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The Legend of Zelda: Tiempos Oscuros

Castillo de Hyrule

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12/11/2015, 13:47
Director

Quien iba a decir, años más tarde, que la paz la tranquilidad de vivir en un reino sin guerras ni maléficos seres iba a acarrear también quebraderos de cabeza a personas que pensaban que ya iban a pasar los años que restasen de su vida en armonía.

Tener un hijo, o en este caso una hija siempre implicaba una doble cara: alegría, felicidad, orgullo... sin embargo también tenía una cara oscura repleta de inseguridades, miedos e incertidumbre: estos sentimientos son lo que asolaron a los reyes de Hyrule una mañana como cualquier otra cuando quisieron entrar a visitar a su hija Zelda.

La pequeña había cumplido hace poco 12 años, era intrépida y fuerte como su padre pero a la vez hermosa y con astucia como su madre. Ambas cualidades habían convertido en la primogénita de los reyes en el ojo derecho de todo el reino, sin embargo su fuerte carácter provocó que en las últimas semanas muchas disputas se convirtiesen en el pan de cada día.

Cuando Link y Zelda giraron el pomo de los aposentos de su hija, comprobaron de manera terrible que allí no estaba. En su lugar estaba todo patas arriba, como si alguien hubiese entrado y de manera violenta se la hubiese llevado.

Fue en aquellos instantes, al ver su espada de madera en el suelo o su pequeña muñeca (un conejito rosa) rota lo que os hizo temeros lo peor.

Lo peor para unos padres no era ya saber que su hija no estaba y que alguien o algo se la podría haber llevado para hacerle daño, sino que para colmo quedaba la intranquilidad de saber que no estaban "en paz" con ella a causa de trifulcas que en esos instantes no tenían importancia.

 

Notas de juego

En este post debéis narrar vuestras impresiones de cómo llegáis al cuarto y comprobais que vuestra hija no está, además claro está de observar horrorizados como la habitación está totalmente desbaratada.

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13/11/2015, 13:42
Zelda

 

Zelda se dirigió con Link hacia la habitación de su hija, no era muy común que fueran ambos a visitarla pero últimamente las discusiones estaban llegando demasiado lejos y no podían continuar así. Iba con la intención de disculparse para llegar a algún trato con ella, quizás debían dejarle más libertad ya que con su fuerte disciplina no conseguían nada más que la niña se revelara una y otra vez.

Al llamar a la puerta de la habitación nadie contestó, probablemente se le habrían pegado las sábanas, sonrió para sí en eso se parecía a su padre, pero al abrir lentamente la puerta se encontró uno de los mayores temores de una madre, alguien se había llevado a su hija.

Observó en silencio la habitación destrozada hasta que centró su mirada en los restos del conejito rosa y se encaminó hacia él, se le encogía el corazón a cado paso vacilante que daba, multitud de pensamientos que le surcaban la mente a toda velocidad y le hacían sentirse mareada. Habían sido tan estúpidos de creer que el reino estaba seguro y ni siquiera habían sido capaces de proteger a su niña, ahora quizás fuera demasiado tarde.

Cuando llegó hasta la muñeca la cogió y la apretó con fuerza contra su pecho. ¿Y si le había perdido para siempre? Sin poder despedirse y precisamente ahora que sus últimas palabras no habían sido nada más que discusiones. Las lágrimas comenzaron a brotar de sus ojos y buscó con la mirada a Link en busca de apoyo.

 

- Nuestra hija… no está. – No podía decir nada más que lo obvio, demasiado preocupada para pensar con claridad.

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13/11/2015, 20:57
Link

Link se había quedado dormido, otra vez. Pese a ostentar el título de rey, de vez en cuando pasaba unas horas tumbado en la hierba bajo el cobijo de un árbol y caía rendido por el sueño. Las viejas costumbres nunca se pierden, pensaba él. Ahora enfilaba el camino a los aposentos de su hija acompañado de su esposa. La chiquilla llevaba unas semanas comportándose de una manera diferente; quería más libertad, poder viajar por los alrededores sin escoltas ni nadie vigilándola e incluso le pidió utilizar una espada de acero de buena calidad para entrenar. Y en otros tiempos, si él no fuera el rey de Hyrule lo hubiera permitido. Pero todo había cambiado, él tenía un cargo que mantener y sus decisiones las ejercía desde la madurez que había obtenido con el paso de los años durante sus múltiples aventuras.

