Intento entrar sin pagar
Entras con paso decidido mirando con brava mirada al cochero que, una vez dentro te dice;-Sepa vuestra merced, que esta entrada no lo es tal y si quiere ver la comedia, vaya por la entrada principal que puede verla entre mosqueteros, a sabiendas que encontrará sitio.
En los corrales de comedias, los palcos eran donde estaban las autoridades, realeza (que al rey le gustaba mucho asistir, ya fuera de incógnito o no) nobleza, hidalgos con dinero y ganas de pagar dos reales de más por codearse con los de arriba y demás damas y compañía de de soldados.
Luego estaban las gradas, bancos puestos a uno, otro lado y enfrente del escenario. Luego las paredes, que había que estar de pié y al final a pié de puerta, la mosqueteria (llamados a estos mosqueteros por que aparte de hacer siempre mucho ruido, silvidos, exclamaciones, abucheos, ect... se cargaban de hierro como si fueran ese mismo día a trincheras). Lo que viene a ser el fondo sur hoy en día.
-Muchas gracias, pero aquí estoy a gusto.
Pues allí te plantas, a la entrada de la cochera, rodeado de caballos, carruajes y cada vez más cocheros que acuden en ayuda de su camarada. Una puerta se divisa al fondo del corral, a unos diez metros escasos, que seguramente conducirá a las estancias de los actores y al corral. Detrás la puerta de salida.
El cochero vuelve a insistir viendose que vas pertrechado de acero y no quiere dejar de llevarle el pan a su mujer.
-Recapacite usted y vuelva por donde ha venido.-
Calculando que de la situación puedo salir mal parado, tras meditarlo decido retroceder, no sin antes mirar al insolente cochero diciéndole:
-Podré acomodarme con los mosqueteros... Pero sepa vueced que este asunto no concluye aquí ni de este modo.
Y guiñándole un ojo al tiempo que me calo el sombrero en ademán de saludo me vuelvo para dirigirme a la mosquetería.
Estoy hecho un lío, ¿porque Rodrigo elije a todos en sus post, cuando se supone que el doctor está el el hospital?. ¿Se supone que yo debo de saber lo que está haciendo?. Se supone que he pagado y debería de ir por otro lado que él.
Por pura inercia XDD
Lo siento, pero casi nunca me doy cuenta de que no elijo a los PJs que verán mis posts. En la inmensa mayoría de mis otras partidas cuando nos separamos hay escenas para cada personaje/personajes que están solos, y al final me ha creado esa mala costumbre.
Por supuesto que no,(a menos que tu quieras) tu te has mantenido afuera viendo el "espectáculo" de tu amigo.
Es cierto que le estamos dando caña a la partida y es de ritmo medio, yo como dirijo otra de ritmo diario pues contesto cuando hay mensaje, pero podría esperar algo más para ver si otro quiere actuar. Lo siento fallo mío.
Actúa Gabrielin :))))
Acabada la intervención, te lavas las manos en el cuenco que el bueno del fraile trajo con agua limpia. La herida puede curar si se lleva al paciente, con cuidado y sin muchos meneos, a su casa donde pueda recibir mejores cuidados.
-Don Hernando,-dice el fraile-Es usted un ejemplo de misericordia. Rezaré por el alma de este hombre y por la de su merced.
Pues entrando en el corral poco más de dos metros, entre el ruido de cacharrería de los hierros y los vítores hacia los actores cuando en alguna decían;
Una mujer que me adora,
y eso que has echo agora,
es un notable yerro.
O, cuando Gerarda, la enamorada, actuaba ante Lucindo, disputándose su amor con Fenisa;
Cuanto te dije fingía,
y cuanto hablaba también;
Aborrezco a Doristeo,
Solo te adoro, Lucindo;
de nuevo el alma te brindo.
En prenda que tu eres mi verdad,
vente conmigo.
Y con mucha sorna y griterío por parte de hombres, y poca guasa y algún abanicazo por parte de féminas este respondía;
Mucho os alienta el castigo,
como bestias sois mujeres;
¡Bendiga el cielo la traza,
la hora, el movimiento, el prado,
los celos y el truco creado.!
—Gracias, me sentiré reconfortado si este hombre salva la vida. Habrá que llevarlo a su casa para que guarde cama durante un tiempo. Quizá sea necesario administrarle algún calmante a base de adormidera de la botica cuando despierte. Es necesario que se esté bien quieto para que la herida sane y no supure. Perdonad por las molestias.
Después de pagar, entro con Montoya a ver la obra, esperando no haberme perdido lo mejor...
Ahí te quedas, Carrasco ;D .
Pues entrando en el corral poco más de dos metros, entre el ruido de cacharrería de los presentes y los vítores hacia los actores te dejan oír algo, como cuando en alguna decían;
"Una mujer que me adora,
y eso que has echo agora,
es un notable yerro,
pues que muero."
Por en medio una pluma de sombrero, un perdone que voy allá o un pardiez que te dejaban a medias una frase como, cuando Gerarda, la enamorada, actuaba ante Lucindo, disputándose su amor con Fenisa;
"Cuanto te dije fingía,
y cuanto hablaba también;
Aborrezco a Doristeo,
Solo te adoro, Lucindo;
de nuevo el alma te brindo."
