Partida Rol por web

Jack se quedó como una estatua al oír los disparos. Solo con la tensión que acumuló ese momento, vio las estrellas con el dolor de su herida. Miró a su mujer y a su ayudante algo desamparado, pues no tenía demasiadas respuestas y tenía, en cambio, miles de preguntas.

Al oír a los militares ordenarlos a subir, pensó en contestar algo, pero luego sopesó de nuevo la situación. Miró a sus dos compañeras y cabeceó en dirección al camión, ¿qué otra cosa podían hacer?

- Vamos, ayudadme a subir, por favor.

Cuando oigo los disparos siento una duda formarse en mí, porque sólo se me ocurre que disparasen a Ian. ¿He hecho bien en decirles que estaba ahí? ¿Hubiera sido más cruel dejarle ahí esposado y herido? ¿Debí haber sacado un momento para atenderle después de Jack y Bianca? Esas preguntas me hacen sentir algo mal.

-Bianca, sujétale por el otro lado para ayudarle.-le pido a ella, acercándome con Jack al furgón.

Ayudo a Felicia a subir a su marido al furgón. Veo que a ambos lados del furgón hay tipo unos asientos aunque no tienen pinta de ser muy cómodos:

- Jack, te vamos a sentar aquí, no estarás muy agusto pero no nos queda otra.

- Gracias - dice subiendo poco a poco al furgón. Jack observó a ver que se encontraba ahí adentro, supuso que los llevarían a algún campo de refugiados o alguna zona de evacuación, pero no sabía porque casi le daba miedo preguntarlo. Esperaba que aquel sargento les informara de lo que estaba pasando, pues él hasta hacía pocas horas era el encargado de velar por la seguridad de Paxton.

En el furgón hay asientos a cada lado de la parte trasera, en medio hay una camilla de enfermos. Una rejilla separa el habitáculo trasero del conductor y el copiloto.

Los militares suben al furgón y ponen a éste en marcha. En las ventanillas de las puertas traseras veis mientras avanzais como la gente asustada va saliendo de sus casas y los militares les apuntan con sus armas y los van poniendo en filas. En el cielo veis un helicoptero rondando toda la zona del pueblo. Todo esto os parece increible, como si fuera una pelicula.

Finalmente llegais a las afueras del pueblo, en la gran explanada que hay junto a la gasolinera del pueblo. Antes desolada y ahora llena de vehiculos, y carpas de lona blanca, que muchas de ellas están montando. El furgón entra en el improvisado "campamento" y se detiene junto a una carpa grande. Multitud de militares van de un lado a otro andando, en 4x4 y furgones.
Os abren las puertas y os dicen

-Pueden ir bajando!

Vuelvo a sujetar a Jack para ayudarle a ponerse en pie del asiento y bajar, sin poder evitar echar un vistazo a donde nos han traído. Por un instante me corroe la duda de si no me habré dormido encima del escritorio de mi consulta y estaré teniendo uno de mis extraños sueños en los que me meto en películas muy bizarras. Esto es lo suficientemente bizarro como para sospechar. Le hago un gesto a Bianca con la cabeza para que baje primero y le sirva de apoyo a mi marido.

El camión se detiene y saco un poco la cabeza para ver dónde nos han llevado. Es una especie de campamento militar lleno de tiendas, otros camiones militares y soldados. Ayudo a Felicia a sacar a Jack del camión y le grito a uno de los soldados:

- ¿Dónde nos van a llevar ahora?

Jack baja del camión, con algunas dificultades, igual que lo subió. Al tocar suelo se lleva una mano en la frente, para ver el alcance de ese campamento.

- ¿Qué estás pasando aquí? - dice, casi hablando solo, sin esperar respuesta. Se fijo en todo el montaje que los militares habían hecho, sin duda algo grave estaba pasando. Se giró e intentó ver si había alguien al mando, cerca de su posición para poder hacerle unas cuantas preguntas.

Jack estaba tan sorprendido como yo. En todos los años que llevábamos al frente de la seguridad en Paxton no habíamos visto nada parecido, ni siquiera similar. Esto solo pasaba en las películas pero ya se sabe, dicen que la realidad supera la ficción.

- Jack no se cómo vamos a salir de esta ni lo que estos militares pretenden, ¿alguna idea?

Jack se giró hacia Bianca y suspiro.
- Ahora mismo dependemos de ellos, espero que nos informen en breves de la situación.. - esto ultimo lo dijo alzando algo la voz intencionadamente para que lo pudiera oír algún que otro soldado cercano.

El soldado os dice

-Por favor siganme, el general Stook les explicará todo una vez les hayamos scaneado.