 

El silencio que inundaba el pasillo le transmitió un mal presentimiento, y en cuanto abrieron la puerta y descubrieron el caos que reinaba en la habitación, el corazón le dio un vuelco. Por un instante se quiso creer que su hija estaba jugando con ellos o algo similar, pero cuando vio la espada tirada en el suelo, supo que las cosas no iban bien. Recogió la espada de madera e inmediatamente la dejó encima de la cama, sentándose en ella. Zelda permanecía de pie con los ojos anegados de lágrimas, él se mantuvo serio hasta que finalmente la abrazó. Intentó calmarla transmitiéndole seguridad aunque en su interior su pensamiento fuera bien distinto.

 

-Tranquila… Vamos a encontrarla… -alcanzó a decir con una mirada triste, reflejo de la angustia que sentía. “Hija mía, ¿dónde estás?”

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15/11/2015, 10:13
Director

De pronto, mientras estabais paralizados en la habitación de vuestra hija comprobando lo que allí quedaba intacto y lo que mostraba los claros indicios de que había sucedido algo horrible, un poderoso estruendo rompió desde el exterior.

Sin dudarlo mirasteis a través de la ventana para comprobar consternados como el cielo se había tornado oscuro, tan oscuro que tanto a Link como a Zelda le vinieron recuerdos de épocas pasadas donde el mal volvía a azotar la tierra.

Si el mal había vuelto significaba que algo había cambiado, que se había dejado de contar con la protección de algo elemental.

La puerta de la habitación comenzó a sonar, alguien estaba llamando a la puerta con firmeza pero a la vez también con presteza.

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15/11/2015, 10:20
Soldado del Castillo

Con el debido respeto, uno de los soldados del castillo entró a la estancia y tras miraros y hacer una leve reverencia se dedicó a ustedes.

- Sus majestades, os traigo malas noticias - dijo en un tono serio, la preocupación estaba dentro de su mente.

- La Trifuerza ha desaparecido de la cámara del castillo... -

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16/11/2015, 18:33
Link

Aún afligidos por el estado del dormitorio de su hija, un ruido atronador los alertó a ambos. Link se encaramó a la ventana para contemplar estupefacto como el cielo había cambiado de un momento a otro del alegre azul a un negro triste, plomizo y lo que era peor, síntoma de un peligro incipiente. Ahora que aquellos recuerdos del pasado se estaban difuminando en su mente, sucedía esto. Todos los acontecimientos vividos en la época pasada llegaron de golpe a su cabeza y por un instante perdió el equilibrio. “No puede ser, no, otra vez no…”

Los golpes a la puerta sobresaltaron al rey que inmediatamente hizo pasar al soldado; su semblante, mezcla de seriedad y nerviosismo, no serenó en absoluto a Link. Y en cuanto notificó aquella nueva, los ojos del hyliano se abrieron todo lo que se podían abrir. Su primera reacción fue lanzar una mirada suspicaz a Zelda, quien estaba aún en shock por lo sucedido en la habitación.

-Llévame ahora mismo a la cámara –ordenó con un tono firme, intentando ocultar el temor que sin embargo comenzaba a aflorar en sus entrañas.

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17/11/2015, 10:43
Zelda

El abrazo fue realmente reconfortante y pudo secarse las lágrimas, pero un estruendo les interrumpió y Link fue rápidamente a asomarse a la ventana pero ella se mantuvo en el sitio, desde ahí podía ver el cielo y no necesitaba más, era muy mala señal.

- Link, esto puede suponer la vuelta Ganon o de algo peor.- Intentó decirlo con toda la serenidad que podía pero le salió una voz temblorosa, quebrada.

