En Los Angeles no es nada extraño encontrarse con hogueras en la playa, por lo tanto, Liam no destacaba mucho al hacerlo....diferente hubiese sido si quien mirase supiese el motivo por el cual habían sido convocadas las llamas....rápidamente hacían desaparecer los restos de la ropa que había llevado Liam esa misma noche...tan solo unas horas antes.
Después de eso, despidiéndose del mar con una mirada....ya nada le retenía allí...era el momento de volar hacia otros lugares y quien sabe si volvería algún día, comenzó a caminar alejándose de la que había sido su vivienda...tenía que llegar al espaciopuerto cuanto antes...Dublín le esperaba.
Uso el medio de transporte publico para llegar al espaciopuerto.
Siento no poner post del traslado.
Sin volver la vista atrás, Liam decidió utilizar el transporte público para llegar la espaciopuerto...tenía que llegar a Dublín cuanto antes, y ya se preocuparía cuando estuviese allí de cómo encontrar a la chica de las noticias.
Cuando entró en el espaciopuerto, pudo observar un mostrador en el lado izquierdo, donde una azafata con un rostro marcado por el aburrimiento, fijó sus ojos en él en cuanto entró.
El resto de lo que quedaba a la vista de Liam era un largo pasillo, lleno de sillas para que los pasajeros pudiesen esperar tranquilamente su turno.
También podía verse a un par de guardias de seguridad haciendo la ronda, aunque a esas horas no lo tenían excesivamente complicado, pues apenas había nadie en el lugar.
Liam se acercó al mostrador, solicitando un billete para Dublín, el cual no tuvo ningún problema en conseguir....quizás era más difícil sortear los comentarios de la azafata, que ahora tenía un nuevo brillo en sus ojos...¿qué si tenía a alguien esperandole allí? ¿Cuánto tiempo tardaría en volver? ¿Si tal vez le gustaría tomar algo cuando regresase a Los Angeles?....En otro momento, Liam hubiese entrado en el juego, pero no ahora, no esta noche....Lilian estaba muy presente en su memoria.
Cogió el billete y se dirigió hacia la puerta que le indicó, despidiéndose de ella con una sonrisa....una sonrisa que no prometía nada, pero tampoco descartaba.
Llegó hasta la puerta C, que le habían indicado, y cuando llegó su turno accedió al interior.
Una sala prácticamente a oscuras le recibió. Solamente iluminada por la luz azul que se desprendía del portal ovalado que debía atravesar para realizar el viaje.
A cada lado de este portal, se encontraban dos demons, fuertemente armados pero que ni siquiera miraron por segunda vez al pasajero que se acercaba.
Paso a paso, Liam llegó hasta el portal, la luz le envolvió y se introdujo en ella.
Bien. Te cierro esta escena y ahora pasarás a Dublin, ciudad por descubrir.
Mira que te gusta hacerme trabajar, jajajajajaa