Neves se acerca a todos. Sus ojos llorosos, quizá por la emoción, quizá por el humo, miran a todos mientras asiente y sonríe levemente.
-Hemos vencido.- dice -Esta vez ha muerto del todo. Sin duda no podemos esperar las simpatías de Akium a partir de ahora, pero hemos librado a la región de un peligro enorme. Gracias de todo corazón, a todos.-
Cambiando a un tono de voz más urgente, Neves continúa. -Creo que lo mejor es explicar a la policía que lo que hemos hecho aquí es ahuyentar a un par de asesinos. No sabemos qué quería, pero probablemente pretendían usar nuestro terreno como base para esconder el fruto de sus robos. Quizá podríamos decir que tenían acento de auropa del este. Ellos mataron a los guardias civiles y a Diana, que les habría descubierto al venir a tasar la finca. Probablemente tenían perros de presa, de ahí las heridas de los guardias y José. Mientras decidían qué hacer con nosotros, Daniel se escabulló y usó su coche para embestir contra ellos. Falló, pero la explosión les ahuyentó. Creo que es una historia lo bastante creíble. ¿Estáis de acuerdo?-
Creo que por fin todo ha terminado. Me siento tan cansado... El afán de venganza y la necesidad de proteger a Blanca del hijo de Akium se están desvaneciendo. Están siendo sustituidos por un cansancio placentero, un deseo de irme al sitio al que debía haberme marchado en el momento de mi muerte. Nada me ata ya. No sé cómo explicarlo pero siento terminé lo que me quedaba por hacer.
Me gustaría poner un final teatral a mi marcha, poder despedirme de Blanca a la vista de todos, poder dirigirle unas últimas palabras. Pero estoy tan, tan cansado... Sólo me siento capaz de acercarme a ella y rozar su cara con mi pensamiento, ya que no con mi carne. Adios, Blanca, podría decirle. Demasiado tarde me di cuenta de tu inquietud, pero ¿cómo iba a imaginar todo ésto hace siquiera un par de semanas?.
Siento que me encuentro cada vez más lejos, yendo a mi sitio, y ya el cuerpo desangrado de un joven biólogo que yace en un túnel hasta me resulta extraño, como si nunca hubiera estado unido a mí.
El roce de tu espíritu parece ser percibido por Blanca. Los demás siguen hablando, Miguel dice algo pero no sabes qué y ha dejado de interesarte. Blanca está llorando. Una lágrima tras otra, una triste, una feliz. Parece que ha comprendido.
Poco a poco, te vas desprendiendo de esta existencia como de una traje que se hubiera mojado con la lluvia y te sumerjes en el agua caliente de una ducha espiritual para descansar. Al otro lado te espera sin duda la Antesala, como te enseñó Joshua Anderson. Allí serás por fin libre para elegir un nuevo camino...
Fundido en negro.
FIN
Magnífico trabajo, compañero. Los demás (a los que les quedan pocos posts para terminar) van a flipar cuando lean tu parte. Me consta que los hay que no saben que sigues jugando; al menos Miguel/phoennyx me consta que no lo sabía.
En cuanto la cosa haya terminado pondré una escena para comentarios y ahí podrás compartir lo ocurrido con el resto de jugadores.