Partida Rol por web

Regreso al Hogar.

Regreso al Hogar.

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06/10/2021, 15:09
Uther Brannagan

Encontrar algo en aquella pared no era tan fácil. No había nada a simple vista, y otros (muchos otros, sospechaba Uther) habían buscado también. El olor nauseabundo no ayudaba tampoco. Buscó algún palo o hueso largo para sumergir en el lodo verde, no quería utilizar su espada aún. También buscaba algo para escribir, no deseaba hacerlo con sangre, pero si no encontraba otra cosa lo haría. Pondría "Karmak", "carcelero con piedras mágicas", una flecha apuntando al pasadizo por el que habían ido los demás, y si lograban hacer hablar al rostro, "rostro parlante" cerca de él. 

- Gracias -respondió con solemnidad cuando Allannah contó lo de su madre. 

- No creo en la inquisición -susurró. Uno de mis mejores amigos y consejeros es mago. No tengo nada en contra de las criaturas no humanas, de hecho iba a encontrarme en secreto con el rey de los goblins antes de que esto sucediera. No se puede cambiar el mundo de un día para el otro, pero te aseguro que lo intento -confesó. Tú si has confiado en mi contandome lo de tu madre, y yo contandote esto. ¿Tienes secretos? Perfecto, guardatelos. Nadie espera que abras el pecho y expongas tu corazón. Colaboremos en la medida de lo que podamos. No te traicionaré. 

Luego agregó algo más.

- Estoy de acuerdo en que las posibilidades de que la elección de los prisioneros no haya sido fortuita. Sería bueno averiguar el motivo de la elección de cada uno, pero para eso debemos confiar entre nosotros lo suficiente. En algunos casos reconozco que me cuesta más. La súcubo, el diablillo, el constructo de metal, son de cuidado. Pero por algo están aquí. Vamos paso a paso.

Luego, si quedaba tiempo, quería reflexionar sobre el emisario, la historia que había contado Jim, y si podía recordar algo de lo que Gorgorius le había contado sobre la magia para determinar cual era la naturaleza de las piedras, o de su dueño. Si podía quitarselas, y eventualmente utilizarlas.

- Tiradas (1)

Motivo: teoria de la magia

Tirada: 1d100

Dificultad: 80-

Resultado: 78 (Exito) [78]

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06/10/2021, 19:28
Jraxas el Mancillador
Sólo para el director

Jraxas sonrió y se encogió de hombros, había intentado alargar aquella partida todo lo que pudiese, pero había llegado a su fin.

No confundas inmortal con indestructible—. Respondió a las amenazas de aquel ser. —Creía que teniendo tu amo un gran espíritu científico te habría explicado esas cosas.

Estaba casi seguro de que no le haría nada si no forzaba demasiado la situación, al fin y al cabo su amo quería experimentar con él, aunque también estaba convencido de que era una tontería intentar escaparse de él

Por cierto, te voy a explicar otra diferencia, la que hay entre un perro y un lobo. El perro tarde o temprano acaba aceptando las cadenas y resignándose a la servidumbre, mientras que el lobo jamás dejará de buscar la libertad y hará lo posible por recobrarla.

El diablillo se dirigió revoloteando hacia el portal que habían abierto para él, pero justo antes de cruzarlo se giró por un momento y lanzó un par de ladridos.

Guau, guau. Ya no veremos Toby.

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07/10/2021, 15:03
Jim

Jim sonrió cuando Jafhar dijo que a él también le molestaría que le despertasen. Pensándolo así era fácil ponerse en el lugar de la estatua.  Frunció el ceño un instante, pensativo, exprimiendo su cerebro, se lo había tomado como un reto personal. Abrió los ojos.

—¡Le hacemos cosquillas! —dijo entusiasmado, mostrándose pensativo un segundo después. —No, eso no se puede hacer —negó con vehemencia, aunque no dio razones de porqué no era posible hacerlo.  ¿Tendrían cosquillas las rocas? ¿O su propia naturaleza rígida les hacían tan insensibles como una piedra? 

¿Y si... Le hacemos sentir un poco incómodo? —preguntó a continuación, tanteando al didáctico hombre del desierto tal y como habría hecho con el profesor de matemáticas, en la escuela.  

Aunque había estado escuchando los discursos cargados de idealismo, casi solemnes, del Rey y las repuesta cortantes que Allanah le proporcionaba, su atención estaba puesta en la misteriosa estatua. ¿Cómo sería la boca por dentro? ¿Tendría una lengua de piedra que se movería al hablar o lo haría con una decepcionante voz retumbante que vendría de su interior? Sus ojos se abrirían mostrando unas enormes gemas brillantes o se tratarían unos ojos tan torpemente tallados como el resto de la estatua?

