Partida Rol por web

Una vez en el McDonalds, el grupo se sentó en la mesa junto al teléfono con sus respectivos menús individuales.  Para cuando terminaron de comer había pasado más de media hora. Tiempo suficiente para que Carol hubiese podido encontrar la dirección o más información sobre el propietario del furgon de los helados.

Dan se levantó cuando hubo terminado con su menú, lo cual ocurrió demasiado rápido para su gusto. 

- Disculpad un momento.

Marcó el número de la oficina y esperó a que Carol le contestase.

- Hola, preciosa. -le saludó haciéndole un poco la rosca- Soy Dan, ¿hay buenas noticias sobre lo que te pedí?

-¡¡¡EXPLOTADOR!!! ¡¡NEGRERO!!! ESPERO QUE LA PAGA EXTRA DE NAVIDAD MEREZCA LA PENA

Los gritos de Carol pueden ser oidos por cualquiera que esté cerca del telefono, pero después de la explosión inicial parece calmarse y continua hablando:

-No me preguntes como, porque tendré que mentirte, pero he conseguido la dirección.-Calla unos segundos y continua burlona- Que es del estado que es del estado....Si. Es del estado por 5 kilometros. -Su voz vuelve a tornarse seria-Está en la otra punta de Maine y parece pertenecer a una oficina de una de esas empresas nuevas de ordenadores ¿Se puede saber que narices estaís buscando?

Ois perfectamente una voz que sale del otro aldo de la linea telefonica

-¡¡¡EXPLOTADOR!!! ¡¡NEGRERO!!! ESPERO QUE LA PAGA EXTRA DE NAVIDAD MEREZCA LA PENA

 - ¿Me dictas la dirección exacta que has conseguido? -Parker tomó nota. Después continuó.-  ¿Has leído la prensa de hoy? Un caso de un tipo medio loco que disparó a un heladero... estoy haciendo algunas averiguaciones sobre eso, ya te contaré.

Eres un tesoro Carol, no sé que haría sin ti. Recuérdame que un día de estos te lleve a comer a un sitio elegante.

Carol te da la dirección que había apuntado en una hoja de papel momentos antes

¿Vas a hacerte un viaje de 300 kilometros?- Carol parece preocupada por unos momentos -No se Dan. No me gusta la idea. He leido el caso si, pero Jessy me llamó comentandome que lo habían detenido.  ¿Porque no me dices que quieres averiguar y el lunes te doy toda la información?

- ¿Has dicho 300? -Parker silbó al oírlo- No Carol, no creo que tenga ganas de chuparme ese montón de kilómetros; además... -el detective se detuvo unos instantes mientras pensaba en algo.

Verás, el caso es que el heladero murió sin haber terminado de pagar su camioneta y se la han devuelto al dueño, que resulta ser ése Hugh Jones o... Jon Hughman, no lo tengo claro. El de la oficina ésa de ordenadores me refiero.  Tengo cierto interés en localizarle. No sé si habrá venido él mismo a recoger la furgoneta o se la habrán hecho llegar. En el primer caso, a lo mejor aún sigue aquí en Derry... -en estos momentos, parecía que Dan hablaba más con sí mismo que con su secretaria.- En fin... gracias otra vez, cielo. A ver qué se me ocurre.

Haré algunas llamadas y el lunes a media mañana te diré donde esta el diochoso camión. No se te ocurra hacer la tonteria de recorrerte todo el estado en esa carreta oxidada que llamas coche. SI es una oficina estará cerrada. Así que ten un poco de paciencia. El lunes te daré la localización de la furgoneta.

Se queda unos moemtnos en silencio y riendo te dice a modo de broma - de acuerdo, invitame, que pediré lo mas caro de la carta- Carol sabe perfectamente los aputros económicos del detective, no en vano la falta de cobrar el último mes, pero no hace ninguna mención al respecto. Tiene algunos ahorrillos y sabe que en cuanto pueda el detective la pagará.

