Vale, no tienes ni idea de donde está la sala de curas ;)
Al ver que no reacciona de ninguna forma, decido comentar a mis compañeros.
-Bueno, alguien deberá llevarlo al confesionario, y explicarle todo al gran ordenador, yo al ser el último en llegar aquí tendría demasiadas dudas si me pregunta la gran computadora. Mejor llevarlo inconsciente que muerto.
- A ver, un momento... -Mou-R se acercó al bulto que yacía en el suelo y le propinó un par de buenas patadas en los costillares, un poco por ver si reaccionaba ante sus conocimientos médicos y otro poco por... - ¡toma y toma, cabrón! ¡Esto por lo de mi nariz! -Después de eso, se calmó un poco.
- No tengo inconveniente en esperar si alguien quiere dar parte al ordenador, incluso lo haría yo mismo si no os veis capaces. Pero yo soy partidario de cargar al traidor en una vagoneta y ver a dónde nos llevaría el tren; no tenemos otra salida que ésa o desandar lo andado. Quizás encontremos por allí información más concreta.
Por cierto, ¿no sabréis dónde hay una sala de curas? -preguntó, volviéndose a tocar el hueco de la nariz.
-No, yo no, lo siento, compañero.. ¡Pero consuélate pensando que siempre puedes poner ese estilismo desnarigado de moda!
El traidor ya estaba para el arrastre, pero como que me daba bastante igual.
-Podemos hacer ambas cosas, y así no contrariar ninguna orden. Puedo ir yo a hablar con el ordenador mientras preparáis todo para irnos, ¿os parece?
¡Dale maz fuerte, Dale maz fuerte!, jalee a Mou
-Me iba a ofrese' yo pa llevar al traido' ante el ordenado' pero ya que lo haz hecho tu antez, mire a garga,yo aqui me quedo. Me sente en el suelo para descansar hasta que volvieramos a retomar la marcha
-
¿Entras en el confesionario?
¡Entro, entro!
Patadas y puntapiés tampoco consiguen reanimar a muertos e inconscientes, igual al ser traidores no hacen caso ni con eso..
Os cuesta un poco organizaros pero por fin lo lográis, Garga-R entrará en el confesionario mientras los demás esperáis fuera, Paqui se sienta en el suelo y Mou parece aún enojado por la pérdida de su bella nariz, pese a todo el combate no fue nada mal.
No marquéis a Garga-R hasta que salga.
Entras en el confesionario, las puertas se cierran de forma hermética tras de ti, delante tuyo una pantalla con el ojo del ordenador
- ¿Qué se te ofrece querido esclarecedor? – A veces cuando más cariñosa podía la voz más repelús daba.
Vamos a hacerlo rapidito xD
yo también quiero pasar por el confesionario, hay otro al lado?, ya sabes que yo tardo poco XD
En el tiempo en que esperaban, Mou-R se acercó a la boca del túnel por donde desaparecían las vías sólo para ratificar que éstas acababan un trecho más allá, cosa que ya sabían, pero que se le había olvidado.
- Parece que estamos en un punto muerto, ¿eh? -comentó- No podemos salir por las puertas azúl y verde -todavía... dentro de poco tiempo podré pasar por donde me dé la gana...- así que, o Garga saca algo en claro de la conversación con el amadísimo, o tendremos que darnos media vuelta.
Dicho esto, se sentó también a esperar. Con la mano siguió palpando el boquete nasal, que había quedado de alguna manera liso y suavecito por la cauterización del láser, y comenzaba a darle gustirrinín tocárselo.
-¡Saludos, bienamado ordenador que nos guía y nos ilumina! Venía a informar de la neutralización exitosa de un comando de traidores que nos pretendían atacar, con ninguna baja por nuestra parte, tan sólo la nariz de Mou-R-iño sufrió desperfectos.
Cuando llegaste a esta sala por la puerta roja, a unos 50 metros había uno ^^
- ¿De verdad? – Por primera vez notaste la voz del ordenador emocionada, pero no tardó en disimular – Ejem… claro, claro, paso a analizar las grabaciones de las cámaras del exterior.
- De todos modos, me temo que la traición va más allá, voy a mandar los recolectores de basura para llevarme los cuerpos y analizar todas las pruebas, acudan a… vuelvan a la sale de reuniones donde les expuse la misión ¿Sabrán hacerlo? Sólo hay que volver sobre vuestros pasos ¡Andad panda de holgazanes! – El sólo se iba crispando según hablaba.
Observo a mis compañeros, y Veo que Garga está en el confesionario.
-Ahora mismito vuelvo compañeros, se me olvidó preguntar una cosa al gran ordenador cuando he salido del confesionario.
Salgo corriendo hacia el confesionario del que he salido antes del combate.
Entras en el confesionario, las puertas se cierran de forma hermética tras de ti, delante tuyo una pantalla con el ojo del ordenador
- ¿Qué se te ofrece querido esclarecedor? – A veces cuando más cariñosa podía la voz más repelús daba.
contestado en el confesionario, jejejeje
¡¿Pero donde vaz?!, pregunte a Danit mientras corria sin moverme ni un milimetro de donde estaba sentado.
Mire a Mou con cara de desconcierto, ¿Pero ezte?¿Que hase?¿Por que ze va?, pregunte. -Como zigamoz azi no vamoz a cumpli' nueztra mizion.
Me pareció oír emoción en la metálica voz del ordenador, y su luz titiló un instante.. ¡¡Qué orgullo sentía yo!!
-¡Comprendido, oh, ser que nos guía! Volveré entonces con los otros a comunicarles tus instrucciones, si no se le ofrece ninguna cosa más.. ¡que tenga propicios días!
Sin girarme para no darle la espalda al gran ojo que todo lo ve, retrocedo de nuevo hacia la puerta, buscando el pomo con la mano, y salgo haciendo una reverencia hacia donde están los demás.
A partir de ahora posteo para todos, no?