Antes de que él pudiera darle una respuesta sonó la puerta y entró un guardia con la peor de las noticias, pero que no hacía más que reafirmar su suposición. 
Ella no estaba en disposición de dar ninguna orden a nadie, no tenía fuerza. Por fortuna Link se adelantó y tomó las riendas de la situación, dejaría que hablara él mientras ella intentaba asimilar que no solo su hija sino todo el reino estaba en peligro. Se acercó a la cama y dejó el peluche junto a la espada de madera.
- Yo también voy.
 

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17/11/2015, 13:29
Director

El soldado asintió y os acompañó tan rápido como pudo a la cámara donde estaba la Trifuerza.

Mientras caminabais por el castillo siguiendo a vuestro siervo pensasteis que el hecho de acceder hasta la cámara y robar aquella poderosa reliquia significaba que os estabais enfrentando a un enemigo bastante peligroso, alguien a quien no podíais ver o con un poderoso uso de la magia ¿Ganon quizás? es posible, pero su derrota fue definitiva supuestamente años atrás.

Tras varios minutos recorriendo pasadizos y puertas muy específicas se llegó a la cámara. El soldado os dió paso sin querer entrar él personalmente, no quería interrumpiros en vuestra reflexión.

Notas de juego

La sala tal y como era de esperar no contaba con la presencia de la Trifuerza, pero tampoco había signos de violencia como de haber roto la puerta.

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18/11/2015, 20:07
Link

-Ganon… -repitió Link cuando Zelda mencionó su nombre. Un nombre que preferiría no volver a escuchar, pero lo cierto es que la posibilidad de su vuelta aumentaba a pasos agigantados.

Abandonaron el dormitorio avanzando con celeridad por los pasillos. Quien hubiese accedido a la cámara tenía un poder elevado, o eso suponía pues se había abierto paso a través de infinidad de galerías vigiladas sin ser detectado por los guardias. Un enemigo a tener en cuenta. Entró andando con premura a la cámara, consciente de que la Trifuerza había desaparecido, su aura mágica ya no impregnaba la estancia. Dio varios pasos alrededor de la sala, valorando la situación. La puerta estaba en perfecto estado, por lo tanto la magia empleada por su adversario era preocupante, ya que o bien podía volverse invisible o tenía la capacidad de inmiscuirse sin problemas en un castillo como el de Hyrule. De nuevo la imagen de Ganon volvió a sobrevolar su mente. "Ganon, te destruí. No puedes ser tú de nuevo..."

-Soldado –llamó al susodicho para que entrase-. Convoca enseguida a todos los encargados de custodiar la cámara, quiero saber si alguno ha presenciado algo. Cualquier detalle, por pequeño o imperceptible que sea.

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18/11/2015, 23:16
Zelda

Zelda recuperó un poco la compostura camino a la cámara de la Trifuerza, todos recorrieron los pasillos en silencio lo que permitió a la reina pensar con más claridad en lo ocurrido. Quizás dijo muy pronto el nombre de Ganon pero si no se trataba de él debía ser alguien realmente poderoso si consiguió robar la Trifuerza, ante la expectativa de un nuevo enemigo casi prefería volver a encontrarse con él.

Al llegar a la cámara todo estaba intacto y efectivamente la Trifuerza había desaparecido, no quedaba ni rastro de ella. Sin embargo estaba todo demasiado en buen estado, como si nadie hubiera entrado, como si nunca hubiera estado algo tan poderoso en ella. Zelda comenzó a inspeccionar las vidrieras y el fondo de la sala cuidadosamente con la esperanza de encontrar alguna pista, quizás alguien había conseguido que algo cediera de algún modo para abrirse camino.

Mientras inspeccionaba el fondo de la sala escuchó la orden de Link y asintió, si entró por la puerta alguien debe haberlo visto. Se detuvo un segundo aún con la mano apoyada en el muro, algo no terminaba de encajar ¿Cómo alguien podía haber robado la trifuerza y haberse llevado a su hija?, ¿Por qué la habitación estaba destrozada y sin embargo la cámara intacta?, ¿Y si no era un único enemigo?

Suspiró y miró al suelo agotada, demasiadas preguntas.

