-Permitidme que os felicite por una misión excelente.
El maestro supremo del consejo se sentía visiblemente orgulloso del grupo. Al fondo, tras los cristales de la sala, se veía el tráfico aéreo de la increíble ciudad de Coruscant.
-Tu, padawan. -el maestro Cereano se dirigía a Droben- Me gustaría hablar contigo mas tarde sobre lecciones de la fuerza. Puede que tengas un futuro en las salas de enseñanza teórica del consejo.
-Ja. No se ve del tipo de jedi que se deje encerrar en un aula alejada de la acción. Y, en cuanto a tí, Yeíjio... nuestra raza ha sufrido innumerables injusticias por la acción bandálica de unos pocos. Rodhianos como tú hacen falta en esta Galaxia, Yeijío. Estoy muy orgulloso de compartir raza contigo.
-Todos, desde el mas grande al mas pequeño -al decir pequeño le guiñaba el ojo al uthai- habéis jugado bien vuestro papel. No hace falta ser sensible a la fuerza para ocupar el lugar que te corresponde en el universo. Y vosotros podéis estar empezando a vislumbrar cual es el vuestro.
El utai se sentía descolocado, no sabía muy bien como comportarse ante el consejo. Permaneció quieto mientras hablaban sobre el buen termino de sus pesquisas,pero finalmente,adelantandose un par de pasos, habló:
- Mis Jedi-amigos, Tughi pregunta que hacer ahora..¿ Vuelve a la zona de mecánicos?¿ sigue con cara-mosca y jedi- persona?- se rasco la cabeza con sus dedos y continuó:- Si Tughi hace bien trabajo,¿ que gano Tughi?-
Ante tanto poderío jedi, Yeyjío estaba totalmente cohibido. Pero la verdad era que los maestros parecían satisfechos con el trabajillo.
Y para el colmo, un paisano rodiano le felicitaba directamente.
Era muy emocionante ser reconocido como parte del bien de la galaxia... Aunque... Bueno... Si era parte del bien de la galaxia ¿por qué siempre tenía problemas con la ley cuando hacía contrabando?
Pero ahora no era el momento de hacerse preguntas, al contrario. El rodiano recibió de buen grado las alabanzas y aprovechó un momento de pausa para invitar a sus compañeros de aventuras a unas copas cuando salieran de allí
-Thugi, realmente nos gustaría que participarais en un proyecto piloto de patrullas especiales formadas por integrantes de muchas ramas del saber: tecnicos, "especialístas en seguridad" y jedis unidos contra los problemas de la galaxia. Llevamos tiempo detrás de la idea y vosotros nos habéis probado que es algo muy factible. ¿Nos haríais el honor de participar?
El pequeño alien abrió sus ojos como platos ante tal proposición. Asintiendo nerviosamente, Tughi consiguió decir:
- Contar con Tughi podeís, Jedi-amigos.- sonriendo de oreja a oreja;- Tughi es el mejor "arregla-cosas" de todo el borde exterior. Grandes interés tiene Tughi ante la oferta que Jedi-amigos ofrecen. Tu solo decir que tiene que hacer Tughi, y Tughi hace.-
llevo sus pequeños brazos ha sus caderas quedando en una pose de brazos en jarras ,hinchando el pecho y sonriendo ante el consejo. Aunque rapidamente volvió a hablar, esta vez señalando a sus compañeros:
- ¿ Que va a ser de ojos-de-mosca y de Jedi-amigo? ¿ Trabajaran con Tughi una vez mas?-
-Claro maestro, estoy a su entera disposicion. Respondo al maestro Kor-Othi -siempre estoy ansioso de aprender mas acerca de los caminos de la Fuerza, sea practica o teoricamente.
Perdon, no habia visto que me hablaban a mi.
¿Dar tumbos por la galaxia con los gastos pagados? ¿Pasearse por las tabernas de planetas desconocidos? Sin duda era una oferta muy tentadora... Sobretodo para Yeyjío.
-¡Tenéis mi bláster a vuestro servicio!... Quiero decir... Que estoy a vuestro servicio y llevo un bláster... Bueno... Con lo de servicio no me refiero a limpiar... Me refiero a pegar tiros y freír gente...
Los Jedi sonrieron ante las respuestas y se miraron unos a otros, asintiendo satisfechos.
Así, en el templo jedi de la ciudad-planeta de Coruscant, con un atardecer como pocos se han visto desde esa torre, con las naves surcando los cielos, comenzó la vida de aventuras que los tres compañeros. La galaxia viviría momentos aciagos, pero Tughi, Droben, Yeijío y miles de operarios a favor de la república no están dispuestos a dejar el universo a su suerte sin luchar.