"En prenda que tu eres mi verdad,
vente conmigo."
Y con mucha sorna y griterío por parte de hombres, y poca guasa y algún abanicazo por parte de féminas este respondía;
"Mucho os alienta el castigo,
como bestias sois mujeres;
¡Bendiga el cielo la traza,
la hora, el movimiento, el prado,
los celos y el truco creado.!"*
Y ya con mucho hablar de actores y pasajes, que todos eran grandes entendidos, hasta el mozo de cuadra, de las obras que tanto gustaban a los epañoles de esta españa, grande y poderosa, salen todos a la calle para charlar de sus asuntos y visitar las gradas.
Cuando vas a salir ves a una señora mayor intentando pasar el escalón de la puerta, apoyándose en esta, mientras notas el empuje del gentío de atrás y como arrollarán a la señora mayor si no haces algo.
*- Dicho de otra manera más actual, viva el sexo las drogas y el rock and roll.
Pues entrando en el corral te acomodas en una pared un tanto libre, oyendo el alboroto de la mosquetería y sintiendo pena de el jaque valentón, que se bajó el listón, precisamente, por no ser listo. Y como tal era la obra:
BELISA Baja los ojos al suelo,
porque sólo has de mirar
la tierra que has de pisar.
FENISA ¡Qué! ¿No he de mirar al cielo?
BELISA No repliques bachillera.
FENISA Pues ¿no quieres que me asombre?
Crió Dios derecho al hombre
porque el cielo ver pudiera.
BELISA Mirar al cielo podrás
con sólo el entendimiento;
que un honesto pensamiento
mira la tierra no más.
Cuando quieras contemplar
en el cielo, en tu aposento
con mucho recogimiento,
tendrás, Fenisa, lugar.
Desde allí contemplarás
de su grandeza el proceso.
FENISA No soy monja, ni profeso
las lecciones que me das.
BELISA Y no recibas enojo;
que doncellas y hermosuras
son como las criaturas,
que suelen morirse de ojo.
Hay mancebete en Madrid,
que si te mira al soslayo,
hará el efecto del rayo.
Continuando cuando Lucindo, el amante se entera;
"Una mujer que me adora,
y eso que has echo agora,
es un notable yerro,
pues que muero."
Cuando Gerarda, la enamorada, actuaba ante Lucindo, disputándose su amor con Fenisa;
"Cuanto te dije fingía,
y cuanto hablaba también;
Aborrezco a Doristeo,
Solo te adoro, Lucindo;
de nuevo el alma te brindo.
En prenda que tu eres mi verdad,
vente conmigo."
Y con mucha sorna y griterío por parte de hombres, y poca guasa y algún abanicazo por parte de féminas este respondía;
"Mucho os alienta el castigo,
como bestias sois mujeres;
¡Bendiga el cielo la traza,
la hora, el movimiento, el prado,
los celos y el truco creado.!"*
Y ya con mucho hablar de actores y pasajes, que todos eran grandes entendidos, hasta el mozo de cuadra, de las obras que tanto gustaban a los epañoles de esta españa, grande y poderosa, salen todos a la calle para charlar de sus asuntos y visitar las gradas. Pero se ha echo un tapón en la salida.
*- En palabras actuales esto último sería como; Viva el sexo, drogas, y rock and roll.
Las gradas de san felipe, lugar donde corren todo tipo de rumores y citas, muchas de quevedo hacia góngora, su mortal enemigo.
Me dirijo hacia la señora. Vive Dios que una cosa es alquilar la espada contra quién uno juzgue que lo merece, y otra es permitir por las buenas que pisoteen a una anciana que apenas puede caminar.
-Más les valdría a vuestras mercedes -digo en voz alta, sin mirar a nadie en particular- cuidarse de que a esta buena mujer no le suceda nada.
YEAH!! XDD
Ves como la gente se arrima empujados por los de atrás y decides pararles hasta que la anciana pueda pasar. Entonces la impaciencia se hace presente:
Una voz:-¿Que pasa, que ocurre?.
Otra voz:-¿Quién impide salir.?
Otra más:-Una merceded ha dicho no se qué de un tal "uceda".
Una voz:-Pardiez que en el prado le despeinaba yo a ese "Uceda".
Otra voz más:-Será de alta cuna? O pariente un hijodalgo?
Otra por ahí:-Caradura¡¡
Oyes como un griterío y al parecer, un lindo o un valentón, interfiere la salida. Ya se oyen algunos insultos y voseos de más.
De caraduras está el mundo lleno
Que se escudan tras la sordera
Que pongan oído, o mi acero
Hará que se lleven manos a la cabeza
Ni Calderón!! XDD
Miro, tratando de vislumbrar lo que está ocurriendo, desde mi sitio...
¿Rodrigo ha vuelto a liarlo eligiendo de nuevo a todos ;D ?.
Te parece vislumbrar el sombraro de un galán del acero, cierto conocido tuyo.
Bueno, ya te haces una idea de lo que pasa no? :)