Partida Rol por web

El profesor Orizuma les dio el resto del día libre y les explicó donde podrían pasar el resto del día. También les dio la mala noticia, era una lástima que aún no estuvieran implementados los clubs, ¿a qué se refería con que había habido ciertos problemas en el pasado? Escuchó la pregunta de Ichijo-san y miró expectante al profesor para saber la respuesta.

El resto de compañeros fueron saliendo de la clase, algunos al patio y al polideportivo y otros a la azotea. Recogió sus cosas y con una breve reverencia al profesor siguió a las otras chicas que subian a la azotea.

Una vez terminamos de presentarnos todos, el profesor nos explicó las áreas del Instituto a las que podíamos acceder y nos dió el resto del día libre. Era algo bueno, al ser el primer día era la perfecta oportunidad para explorar y habituarse al nuevo Instituto. 

Me quedé sorprendida y decepcionada al oír que no iba a haber clubes debido a un incidente. ¿Que pudo pasar que causara que tomaran esa decisión? Tenía mucha curiosidad por saberlo. La mayoría fue levantándose poco a poco y pensé en ir a preguntarle al director sobre los clubes, pero me daba algo de corte ir sola a preguntarlo.

Tenía curiosidad por saber que pensaba el resto de lo de los clubes, así que cogí mis cosas y me uní a la mayoría que iba a la azotea. Tal vez entre todos podríamos buscar una solución y hablar con los profesores al respecto.

1 DE OCTUBRE

Comienza un nuevo día, hay que asistir a clases con normalidad.

Han transcurrido diez días desde el primer contacto con el "Reino de Morfeo"

Rumores: En la entrada de la escuela podéis escuchar rumores de otros compañeros del Instituto. Hablan de manera preocupada sobre llantos que han escuchado en mitad de la noche en sus casas. Dicho suceso parece aislado.

El timbre sonó un día más por la mañana anunciando el comienzo de las clases, aún los alumnos estaban adaptándose al ritmo diario de su nuevo curso y sobre todo a las instalaciones que ofrecía el instituto a todos sus integrantes. En los días posteriores, diversos alumnos fueron abandonando el curso. Había muchos rumores detrás de dichos abandonos: algunos decían que las familias no tenían dinero, otros que no tenían el nivel académico necesario y en casos más extremos que incluso algunos habían tenido problemas con la ley.

Aquellas ausencias os extrañaban, pero ni vuestro tutor ni desde dirección os dieron explicaciones ¿qué esperabais? Solo erais unos alumnos normales y corrientes... ¿no?

Tan puntual como siempre, el profesor Aoshi apareció en el aula y todos tuvisteis que poneros en pié...

El profesor hizo un gesto con la mano para indicaros de nuevo que podíais sentaros.

- Buenos días a todos, espero que hayáis venido hoy con las energías puestas ya que hay que rendir al máximo. Sé que muchos estáis todavía añorando las vacaciones de verano pero ya hemos llegado a un punto donde la pereza y la dejadez no son una opción - hizo una leve pausa y se acercó a su mesa.

El profesor carraspeó ligeramente y sacó unos papeles que tenía en el archivo.

- Veamos chicos y chicas, hasta ahora habéis estado haciendo actividades individuales para que vuestra adaptación al centro y a vuestros compañeros fuese más sencilla pero como todos sabéis ya las personas necesitamos de manera innata relacionarnos con otros semejantes para poder aprender y desenvolvernos en nuestras capacidades. Un claro ejemplo de este tipo de situaciones se trabajan perfectamente en actividades en grupo, labores cooperativas donde la comunicación, la organización y el entendimiento mutuo son la clave para llegar a un objetivo ¿y cual es ese objetivo? pues uno muy sencillo - después de aquellas palabras alzó uno de los papeles.

- En primer lugar os separaré en dos grupos, no quiero oír ni una sola queja o comentario al respecto a la distribución ¿de acuerdo? que ya sois todos mayorcitos y mayorcitas, en uno de los grupos trabajaran: Nakano Airi, Suzuki Arisa y Himura Tomoyo - hizo una leve pausa para observar vuestra reacción.

