Partida Rol por web

No pretendo extenderme mas de lo necesario, se que necesitamos descansar y no pretendo quitarle tiempo de descanso que a sido bien ganado. Le dije a Cornelius directamente en cuanto nos apartamos un poco de los demas, lo justo para que no pudieran oir la conversacion que habia iniciado con Adler.

Asi que vamos directamente a ello.

En primer lugar quien es usted, porque Airuf le ataco en el puerto antes de enbarcar, jamas se comporto de esa forma.

En todo caso podria haber atacado a su perro, pero no a sido asi, expliquese.

Cornelius esperó a que el brujo empezase con las preguntas. Eso seguro que sería más fácil que intentar adivinar lo que él quería saber.

¿que quien soy yo? -dijo Adler con media sonrisa- Vaya... esa es una buena pregunta... sin ponernos filosóficos, que no es mi estilo, le diré lo que ya sabe, porque no hay más.

No se ofenda, Ulrich, pero es la única pregunta que no me esperaba...

Mi nombre es Cornelius Adler, y hasta hace poco me ganaba la vida haciendo de cazarecompensas a varias semanas de viaje al sur de Tashlutta.

Hizo una pausa para recapitular las otras preguntas, y prosiguió.

El porqué me atacó su perro, la verdad no lo sé. Eso debería preguntárselo a él. A mi tampoco me había pasado nunca, y he tratado con muchos animales en mi vida. Pero debo admitir que últimamente me estan pasando cosas que no me habían pasado nunca. Tengo dinero, me atacan hombres transformados en peces a dos patas de mandíbulas descomunales... ¿me sigue?

Lo que si que tengo claro es que Jazzminne no es la única que necesita ver a un clérigo. A mi tampoco me irían mal algunas respuestas que creo que sólo ellos pueden darme, espero.

He criado Airuf desde cachorro, conozco su comportamiento y lo que paso en el puerto no fue normal, Airuf no ataca porque si, seguro detecto algo. Es usted un hombre misterioso, pero respetare su respuesta.

No queria continuar por aquel camino, que lo mas seguro es que no llegase a ninguna conclusion, mi intencion no hera la de meterme en discusiones de las que no sacaria nada.

Tras unos segundos de espera, entre pregunta y pregunta, para que los animos no se caldeasen.

He visto que Khunder se a curado espectacularmente rapido y de sus heridas no ha brotado nada, puede responderme a eso, porque la verdad muy normal no es. A no ser que se trate de algun poder magico, si quisiera no me costaria detectar magia alguna, pero prefiero no llegar a esa situacion, ya que eso mostraria desconfianza por mi parte y eso no es bueno para el grupo.

Me esforzaba por detectar lo que fuese en la mirada de Adler.

Alder no miraba a Ulrich a los ojos, sinó que miraba al horizonte plano y tranquilo del mar, mientras pensaba lo que tenía que decir.

Esa pregunta me ha gustado más, brujo...

Yo también crié a Khunder desde cachorro. Y le entiendo. Su comportamiento tampoco no fué normal, y no conseguí que me dijera el porqué lo había hecho, más allá de mi defensa.

Si le sirve de respuesta, yo no sé mucho de lo que está pasando. Y ese es uno de los motivos por lo que quiero ir a ver a un clerigo. Las heridas de Khunder se recuperan de forma realmente asombrosa, y eso también me -hace una pausa para buscar la palabra adecuada-... preocupa.

¿Quiere saber si hay mágia en ello? Haga lo que deba. Yo creo que si. De animales en general, no sólo de Khunder, sé algo, y puedo asegurarle que eso no es normal. Pero no puedo decirle qué es. Si hace el hechizo, o lo que deba, puede que encuentre respuestas que yo no tengo. Así que no debería extrañarse de mi sorpresa, si la tengo.

Adler calló unos segundos, concentrado en el mar.

Es curioso. Usted habló de confianza. El elfo que va siempre con la cara tapada por una máscara.

No se preocupe por eso. No es grave. Pero debería saber que este grupo no se basa en la confianza sinó en los objetivos. Todos buscamos cazar a Vanthus Vanderboren por un motivo o otro, además del dinero que nos han prometido.

Los únicos que aquí pueden hablar de confianza son Jazzminne y el Capitán, que se conocen de hace tiempo... bueno... y el Capitán con su equipo de marineros, y por los mismos motivos. El resto somos compañeros de viaje.

Miró un momento a los ojos de Ulrich, para buscar su expresión y volvió otra vez a mirar al mar.

Pero no me malinterprete.

Si usted, Jazzminne o el Capitán están en apuros, yo haré todo lo que pueda para ayudarles.

No solo no me interesa que nadie más muera en este asunto, sinó que además, me interesa especialmente que ustedes sigan vivos para poder acabarlo.

Volvió a girar la vista hacia el mago, e hizo una mueca intentando ser una sonrisa afable.

¿Y quien dice que con el tiempo no acabemos confiando?

Muy bien, pues cuando este mas recuperado, si no le importa intentare detectar algun tipo de magia en Khunder, si esta deacuerdo claro esta.

El tono de mi cara y la expresion de mi cara cambio y se torno serio, incluso con la cara tapada se podia notar, la seriedad de mi gesto y el tono de mi voz.

En canto a mi mascara es cierto que puede inducir a desconfianza... pero es mejo que la mantenga puesta, nuestra mision se veria seriamente en peligro si no la llevase.

Le pido que esto ultimo no lo comente con los demas, esto ya es suficientemente complicado.

Ademas nos pondria en peligro continuamente, se lo aseguro...

Creo que esto nos puede representar mas tiempo del que disponemos, es mejor que nos dispongamos a descansar ya que no sabemos que nos podemos encontrar cuando lleguemos a puerto.

Si le parece bien podemos continuar en otra ocasion.

Cornelius miró a los ojos a Ulrich.

Eso de detectar... hágalo cuando lo crea conveniente. Símplemente, le pido que me avise, y que me comunique el resultado.

Entre otras cosas, no me gustaría que Khunder se enfadase y yo no estuviera, o estuviera distraído. Ya le he dicho que no sé lo que está pasando realmente, y ya ha visto lo que es capaz de hacer...

Y no se preocupe por su máscara. Mientras no nos dé problemas, si quiere puede llevar un vestido tradicional thayino... sólo lo decía para contrastar... -sonríe- Cuando quiera, me avisa y si hay tiempo continuamos.

Dicho esto, le acompaño hasta la puerta, y le despido.

Que tenga buenas noches, Ulrich.

Y justo cuando se da la vuelta para irse, añado:

Por cierto, conoce el dicho netherino quid pro quo?

Y antes de que responda, cierro la puerta y me tumbo a dormir.