La hoja de la navaja pasó lentamente por el cráneo de ébano.
Maggie estaba examinándose en el ROTC, sentada en un pupitre. Parecía tensa, y mordía el capuchón del bolígrafo. Echó una ojeada al profesor, y su vista se distrajo hacia algo que se movía en la ventana. Frankie estaba allí, y sonrió al verla, levantando una mano donde llevaba colgando de sus cordeles, dos guantes de boxeo. El rostro de ella se iluminó con una sonrisa, y siguió escribiendo en el folio.
La mano pasó por la piel de la cabeza, comprobando el resultado del afeite.
Jonas acababa de mandar una carta para ella, y salió de la tienda de intendencia en aquel improvisado campamento en un lugar polvoriento y seco, pero a la vez diferente. Se puso las gafas de sol, suspirando mientras pensaba en lo que había perdido, pero también lo que había ganado. Sin más, caminó hacia el montículo.
La maquinilla reposó finalmente sobre el recipiente de hojalata, lleno de agua turbia.
Kendrik acababa de ganarle un pulso a su amigo Webster, y este se quejó, entre las risas de los compañeros. El sureño se levantó entonces, mirando hacia la carretera, donde un 6 toneladas acababa de llegar, trayendo más marines. James Kazcynski bajó de él, mirando el letrero con el nombre de aquella base afgana perdida en el culo del mundo. Mientras se echaba el macuto al hombro, pensó en que se había engañado a si mismo. La muerte de su madre, la experiencia en Irak, todo ello no demostró otra cosa que lo que comenzaba a intuir. Su vida había cambiado desde que llegó a Parris, para bien o para mal.
Mientras caminaba con una sonrisa hacia Kendrik, el sargento Jackson se apoyó la toalla sobre los hombros, mirando de reojo a la aparición. Él no alteró el semblante, ya que sabía perfectamente por que él, como ellos, había decidido reincorporarse de nuevo a aquella mierda, tras pasar un año en la reserva. El negro sabía, mejor que nadie, que ahora nada les ataba a casa. Su vida estaba allí, y a pesar de que no estaban todos, no le cabía duda de que cada uno lucharía sus propias batallas.
Para ellos, era más sencillo. Ahora los marines eran su trabajo, el único que sabían hacer. Y por encima del trabajo, estaba la familia. Y ahora, los marines eran su familia.
Por que no existen los ex-marines.
Hurrah.
Nací el 10 de noviembre de 1775, en el crater una bomba. Mi madre era un M16 y mi padre el Diablo. Cada segundo que sigo vivo es una amenaza adicional para tu vida. Como alambre de espinas y meo Napalm, y puedo meterle una bala en el culo a una pulga a 300 metros. Viajo por el mundo destruyendo Antiamericanos donde sea. Por el amor de mamá, por Chevrolet, por el beisbol y por la tarta de manzana. Soy un gruñón. Soy el sucio, desagradable, apestoso, sudoroso, obsceno y guapo hijo de perra que ha mantenido al lobo a raya durante los últimos 225 años. Soy un Marine de los Estados Unidos. Parecemos soldados, hablamos como marineros y podemos patearles el culo a ambos. Le robamos el águila a la Fuerza Aérea, la soga al Ejército y el ancla a la Marina. Y en el séptimo día Dios descansó, y desde entonces, nosotros vigilamos el perímetro. Guerreros de día, amantes de noche, ebrios por convicción, Marines por la Gracia de Dios.
Semper Fidelis.
Dedicado a mis jugadores, por su estupenda interpretación durante un año de partida. Por estar ahí, frente a los parones, las dificultades, el tedio y cualquier otra adversidad.
Por haber sabido mantener la calidad en su posteo, día tras día, semana tras semana, haciendo de esta partida una de las mejores que he tenido el placer de dirigir.
Este final, quizá no el que teníais en mente, es mi pequeño tributo a vosotros. Por que, a pesar de que algunos personajes deseaban volver a casa, quiero creer que a los otros les daba igual, o preferian quedarse. Y como buenos compañeros, mejor juntos, que separados. (Modificación) Respetando el deseo de Zjordi, he cambiado un detalle: Maggie hará el ROTC para intentar ser un oficial, además de examinarse a distancia para obtener un título de enfermería.
Por que cada vez que me preguntaban sobre esta partida, siempre les decía "mis marines son cojonudos". Por que os lo merecéis.
Ha sido un honor rolear con todos vosotros.