Vais en el autobús escolar, hoy es un gran día, vais de excursión al campo. En la autovía hay una gran cantidad de tráfico, y todos vais muy animados cantando vuestra canción de viajes. El conductor está algo cabreado, eso de llevar a jóvenes de 17 y 18 años no le gusta demasiado.
De repente algo ocurre cerca de vosotros. Un coche rojo resbala, se tambalea, y cuando parece que recobra la trayectoria choca con otro coche. El coche rojo se vuelca. El autobús, junto con otros coches paran, pero no parecen hacer nada. La escena era divertida, para vosotros es como ver una película de acción. Los que quedan atrapados dentro del coche comienzan a sentir el calor abrasador del fuego que comienza a salir del motor. A vuestro parecer parecían la familia Stark. Os resulta sádicamente divertido. Finalmente el viaje continúa, ya que el conductor ya ha llamado a los bomberos y prosigue su marcha. El profesor parece escandalizado, pero no hace ademán de ir a ayudar tampoco. Todo el mundo se había quedado parado.
Ese mismo día se anuncia la muerte de la familia Stark. Un hombre, su mujer y dos hijos. Todos conocían a esa familia, ya que en vuestro pueblo todos os conocéis.
Os acordáis de vuestro compañero de clase Malcom Mcbride, el chico que se suicidó por vuestra culpa. Os sentís ligeramente culpables, aunque los demás tampoco hicieron nada por evitar esa tragedia.