Partida Rol por web

Orbis 5: Ramelok [DM05/21]

01 El desierto negro

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11/05/2021, 10:25
Anwië Diherôth

Lo que era una Atalaya, había pasado a convertirse en un denso bosque de tonos verdosos y rosáceos, absorbiendo a su paso la corrupción del desierto. No podía verlo, pero mis sentidos se agudizaban durante la transformación, provocando que pudiera percibirlo en la plenitud de mis sentidos.

Y, sin embargo, con el bosque no había acabado el milagro...

Noté la vibración en el suelo, luego su rugido, y finalmente la grandiosidad de su presencia... Fue entonces cuando dejé de acariciar el árbol para girarme y mostrar mi cara a aquel mitológico ser.

Las leyendas que padre contaba cuando apenas era una infante se mostraban ahora como una realidad incuestionable. Leyendas en las que hablaban de la grandiosidad de aquellos seres y su colaboración en las primeras guerras de expansión de Adarnaj. Que la diosa Beory le hicera llegar hasta mí no era sino una muestra de que me ofrecía su poder para recuperar Adarnaj. Contaba con su apoyo para la reconquista de mis territorios. El Kaos sería erradicado...

No pude sino sonreír amablemente y asentir ligeramente en señal de aceptación ante su noble gesto. Finalmente, di unos pasos para acercarme a él...

—Thä ar n-anamän aönaichte —pronuncié en tono majestuoso y formal. Sin embargo, mis palabras eran recitadas en el antiguo idioma de los primeros elfos oscuros. Chä bhith däd ägad, bhëir me airü dhüt... ä-nis agus gu deireädh na h-ùine, a bhràthäir.

Tras ello, y si el gélido lo aceptaba, montaría en él... ignorando por completo las palabras de Nevalar.

Yo, Anwië Diherôt, volvería a reinar en Adarnaj... y con mi reinado, la naturaleza gobernaría el continente.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Traducción: Nuestras almas están unidas. Nada te faltará, yo te cuidaré... ahora y hasta el fin de los tiempos, hermano.

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11/05/2021, 10:56
Anwië Diherôth

 

Su voz me habló, llenando de luz mi oscuridad. Yo era su Elegida... y, como tal, cumpliría su Palabra sin vacilación. Erradicaría el Kaos, y reconquistaría Adarnaj; haciendo de sus tierras Ciudad Sagrada. Y nadie osaría profanarla, pues daría condena máxima a quien cometiera semejante error.

Yo era Hija de Beory, y como tal defendería lo que era suyo con fiereza. Y bajo mi reinado, todo el Continente alabará su Presencia. Se construirán monumentos en su honor, y se le dará a la Naturaleza lo que por derecho le pertenece...

 

Cabalgaremos juntos, Madre;

y lucharemos sin Tregua contra el Kaos.

Bajo su Nombre lo erradicaremos, Madre...

 

Esparciremos su semilla, Madre;

y reinaremos en el Valle

como sus Hijos, Madre...

 

Como Hijos de Beory...

 

 

Notas de juego

Argh, quiero escribir un post para la diosa beory, pero no me da tiempo. Esta noche lo escribo, ¿vale?

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12/05/2021, 09:45
Lord Sil

Entregar la vida al descubrimiento de los misterios de nuestro mundo a menudo arroja una infausta sensación de ingratitud. Es algo que he contrastado a lo largo de los siglos. En realidad, el conocimiento genera ignorancia, pues cuanto más ahondas en él, más vasta resulta la percepción del mismo, más inabarcable entre mis voraces manos, y más pequeño me hacen sentir en mi camino hacia la Trascendencia.

No profeso devoción sincera a ningún dios. A ninguno, salvando una pequeña, extraña excepción. Supongo pues que soy monoteísta. Muchos de mis congéneres, no digamos ya esos pusilánimes humanos, consuelan sus almas rezando a una pléyade de caprichosas deidades cuyos designios son tan inalcanzables, inescrutables para ellos, que me hacen pensar si no son, en realidad, ignorantes que desean seguir desconociendo las verdades del mundo. Un mundo que, en su turbulencia y crueldad, rebasa la voluntad de sobrevivir de los débiles.

Aunque disto mucho de ser un hombre de fe dado mi natural escepticismo, sé apreciar un milagro cuando este acontece. Y aunque trato de calibrar qué está sucediendo a mi alrededor, no puedo dar una explicación lógica, racional, que me satisfaga por completo. El bosque, este bosque, ha hundido sus raíces en Ramelok. Es la marca de Beory, diosa de la naturaleza; pero esa sería la explicación que daría un débil mental. En realidad, es la huella de Anwië Diheröt, una mujer sin duda singular que ahora se me antoja lejos del sombrío título que ostenta para Anodiräs, pues si la naturaleza se abre camino azagando su estela, tengo pocas dudas de que debe ser algo así como... Una Elegida.

