Partida Rol por web

La mujer suspira profundamente y dice:

- Soy la teniente Hesh y me han enviado a ese hangar donde usted terminara de nformarme

Finaliza temiendose que aquel tipo no fuera mas que un friki de los robots como se temia

-Teniente Hesh?-no me parece familiar el nombre-Es usted nueva en la nave?

Después de todo, ya tenía varios nuevos en el hangar.

Rápidamente vuelvo al "zangano" :

-Bien, como les iva diciendo. Este bombardero ha sido modificado para poder calibrar los sensores. Ya no tiene capacidad de ataque orbital o de flota, han sido reemplazados sus misiles y torpedos por estos cañones-Señalo los cañones montados en las alas y en la pequeña torreta dorsal-Cada uno de esos cañones son versión miniatura de los cañones de la Yamato Maru. En modo "flota" cada cañón tiene carga para veinte disparo. En modo antiaereo cada disparo "divide" su carga de manera que resulten veinte disparos con la potencia de impacto similar a la que tienen los cañones de nuestros cazas más modernos.

Miro atentamente a todos, incluyendo ambos avatares.

-Lo interesante son los drones, lleva una pequeña cantidad de ellos, que pueden simular ser cazas o hasta una pequeña nave patrulla en los radares, pero solo duran seis minutos. Tiene escudos... y la capacidad de hacerse invisible por solo un minuto.-siento que he olvidado decir algo-Ah! Si. Los escudos. No son regenerables. Brindan una protección similar a la del doble de la dureza de la coraza del "zangano". Supongamos que el "zángano" tiene un blindaje de 5 mm de Tritanium, sumado al escudo serían 15 mm. El escudo no es integral, está dividido en superior, inferior, frontal, caudal, lateral izquierdo y lateral derecho. Lo positivo es que si pierden el escudo caudal (señalo los motores) el resto de los escudos permanecen en su sitio.

Miro a todos.

-¿Me estoy haciendo entender?-pregunto interesado.

Soram seguía escuchando al profesor mientras de reojo observaba a los dos golems de acero presentes. Las características del “Zángano” eran abrumadoras y realmente inusuales. Estaba deseando pilotarlo y comprobar si realmente era igual de efectivo que las palabras del Profesor.

- Perdone Profesor Kiroshi, ¿habéis implementado algunas modificaciones en esos nuevos cazas que embarcaron antes? – Pregunto el joven más por curiosidad. Tras lo cual se giro hacia los oficiales presentes. – Soldado Ibrahim dispuesto. ¿Qué ordenan?

-Lo que se está implementando es algo entre eso...-señalo el zángano- y eso -señalo los Avatares- pero la integración es difícil.

Acto seguido ordeno:

-Pilotos, aborden el zángano. Listos para despegar

Soram se dispuso a obedecer en cuanto la Comandante de vuelo dio las órdenes finales. Sus pasos le condujeron a la cabina de mandos y mientras trataba de averiguar algunas cosillas por lo que veía se dispuso a tomar el asiento del Piloto a excepción de si Michael lo solicitaba y el se encargaba de los mandos de Copiloto.

- Si Señor, dispuesto y preparado. - Termino de decir cuando tomo asiento.

Immelde observa pensativamente a los droides. Hmmmm. ¿Naves tripuladas remotamente? Suena interesante. Podrías salvar muchas vidas en batalla, aunque bien mirado, también podría darse el caso inverso. Las máquinas son más previsibles que los zentradi o los humanos, pero siguen sin ser completamente previsibles. Y un fallo de identificación o de adquisición de objetivos, en una máquina cuya capacidad de detección y adquisición estaba mucho más desarrollada que un par de ojos...

El pensamiento no era agradable.

La comandante de vuelo pone fin a todas estas disquisiciones cuando nos ordena abordar la nave. Respondo con un escueto A la orden y me dirijo hacia lo que parece ser el puesto de artillero, acomodándome e inicializando los chequeos de sensores previos al despegue.

-Tu vuelas y yo disparo- digo en tono jovial a Soram.

Ocupo el lugar del copiloto mientras trato de imaginar lo incomoda que debe estar la cabo.

Finalmente el zángano parte de la Yamato Maru.

La misión es sencilla ya que toda la flota ha decidido hacer un alto para establecer un contacto claro con la flota gemela, distante varios años luz.

Soram: Sientes los mandos pesados, después de todo, es un bombardero viejo y no un moderno caza.

Immelde: Los sensores te exigen concentración, hay todo un tablero que no conoces que función cumple, para colmo de males el profesor olvidó u omitió explicarte para que sirve. El cartel de "no tocar" escrito en un papel y con boligrafo no ayuda para nada.

Michael: Los sensores de tiro son identicos a los de un bombardero, así que contra un caza solo podría defender a la pequeña, lenta, pesada e indolente nave, la cabo Zeus.

Khazziana: La comandante Storm te pide que la acompañes a una zona de seguridad de la nave.

Fin del Capitulo II