Partida Rol por web

La posada apestaba, el ruido de las furcias no se acallaba en aquel maldito antro incluso a media mañana, Denkar habría preferido dormir en cualquier otro lugar, pero tenía que esconderse de aquél al que buscaba y conservar como pudiese las pocas monedas que le quedaban, la venganza era un negocio muy caro.
Hasta ahora, las pesquisas en busca de su antiguo compañero de aventuras no le habían reportado ninguna información salvo callejones sin salida. Denkar empezaba a pensar que quizá lo mejor sería buscar otros aires más propicios y empezar de nuevo, desde 0.

Sumido en esas cavilaciones apenas se percató de que una mujer de pelo oscuro, cuerpo de pecado y con una rosa tatuada en el hombro acababa de sentarse junto a él en la barra tras apartar al borracho babeante que hasta ahora había sido el compañero de mesa del joven.

Hola, permiteme que te sea tan directa, pero he oído por aqui que estas buscando a un tal Vanthus Vanderboren, ¿Es eso cierto?
Perdona que sea tan maleducada, mi nombre es Ekra.-dijo la joven morena. destacaba enormemente entre los borrachos y las putas del local que le lanzaban miradas de envidia y desdén, aún así parecía moverse como pez en el agua, muy segura de si misma.

Si es cierto, lo conoces acaso o tienes informacion sobre él?.dijo Denkar mientras jugaba con una moneda entre sus dedos y no dejaba de mirar los pechos de la joven morena

Yo no, pero hay un tipo por aquí, llamado Shefton Rosk que se lo está contando a todos aquellos que se lo preguntan, tiene la boca muy suelta.
La joven se acercó lentamente a Denkar, tan cerca que parecía que fuese a lanzarse encima suyo en cualquier momento. Antes de que lo preguntes, Vanthus se ha ganado a muchos enemigos en la ciudad, y yo soy una de ellos, asi.. que cualquier enemigo suyo es amigo... mío.

La joven se separó de Denkar y mientras se alejaba de él contoneando sus anchas caderas se giro una ultima vez. Si lo buscas podrás encontrarlo ahora mismo en la Casa de Té, está... comprando algunas hierbas para sus infusiones diarias. Si te das prisa lo alcanzarás

Inmediatamente Denkar guarda su moneda y va en busca de su viejo amigo. Se dirige hacia el sitio donde la chica de los pechos turgentes lo había enviado con la esperanza que siguiera ahí. Intenta llegar o más rápido posible a la Casa del té y una vez llega allí, decide esconderse esperando la salida de Vanderboren del local.Una vez salgá lo seguirá desde una distancia prudencial para no levantar sospechas.

Denkar se movió por los callejones del depresivo barrio, gentes de mirada perdida y sonrisas bobaliconas se iban apilando por las calles más sordidas de Tashlutta a medida que el joven se acercaba a la famosa Casa de Te. Al fin tras girar por los recobecos de las tristes calles alcanzó la dirección que le había dado Ekra. Se agazapó a la entrada de la callejuela esperando que Vanthus entrara o saliera de aquella casucha.

Los minutos se transformaron en horas y no había ni rastro de Vanthus, empezó a preguntarse si aquella chica no le había gastado una broma pesada cuando la puerta que llevaba tantas horas vigilando se abrió de golpe y dos tipos con los brazós del tamaño de un tonel lanzaron a un desaliñado tipejo con cara de rata a la porquería que se acumulaba a ambos lado de la puerta.

Tu dinero se ha acabao Shefton!! Vuelve cuando tengas más oro!! -dijeron los dos gorilas mientras cerraban la puerta con un golpe seco.

Cuando los dos gorilas han cerrado la puerta Denkar, aparece de donde se había escondido y se acerca a Shefton, de forma cautelosa.
Tu eres Shefton verdad? Tu conoces a Vanthus no? Sabes donde esta ahora?

El hombre se incorporó de golpe e instintivamente levantó sus manos sucias de uñas mordisqueradas como un resorte. Tenía el pelo negro y largo, tan graso que se le pegaba al cráneo y no podía esconder sus facciones afiladas y sus orejas levemente puntiagudas.

A toda vista, el semi-elfo trató de serenarse mirando a ambos lados de la calle, y con una voz tratando de aparentar tranquilidad empezó a hablar con los ojos desenfocados y voz terriblemente pastosa.

Tuuuuu taaambieenn leee buuuscaas? Ja, ja, ja más oro para el pobre Shefton!! Deeee ve...verdad que es mi diiia de suerteee serán c... ciii cincooo monedas de oro y mañaaana te llevareee donde se esconde.

Ya claro, te doy las monedas y si te visto no me acuerdo. Será ladrón!Necesito encontrarlo ya, no me vale ir mañana, porque sinó le habré perdido la pista.Por cierto te suena el nombre de Ekra?Denkar, aun sabiendo que lo que le pudiera contar el semi-elfo tenía toda la pinta de ser mentira en este momento no disponía de mas información.

Miiraaa, tengo otros clients que le estan buscando así que o vienes mañana o te quedas en tierra, dijo en un momento de lucidez antes de volver a poner aquella cara de bobalicón colocado.

Cita:

¿Quien?

¿Así que? ¿Tenemos trato?

A regañadientes, pasándose la mano por el mentón y no muy convencido de lo que se proponía a hacer, Denkar acepto. Bueno, tu llévame hasta ahí y te doy 1 moneda de oro que para hacer de guía tienes mas que suficiente.Tendré que hacer caer a mis manos el portamonedas de algun ricachon.

De acuerdo! Teeneeeemoss trato! -Shefton alargó la mano para sellar el acuerdo con un apretón. Mañaaaana deeelaaante de "Aún Flota" al aaaamaneceeer.

Del otro extremo del callejón, apareció una figura alta y esbelta, se movía con la gracia de una gato y se dirijía directamente hacia Denkar y el semi-elfo.