Partida Rol por web

Un par de horas antes a la reunión en el club con el príncipe, recibes un mensaje en tu PDA, viene de parte de Cesar el Primogénito Tremere, el mensaje es simple y dice:

Zelinda, sea lo que sea lo que te pida el príncipe, accede a ello. Debes confiar en tu clan, y recuerda esto, hay un plan mayor para nosotros.

Cesar

Realmente, el hecho de recibir ése mensaje me desconcerto, por lo que no tardé en contestarle: Cesar cariño, no me pidas imposibles pues sabes quien es el único Principe a quien sirvo. Aún así, intentaré comportarme por el bien de la casa Tremere.

Nada más, tampoco hacía falta sobrepasarme con la información, ni mostrarle lo indignada que estaba por todo aquello.

Me la íban a pagar por el teatro que había tenido que vivir ayer, tanto el cómo mi sire. Ésa broma no quedaría así. 

En ése momento, dentro del taxi de camino al local recorde la escenita de poder que había hecho. Su monologo, su fuerza, su poder para decidir quien vive o muere,... realmente una danza perfectamente guionizada para atemorecer a los débiles, sólo que para mi, no dejaba de ser Demian, y su poder, hasta que me demostrara lo contrario, una esterilidad en manos equivocadas. Simplemente, un permiso de Londres para hacer creer a ése demente que disfrutaba de autonomía, pero al fin y al cabo, una cucaracha britanica más.