Os llevan al interior de la tienda blanca, en principio veis solo un ppasillo largo y blanco, con dos entradas laterales con una cortina de plastico opaco, alli hay varias personas con trajes impermeables blancos y mascarillas. Uno de ellos porta un aparato cuadrado con un una pantalla digital y varios botones. No teneis ni idea de qué puede ser.

-Por favor coloquen los brazos abiertos y las piernas separadas, vamos a hacerles un escaner de reconocimiento- dijo el que lleva el aparato

Un soldado nos dice que le sigamos hasta el interior de una de las tiendas blancas. Evidentemente le seguimos ya que no tenemos otra alternativa [Puede ser que dentro de esa tienda estén todas las respuestas que buscamos...] La próxima acción de ellos es hacernos una especie de reconocimiento con una especie de aparato médico o algo parecido.

- Si estáis mirando nuestro grado de cordura creo que aun tenemos el suficiente aunque nos hayan pasado cosas horribles estos últimos días.

Dicho esto separo mis extremidades tal y como ellos han dicho.

Jack sigue a Bianca y esboza una sonrisa ante el comentario. Había sospechado, por los trajes que llevaban que se trataba de alguna contaminación o radiación que había provocado ese comportamiento extraño en los habitantes, quizá por eso querían cerciorarse de que ellos estaban sanos.

Siguió la fila y dejó examinarse por esos extraños aparatos.

Hacen una pasada primero a Bianca, luego hacen la lectura digital con el aparato y dicen:
-Ok, tienda nº8, todo estable.

Luego pasan el aparato por Jack, y tras hecer la lectura como en el caso de Bianca dice:
-También estable...tienda nº8

Finalmente pasan el aparato por Felicia, y al hacer la lectura el militar pone cara de extrañado.
- Esto es extraño...voy a volver a pasar el escaner.
pulsa algunos botones y vuelve a pasar el aparato por Felicia. Tras la nueva lectura y varios segundos con el militar pensativo dice
- A observaciones en la tienda nº2

Los soldados procedieron con el reconocimiento y a Jack y a mi no nos sacaron nada raro. Pero cuál fue mi sopresa cuando vi que tenían dudas con Felicia, como si hubiesen encontrado algo anormal en ella o en su cuerpo [ ¿Estará infectada? No,no puede ser, quítate eso de la cabeza....] Querían llevársela a otra tienda a lo que yo repliqué:

- ¡No os la váis a llevar de aquí! Hemos estado todo el rato juntas, si yo no tengo nada ella tampoco debería tenerlo- no podía soportar la idea de que la trasladaran y pudieran hacerla algo,si eso sucedía quizás no la volveríamos a ver más- Jack, díselo tú, ¡no se la pueden llevar!.

Mi cara denotaba furia, rabia y enfado, todo junto. Estaba enfadada con esos militares y con la maldita enfermedad que estaba asolando nuestro pueblo.

Jack posó su brazo en el hombro de Felicia, para intentar que se relajase. Sabía que a su mujer no le pasaba nada, porque su actitud era normal así que supuso que simplemente se les habría estropeado la maquina.

- Tranquila Felicia, en unos minutos estarás con nosotros.. - dijo mirando a los soldados que había en la tienda, mirándolos a los ojos. Jack dio un voto de confianza a aquellos malditos militares. Obviamente si algo le pasaba a su mujer, haría saltar toda esa mierda de campamento por los aires y se iba a encargar del responsable de eso.

El sheriff sacudió la cabeza como intentando alejar esos pensamientos violentos, convenciéndose a si mismo y a sus compañeras de que todo iba a salir bien.

Si no me hubiera encontrado como me encontré antes de lo de Ian, seguramente habría saltado de indignación y preguntaría que qué demonios significaba todo aquello. Pero claro...es obvio; la infección debía tener origen el algo irradiado para poder medirlo con un lector, y a mí me han cogido.

Cuando siento la mano de Jack en mi hombro, llevo la mía a la suya para apretársela. Agradezco bastante el gesto, porque sabiendo que a Ian le habían pegado un tiro sin miramientos, y a saber a cuántos más habrían matado, no me consuela saber que me van a separar de las únicas personas en que puedo confiar ahora.

-Está bien, Bianca; no te preocupes. No me pasará nada.-intento tranquilizarla a ella, que es quien se ha puesto más nerviosa. Yo sólo tengo un poco de miedo; es todo.

Cálmese señorita- dijo el militar a Bianca mientras "acompañaban" casi por la fuerza a Jack y a Bianca por el pasillo y entrando por una de las cortinas de plastico hacia otra zona de la tienda.

A Felicia la cogieron amablemente del brazo y la sacaron de esta tienda, para llevarla a otro lugar