- Con lo cual, Genkidashi Yuyuko y Hamasaki Souta formarán el segundo grupo - después hizo un gesto con la mano para señalas vuestros pupitres -

- Intercambiad los pupitres e intentad sentaros todos los de un mismo equipo en la misma zona ¿de acuerdo? y no perdáis demasiado tiempo. -

Tras un tiempo prudencial para vuestra reorganización el tutor continuó

- Bien chicos, ya habéis tenido tiempo suficiente para organizaros, ardo en deseos de conocer vuestra forma de pensar y de comprobar como os adaptáis para trabajar en grupo, ahora tan solo os queda saber de qué se tratara ¿no? pues será algo sencillo pero a la vez complejo - carraspeó

- Quiero que hagáis un ensayo sobre un tema bastante relevante en los tiempos que corren, no existe límite de extensión, como si se trata de una sola frase, lo único es que debe ser algo donde todos colaboréis con ideas, pensamientos o redacción. ¿Que cual es el tema? me dejo ya de rodeos... Paz en el mundo ¿es posible? - se sentó y os miró sonriente.

- Espero que sepáis sorprenderme, los que acaben podrán salir al recreo antes, demostrad que sois el futuro de este país -

El resto de días habían transcurrido con bastante tranquilidad, ningún extraño sueño más. Había alumnos que se habían marchado del centro y de la clase, lo cual era una pena, ya que apenas habíamos podido conocernos. No nos dieron motivos de sus repentinas marchas...¿tendría algo que ver con los extraños rumores que he empezado a oír en los pasillos?

Aoshi-sensei llegó al aula y todos nos levantamos rápidamente y tomamos asiento de nuevo poco después. Empezó a hablar sobre la importancia de la cooperación y el trabajo en equipo y nos dividió en grupos. Miré a mis compañeras para este nuevo trabajo y asentí a ambas con una tímida sonrisa. Creo que entre las tres podremos ser capaces de realizar un buen trabajo.

Una vez me senté junto a las chicas miré al profesor con curiosidad por saber cual sería el tema del trabajo. Me sorprendió bastante lo que propuso: "Paz en el mundo ¿es posible?" Era algo bastante complejo de desarrollar, sobre todo porque existía una gran cantidad de opiniones al respecto. -Bueno...será mejor que empecemos ya...-dije con una pequeña sonrisa mientras sacaba mi libreta y un lápiz para tomar notas. Lo mejor sería empezar a escribir las ideas generales y tal vez llegar a un acuerdo o punto intermedio entre todas.

A pesar de lo que digan los malditos rumores y como he dicho miles de veces ya, NO, yo no he tenido ningún problema con la ley (de momento) ni he inducido a nadie a meterse en problemas. ¡Y por supuesto que no hay intención alguna de irme del instituto y volver a casa!

La clase está tan vacía últimamente que es deprimente. Y encima, estoy rodeado de chicas. Que molesto. Aunque no es que me caigan mal. No he vuelto a tener sueños emocionantemente extraños y no he hablado con ninguna del tema, ni intención de hacerlo, pero el hecho de que ellas formasen parte de mi sueño es como que las hace "no-desconocidas". El problema es que a menos que tenga sueños extraños no voy a tener más peleas que las de Street Fighter. Puta pacífica ciudad. ¡Y rodeado de chicas!

Por eso duermo mucho. Duermo por la noche. Duermo en clase. Duermo en el baño y cuando estoy cagando. Pero nada. Y empiezo a ponerme de mal humor. ¿¡Y ahora un trabajo en grupo!? Al menos me ha tocado la mini-rubia de la impresionante patada voladora.

— Hey —gruño al llegar a su lado, acercando de mala gana uno de los pupitres vacíos al suyo. — Me toca aguantarte.

Me dejo caer en la silla y la miro desafiantemente, retándola a rechazarme como compañero.

Los días pasaron sin más pesadillas ni sueños raros, por lo que Tomoyo terminó trasladando todo lo sucedido a rincón de su memoria. Las primeras noches habían sido incluso un poco estresantes, siempre preguntándose si esa noche volvería a entrar en ese mundo de pesadilla, pero cuando se despertaba a la mañana siguiente sin haber soñado nada se tranquilizaba.

