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Esta partida está en revisión. Si el director no da señales de vida o es aprobada por un cuervo será borrada esta noche

Proy. Contingencia - Metanoia (+18)

Inicio - Un día como otro cualquiera

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16/04/2016, 20:41

Hay vida más allá de este planeta.

Los últimos datos recogidos por varias misiones no tripuladas dan información suficiente para saber que, no solo hay vida, si no que, además, es inteligente. Eso plantea varios escenarios. El peor de ellos implica invasión.

La ONU, enmarcado en el Plan Oikos, ha creado varios equipos de trabajo cuyo objetivo es establecer un plan anti - invasión. El equipo cuenta con varios grupos de trabajo; uno para definir los esquemas de alerta y para configurar los medios de comunicación, otro para diseñar armas que abarquen nuevos medios de ataque... y un grupo para evaluar y definir los esquemas de organización y conducta, llamado Proyecto Contingencia.

Todos los responsables de los distintos grupos del Plan Oikos conocen la existencia de los demás equipos de trabajo y sus objetivos, pero no el detalle de cómo desarrollan sus tareas. Esto permite que cada grupo trabaje con libertad absoluta de cara a obtener sus objetivos. Ademas, se ha dotado a los miembros de los equipos de recursos casi ilimitados, accesos especiales a cualquier información, valija diplomática para viajar sin declarar entre países...

El Proyecto Contingencia está formado por 10 militares y 10 científicos especializados en Neurobiologia, Psicobiologia, Anatomía...
El director del equipo es el Dr. Auguste Newman, doctor en Antropología, Ciencias del Comportamiento y Psiquiatría.
Por debajo de él y a sus órdenes, esta el General John S. Husser.

El objetivo declarado del Proyecto Contingencia es establecer las posibles pautas de comportamiento de la humanidad, ante distintos escenarios de ataque. Para ello evaluan el comportamiento de las personas ante escenarios de cambio repentino con alto nivel de stress.

Además para cada escenario y, una vez identificadas las pautas de actuación que tendríamos, tendrán que establecer cuales serían los protocolos necesarios que dirijan nuestro comportamiento de manera que podamos, como raza, afrontar y combatir en un escenario alterado. Lo que se busca es pautas que permitan identificar líderes, establecer incentivos que movilicen a las personas, evaluar el impacto de la falta de recursos en personas anónimas... en definitiva, identificar y controlar todo lo que pueda "volver idiotas a las masas", como dice el General Husser.

El equipo se encuentra en la Fase I de trabajo, la que implica la obtención de información sobre escenarios y reacciones humanas ante los mismos.

La fórmula de trabajo, no declarada, que actualmente se utiliza por el equipo, es la recogida de sujetos en distintos ambientes, físicos y mentales, a los que someten a diversos escenarios imposibles para testar reacciones y consecuencias.

La recopilación y análisis de la información obtenida permite cumplir una doble función:
- establecer pautas de comportamiento ante situaciones imprevistas
- ayudar a identificar patrones concretos que ayuden a seleccionar sujetos con un perfil mental resistente, que serían los reclutados como responsables y coordinadores de los equipos de respuesta y contención en caso de ataque.

El procedimiento es el siguiente:
1.- Identificar el sujeto candidato conforme a las especificaciones definidas por el equipo médico.
2.- Análisis de sus patrones diarios (rutinas). Selección del mejor momento para la extracción.
3.- Extracción del sujeto
4.- Implantación mental del escenario a testar
5.- Recogida de datos
6.- Borrado de memoria
7.- Entrega del sujeto en el mismo lugar de la extracción

El proceso completo dura 5 horas. En cambio los datos analizados responden a un período mental de 4 días, que es el plazo que el Plan Oikos tiene identificado como plazo mínimo para una concluir una invasión completa del planeta.
La diferencia entre el tiempo mental y el real se salva con un estímulo neuronal que acelera el trabajo del cerebro. El único efecto secundario es un fuerte dolor de cabeza que permanece en los sujetos por 12 horas tras la devolución.

