeccion ya habia llegado a todo el mundo. Dos dias despues de que los heridos de Afghanistan llegaran a los hospitales empezaron a surgir los primeros brotes. Nadie sabía lo que ocurría y cuando el ejercito de los Estados unidos quisieron darse cuenta ya era demasiado tarde. Cientos de coches huyendo de las principales ciudades y miles de coches llendo hacia ellas buscando un refugio. Aeropuertos bloqueados. Miles de heridos, incontables muertos...

Lo primero que se escucho oficialmente fue que la gente fuera a las grandes ciudades y las autoridades emitieron un comunicado con las principales de cada estado. En tu caso era Mineapolis Pero nadie consiguió llegar alli. Las carreteras enseguidase colapsaron y los primeros disturbios empezaron a formarse. El aeropuerto se bloqueo a las 6 horas de empezar a evacuar. A los dos dias las autoridades ordenaron la ley marcial, que nadie saliera de casa si no era necesario y que no mantuviese contacto con nadie que presentara signos de violencia o algun comportamiento extraño. En realidad aquello era imposible de discernir puesto que aunque todavia no se sabía que ocurria en la ciudad la histeria colectiva reinaba las calles y las autoiridades eran las minimas pues habian sido requeridas en las ciudades principales, donde la infeccion empezó a manifestarse. 

Tres dias mas pasaron entre la incertidumbre. La radio no se escuchaba y la television solo era estatica.Desde tu callejon, veias correr a la gente, veias como los disturbios amenazaban la ciudad pero nadie parecia reparar en ti...