Tomoyo entró en la clase, y como cada mañana se sorprendió de lo vacía que estaba. Le hubiera gustado saber el porqué de tantos abandonos, pero no era asunto suyo, se recordó. Saludó con una sonrisa a las chicas que habían llegado antes que ella y se sentó en su pupitre a la espera de que empezara la clase.

Escuchó con atención la charla del profesor y asintió hacia sí misma cuando éste les dio un trabajo en grupo. Se giró para buscar a sus dos compañeras de trabajo y acercó su pupitre hacia el de ellas. Luego siguió escuchando al profesor para entender mejor de qué iría el trabajo, cuando por fin lo dijo Tomoyo levantó las cejas en sorpresa, ¿Paz en el mundo? ¿En serio? ¡Ese era un tema tan amplio y complicado que podía dar para días y semanas de discusión!

Se volvió hacia sus compañeras y las miró con un matiz de incredulidad. – Si, mejor empecemos… ¿Pero por dónde? – preguntó al aire, como esperando inspiración. Abrió su libreta y empezó a toquetear su lápiz con el pupitre en un tic nervioso. - ¿Quizás podemos escribir dos o tres ideas cada una y luego ponerlas en común?

Tras algunos días de... particularmente simples días en comparación al sueño de la otra vez (si saltamos la desaparición misteriosa de la mitad de la clase. ¡Han sido Youkais, os lo digo, Youkais!... Más quisiera. Ahora mismo, en clase, tras una pequeña charla del profesor en la que nos ha asignado grupos, me ha tocado con Hamasaki "Idiota (Baka)" Souta "Bakaouta" para los amigos, o al menos para mí. No me olvidado de lo que vi en el sueño. No sé si fue real, pero desde ése día me dan ganas de patearle cada vez que le veo. Y ahora me toca hacer con el un trabajo sobre si la paz mundial es posible, ¿Estás de broma?. Arg, esa mirada... aguanta Yuyuko...

"Ésa es mi línea, Bakaouta." Shit, se me ha escapado. Por suerte he conseguido mantener una cara más o menos normal. "Bueno, ésto debería ser corto de todas formas. La paz mundial es simplemente imposible. Incluso si acabases con las guerras, los conflictos personales entre personas siempre existirán por una razón u otra. Sólo un niño o alguien con mucha fe cree lo contrario." crucé los brazos delante de mí mientras me sentaba en una silla cerca de mi compañero, poniendo mi mejor cara seria.

¡¿Bakaouta?!

Escucho a Rubia-chan con atención (raro en mí, no creas), asintiendo con la cabeza en silencio con los brazos cruzados.

— Sí, sí, pon eso. —digo señalando el papel donde escribir ese ensayo. POR SUPUESTO, doy por hecho que va a ser ella quien lo escriba. Yo cometo faltas y mi escritura es como la de un niño de 6 años, así que...

— Y pon también que sino sería muy aburrido, con todos llevándose bien. Imagina un mundo sin peleas. ¿Qué entretenimiento habría? —me tiro hacia atrás en la silla, colocando mis manos detrás de la cabeza, con expresión de "qué soso todo". — Con lo divertido que es discutir.

No concibo una vida sin algún puñetazo, patada o moratón.

— En definitiva, ni es posible ni queremos la paz mundial, ¿verdad, Rubia-chan? —le doy un par de palmaditas en la cabeza para felicitarla por su trabajo: "buena niña, buena niña" — Escríbelo bonito que nos pongan buena nota.

Ganas de matar aumentando. Por qué estoy en clase y se que es un tontarra que lo disfruta, si no ésta vez si le daba... intentando esconder mi cabreo (no muy bien) aparto su mano de mi cabeza.

"Estoy de acuerdo con escribir, pero, aunque haya dicho que la paz no es posible, tampoco quiero decir no la desee. Una vida tranquila y sin violencia es mejor en mi opinión, no veo las peleas como "Entretenimiento", ni las encuentro "Divertidas". Vamos a tener que ponernos de acuerdo en ésto."

Por el momento, escribo una pequeña introducción y la parte en la que estamos de acuerdo: Que no pensamos sea posible la paz mundial.