Su mano se posó sobre la mejilla del rostro pétreo y comenzó a acariciar suavemente la rugosa superficie. El musgo que crecía sobre esa parte de la roca se amarronó y murió, sus minúsculos tallos se enroscaron sobre sí mismos y se convirtieron en negra ceniza. Los dedos de Jim humeaban, áspero vapor crepitante que restallaba sobre el rostro de la extraordinaria criatura que dormitaba en la pútrida mazmorra desde hace un tiempo difícil de determinar.

Hola, soy Jim — dijo mientras la roca humeaba bajo sus suaves caricias. Parecía contenerse, un esfuerzo consciente por no hacer daño a la gigantesca estatua 

Necesitamos ayuda.¿Nos puedes ayudar? Te dejaremos dormir después ¿Vale? Seguro que llevas un montón de tiempo durmiendo ¿Verdad? 

 

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07/10/2021, 19:49
Cyriack Voared

Cyriack vio como algunos de los presentes, en concreto la joven sirena, apenas podían aguantar el nauseabundo hedor del lugar... aunque no podía culparla, semejante olor haría revolverse las tripas a cualquier persona normal... lo que no le gustó nada fueron las palabras de la súcubo, que parecía no ser consciente de su situación... - Ya que debemos tolerar su compañía, al menos no haga de este trance más desagradable de lo que ya es... - contestó de forma tosca a la demonio tras increpar a la joven Ilia... - Aunque reconozco que la idea de separarnos es desastrosa, en eso estamos de acuerdo... lástima que los otros se quedasen allí arriba...

Luego acercó la cantimplora a la sirena y la ofreció algo de agua... - Bebe sin preocuparte por la cantidad, por suerte no necesitaremos preocuparnos por el agua... - dijo mientras trataba que la sirena bebiese algo para quitarse el mal trago del vómito...

La verdad es que le preocupaba sobre todo la seguridad de Jim y Sir Joric, pero aquel hombre no dejó a Jim acompañarlos y sir Joric parecía querer descubrir más sobre esa sala... quizás, solo quizás, la suerte permitiría que volviesen a encontrarse...

Luego fue aquel extraño... ¿golem?, eso parecía, pero era mucho más sofisticado de lo que nunca había visto antes en otros golems... pero tenía toda la razón del mundo... su estrategia no solo era buena, sino que era ideal para la situación en la que se encontraban... lo cual hacía que Cyriack dudase más aún sobre la natura real de Cecil... - Nada mal para un hombre de hojalata... aunque si salimos de esta... me gustaría saber más sobre sus orígenes... - No es que Cyriack tuviese algo en contra de Cecil.. pero contra su posible creador sí... algo así no podía ser creado sin artes heréticas...

Luego se giró hacia Inphie, para responder a sus palabras... - Si quieres yo puedo vigilar la retaguardia, pero antes deberíamos decidir de forma definitiva que camino tomar... - Y eso precisamente es lo que quería hacer la joven sirena, que hizo callar a todos para tratar de escuchar con más detalle todo lo que los rodeaba...

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07/10/2021, 20:40
Cécil Steadman

Cécil hizo una reverencia ante los elogios del inquisidor.

My pleasure, Sir. Aunque debo deciros que mi exoesqueleto no está hecho de hojalata, sino de... —Cécil ladeó la cabeza hacia un lado. Luego hacia el otro.

ErrorSyntax666. —dijo con una insólita y gutural voz.

El propio Cécil pareció sorprendido.

Well... That was surprising... —dijo.

Luego Ilia pidió silencio para concentrarse en sus poderes auditivos.

Mientras la sirena afinaba su oído de mezzosoprano, Cécil hizo repiquetear su índice metálico sobre el cabezal de su bastón en clara muestra de expectación. Era en verdad una preciosa pieza de artesanía que emulaba el cráneo de un chacal con las orejas erguidas.

Qué suspense. —declaró pasado un minuto.

Qué intriga. —declaró tras dos minutos de estoica paciencia.

Qué congoja. —declaró tras un tercer minuto en el que el sistema auditivo de Lady Ilia no arrojaba pista alguna sobre la encrucijada que tenían ante sí.

Me temo, Lady Lightborn, que todos los caminos, lejos de ascender a la superficie, se hunden aún más en la penumbra. Detecto aviesas simas aguardando pies de incautos para ser transportados hacia una larga caída al vacío. Descartando la ruta septentrional en la que parece tener lugar una fiesta macabra, puedo guiarles por las restantes sin problema, mas temo que carecemos de datos que nos permitan descartar la ruta hacia el este o la ruta hacia el oeste. Así pues, como nadie ha ofrecido lanzar una moneda al aire, consideraré que ha llegado la hora de que su humilde servidor, Cécil Steadman, recurra...

>> Al Centro Nacional de Inteligencia.

Cécil se giró sobre sus pasos y chasqueó los dedos un par de veces.

—Agente 001, preséntese para el servicio.

No se sabía muy bien de dónde emergió aquella cosa, pero cabía la ligera y espeluznante posibilidad de que descendiese como una araña del techo de la caverna. Bañado en las sombras era difícil de distinguir, pero era bajito, parecía cubierto con un capote, quizás un caftán, y la testa cubierta por un sombrero de ala ancha. Daba algo de repelús, como si su piel fuese de… trapo.

No dijo ni una sola palabra.

Aaaaah, mi querido Benson, cuánto tiempo. ¿Qué tal la familia? —saludó Cécil con la amabilidad protocolaria que le caracterizaba.

Tras un dramático silencio que pareció vaticinar que Cécil no obtendría respuesta, el tal Benson contestó.

O algo parecido.

Gurugurugú. —gorjeó.

Cierto es. El IPC está disparado tras el AcaboseTM. Verá, Benson, nuestra situación es interesante. Aquí tiene sus órdenes. —dijo Cécil extendiendo un legajo sobre el que había escrito unas palabras con su exquisita caligrafía.

Benson tomó el documento, lo leyó por encima y asintió.

Gurugurugú. —repitió Benson al tiempo que el documento entraba en combustión espontánea.

Siempre tan eficaz. Explore para nosotros la senda de la derecha y no olvide regresar a informar puntualmente de sus hallazgos, agente.

—¿Guru? —preguntó preocupado Benson.

—¿Moneypenny? Tuvimos que despedirla. Fue víctima de un agresivo ERE, me temo. Los recortes, Benson… Los recortes.

Gururugugu… Gu.

—Adelante, Benson. Cumpla con su cometido. Hágame sentir orgulloso. —dijo Cécil con altivo gesto de jefe de servicio secreto. No en vano, Cécil empieza por C, de Control. No hay servicio de inteligencia británico cuyo jefe de operaciones no responda al sutil nombre de “C”.

Con el sigilo de un gato callejero, Benson se marchó por la izquierda.

Cécil ladeó la cabeza sin comprender el indecoroso comportamiento de su subordinado.

Debí indicarle que fuese por la otra derecha… Ah, Benson, pequeño advenedizo…

El androide se giró al resto de la comitiva.

Creí decirles anteriormente que soy un tipo con recursos. —dijo por toda explicación a lo sucedido, sin inmutarse al más puro estilo Steadman. —Aguardemos un instante, si son tan amables. Lady Lightborn, ¿ha decidido finalmente sobre la conveniencia de adoptar el Triángulo Ofensivo? —preguntó cortés.

Extrajo su reloj de arena para cronometrar la duración de la operación de infiltración de su agente.

Corra, Benson... Corra.

Notas de juego

Quería dar un margen por si posteaba nuestro segundo inquisidor, pero ya no aguantaba más ^^

¡¡¡HE INVOCADO A CYRIACK!!!

YEEEEEEEEEEEEEEEEESSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS!!! ^^

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09/10/2021, 09:11
Ilia

Agradeció como nunca a Cyriak por el agua. No tocó con sus labios la cantimplora y el primer trago fue destinado a limpiar su boca antes de beber un poco después, sin pasarse.-Gracias. Realmente agradecida, le faltaba el agua en aquel asqueroso lugar.

No lograba escuchar nada, pero claro, ¿Cómo podría saber si realmente no escuchaba nada porque no hubiera nada, o si era causado por el incesante repiqueteo de Cécil contra su bastón? Aquello le sonaba como un martillo hidráulico a toda potencia estando a su lado... Respiró profundamente, abatida y negó con la cabeza. - Solo escucho los martilleantes dedos del señor Cécil... Tendría que acercarme un poco si quisiera escuchar más allá. Y ya de paso abandonar la banda sonora de Trash metal que se habían emperrado en componer con sus sonidos corporales. Pero parecía que al final no haría falta pues apareció un... ser extraño, realmente extraño y de la nada. Aquello le hizo dar un paso atrás mientras el abogado del infierno hablaba con la extraña criatura aparecida. La izquierda, esa críatura se fue por la izquierda... Comenzó a prestar atención a los pasos de aquel ser, a cada movimiento que hiciera y sobre todo que no hubiera nada que le pudiera hacer daño a el o a los demás y que estuviera esperando su momento en las sombras. 

- Tiradas (1)

Motivo: Percepción, Escuchar

Tirada: 1d100

Dificultad: 75-

Resultado: 52 (Exito) [52]

Notas de juego

Cortito, lo sé, >:

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09/10/2021, 15:18
Kelgar Stalsson

Esperaron un buen rato a que Ilia consiguiera discernir algo con su oído prodigioso, pero parecía que era imposible incluso para ella. Lo que quedaba claro era que el camino central conducía a algún tipo de sala de tortura a la cual no era recomendable ir. Entonces Cecil hizo aparecer de la nada una especie de ¿muñeco? de trapo parlante… o que al menos emitía un sonido que se parecía al habla. El extraño abogado parecía entenderlo y le pidió que fuera a explorar uno de los caminos. Arqueando una ceja, miró sorprendido al golem. ¿De dónde ha salido? preguntó directamente. Bien, esperemos a que vuelva y nos diga qué hay… aunque… la cosa viscosa esta no me hace ninguna gracia. Mejor alejémonos todo lo posible. dijo, mirando la especie de grasa que goteaba incesantemente por las paredes.

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10/10/2021, 00:28
Director

La esencia mágica, le había dicho Gorgorius una vez, podía condensarse en objetos, quedando atrapada dentro de ellos. La técnica para imbuir magia en una espada o un anillo no era complicada. El único problema era la cantidad de energía y poder que uno necesitaba para lograrlo. Cuánto mayor era el poder que se quería insuflar a un objeto inerte, mayor debía ser la energía que lo subyugase. Una pieza de metal grande requería un martillo grande.

Atar un poder a un objeto pasaba por alterar la naturaleza misma de ambos. Y era el más mundano el más reacio a cambiar porque, y esto solo lo intuía, los objetos ajenos a la magia también tenían cierto poder, aunque fue incapaz de especificar cuál. Dicho poder ofrecía una fuerza opuesta al conjurador que desease imbuir de magia un objeto.

Se podía atrapar un solo hechizo dentro de un objeto. También una esfera entera aunque el poder necesario para tal hazaña rozaba casi lo divino.

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10/10/2021, 00:28
Director

—El lobo es quien más sufre en tu historia, diablo, cuando descubre que la cadena que ata su cuello es más gruesa de lo que imagina —contestó el carcelero.

No entró en el juego de las provocaciones de Jraxas, limitándose a esperar a que atravesase el portal para cerrarlo a su paso. Jraxas, que podía considerar su victoria tan agria como dulce, descendió planeando juntos a sus “compañeros”, descubriendo que su número había menguado.

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10/10/2021, 00:29
Director

Un bostezo, poderoso como una avalancha. El sonido de un desprendimiento que no era otra cosa que las facciones del muro poniéndose en movimiento. Tenía algo de irreal, de artificial. Sus movimientos eran como los de cualquier otro rostro pero se movían con lentitud. El rostro movió sus labios, gruesas columnas de roca blanca y lentamente abrió los ojos. Bajo los pétreos párpados existía una mirada inteligente y pausaba. Todo él era de piedra.

—Hola Jim, me alegro de que hayas despertado —su voz era profunda como un pozo, señorial como la de un rey en su montaña, templada como la roca tallada.

Sus ojazos de piedra se centraron primero en Jim. Eran amables, como los de un sacerdote, como los de un padre. Curiosamente Jim no asociaba la mirada a una expresión paternal. Luego se deslizaron hasta Jafhar.

—Yo soy Jafhar —saludó al estilo de los hombres del desierto, besándose la palma de la mano y ofreciéndola al aire.

—Saludos, Jafhar. Lamento no poder corresponder, carezco de nombre desde que tengo recuerdos y hasta hoy nadie se ha atrevido a adjudicarme uno.

Allanah se acercó, pero se quedó a una distancia prudente. Sir Joric se unió a ellos. Y no fue el único, Jraxas descendió desde la parte más alta del a mazmorra, las altas extendidas, bajando pausadamente en barrena. Cuando llegó a tierra vio que el rostro del muro le estaba mirando.

—Veo que hoy somos unos cuantos. Es un sabor agridulce; me alegra ver caras nuevas, de tener alguien con quien charlar. Sería ideal si la ubicación fuera otra. ¿No creen?

El regreso de Jraxas había quedado opacado por el despertar del rostro moldeado en el muro.

—Claro que puedo ayudaros. Jim. Si está en mi mano, cuenta con ello.

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10/10/2021, 00:30
Director

La criatura invocada por Steadman empezó a alejarse siguiendo el camino marcado. Ninguno de ellos lo vio ya que de alguna manera el hombre de trapo llamado Benson había desaparecido de su vista. Únicamente Ilia podía intuir donde se encontraba. Escuchó sus pisadas, muy silenciosas, hasta que se alejó demasiado. De nuevo, rodeados de oscuridad, esperaron.

El lugar se antojaba vivo, con toda esa baba resbalando por las paredes. La gran fuga se había detenido a los pies de la escalera que habían tomado tras encontrar el pasaje secreto. Si algo atenazaba sus corazones, si algo inquietaba sus instintos, quizás debieran hacerlo caso.

 

 

Notas de juego

Podéis esperar el tiempo que consideréis necesario; quince minutos, media hora, una, dos, hasta daros cuenta de que Benson no va a volver.

Tampoco captáis nada nuevo escuchando ni observando desde la posición que mantenéis.

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11/10/2021, 17:20
Uther Brannagan

- Bien hecho, Jim -lo felicito cuando se hubo repuesto de la sorpresa y el asombro. Ver moverse aquel rostro era un espectáculo digno de verse, y a la vez la satisfacción de haber estado en lo correcto respecto a él, lo encontraba gratificante.

- Soy Uther Brannagan -se presentó, dirigiéndose al rostro, pero dedicando una mirada al diablillo, que justo había regresado. No desdeñaba lo que le había dicho Jafhar, pero tampoco quería seguir adelante con una identidad que no fuera la suya. Somos bastantes más, pero nuestros compañeros han bajado por un pasadizo de allí.

Tampoco añadió mucho más, pese a que deseaba preguntar muchas cosas al rostro. Pero ya que Jim lo había despertado, consideraba que era él quien debía interactuar principalmente, o al menos en un comienzo. Si podía intervenir, lo haría luego. Esperaba tener tiempo.

Notas de juego

Perdón por el turno corto, pero cedo la iniciativa a Jim.

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11/10/2021, 17:42
Jraxas el Mancillador

Mientras descendía el diablillo fue mirando el panorama que había en aquella celda, el cual había cambiado bastante desde que se había marchado, finalmente se posó sobre el montículo de calaveras en el que lo había hecho un rato antes y empezó a hablar acompañando sus palabras con exagerados movimientos de brazos.

¿Pero qué diablos ha pasado aquí? Me voy a dar una vuelta y cuando vuelvo ha desaparecido la mayoría de la gente, hay un cabezón gigante hablando y  el barbudo ha cambiado de nombre, si es que no se os puede dejar solos.

A pesar de su tono despreocupado, lo cierto es que aquel ser también le generaba mucha curiosidad, sin duda había magia allí y cualquier magia que no hubiese visto antes llamaba su atención. También iba a preguntar por los que faltaban, pero el tal Uther dijo que habían bajado por un pasillo.

Mi nombre es Jraxas—. Dijo el diablillo dedicando una reverencia al enorme rostro. —¿Y quién eres tú? ¿Tú también eres otro prisionero con el que han experimentado o esa es tu verdadera forma?—. Entonces se giró hacia Uther. —He averiguado algunas cosillas sobre nuestros captores, ahora os las cuento si queréis, por cierto ¿Dónde están los demás?, bueno da igual, después me lo cuentas—. Volvió a mirar nuevamente al enorme rostro. —Entonces ¿Quién eres? ¿Qué puedes contarnos de este lugar? ¿Y de su amo?

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12/10/2021, 18:07
Yakshini Krasue

Estando en otra situación, le hubiese devuelto la agresividad a los inquisidores. No me gusta que se tomen la libertad de hablarme de esa manera, ¿quien se creen que son? La verdad en ese momento estuve a punto de sacar mi daga oculta y sacarle un ojo a la inquisidora, pero entiendo que este no es el momento para eso. Si quiero escapar de este lugar necesito toda la ayuda posible, incluso si eso significa cooperar con estos gusanos desagradables, así que, por mas que esté ardiendo de odio dentro de mi en este momento, me quede en silencio y simplemente mire a ambos inquisidores a las caras sin decir nada. Mas adelante vendrá el tiempo en el que les enseñe la diferencia entre ellos y yo.

No pude ocultar mi impresión al ver Cécil invocando a un… ¿muñeco de trapo? Fue interesante, ¿que clase de habilidades tiene este abogado? Sea lo que sea que acababa de hacer, de seguro resultaría de lo mas útil… Si es que el tal Benson regresaba claro está. Podía entender que el muñeco tardase un tiempo, pero después de los primeros 20 minutos sin saber nada de el, me acerqué a Cécil nuevamente y le pregunte.

- ¿Su querido Benson normalmente se tarda tanto tiempo con sus tareas? ¿Se habrá perdido?

No quería pasar mucho tiempo junto a los inquisidores, y estar así, estancados en un solo lugar junto a ellos sin saber nada simplemente servia para ponerme mas nerviosa.

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12/10/2021, 18:31
Jim

Jim sonrió, fascinado por los movimientos y los gestos del hombre pétreo. Dejó de tocar la roca con sus dedos y se colocó delante de sus ojos, para que él pudiese verle con más facilidad.

Fue en ese momento cuando Jraxas decidió descender de las sombras. Traía noticias en sus correosas alas, así como una curiosidad insaciable que le hizo comenzar a interrogar al rostro en la roca. El chico sonrió, el desparpajo de la innombrable criatura demoníaca invitaba a escucharle. La sensación de que era mucho más viejo de lo que parecía, a cederle la palabra.

No se puede vivir sin nombre, señor —exclamó tras las preguntas del diablillo, una vez hubo acabado. Le había parecido que tener nombre era algo importante para la estatua, como lo era para todo el mundo. —Y no entiendo porqué nadie se atrevido a ponerle uno.   Era facilísimo, a su entender.  Y si bien era cierto que conocer a su enemigo y saber como salir de allí eran cosas de mucha importancia, había otras que también lo eran. Y mucho. 

En un cuento que leí — bajó la vista un poco, sus recuerdos eran en su mayoría cuentos e historias ¿Eran reales?. Se sintió algo avergonzado por volver a recurrir a ellos, pero no dejó de hablar.  Joric, Jafhar y Allanah le hacían sentir seguro, se sentía escuchado.

—hubo un héroe.. un rey que se llamaba Nimrod. Fundó un reino, pero habían pasado tantos años desde que lo hizo que todos lo que lo habitaban habían olvidado su nombre.  Alzó la cabeza de nuevo, sus ojos azules contra el gris de la fría roca.  —Si quieres, puedo llamarte así. 

​​​​​​Hubo un silencio tras sus palabras, que apresuró a llenar de más de ellas.—Y... y gracias por ayudarnos —añadió —No sé por qué estamos vivos de entre todo el mundo, ni qué quieren de nosotros. Intuía que, conociendo lo que buscaban sus captores, averiguarían qué necesitaban. Y necesitar algo solía significar lo mismo que tener una debilidad.   —Ni como hacer que todo sea como antes. ​​​​​

Notas de juego

Disculpad la edición. Releyendo vi un error de ortografía.

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12/10/2021, 22:53
Kelgar Stalsson

Al ver que “muñeco Benson” no regresaba, se unió a las dudas de Yakshini y creyó que esperar podría ser perder un tiempo precioso para su escape.
Mmm… no sé si es normal que tarde tanto, pero yo preferiría seguir ya. Por el camino de la derecha pues. ¿No vamos a quedarnos aquí eternamente? preguntó, dispuesto a seguir de inmediato.

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12/10/2021, 23:12
Inphie Lightborn

La extraña criatura invocada por el autómata marchó antes de que Inphie siquiera pudiese estimar la gravedad de la herejía que presenciaba. De todos modos, parecía un ser obediente y prescindible, por lo que sería un buen explorador. -Tu intenta mantenerte detrás de, al menos, uno de nosotros y a suficiente distancia para no llevarte un espadazo por error. Nosotros nos encargamos del resto- le dijo a Cécil ante su insistencia por participar en las decisiones tácticas.

Mientras esperaban el regreso del muñeco, los segundos parecían minutos y éstos últimos parecían horas a su vez. Inphie no tardó más de 10 minutos en empezar a inquietarse y se acercó al camino de la derecha con la antorcha por delante y el espadón preparado en su otra mano. Apenas se separó un par de pasos del grupo, pero se sentía como si se hubiese adentrado en la espesura y se hubiese perdido. Aquella oscuridad no era natural, estaba convencida. Se agachó y dejó su espada en el suelo un instante para recoger un pequeño guijarro del suelo. Rezó una plegaria al Señor de la luz y, gracias a su poder divino, la piedra comenzó a brillar por sí misma. Inphie la sopesó un instante en la palma de su mano y luego la arrojó para que cayese a cuatro o cinco metros de distancia. Recogió su espadón y se incorporó de nuevo analizando el comportamiento de las sombras ante la nueva fuente de luz.

El bárbaro y la súcubo también se estaban impacientando y le preguntaron a Cécil por el muñeco -Supongo que si tu pequeño monstruo no nos ha traicionado, posiblemente haya muerto, por lo que nos quedamos sin opciones. Ha pasado un rato y nuestro carcelero no ha hecho acto de presencia, posiblemente no sepa cómo hemos escapado. Pero si lo averigua, no tardará en venir. Deberíamos movernos ya- Dijo con su habitual tono autoritario.

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13/10/2021, 12:46
Ilia

-Es como si hubiera desaparecido... Empezó a decir después de lo que habían hablado los demás. - He escuchado su caminar hasta que este ha sido lo suficientemente lejano para desaparecer... Por lógica, algo me dice que es un pasillo muy largo. Se quedó pensativa unos momentos. -No he escuchado ni un solo ruido más además del muñeco por lo que parece un camino seguro... Al menos... más seguro que el que no conocemos y del que sabemos, se escuchan gritos latigazos y cadenas... Para ella tenía lógica aunque quizá para los demás podía no tenerla... Odiaba seguir hablando pero seguiría con su punto. -A lo mejor está muerto, o a lo mejor el lugar es tan grande que aún no ha encontrado nada de lo que informar. Podemos aventurarnos por el que no conocemos o podemos ir por el que tenemos la mitad de la información. No dejaré de estar atenta a cualquier ruido que pueda detectar... Siempre y cuando los sonidos a mi alrededor no sean demasiado altos. Demasiadas palabras juntas, definitivamente ahí terminaba su cupo por muuuucho tiempo, ahora solo quedaba que el resto decidiera qué hacer con la información que daba, les seguiría pues tampoco quería quedarse sola en un lugar así e indefensa como estaba en esos momentos. Con clara molestia se estiró del grillete que rodeaba su cuello, aquellos grabados brillaron un poco a la luz de la antorcha y ya no lo soportaba más pero había cosas importantes que hacer antes.

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15/10/2021, 01:38
Director

—Uther Branaggan, de la Casa Branaggan, obviamente. ¿Cuál es vuestra generación? No es la primera vez que me topo con alguien de vuestra casa, y no puedo decir que tal hecho me desagrade —dijo el rostro. Estaba bastante animado, la verdad —. Lamento que vuestros compañeros hayan elegido ese camino, por allí solo circula la batalla y la muerte.

Pronto Jraxas tomó la palabra. Su aspecto solía asustar a la gente, al menos, debía contrariarlos. Con esa intención había sido creado. El Muro le respondió con naturalidad. Sus ojos de piedra habían visto tanto que alguien como el diablillo no destacaba dentro de sus memorias. Era uno más, una pieza más de la vida, no una anomalía o un terrorífico desliz de la naturaleza.

—Desde mi primer despertar siempre he tenido la misma forma. De hecho, soy inalterable, virtud y maldición a partes iguales. Aunque al principio formaba parte de un muro más grande, pero todo eso ha quedado atrás. Fue hace mucho tiempo. Por desgracia no puedo corresponder a vuestra gentileza, yo carezco de nombre. Nunca se me otorgó uno y nunca se encontró nadie que pudiera o debiera hacerlo.

—Interesante —masculló Jafhar.

—Nimrod es un buen nombre, Jim, ¿Pero cómo voy a tomar un nombre prestado? Aquellos que nacen pueden ser nombrados y renombrados, pero los que somos creados estamos atados a otro tipo de normas; alquimia, geolomagia, la mística de las matemáticas. Tus intenciones son nobles y no puedo más que agradecerlas, pero no tienes suficiente poder para otorgarme ese nombre.

—La magia que estudiaba los nombres, el poder ligado a nuestra identidad, es casi tan antigua como el mundo —añadió Jafhar —. ¿Cuánto tiempo lleváis existiendo?

El muro arrugó el rostro.

—Para poder responder correctamente a esa pregunta debería conocer cuál es el calendario que seguís y tratar de extrapolarlo a tiempos anteriores a su sistema de creación, ya que pertenezco a tiempos bastante remotos. Digamos entonces que soy parte de vuestra historia.

»Es verdad, Jraxas, que aquí se experimenta con la carne, el hueso, la mente y el alma de los vivos, pero como dije, a mí no pueden hacerme nada. De hecho, tampoco pueden moverme. Lo intentaron pero la magia que reside en mi interior es aún más fuerte que la de nuestro captor. Lo único que han podido hacer es dejarme aquí, olvidado. Trato de mantenerme despierto pero el tiempo pasa, el aburrimiento me asola y el sueño me vence. Ahora que estoy en tan grata compañía, no deseo volver a dormir. Y temo hacerlo —confesó, arrugando el rostro en una mueca que era mitad severa, mitad entrañable —. Cada vez me cuesta más despertar y temo no volver a hacerlo la siguiente vez.

Yo quiero que nos cuentes lo que has descubierto, pero más tarde —terció Allanah, dirigiéndose a Jraxas, pero era evidente que también quería escuchar lo que el muro tuviera que decir. Ella no se presentó.

—Quien gobierna esta fortaleza, este palacio del pecado, es un hombre como ningún otro. Inmortal. Una palabra difícil de comprender, pues su poder va más allá de lo que se intuye. Ni el tiempo, ni la muerte pueden alcanzarlo. A su vez, es un estudioso. Hundido en el tedio de su vida, sin un aliciente, sin poder quitarse de en medio, cosa que intentó en notables ocasiones, ha encontrado su misión en esta vida en la búsqueda de iguales. Está convencido que existen al menos otros dos seres como él. Almas iguales, eternas, con las que desea compartir el infinito. Pero encontrarlas no es tan sencillo. Y ese es el motivo por el que estamos aquí.

»Sus cazadores buscan entre los mundos, cazan las presas y las traen aquí. Para descubrir si alguno está dotado con el don de la inmortalidad los pone a prueba, o experimenta con ellos. Cuando descubre la falta del don entre sus prisioneros, les somete a las más duras adversidades. Su intención, más allá del sadismo, es comprender la vida, y la muerte, diseccionar el cuerpo, analizar la mente.

»La mayoría perecen, unos pocos sobreviven. Entre ellos muchos pierden la cabeza. Los que quedan cuerdos, son…transformados. Él los engaña, los seduce, retuerce sus mentes y sus cuerpos, les otorga poder y los convierte en sus seguidores. La marca que portáis es su marca, y es lo que significa. Sois productos para sus experimentos. Si tenéis el don, compartiereis su trono y su compañía, sino, aún podéis sobrevivir bajo su servicio, pero como algo totalmente diferente a lo que sois, después de quebraros a varios niveles que ahora no podéis comprender.

»¿Habéis visto a nuestro carcelero? Un hombre que levita con una máscara puntiaguda. Antaño era un animal, un ave del paraíso que tuvo por fortuna sobrevivir a la masacre que aquí sucedió ese día. Él lo cambió, y ahora, es algo totalmente diferente. Su esencia sigue dentro de él, pero retorcida, herida. Algo horrible.

»Siento ser tan fatalista, pero la verdad es lo único que puede salir por mi boca y aunque terrible, el conocimiento es siempre un arma que esgrimir antes que una espada. Temo no poder deciros mucho sobre el propio castillo, o fortaleza, o palacio, pues no he logrado salir de estos muros y lo poco que sé del lugar es lo que otros aventureros, como vosotros pero con peor suerte, han ido contando a mi alrededor.

Se detuvo unos momentos, sus grandes ojos se posaron en Allanah. Ella le devolvió la mirada, desafiante, el mentón alto como un púgil dispuesto a soltar un puñetazo.

—Los dioses me libren a obligaros a presentaros mi señora, pero debéis saber que vuestro frío desdén me parece tan encantador como la sonrisa del muchacho Jim. Oh, estoy tan contento de poder hablar, de ver tanta vida. A la vez, me embarga la preocupación. La mayoría de los que aquí se presentan, mueren. Y no deseo que os pase nada.

Rumió las siguientes palabras, dirigiéndose esta vez a Jim.

—Llevo encerrado aquí demasiado tiempo para entender cuál es vuestra preocupación, muchacho. ¿A qué os referís cuando decís que deseáis que todo vuelva a ser como antes? ¿Es que algo ha cambiado en el mundo que todos conocemos?

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15/10/2021, 01:46
Director

—Benson tiene tantas posibilidades de perderse como de convertirse en un molinete de café.

Por primera vez la voz de Cécil había adquirido un cariz sombrío, desprovisto de su tono dicharachero y alegre de vendedor de artículos de segunda mano. De haber tenido ceño que fruncir lo habría hecho mirando hacia la oscuridad.

—Mr. Stalsson, veo que vuestro cariz de deducción es inversamente proporcional a la geometría volumétrica de vuestros bíceps. Que Benson no haya regresado significa que precisamente ese no es el camino que debemos seguir. Solo hay un motivo para la ausencia de retorno; total aniquilación —su rostro dorado se giró hacia Ilia —. Quizás lo alcanzó algo que no puede oírse. O quizás marchó demasiado lejos. Incógnitas que abren más preguntas de las que se cierran. Oh, my…goooddd. Creo que voy a tener que superar la última barrera. The Final Frontier, amigos. Como suele decirse, si quieres algo bien hecho, debes hacerlo tú mismo.

El pensamiento chirriando dentro de su mente, engranajes a toda potencia.

—Hay algo que debo descubrir. Seguiré el camino de Benson, solo. Esperad. Solo será un momento. Y si no vuelvo, no se os ocurra tomar este camino.

El extraño personaje no esperó reacción de sus compañeros, se deslizó entre las sombras con su extraño andar y su excéntrico porte. Esperarían su vuelta, como la del tal Benson, pero ésta tampoco de produciría.*

Nuevamente, había quedado solos. Inphie encendió un guijarro, dotándolo de una luz blanca y reconfortante. La oscuridad lo envolvió sin lograr a tomarlo. No era así como debía comportarse la oscuridad. El ambiente estaba cargado. Magia, o algo que no podían comprender.

Notas de juego

*Nuestro compañero Dewey tiene que dejar la partida, al menos temporalmente. Así que lo saco de escena de esta manera poco traumática. Que su marcha no sea en mano. El camino de la derecha esconde muchos peligros. Obviamente podéis tomarlo, pero es un camino por el que la gente que va, no vuelve.