Una vez terminado el experimento, a los sujetos se les borra la memoria y son devueltos al lugar donde fueron extraidos, solo unas horas después de la extracción.

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26/04/2016, 20:49
Dos Caras

Es un día como otro cualquiera*, Héctor se levanta a la hora de siempre. Tiene que hacer lo que siempre hace por las mañanas...

Notas de juego

* Descríbelo hasta el mediodía. Dime qué hace Héctor en su día a día. A qué hora se levanta, si come con alguien, cómo va hasta el hangar...

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27/04/2016, 22:22
Hector Villa

 12:00

 El telefono móbil no deja de sonar. Hector renquea por la cama, vestido sólo con unos fabulosos Dolce & Gabanna underwear que le sientan de vicio. Por suerte está en su cama, en su casa, de matrimonio para uno solo. E invitadas.

 Mira la pantalla y cuelga. Es una de las invitadas de hace tres días. Aún no ha pillado la indirecta.

 Se arrastra a la ducha y se sumerge en agua tibia para conseguir tonificarse. Anoche tuvo un servicio, devolviendo a un empresario de Mahón de una fiesta en Ciutadella. Le dijo que se "retiraría temprano", pero al final el mamón lo tuvo en liza hasta las cuatro de la mañana. No se ligó a nadie, pero consiguió Dry Martinis gratis con abundante ginebra. 

 Se seca, se afeita y se aplica la loción fresca para después del afeitado. Le tiene que agradecer a la pesada que lo haya despertado, ya que hoy tiene que ir al hangar para una inspección técnica. Ramón es colega, pero aparecer por allí es necesario para pasar la inspección. Se cepilla los dientes y aún siente la necesidad de usar el spray anti-halitósis. 

 Después de volar haciendo más eses de las estrictamente necesarias, aún había dormido seis horas. Cogió las llaves del audi y se vistió con unos tejanos con nauticos, una camiseta de rayas horizontales, blancas y negras, coronando todo con su chaqueta de cuero marrón. Salió a la calle silbando una canción y calándose las ray ban en los ojos.

 De camino al hangar pararía en el bar de Pintxo para tomar un tentempié rápido, a medio camino del desayuno y de la comida, que él llamaría "Esmorçar" (almuerzo), de forma un tanto ambigua.

Notas de juego

 Perdón por el retraso, pero me quede un poco bloqueado pensando en una "rutina" para alguien tan poco "rutinario". Creo que al final ha quedado digno. Ya me dirás...

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29/04/2016, 08:27
Dos Caras

Al igual que el resto de sus días, Héctor se levanta disfrutando de su libertad. Aunque obligado por las pequeñas necesidades, como la visita de Ramón, tiene que hacer algunas concesiones a lo de vivir sin planificación, en general no se preocupa por las rutinas. Duerme hasta que se despierta, se deleita en su trabajo siempre, se "deja" acompañar cuando surge la ocasión sin complicaciones adicionales...

En general, Héctor disfruta de la vida tanto como puede. Después de haber estado en zona de guerra, ha aprendido qué es exactamente lo que quiere y a no perder el tiempo con lo que no le interesa.  Él se impone sus propios límites... sólo si es que los necesita.

Sale de casa con ropa cómoda pero que sabe que le hace atractivo.  Aunque no es sólo la ropa, es también la seguridad que siempre deja traslucir. Un conocido, envidioso porque le levantó un ligue en su misma jeta, le comentó en una ocasión que era su precioso coche el gancho que seducía.  Pero no, el coche es realmente bonito pero es la personalidad de Héctor lo que le hace magnético hacia los demás.

