Partida Rol por web

Vaya... Que peinado mas extraño... -Pienso al ver la estrafalaria enfermera

Esto... Lo que le pasa es que es un inútil. En fin... Vengo a que me digan como entreno a esto. Pensaba que los pokémon hacían caso y todo eso, como en la tele... Pero el mío es un inútil, míralo, seguro que aún sigue durmiendo... Digo mientras libero a Totodile de su pokéball. Creo que tiene 2 días, y ese "profesor" Oak pensó que sería buena idea dármelo a mi. Pff, yo lo que quiero es uno que sea fuerte y pelee, no un pelele. Bueno, da igual. ¡Dime como lo cuido, que come y como le enseño a pelear!

Efectivamente totodile aparece echo una bola y durmiendo, entreabre un ojo mirando a su alrededor y al no ver nada demasiado cerca se mantiene enroscado descansando.

¿El profesor Oak? Él sabe mucho de los pokemon, deberías haber preguntado a él.

De todas formas los pokemon no solo sirven para pelear. Los pokemon son parte de la naturaleza. Y en los casos domésticos son una excelente compañía. También se hacen muchisimos concursos pokemon que nada tienen que ver con la fuerza pokemon..... ¿No preferirías ser enfermero pokemon? Estarías monísimo con el uniforme y la cofia

Si lo que quieres es entrenar a tu pokemon y no sabes como hacerlo, llévalo al gimnasio. Los gimnasios sirven para entrenar y ser más fuerte....
 

Vale, vale... Ya lo pillo. -Digo mientras doy media vuelta y me dirijo a la puerta.

De repente siento que me olvido de algo. Me olvidaba de Totodile, el muy idiota ni se molestó en despertarse y seguirme. Vuelvo a acercarme para meterlo en su pokéball y me marcho de una vez. Ya estoy de vuelta a la calle y no parece que esté cerca de entrenar a Totodile. Vuelvo a dar vueltas por la ciudad, esta vez para encontrar un banco o cualquier lugar en el que pueda sentarme. Tras descansar unos minutos me dirijo al gimnasio pokémon, de camino voy imaginando los pokémon del líder, seguro que son de lo más fuertes...

Totodile vuelve al interior de la pokeball con más gusto que sarna, te sientas en un banco junto a una fuente de la que tomas algo de agua, es junio y es mediodía y hace un calor de justicia.

El lugar señalado por la pokedex como gimnasio pokemon se trata de una pequeña mansión de dos plantas, un muro alto rodea un enorme jardín y frente a la entrada principal hay una puerta de hierro forjado. Al hacer sonar el timbre acude un niño de unos doce años, va vestido con un traje de mayores. Llega hasta la puerta de reja y te saluda de forma muy cortés.

Bienvenido al gimnasio de Ciudad Verde, soy el entrenador Klos.  Lamentablemente este gimnasio es solo para entrenadores pokemon acreditados - Te enseña su pokedex en la que sale su identificación como entrenador pokemon y en la que lucen dos medallas de gimnasio pokemon- Además la tarifa de un día de entrenamiento es de cien pokeyens. Aún en el caso que seas entrenador pokemon, me temo que el líder del gimnasio de Ciudad Verde solo puede ser retado a duelo por un entrenador que tenga al menos tres medallas pokemon - Te mira de arriba a abajo con más que incredulidad.

Así que, no creo que pueda ayudar a alguien como usted señorito....

Estoy muy cerca de comenzar a hacer de Totodile lo que siempre he querido que fuera pero un entrenador insiste en cortarme el paso al gimnasio. Sin decir una sola palabra muestro mi pokédex y lanzo mi característica mirada altiva.

Pff... ¿Que, vas a dejarme entrar ahora? -Digo mientras jugueteo con la pokéball de Totodile Solo quiero entrenar, no hace falta que te pongas tan señorito conmigo... Odio cuando lo hacen...

Toma tu pokedex y asiente - Sígame por favor - Atraviesas el jardín, hay una piscina, pero no se ve a nadie, los setos y arbustos están muy bien cortados. Entrais en el recibidor donde hay un escritorio. Del recibidor salen dos puertas a derecha e izquierda, un ventanal sobre la puerta lo ilumina todo y las paredes y el suelo son de madera, muy elegante. Un cuadro, un jarrón de artesanía y una alfombra, todo cuanto solo hubieras soñado ver.

El muchacho se coloca tras el escritorio - como he dicho, tendrá un entrenamiento pokemon por cien pokeyenes, la cuota de inscripción de su nombre en el gimnasio es de quince pokeyenes, podrá tener descuentos en el futuro. Además de la cuota registraré su número de entrenador y los pokemon que tiene. - El muchacho sigue tranquilo y con gran etiqueta.

Si no desea ser socio, basta con pagar los cien pokeyenes y pasemos al área de entrenamiento.