Mira con preocupación a Miguel y también a Gordon, es como si el doctor temiese por la salud mental de ambos. No parece muy asustado y por primera vez desde que salísteis de Belize, no parece incómodo ni desganado.
- Señores, cálmense... no ha sido más que una pesadilla del indio.
Fue junto a Miguel y Morgan y posó sus brazos en aquél, entre el profesor y Stuart medio dominaron al indio que sangraba de la nariz y se le estaba hinchando un ojo. Además tenía marcas rojas en el pecho de los guantazos que se había estado dando.
- Gordon... ¿Dónde vas?- preguntó al reparar en que el hombre estaba recogiendo todo su equipo.
-¡Señor! -Le llamó la atención con respeto pero sin dejar de lado la dureza. -Sospecho que sigue habiéndose dejado cosas en el tintero, tenías tus razones para evitar acampar aquí y ahora tratas de huír al menor indicio... Algo me dice que fuiste testigo de más cosas de las que revelas.
Me despierto sobresaltado al oír los gritos del indio, pero al ver que la situación no implica ningún peligro me tranquilizo y me levanto con calma. Vaya grupo de locos el indio gritando como un poseso y el maduro explorador asustado como un chiquillo. Buenos días. Pienso con ironía.
Sin añadir nada de momento me quedo esperando la respuesta de Gordon para ver si entra en razón y explica su extraño comportamiento.
Decía mientras recogía su equipo
- ¡OS DIJE QUE ESTE SITIO ESTABA MALDITO! Y AHORA MIRAD AL INDIO... ¡ESTÁ DESQUICIADO! HA VISTO ALGO SEGURO Y NO HA SIDO TAN SÓLO UNA PESADILLA. YO ME VOY AHORA MISMO DE AQUÍ , DE HECHO NO ME QUEDO NI UN MINUTO MÁS EN ESTE SITIO, ME VUELVO A BELIZE
Gordon estaba al borde de un ataque y os temíais lo peor.
Se acerca junto a Gordon y le agarra por la pechera haciendo alarde de una violencia inusitada para una rata de biblioteca como él
- ¡DE NINGUNA MANERA TE VUELVES A BELIZE! - dice a voces -como ya casi es de día, levantamos el campamento y continuamos adelante, nos nos pueden quedar más que un par de horas para llegar a la ciudad perdida de Bendal-Dolum si mis cálculos son correctos y te aseguro que lo son. -dice soltándole de la pechera -venga todo el mundo, recoged que nos vamos.
Tras decir esto se acerca a Miguel que aún seguía histérico y empieza a hablar con él en español en voz baja.
Observa atonito toda la escena, cada vez todo le parecia mas raro. Escucha los gritos de gordon, el cual parece asustado de verdad, lo contrario a lo que intenta aparentar, y esta seguro que sabe algo mas que se calla. Sin mediar palabra, se aproxima hacia el lugar en el que acampaba el indio, para observar que pudó hacer que se asustara de esa manera.
Motivo: descubrir
Tirada: 1d100
Dificultad: 62-
Resultado: 9 (Exito)
Por lo poco que has entendido de la escena, el indio se quejaba de haber tenido un mal sueño. Pero que le había parecido muy real, aunque no sabes más. No puedes examinar sus cosas de cerca, pues al verte por allí el indio aunque más calmado, te mira de mala gana.
Aunque a primera vista, no hay nada.
Recojo mis cosas con calma intentando no echar más leña al fuego pero comienzo a estar preocupado por el desarrollo de la expedición. Los gritos del indio no tienen mucha importancia para mí, pero actitud paranoica del explorador puede dejarnos sin un miembro de la expedición o con alguien que no es capaz de estar a la altura en situaciones de riesgo. Me pregunto si tanto tiempo en esta selva acaba por volver a la gente loca, pero cuando me acuerdo de la pesadilla de la noche anterior una duda aparece en mi mente de si realmente habrá algo más que se esconde este paraje de la América central.
En cualquier caso no participo en la discusión de momento y espero que Morgan, cada vez más desquiciado según parece, consigue poner en orden su expedición.
En vista de que nadie decía nada más, Morgan esperó a que todos hubieran recogido y les hizo gestos para seguir el camino de Gordon, que había echado a andar al terminar con lo suyo en dirección sur- suroeste.
El grupo caminó y al poco divisó al hombre a no mucha distancia, al darse cuenta de que le seguíais y ya a cierta distancia, se detuvo y dejó que llegárais a su altura para continuar el viaje juntos.
Escena cerrada.