Cuando ese día entra en el Pintxo, las dos turistas (¿suecas quizás? A saber... noruegas, suecas, danesas... son parecidas) le siguen con la mirada hasta la barra. Quizás, si Ramón no viniera hoy, se quedaría y les haria un favor... a las 2. Pero hoy no puede. Así que pide su plato favorito y se lo come, disfrutando de las vistas únicamente.
Cuando ha terminado, se marcha, después de dejarles pagado un café, por si mañana vuelven a estar allí, tener parte del "trabajo" ya avanzado. Al salir les dice algo bonito, que sabe que no entienden, pero no es el qué, si no el cómo y eso se nota. Ambas sueltan una risita medio tímida. Nota mental: volver mañana. 

Se sube al coche y se va hasta el hangar, llegando a tiempo para que Ramón no tenga que esperar.

Notas de juego

Por si acaso no lo habías notado, el día de hoy eres tú el que decide lo que pasa (siempre que sea algo que le pase "normalmente" a tu PJ).
Puedes narrar ahora lo que quieras desde el mediodía a la caida de la noche

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29/04/2016, 10:27
Hector Villa

 Su imaginación vuela mientras las danesas sonríen y cuchichean. Un trío con dos hermanas siempre ha sido una fantasía que no ha logrado concluir. Aunque, de hecho, desconoce si son hermanas o sólo se parecen por ser nórdicas. En cualquier caso, paga los cafés. Quizá las vea mañana aqui... o por ahí. La isla no es tan grande después de todo.

 Llega al hangar quince minutos tarde. Ramón ya le está esperando. Lleva americana y semblante adusto, su aspecto de trabajo. Nada bueno cabe esperar de ahí. Nada más llegar le señala un rayajo en el lateral izquierdo del helicoptero, a lo que Hector responde encogiéndose de hombros. Eso no hará que vuele peor, ¿no?

 Ramón asiente y se le escapa una sonrisa mientras se pregunta por que le tolera tanto a este piloto truhán y jugador. Hector abre el motor del vehiculo y comienza la inspección realmente en serio. Pasados veinte minutos el resultado está claro: todo esta bien menos un manguito del rotor principal.

  ¿Cuanto tiempo tengo para repararlo? pregunta Hector conocedor de la respuesta.

 El que tú quieras. responde Ramón, pero sentencia No puedes volar hasta que lo repares.

 No me hagas esto... es mi medio de vida... tengo unos clientes esta tarde... Hector intenta desesperado salvar su negocio. Ramon niega con la cabeza y va directo a escribir el informe. Hector lo detiene Vamos, tengo manguitos de repuesto en el maletero de mi coche, dame media hora. ¿Tienes prisa?

 Se miran a los ojos. Lo tolera por que aquel idiota salvó su matrimonio cubriendo su "escarceo" una noche diciendo que la habia pasado con él. Lo tolera por que cuando tuvo apendicitis fue en su helicoptero que voló hasta un hospital. Son muchos años y muchos favores mútuos. La isla es pequeña. Ramón asiente con la cabeza ligeramente.

 Hector se saca el polo y va a buscar al coche el repuesto. Coge también su caja de herramientas que guarda en un rinconcito del hangar. Durante la siguiente hora y media desmonta y monta el rotor principal del helicoptero. Ventajas de haber aprendido en el ejército: los pilotos comerciales saben muy poco de mecánica. Al final hasta Ramón ayuda. Su mujer le llama pero cuando le dice que está con Hector, lo entiende. 

 A media tarde, el rotor está listo, el informe firmado "sin incidéncias" y ambos disfrutan de una estrella de lata, sentados en el suelo del hangar.

 Siempre me lías. le dice Ramón Que morro tienes, oye ¿no tenías unos clientes?

 Mierda. masculla Hector mirando el relog. Apura la lata y se pone a los mandos del helicoptero.

 ¡No deberías beber y pilotar! le grita Ramón desde el hangar, pero Hector ya no le oye.