No puedo atisbar las razones por las que un ser se erige en campeón de un dios, pero puedo intuir que el motivo guarda un sagrado vínculo con el sacrificio, lo que lleva mi memoria a Uldatär y los hechos allí acontecidos para explicar la maravilla y lo imposible de lo que está sucediendo a mi alrededor; pero también me retrotrae inevitable y amargamente a mi primera estancia en Ramelok y a todo lo que he perdido buscando yo mismo ese favor...

No...

No hay dioses justos, me recuerdo a mí mismo.

Anwië Diheröt puede cambiar nuestro futuro, pero no es algo que tenga que recordarme Beory con este imponente árbol rebosante de magia.

Al fin y al cabo... yo la vi primero.

Y no requerí que se arrancase los ojos para confiarle mi favor.

* * * * *

Me aproximo a Nevalar guardando una prudente distancia del colosal gélido que acapara las miradas y mimos de la Tenebrïs.

-Deja de quejarte como si fueras un aapiaasï*-, disparo con tono monocorde, fulminándole con la mirada.

El poder que atesora contrasta con su tendencia a ponerse en ridículo delante de sus inferiores con las estériles preguntas que lanza al éter. No ignoro que esto le expone ante la Tenebrïs.

-Este giro en los acontecimientos es... fascinante-. También me genera intriga, por supuesto, pero no voy a admitirlo abiertamente. -Hemos evitado un fatal sino... Y sin embargo...-. Una tos se abre camino en mi garganta y prorrumpe con fuerza. Sé al instante que es una de las más virulentas que he sufrido en... meses, quizás. La fatiga, el esfuerzo por evitar el abrazo mortal de las raíces. La carcasa me recuerda que toca pagar el peaje.

Me doblo entre agónicos espasmos, ahogándome entre sanguinolentas flemas que escapan por los labios de plata de mi máscara. Me cubro con el dorso de mi mano enguantada y me lleva algo más de dos minutos recobrar la compostura. Una que casi me cuesta una caída del caballo. No sé cómo, pero me sublevo contra este ataque interior. No soy un maldito títere movido por espasmos incontrolables. Este maldito pellejo va a aprender quién manda aquí. Yérguete sobre su espalda, insecto. Controla tu cansancio, tu agotamiento, tu enervante debilidad...

Ya...

Inspiro, y me siento extrañamente liberado. Es... Es una rara sensación. Parece como si la tos me hubiese abandonado. Es una ilusión, lo sé... pero una con la que merece la pena fantasear.

Miro a mi discípulo. Una mirada fría e inclemente. La mirada de un cirujano.

-Vuelve a pedir piedad... Y te enseñaré a rogarla de modo convincente, Nevalar-.

Mis palabras son pronunciadas a un tiempo como advertencia, como precaución y como exhorto. De él solo espero excelencia. No toleraré la debilidad.

Luego, desciendo de Nébula y le ofrezco las riendas, cerrando sus manos en torno a ellas. Sabe que profeso sincero aprecio a mi albina montura, una que me he tomado la molestia personal de instruir, alimentar y almohazar desde la infancia. Una que he salvado de milagro de ser devorada por el bosque de su Divina Alteza Beory. 

Su lección comienza aquí.

-Monta... Esa será tu penitencia-.

- Tiradas (1)

Notas de juego

N. del T. "Sucio esclavo humano". También puede significar "mono estúpido". E incluso "haragán mugriento". Virtudes de ser vocablo polisémico xDDD

Señor Narrador, Lord Sil tose y saca un 6. Este enmascarado viene fuerte... ;)

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12/05/2021, 11:14
Ramelok

Ante tu propuesta de hacer un trío con las guerreras, Hoari se muestra fría e impasible, como siempre. Kronaz ríe, aunque desconoces el motivo, o quizás sea porque ríe ante todo, incluso ante la muerte.

La explosión de verdor, de vida, en Sojäk eclipsa tus palabras y parece que quedan en el olvido. Pero no esas que piden una montura a la Tenebrïs, cuyas consecuencias empiezas a ver por boca de tu maestro.

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12/05/2021, 11:17
Director

Notas de juego

Sil va fuerte, sí :D buena tirada. Te deshaces de: