Partida Rol por web

Kratos Volvió a suspirar. No había forma de evitar la pelea así que se vio obligado a atacar Takezo.

 El sujeto arremetió con un golpe de puño y notó la gran velocidad que el joven Aspirante a Dragón tenia, sin embargo debido a su velocidad, ganada tras un feroz entrenamiento, Logro impactar en las costillas de Takezo causándole un fuerte daño

Lou Bun entendió a la perfección la estrategia de su compañero. A pesar de estas en silencio había estado de acuerdo en cada palabra que dijo su rival, solo que se mantenía callada debido a que su único objetivo era reventarle la cabeza a aquel enemigo que se atrevía a invadir su isla. Aprovechando que el enemigo estaba distraído atacando a su rival, el otro aspirante a dragón se lanzo contra el enemigo con seria intención de hacerle daño.

El golpe fue excelentemente colocado pero su potente ataque (una versión un poco débil del poderoso Rozan Shoy Ryu Ha) se encontró con la dureza de la armadura de su rival y no logró ni siquiera hacerle un rasguño.

Takezo recibió el golpe en el estómago. Aquello no era suficiente para detenerlo, pero sintió como una de sus costillas crugia. Los golpes de Kratos resultaban demoledores y su armadura un estorbo. Si querían detenerlo tenían que coordinarse mejor.

Lanzó un ataque descendente con Excalibur, esperando que Kratos lo esquivara saltando y poderlo dejar en mala posición para que Lou Bun lo atacara de nuevo, lamentable para el, su enemigo era bastante fuerte.

Se puso en guardia nuevamente, esperando que el segundo asalto fuera más favorable.

—Esta vez al mismo tiempo

Tanto los golpes de Lou Bun como él los de Takezo lograban pasar la defensa del enviado de Ares pero no lograban hacerle daño debido a la armadura que este portaba.
-Maldita sea, es verdad traigo armadura y ustedes no.- Dijo dándose cuenta de la protección extra de la que gozaba. De inmediato contento su cosmo para rechazar a su protección que cayó inerte en el piso.
-Bien ahora estamos más parejos.- Dijo y retomó el combate.

Ahora nuevamente se lanzo al ataque pero busco como objetivo a Lou Bun. A pesar de que a la legua se veía que era un enemigo poderoso no intentaba atacarlos con habilidades del cosmo, ni con alguna técnica que pusiera en serio peligro las vidas de los discípulos de Nobou.
 El Joven Chino no tuvo dificultades para esquivar los ataques de Kratos y aprovecho el error para contra atacar y darle una mejor oportunidad a su amigo Takezo.

Lou Bun estaba un poco confundido por la "amabilidad" de su enemigo por lo que optó por atacarlo con sus habilidades de combate común y no con su Rozan Shoy Ryu Ha en un acto de cortesia casi tasito. Sin embargo la gran habilidad de su enemigo mezclado en el estado de confusión en que lo habia dejado la amabilidad de su rival hicieron que su golpe no sirviera de nada.

Takezo frunció el ceño al ver como su enemigo los subestimaba, pero ciertamente lo aliviaba que se tomara ese tipo de confianza. Incluso no parecía una mala persona.

—¿Por que estás con ellos? No pareces mala persona. 

Takezo hablaba mientras arremetía de nuevo con su brazo derecho sin intenciones de herir permanentemente a su enemigo. Si bien entrenaba para pelear, esperaba tener que hacerlo lo menos posible. Su poder no era para dañar. Aunque aun debía aprender a tener más control.

Haber esquivado el ataque de Lou Bun Dejo a Kratos expuesto al poderoso ataque de Takezo que impacto de lleno contra el invasor hiriéndolo fuertemente pero sin poner en peligro su vida.
 Al Caer al suelo Kratos alzo una mano con intención de llamar la atención de sus rivales.
-¡Muy bien me rindo!.- Dijo esperando que sus rivales acepten su dedición.
 -Con esto tengo más que suficiente como para decirle a Ares que fracase, si tengo suerte no me enviara de nuevo a estas estúpidas tareas.- Agregó intentando sentarse reincorporarse para quedar sentado.
-Lamento todo esto, en verdad no tengo intenciones de reclutar ni nada por el estilo, tampoco iba a hacer daño a nadie. Solo necesitaba algunos golpes como para que me creyeran de que perdí, ¡pero vaya que voy a llevar muestras!- Agregó con un extraño entusiasmo.
-Vi que tienen una playa. Si me ayudan a llegar hasta allí nos sentaremos a charlar, creo que pueden ayudarme a mí y a mi hermana a ejecutar una estrategia. Lo haría yo pero estoy algo magullado como para llegar rápido a la playa.-

El sujeto no demostraba ninguna actitud agresiva e incluso su cosmo se encontraba calmo, de momento no parecía peligroso ayudarlo con lo que pedía.

Takezo no esperó si quiera a que Lou Bun decidiera, si era una trampa, el iba a caer directamente ¿Cómo se negaría a una petición de ayuda?

Le ofreció la mano a Kratos para que se levantara del suelo —Si te dejas la armadura no habríamos tenido oportunidad.

El joven ofreció su hombro para que se apoyara. Se había pasado con el golpe, un poco más y podía haber resultado mortal o incluso cortarle una extremidad. Aquel pensamiento le causó un escalofrío.

—¿Tu hermana y tu trabajan para Ares contra su voluntad? —preguntó a pesar de ser evidente ¿Por que otra razón alguien trabajaría con aquel villano? —. Los ayudaremos cuanto podamos, quizá cuando nuestro maestro vuelva...

El golpe que le habían propinado en el estomago aun le dolía, pero no era mucho comparado con el que le había dado al pobre hombre. 

Una vez que estuvieron sentados en la arena Kratos respondió la pregunta de Takezo. -Yo si trabajo para Ares pero mi hermana no. Ella trabaja para Athenea y fue la que ideo el plan.- Dijo.
-Pero para que se entienda mejor tengo que hacer mi presentación. Mi nombre es Kratos, soy hijo de Palas y Estigia y me asignaron como dios de la fuerza. Mi hermana es Nike diosa de la victoria, tenemos dos hermanos más pero de momento no están metidos en esta guerra. Tal vez a Nike la conozcan por el báculo de Athenea que utiliza para cuantificar el poder de mi hermana.- Hizo una pausa y luego retomo el habla -Por si no se dieron cuenta soy un dios, pero uno de muy baja monta, apenas superior a un humano. Tanto Nike como yo somos soportes de los dioses más poderosos. Útiles pero no imprescindibles. Ahora, bien hechas las presentaciones pasamos al otro tema. Mi hermana ideo un plan, o por lo menos un principio de plan para minar la fuerza de Ares. Yo estoy de acuerdo con ella ya que considero que Ares una mal mi habilidad. No quiero que el don de la fuerza sea prestado a gente que quiere mutilar y violar como lo hacen los adeptos a Ares. Trabajo para el solo porque Zeus me obliga pero no comparto su visión- Hizo silencio unos segundos para bajar un poco la intensidad de sus palabras. Por lo visto a Kratos no le gustaba para nada Ares. -Volviendo al tema, a Nike se le ocurrió que podría servirnos crear falsos espías. Es decir haríamos creer a Ares que tenemos gente dentro de sus filas y le pasaríamos información cierta pero inofensiva o levemente perjudicial para el bando de Atenea. Esto tendría la finalidad de que Ares confié más en los falsos informes mas se arriesgara. Eso servirá para darle algún golpe duro en algún momento preciso.- Explico.
-La idea era hablarlo con el santo dorado de Capricornio pero no está, así que los vi a ustedes y pensé que podrían servir para por lo menos justificar mi venida a esta isla. Pero los subestime y aquí estoy, sentado en la playa y vivo por la bondad de mi rival. Sabía que Zeus les había dado el don de hacer milagros para poder defenderse de los dioses pero no tenía idea de que lo usaban con tanta frecuencia.- Kratos guardo silencio para ver que pensaban Takezo y Lou Bun. Este ultimo estaba anonadado por lo que oía y aun estaba con la guardia alta por las dudas.

Takezo puso la mano en el hombro a Lou Bun, esperando que se relajara un poco.

—Con que esa es la situación. Nosotros informaremos al maestro cuando esté de vuelta, puedes estar seguro. ¿Alguien vendrá por ti?

El joven no tenía idea de como iban a contactar a Nobou, y tampoco tenía idea de como ayudar en el plan, pero estaba dispuesta a ayudar, consiguiera o no la armadura.

Le impresionaba que entre el y su compañero hayan podido contra un dios, aunque el mismo se considerara de poca monta. Sin duda el entrenamiento los había hecho fuertes.

—De haber querido ganar nos habrías atacado en medio del pueblo —convino Takezo antes de volver al tema principal. —¿Cómo podemos ayudar?

Sabía que comentar la situación del santuario, como la había explicado Nobou, podría ser de utilidad, no obstante no estaba seguro si confiar en aquel desconocido era lo correcto. No aun.

Me alegra que informen a su maestro, creo que de todo esto podemos sacar algo favorable.- Dijo mientras continuaba sentado en la Arena. -No tienes que preocuparte por mí, pronto me sentiré mejor como para viajar. Me tomara solo un rato reponerme.- Agregó mientras esperaba a que sus heridas sanen un poco.
-Me recuerdas a ese guerrero de los mitos, el héroe más querido de Athenea, Diomedes Tididas. El, al igual que tu no distinguía la sangre del Icor.- Dijo mirando a Takezo. -Tú amigo también es muy bueno. Me alegrara trabajar con ustedes si se da la oportunidad.-

No paso mucho tiempo hasta que Kratos se puso de pie, su heridas aún eran importantes pero el parecía encontrarse mejor. -Tal  vez tengas razón, si hubiera atacado dentro del pueblo y con todo mi potencial las cosas hubieran sido diferentes pero la verdad es que la idea de llevarle una victoria a Ares me revuelve el estomago. Si tienen ese mismo sentimiento y quieren ayudar entonces me encantara recibir su colaboración como falsos espías, pero supongo que eso deberán hablarlo con su maestro.

El dios de la fuerza volvió a colocarse su armadura quedando listo para partir. -Posiblemente envíe a algún sirviente para que hable con su maestro dentro de algunas semanas para ver como seguimos o si le interesa la idea. Por lo pronto me iré por un camino alternativo y haré correr la voz de que salvaron la isla de un agresor. Cosa que no es falso. Asi  que si nos volvemos a ver invítenme algo rico para tomar en agradecimiento. Nos vemos. Kratos comenzó a irse bordeando la costa a paso muy lento. Le costaba un poco caminar pero parecía que estaría bien y que su vida no correría peligro.

Lou Bun se encontraba un poco absorto en sus pensamientos mientras miraba a Kratos partir en silencio. -¿Que opinas Takezo? ¿Crees que se puede confiar en él? El joven japones sabia que Lou  Bun  no terminaba de creer al sujeto pero aun así había un ápice de duda en él.

Takezo observó a Kratos alejarse y tardo un momento en responder a su amigo.

—No estoy del todo seguro, pero si alguien necesita nuestra ayuda, sea del bando que sea. Debemos estar dispuestos a ayudar. Incluso si eso nos mete en problemas —añadió después de un momento.

Aquello había resultado extraño y ya era hora de volver a casa.

—¿Deberíamos llamar al maestro por teléfono?  —meditó en voz alta y luego agregó. —Tu que eres más estudioso ¿Quien es ese Diomedes?

-No sé qué pensar Takezo. Si es un aliado será una gran oportunidad para asestarle un golpe durísimo a Ares pero si no lo es el efecto puede que sea el contrario.- Comento Lou Bun tras meditar un poco. -Quiero confiar en que lo que diga es cierto pero creo que tenemos que tomar nuestras propias precauciones.- Agregó

Creo que debemos llamar al maestro Nobou para que sepa que fue lo que sucedió, espero que esto no le dificulte su viaje. Parecía que el asunto del santuario era serio.- Dijo coincidiendo con su compañero de entrenamiento.

Mientras caminaba de vuela a la casa Lou Bun respondió la pregunta de Takezo. -Diomedes fue un héroe que combatió en las guerras Troyanas. Era un común, es decir no era ningún dios o semi-dios, más bien era como tú y como yo pero destacaba en combate siendo tan bueno como el propio Aquiles. Hasta lo que leí el era el favorito de Athena y tanta era su confianza que le encomendó herir a Afrodita en el campo de batalla y más tarde combatió cara a cara contra Ares y lo hirió en un costado. Esa herida lo hizo tener que retirarse del combate. ¿Te imaginas ser tan duro que hasta Ares sale corriendo de un enfrentamiento contra ti?- Pregunto el muchacho entusiasmado imaginando que era el propio Diomedes. -Por eso dijo que no distingues sangre del Icor, eso porque hieres tanto a humanos como a Dioses.- Agregó dando una risotada. -Takezo parece que ya te están reconociendo como un héroe de esta generación, Maldición y me toca competir con tigo para conseguir una armadura. que injusticia.-
 Esto último Lou Bun lo dijo manteniendo su sonrisa, si bien sabía que Takezo era su rival también lo sentía como un amigo y no lo entristecería ser derrotado por él.

Takezo asintió a las palabras de Lou Bun. Llamarían a su maestro en cuanto tuvieran oportunidad, pero se tomarían las precauciones necesarias con el tal Kratos.

El joven casi se ruborizó al oír las palabras de su amigo, pero no sabía si era eso o le estaba volviendo el efecto del sake una vez acabada la batalla.

—Solo pudimos ganar porque éramos dos y se quitó la armadura. Yo solo no hubiera tenido oportunidad, somos un equipo hasta el final.

Le daba pena que de el resultar ganador, un valioso guerrero como Lou Bun no recibiera ningún mérito. Era tan digno como el más valeroso de los guerreros de Atenea. También temía que llegado el momento su amigo lo sobrepasara, pero de ese ser el caso, aceptaría la derrota sin rencores.

—Eres un buen guerrero y mejor amigo ¿Me ayudarías? — dijo pasando su mano por el hombro. Se sostenía el costado derecho donde había sido herido por Kratos unos momentos antes. Había sido leve, pero le molestaba al apoyar el pie.

Claro que te ayudare Takezo, también siento que eres mi mejor amigo y espero poder luchar hombro con hombro con tipo por siempre Dijo Lou Bun y ayudo al joven japonés a llegar hasta la casa.

Allí mismo llamaron a Nobou y le contaron lo sucedido. No paso mucho tiempo hasta que la isla se lleno de seguridad de la fundación Gran recorriendo toda la isla. Pocos días después soldados del santuario reforzaron la seguridad de la isla hasta que llego el Maestro Nobou.
 El Maestro les contó que no fue el único lugar atacado, que en varios campos de entrenamiento habían sucedido cosas similares y que incluso el mismo santuario había tenido problemas durante el periodo en el que estuvo allí, lo cual hacía suponer que había una filtración de información en el santuario.
 En los días siguientes Nobous se puso en contacto con un allegado a Kratos y hasta lo que les dejaron saber harían un pequeño trato y que con el correr del tiempo, si se demostraba que había confianza entre las partes, podrían cerrar algo mas grande.
 El entrenamiento siguió su curso luego de eso sin complicaciones, con el correr de los años Lou Bun y Takezo se hicieron extremadamente poderosos y finalmente llego el día que tanto habían esperado.

3 Años después...

 La noche anterior a la prueba final Lou Bun y Takezo apenas pudieron dormir. Nobou dijo que sería una sorpresa lo que tendrían que hacer pero desestimo la posibilidad de que se enfrentaran en combate. Al Amase en la casa les espero un buen desayuno preparado por la gente del pueblo especialmente para ellos ya que sabían que hoy tendrían que afrontar la prueba que determinaría quién de ellos sería el próximo santo de Athena.
 Desde que sucedió lo de Kratos, tanto Lou Bun como Takezo habían tenido un trato preferencial dentro del pueblo, la gente le regalaba cosas y se comportaba de manera muy amistosa con "Sus protectores". No era raro que tuvieran algún presente de los isleños pero este desayuno era algo sin igual. Todos habían aportado algo para alimentar a los jóvenes y era tanto lo que había en la mesa que dos personas solas no podrían terminar todo el alimento y las bebidas. Menos dos jóvenes que tenían el estomago cerrado por los nervios. Al salir del hogar Nobous se presento ante ellos vistiendo su cloth dorado, algo que solo lo habían visto hacer en otra oportunidad.

-Muchachos hoy es el gran día.- Dijo a sus Alumnos. -Pase lo que pase hoy sepan que son dos grandes guerreros y los mejores alumnos que alguien pudiera desear jamás.- Nobou tomo de los hombros a los jóvenes  y los abrazo a ambos con un poderoso abrazo paternal para que se relajaran un poco. -Ahora acompáñenme a la play, nos ayudara realizar la prueba un aliado que quiero que conozcan.- Dijo y comenzó a caminar por la playa.

En la orilla del mar un hombre se erguía frente a ellos. Vestía una armadura completa al igual que su maestro pero esta era más de un tono naranja que dorado. Al ver a Nobou y sus alumnos hizo una reverencia a modo de saludo.

-Muchacho este hombre es Hideo, Un Marina de Poseidón que viste la Scale de Dragón Marino y es el guardián del pilar del Océano del Atlántico Norte y nuestro Aliado en la guerra contra Ares.- Dijo presentando al sujeto.

-Bueno días chicos, como bien dijeron mi nombre es Hideo y estoy aquí para ayudarlos con su entrenamiento.- Comento con un tono de voz amistoso. -Me agrada estar aquí ayudando a nuestro aliado a nombrar nuevos santos ya que los años que nos esperan seran duros y lo mejor es formar lazos de camaradería desde este punto.- Agregó de modo diplomático.
 Ahora bien, se que están muy nerviosos y que quieren ir directo a la prueba así que les contare en qué consistirá. Con el permiso del Marina de Caballo marino que protege estas aguas utilizare mi poder para generar un tifón marino controlado. Su trabajo será detenerlo de la mejor manera posible.- Hideo hizo una pausa y luego siguió. -Los habitantes de la isla esta avisados de este evento y al ser controlado nadie correrá ningún riesgo de vida. Si veo que las cosas se salen de control frenare todo de manera inmediata. También para evitar algún problema que se nos haya pasado estará el Maestro Nobou para corregirlo así que no teman en dar todo de si.- Miro a los alumnos y luego miro a Nobou para ver si querían acotar algo. -Una cosa más, este tifón está localizado solo en esta costa asi que no deben temer por lo que suceda a los alrededores ¿Bien?. Si alguien tiene una pregunta este es el momento de hacerla, sino comenzamos.-

Takezo no dijo mucho durante todo el camino y comió al ver que Lou Bun sacaba fuerzas para comer. El nudo que tenía en el estómago amenazaba con devolver toda la comida por donde entró, pero finalmente no ocurrió.

Estuvo a punto de llorar cuando Nobou los abrazó —Siempre serán mí familia.

El joven le hizo una reverencia a Hideo. No había visto a otro santo con un cloth como ese. Pero después de ver a Kratos con uno, no le parecía tan descabellado. Había escuchado antes que habían varios tipos. Los nervios ayudaron a contener las ganas de preguntar.

—Estoy listo —dijo mirando a Lou Bun. En ese momento volvían a ser rivales.