 El resto de la tarde se pierde en llevar a unos alemanes de excursión. Un empresario llamado Fritz y su insoportable madre octogenária que responde al nombre de Helda. Los acantilados rocosos, los muros de coral... cenar en un restaurante elitista en la cima de un volcán apagado... al menos le invitan a cenar, aunque no en su mesa, claro.

 La "rutina" de siempre.

Notas de juego

 Mola.. de momento voy haciendo.

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29/04/2016, 21:02
Dos Caras

Héctor no puede si no agradecer al Destino todas las ocasiones en que supo ponerse de su lado... ¿o tomar él la decisión correcta, más bien? Porque, en realidad, como dicen por ahí "al saber, le llaman suerte". Todas esas veces que él se la ha jugado, mucho o poco da igual, por otros, siempre acaban trayendo recompensa. Si con Pedro no es una excepción. Lo hubiera hecho igual, porque le considera un amigo, pero aún así, cuando se reciben los frutos... Esa red de amigos, conocidos y contactos, le ha devuelto tantos favores como los que él ha hecho.

Al final, el cambio del manguito casi se convierte en una tarde de risas y chapuzas, con un colega. Así que, cuando recuerda al alemán (y su madre) que le esperan, le da algo de pereza. Pero ¿qué remedio? Hay que pagar el seguro del cochazo, el café de las suecas, la cama de matrimonio para visitas... No es que lleve un tren de vida de lujo, pero tiene lo que quiere y, a cambio, sólo necesita volar que es algo que adora.

Despidiéndose rápido de su amigo (y haciendo como que no escucha el comentario sobre beber y volar) se dirige a recogerlos. La tarde pasa rápido porque, gracias a los cielos, allí arriba, con los cascos no tiene que aguantar a la vieja. Hector no puede si no sentir pena por el pobre Fritz, que con la pasta que tiene podría estar follándose a cualquier modelo sin dos dedos de frente, pero está aquí con la vieja.

Al final, cuando van a cenar, agradece estar en una mesa separada. La cena está deliciosa y las vistas son fantásticas. Y lo mejor de todo, es que por culpa de la vieja pesada, se marchan pronto...

Notas de juego

Puedes narrar lo que quieras hasta que te vayas a dormir (aprovecha, es el último post en el que tú decides qué pasa ;)

PD: Por si no te has dado cuenta, todo lo que vas contando, me permite hacer un esquema completo de la vida de Héctor (no sólo rutinas, también situación económica, amistades, gustos...) :P

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30/04/2016, 10:50
Hector Villa

 Una vez deja a Fritz y su madre en su villa del sur de Mallorca, aprovechando la pista de tenis sin red para aterrizar, mira su PDA y observa su siguiente cita.

 Shit

 Un hotel de cinco estrellas del centro con destino a Pachá en Ibiza. La cosa pinta mal. El nombre es inglés: George Walker. Y Hector ruega a los cielos en los que no cree para que los cuatro pasajeros sean una despedida de solteros americana. Es la segunda opción menos mala. Pero no.

 Una vez en la terraza del hotel los vé venir y sabe que tendremos problemas. Ingleses. Adolescentes ingleses, seguramente alojados por un viaje de estudios muy caro de un colegio muy pijo. Las chaquetas tipo Etton confirman sus peores sospechas. Hooligans ingleses de dieciocho años recién cumplidos. Borrachos.

 Seguramente, algún padre preocupado por enviar a su niñito "al tercer mundo" le ha dado una VISA y un numero secreto. El gilipollas de turno decide contratar un aero taxi y esperar a que los profes vuelvan. Pasa todos los días. Hector no pide ni documentación: tienen más de dieciocho o el destino no sería Pachá. En la discoteca les pedirán la documentación seguro. Sólo les pide que no vomiten en el helicoptero, pero no le escuchan.

 Los cuatro no dejan de reírse y pasarse una petaca que a saber que contiene. Hector se concentra en pilotar. El trayecto es de los más largos que hace, pero sólo son 130 km, estan en apenas una hora y media. A media noche los gilipollas estan haciendo cola para entrar en pachá. Insisten en que los recoja a las cinco. Seguramente temen llegar tarde y que los profesores despierten antes de tiempo. Hector les dice que Ok. 