¡Mucha suerte cielo! dice a modo de despedida, y recuerda como me vuelvas a llamar un viernes a última hora  te descoyunto las vertebras

- No te preocupes, descuida. -se despidió Parker y colgó el auricular. Luego volvió a la mesa donde los otros le esperaban.

- El teléfono es de una empresa... ¡de ordenadores!, en la otra punta del estado, a 300 km de aquí. -les resumió. Se quedó unos instantes pensativo, con las piezas del puzzle en la cabeza sin que acabasen de encajar: ¿una furgoneta comprada por un heladero a una empresa nueva de computadoras?... otro raro detalle a añadir a la amplia colección que presentaba el caso.- Todo esto es muy extraño... -el detective había perdido su habitual sonrisa.

- Y aquí se acaba mi aventura, por ahora - Dijo Will que no tenía dinero ni coche para hacer un viaje de tales dimensiones - Espero que si volvéis me comentéis lo sucedido y pueda continuar en la scooby gang.

La verdad es que la chica de los Connor podría haber afrontado un viaje de menos kilómetros, pero trescientos era una salvajada para una chica que fue a la Universidad a 27 millas de su casa.

Pese a su aire de estudiante informada, lo cierto es que la joven no había visto tanto mundo como quería aparentar.

Bueno chicas parece que hasta aquí a llegado el jueguecito de los detectives. Me marcho a casa.

comence a andar en busca de mi vehiculo.

Pero Dan dijo la joven Ashley mientras se retorcía un mechon de cabello -¿Qué es lo que te dijeron? ¿No pueden averiguar nada mas?

- Hasta otra Joseph -se despidió cuando éste se marchó de la cafetería.

- Nada más. Es viernes por la tarde y pocas averiguaciones se pueden hacer ahora sobre el paradero de la furgoneta. Como dice Joseph, se acabó el jueguecito de los detectives, chicas, lo siento. -respondió a Ashley con una sonrisa que no acababa de ser clara. Tras ella, el rostro de Parker denotaba que no estaba satisfecho y que el caso había conseguido engancharle.

Se levantó y pagó las consumiciones, tal como había prometido, dispuesto a pasar el fin de semana lo más tranquilo posible.

- ¿Debe haber algún tren a estas horas que cruce el estado? -se preguntó. Como no consiguiese apartar al furgón de los helados de sus pensamientos, el fin de semana iba  a  ser de todo, menos tranquilo.

- Adios Joseph. - digo despidiéndole con la mano.

- Dan, ¿puedes acompañarnos a Will y a mi a su casa? - pregunto al detective. Esta noche teníamos pensado pasarla allí.

Will se despidió con las manos de Joshep. Esta noche Ashley dormiría en su casa. De hecho, en su cama. 

Sus padres no estaban pero le parecía de mal gusto invitarla a dormir allí. Supuso que ella se quedaría en el sofa, o que hablarían de sus cosas de chicas hasta las mil de la mañana...

Las palabras de Ashley le sacaron de su momentáneo ensimismamiento.

- No tengo aquí el coche, Ashley -le respondió- Pensaba ir paseando hasta la oficina, a ver si está por allí Carol. Claro que, si vamos en la misma dirección, será un placer acompañaros.

Tenía ganas de ver a su fiel secretaria; siempre que se encontraba preocupado por algo, sentía esa misma necesidad.

Dan acompañó a las jóvenes hasta su casa y se disculpó con los padres de Willow por haber entretenido a las chicas. Poco después se dirigió a la oficina. Carol no estaba allí, pero le había dejado una nota a sabiendas de que pasaría a buscarla.

Hola Jefe.

Me imagino que vendrás a ver si estoy en la oficina, pero este fín de semana va a ser de locos para mí y no he podido quedarme. De todos modos ya te he dicho que para el lunes te dire donde está el camión de tus amores. Ten un poco de paciencia y no te preocupes.

Un beso

Carol