- Es la esposa del agregado militar alemán. Pike hace sus revelaciones como si hablará con alguien venido de otro planeta. - Una mujer joven, atractiva, un trofeo para que su esposo paseé por los salones, falta de atención y que puede necesitar atenciones.
Mientras Pike hace su relato, sus ojos guiñan de manera pícara.
- Pero ya no puedo decirle nada más.
Editado al advertir el error, en el libro aparece así, gracias por advertirlo.
Creo que era hora de hacer una visita al otro Holmes, estaba seguro que el señor Mycroft Holmes podría darme más información tanto de la víctima como del embajador alemán:
- Gracias por su tiempo, viejo amigo, espero que tenga un buen día...
Voy a ver a Mycroft.
En su habitual mesa en el Club Diógenes, habitual lugar de encuentro de personalidades del gobierno y altas esferas, Mycroft Holmes, paladea su copa, tras un día plagado de decisiones importantes.
Contrasta la diferencia física con su hermano, no así el brillo en la mirada, quizás algo más reposada y calmada, pero igualmente fría y analítica.
- Buenas tardes, ¿En qué puedo serle útil, Sr. Redfield?.
- Buenas tardes, señor Holmes, perdone que le moleste, sé que es un hombre ocupado, así que seré lo más breve posible. Estoy investigando la muerte del señor Courtney Allen y mis pesquisas han averiguado que, supuestamente, el difundo mantenía un idilio con la condesa Von Schulemberg, la esposa del embajador alemán. - Le informé. - ¿Que me puede decir de ellos?.
La cuestión era que, en caso de que estuvieran implicados en el asesinato, esto fuera un caso de crimen pasional o algo todavía más turbio, como espionaje. A ver lo que me decía mi fuente, suponiendo que no estuviera errando el camino...
Mycroft se recuesta en el sillón, paladea su copa, sonriendo antes de responderte:
- La condesa, muy atractiva por cierto, la nueva esposa del embajador agregado militar alemán no es su nueva esposa, por cierto. Hace cuatro meses se llamaba Freda Rudel y hoy en día sigue llamándose Freda Rudel. - Mycroft te mira esperando tu reacción ante su comentario.
Le miro imperturbable, con mis dos manos cruzadas, enfrente de mi boca, de manera pensativa, antes de responder:
- Freda Rudel... Muy interesante... Siga, por favor.
Puede que finalmente haya encontrado lo que haya estado buscando, después de todo...
- Se sospecha desde hace tiempo, y esto no se lo he dicho, - Un guiño de complicidad de Mycroft, ahora mismo te está desvelando secretos del gobierno y debes ser cuidadoso en su uso - que el Conde von Schulenberg, es algo más que el simple agregado militar de la embajada alemana. Hay muchas potencias interesadas en los proyectos armamentísticos que desarrollamos, al igual que nosotros en los suyos. El proyecto que desarrolla la empresa de Allen para el Almiraztango es seguido con mucha atención por varias potencias.
- Eso había oído, por eso acudí a usted en cuanto me enteré de quien era la amante del señor Allen. - Asentí, pensativo. - Por si tenía algo que ver con su muerte. ¿Cree que es posible que el embajador o su socia estén detrás de su muerte?.
Microft sonríe al ver que vas algo pérdido. - Señor Redfield, no es el embajador, es el asesor militar y algo más, ya me entiende, tanto el como su esposa.- El tono dado te hace pensar - No creo, ya que están interesados en pasar desapercibidos, un hecho así pondría en grave riesgo sus actividades, espero haber sido lo suficiente claro.
- ¿Y si la víctima les hubiera descubierto?. - Le pregunté, mientras tomaba una taza de té, que me había traido uno de los camareros del club.
- Estamos entrando en el terreno de las hipótesis, querido amigo, en ese caso debe continuar su investigación, yo no puedo serle de más utilidad. - Microft Holmes encoge sus hombros y te hace un gesto elocuente, sus conocimientos no le capacitan para darte más pistas en ese sentido.
¿Ahora es cuando voy a la Sala de teorías para reunirme con los demás?.
Puedes ir en cualquier momento, en principio pensé en fijar en tres las visitas "diarias", pero al final he optado por dejaros un poco a vuestra bola, allí tienes alguno de los jugadores, a ver si sacáis algo en claro.
Tras despedirme del señor Holmes, me fui a reunirme con el resto de mis compañeros detectives. Aunque lo que había averiguado era sin duda interesante, no parecía finalmente ser relevante para la investigación, para mi disgusto. Confiaba en que ellos hubieran tenido más suerte que yo...
Tú dirás...
Adelante, pasa a la sala de teorías y como en las tiendas de fotografía antigüas "revela tu rollo".
Espero que haya debate y cruce de datos entre vosotros.
Master me gustaría saber si mi personaje se puede colar en las oficinas de la Sociedad de Armamentos Grant, para saber en qué trabajos estaba investigando el fallecido Allen para quedarse tan tarde.
Podríamos montar una escena, pero no te va a aportar nada, revisa las notas de las visitas, estás más cerca de lo que crees ;)