Partida Rol por web

Paqui-R-RIN-2 se cuadra antes el RoboGuardia haciendole un saludo marcial, a la vez que se da un golpe con la fregona en la cabeza. ¡Ouch! digo... ¡RoboGuardia, sí, RoboGuardia!

Acto seguido abre la mano, dejando caer la escoba, y echa a corred tras el bichejo al grito de ¡Pa'servir al Ordenador!

Mou-R levantó levemente las palmas de las manos en un gesto de suficiencia que indicaba que todo estaba clarísimo y que no encontraría a nadie más sumiso y obediente que él.

- Todo correcto, oh ilustrísimo. Cuando desee, puede comenzar con la explicación. Estoy ansioso por servirle -peloteó.

- Perfectamente, oh amado Ordenador.

Garga-R-Mel espera ansioso recibir la información disponible para su nivel de CS.

-Oh, si, entendidísimo del todo. Por supuesto.

ya completamente recuperado, me siento, y espero a ver que pasa.

-bueno, ya se ha eliminado al traidor, ¿ahora que hacemos?

- Está bien, que pase el… Robotico!!

En ese momento entra el nuevo clon de Paqui-R – No, no, bueno si, entra, pero he dicho que entre robotico!!

Ahora entra Danit-R un poco dolido del pecho, la pantalla ya temblaba de ira cuando ahora si la puerta se abre y entra un cacharrín con ruedas.

- Muy bien, tenéis que seguir a Robotico, primero os acompañará a la sala de armas y de allí, una vez aprovisionados os llevará a vuestra misión, lo único que os puedo decir es que sospecho que se va a producir una invasión o mejor dicho, un intento de invasión, mis medidas de seguridad son geniales, magníficas, pero para asegurarme que todo marcha bien os mando a vosotros, ningún traidor ni invasor ha de poner un pié en esta base y si lo hace ha de ser inmediatamente eliminado ¿Alguna pregunta? ¿No? Me alegro porque no tenéis acceso a más información

Veo a Robotico, y se me escapa un silvido de admiración.

Si alguna vez la computadora quisiese modificarme, me gustaria ser Robotico, que fino, que clase, que elegancia.

Sigo a Robotico mientras lo observo, no puedo ni hablar al ver esa maravilla.

Con las medidas de segureidad del Gran ordenador, no nos puede pasar nada, es un honor que nos deje ir a obserbar el fracaso de invasión.

- ¡Bieeen! ¡Vamos a asegurarnos de que todo marcha bieeeeen!

Garga-R echa a andar detrás del robot con ilusionada marcialidad.

-¡Arjgh! ¡Una invasión! Que nadie se orine en los pantalones todavía, el Ordenador lo tiene controlado, que todos los traidores se autoejecuten ¿Donde están las provisiones? Ah, ya las veo -dice cogiendo todos los chucuburbus sobrantes y guardándoselos- Esto nos mantendrá calientes durante las largas patrullas a lo largo del sector ¿Todos tienen sus láseres a punto? ¿Y sus pistolas también? Perfecto ¡Guianos, Robotico! ¡Guianos a la victoria!

Paqui-R-RIN-2 saca su pistolaser del pantalón, se lo muestra a Brani y lo vuelve a enfundar. Un esclarecedor siempre tiene que llevar su arma limpia y lista para ser usada.

Sigamos a ese robotico y sirvamos al Ordenador como se merece. tras lo que comienza a andar.

Brani-R se adelanta como un roboguepardo y sujeta la pistola de Paqui-R con una mano, la examina atentamente por encima, por debajo y ambos lados, la agita, la sacude, la huele un poco por si hay olor a oxido, y por último la agita y la constriñe para comprobar su cableado.

-Un arma excelente, clase Alpha 2, diría yo -dice mientras ayuda a Paqui-R a guardarla- ¡Cuidala como si te fuera la vida en ello! Un esclarecedor no es nada sin su pistola.

Mou-R escuchó atentamente la explicación. Al fin y al cabo no parecía una misión excesivamente peligrosa pues simplemente se trataba de supervisar que las defensas estuviesen en orden. Pretender invadir el Complejo Alpha era algo impensable dadas las fortísimas medidas de seguridad que el Supeordenador había dispuesto, siempre, claro está, según palabras  del mismísimo superordenador.

- Será una buena oportunidad para hacer turismo por el Complejo -dijo desenfadadamente- Es imposible que nadie supere sus medidas de seguridad, oh amadísimo, pero si alguien lo logra de remota casualidad puede considerarse desde ya, un traidor muerto.

Y, después de agachar la cabeza en gesto de despedida, siguió a los otros y a Robotico hacia su próximo destino, la sala de armas.