Arisa se rasca la cabeza y se queda pensando unos momentos, ella no era especialmente buena con esas cosas, mira a sus compañeras y dice:

Pues… no se… a ver… la paz en el mundo… cómo se consigue… ufff eso son cosas muy complicadas para mí, yo nunca he pensado mucho en eso

Sonríe un poco tontamente mientras empieza a escribir algunas palabras y algunas ideas, para después de un rato decir:

Bueno… no sé, yo no sé para el mundo, pero puedo decir que para mí la paz es poder estar tranquila y bien… no sé, que no haya hambre, que la gente no se pelee. Ya sé, yo creo que si la gente no pasa hambre y tiene dinero para las cosas podemos traer paz en el mundo.

Decía bastante orgullosa de sí misma a sus compañeras como si aquellas ideas con simplemente decirlas se iban a cumplir.

Escuché a Arisa proponer sus ideas y empecé a anotarlas. -Una igualdad en recursos para todos puede ser una buena idea para alcanzar la paz si... pero creo que es algo igual de complicado de conseguir que el objetivo principal del trabajo...-dije tímidamente.

-Yo creo que es posible conseguir la paz, aunque claro como he mencionado antes...es demasiado complicado de alcanzar...en mi opinión una buena comunicación y entendimiento son requisitos necesarios...-sugerí mientras miraba a mis compañeras antes de anotarlo en la libreta. 

Este trabajo era algo complicado, aunque de momento parecía que Arisa y yo teníamos las ideas más o menos claras y nos habíamos puesto de acuerdo, lo cual siempre es un buen comienzo a la hora de realizar un trabajo en grupo. 

Una cosa estaba clara: el tiempo volaba. Los grupos habiendo puesto en común sus ideas comenzaron a redactar el ensayo de la mejor manera que podían hacerlo.

El timbre sonó indicando que era la hora de salir al descanso. El profesor se quedó de pié esperando que ambos grupos entregasen el ensayo al que le habían estado dedicando el mayor de sus esfuerzos.

- Bueno chicos y chicas, espero que haya servido esta actividad como toma de contacto con vuestros compañeros, estoy complacido de que todo haya sucedido sin ningún tipo de desperfecto, ahora podéis salir libremente al exterior a descansar, seguramente mañana os diga cual ha sido el ensayo que más me ha gustado, pero no me miréis con cara de preocupación, esto os vale más a vosotros que a mi - lentamente fue recogiendo las hojas manuscritas

Con aquellas últimas palabras el profesor os dio permiso para que abandonarais el aula, ahora teníais a vuestra disposición unos gloriosos 40 minutos para despejaros y comer algo. ¿Os acostumbraréis rápidamente a este ritmo?

Mi cara es un poema cuando el profe recoge nuestro trabajo. Me refiero, no hemos escrito mucho... ¿Una cara de folio bastará? Y la mitad es discusión. Bueno, como sea, se acabó por el momento. Hora de agarrar mi almuerzo y a algún otro lado.

Mientras abro la mochila pienso que hacer. Al final, me decido a acercarme a mis dos compañeras... ¿Mmh? ¿No falta alguien...? Bah, imaginaciones mías.

"Nakano, Suzuki. ¿Almorzamos juntas? Saldré al patio, hay mucho sitio dónde sentarse." les digo sonriente mientras levanto mi bento.

Finalmente habían terminado el trabajo, la cabeza de Arisa daba vueltas y estaba embotada ya que ella realmente no estaba acostumbrada a esos trabajos tan mentales. Cuando terminaron la clase no pudo evitar ponerse de pie y casi gritar mientras se estiraba:

Bien, recreo, que bien… ufff tenía la cabeza que iba a explotarme

Fue cuando Yuyuko se acercó y dijo lo de comer juntas, ella asiente con una gran sonrisa mientras se remanda un poco la manga del uniforme que le quedaba algo larga y levanta el dedo pulgar:

Por supuesto que si… vamos a comer juntas las tres, que así es más divertido… ufff que ganas de terminar la clase, ¿verdad?

Arisa saca su bento que parecía bastante infantil y se notaba que era bastante antiguo y tenía muchos usos, ella parecía bastante animada con la comida. Al llegar fuer toma asiento en un lugar agradable y dice a sus compañeras mientras lo abre:

Que día más agradable… que difícil la clase ¿verdad?... ummm que es lo que habéis traído de comer… yo hoy me he hecho algo sencillo jeje

Decía mientras abría su bento y lo mostraba