 La zona de discotecas de ibiza en plena noche es un caos y un hervidero de gente. Hector otea entre las turistas, pero no localiza nada interesante. Al final, opta por encontrar un pequeño bar, tranquilo, dónde hacer un café y disctuir con el dueño, un tal Lluis, sobre lo mal que se esta poniendo esta parte de las islas.

 Recuerda una turista canadiense... ¿Julia? ¿Judit? ahora hace un par de años... una cala desierta, a plena luz de la luna... le prometió llevarla a una playa nudista y no usaron mucha ropa en aquel lugar... aunque tampoco nadaron demasiado...

 Cuando se aproxima la hora, se despide de su nuevo amigo, le ayuda a echar la persiana y corre de regreso a la discoteca. Por fortuna, Pachá dispone de su propio Heliopuerto. Los cuatro hooligans estan esperándole a pie de pista, visiblemente enfadados. Bueno, dos de ellos, por que el tercero esta blanco como el papel y el cuarto se esta durmiendo. Tras asegurarse de que mr.White ya ha vomitado en los baños de la discoteca, los deja subir a bordo.

 Vuelan de regreso a Palma. Aterrizaje sobre la azotea del hotel, bien centradito en la H, para que no se quejen los del hotel. Entonces empiezan los problemas. En un inglés ebrio que cuesta de entender, el jefecillo de la pandilla le explica que no le van a pagar por que ha llegado tarde y por que no les gusta su actitud. No tiene tiempo para esto.

 Con un uppercute de derecha, sin mediar palabra, golpea al chico justo en la base de la nariz. Cae al suelo sujetándose la napia al instante con un alarido de dolor. El otro que está consciente del todo se queda tan pálido como su amigo. El gordo ronca ostensiblemente, aunque se mantiene en pie. El jefecillo se queja You broken mi noise ... fuck... broken mi noise... pero Hector sabe que no está rota. Se habría oído un chasquido. Eso sí, le debe doler y le sangrará a ratos seguramente todo el dia. Puede que se hinche y todo.

 El colega pálido y el colega blanco sacan las carteras bajo la severa mirada de Hector y pagan religiosamente mezclando billetes de euro y de libra esterlina, grandes y pequeños. Es un caos de divisas, pero Hector no quiere más líos. Cobra, se sube al helicoptero mientras el hooligan jefe, ya de pie, le amenaza en la lengua de Shakespeare con lágrimas en los ojos, y se marcha volando, tal y como ha venido.

Cuando sube a su audi en el hangar el sol ya despunta sobre la isla. Seis cuarenta segun el salpicadero del coche. Llega a casa a las siete y pico. Se desnuda y se mete en la cama, esperando poder dormir cinco horas al menos antes de encarar un nuevo día.

Notas de juego

 Bueno, no todo va a ser positivo en la vida del hombre, ¿no?

 Aunque intimidar a cuatro adolescentes borrachos por parte de un ex-militar tampoco debe ser como para que le suba el pulso ni mucho menos, ¿no?

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30/04/2016, 15:27
Dos Caras

¡Por Dios! Si había algo que Héctor odiase eran los estúpidos veinteañeros mal criados, con más dinero que cerebro. Quizás porque su vida había sido dura y se la tuvo que tomar en serio desde joven, le irritaban especialmente los niñatos.

Aunque, de la noche, se quedaba con lo bueno. Haber conocido a Lluis, un tío agradable y con un buen local. Si le tocaba volver por la zona ya sabía donde podía ir a tomar algo y tener una agradable charla.

Cuando llega a casa, lo único que hace es quitarse la ropa antes de dejarse caer en la cama. Si hay suerte dormirá del tirón y no se levantará muy cansado.