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19/11/2015, 07:46
Director

No pasaron más de 10 minutos antes de que se decretase una reunión de emergencia en el castillo. Todos los soldados involucrados en la defensa de la zona fueron llamados para poder hablar con la realiza sobre lo sucedido.

Uno a uno fueron dejando sus testimonios, todos eran descripciones de un día normal de patrulla. Nadie presenció nada raro, nadie se topó con alguien sospechoso... el comprobar que el enemigo era invisible hizo decaer la moral de las tropas debido a que no sabían a qué se estaban enfrentando exactamente.

Lo peor era es que tampoco sabían que la princesa había sido secuestrada.

En mitad de la reunión alguien llamó a la puerta, el sonido provocado era débil. En cuanto uno de los soldados abrió pudisteis reconocer a la figura que entraba en la estancia: se trataba de Impa, una mujer que ha cuidado de ustedes dos desde el inicio de los años oscuros.

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19/11/2015, 07:53
Impa

Su paso era lento, caían sobre sus espaldas muchas décadas sirviendo a Hyrule. Parecía que incluso en sus momentos de más debilidad ella seguiría ahí ayudando a los suyos.

- Ah... tiempos aciagos regresan a nuestro reino - dijo mientras seguía caminando. Uno de los soldados se ofreció a ser de apoyo para que la anciana mujer pudiese caminar de manera más fluida.

- La desaparición de la princesa y de la Trifuerza está conectado... pero muchas son las dudas que hay en nuestras mentes y en nuestros corazones - afirmó.

Cuando estuvo lo suficientemente cerca de Link y Zelda les cogió de las manos, el tacto áspero y arrugado de la edad era en ella hasta reconfortante.

- ¿Qué es lo que hay ahora mismo en esas mentes y esos corazones, hijos míos? -

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22/11/2015, 12:49
Link

Los peores presagios de Link se confirmaron cuando ningún centinela del castillo vio nada inusual durante su turno. La magia empleada por su enemigo había servido para acceder hasta la cámara y robar la Trifuerza sin aparentes esfuerzos. Deambuló de un lado para otro, sopesando cual debía ser su siguiente movimiento cuando unos suaves golpes a la puerta llamaron su atención. La encorvada y frágil figura de Impa irrumpió en la sala, su sabiduría era uno de los principales motivos por los que Link agradecía que permaneciera con ellos.

El tacto de su mano confortó al rey quien si por él fuese se mantendría así durante horas, mas la situación requería iniciativa y diligencia. Ante su pregunta, no dudó la respuesta.

- ¿Qué es lo que hay ahora mismo en esas mentes y esos corazones, hijos míos? 

-La sombra de un acaecimiento venidero, mi señora. Alguien ha alterado la armonía que imperaba en el reino, como ya sucediera en el pasado. Necesito respuestas… -murmuró mirando a la anciana con rabia contenida.

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23/11/2015, 11:58
Zelda

Durante los minutos de espera Zelda continuó analizando la sala en un intento inútil de que los muros y adoquines le dieran alguna respuesta, quizás en la habitación sí encontrara alguna pista ya que entre tanto desorden puede quedar algún rastro, decidió ir tras la reunión si no llegaban a nada en claro.

Los soldados fueron dando testimonio y por lo que ellos decían podría haber sido un día normal en el castillo, su enemigo debía ser realmente poderoso, Zelda permanecía erguida frente a los hombres pero no levantaba la mirada del suelo esperando alguna pista que diera luz al asunto.

Unos leves golpes interrumpieron la reunión lo que le hizo levantar la mirada y pudo ver como entraba Impa a paso lento en la cámara, sonrió con cariño y avanzó hacia ella para acortarle el camino hasta ellos, cuando le cogió la mano Zelda se agachó apoyando la rodilla en el suelo frente a Impa, como símbolo de respeto y para servirle de apoyo.

- Querida Impa, ya nos ayudaste en el pasado y volvemos a necesitar de vuestro consejo. No sabemos Quién hizo esto ni cómo actuar, haremos todo lo que este en nuestra mano pero necesitamos alguna pista.

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23/11/2015, 12:38
Impa

Impa asintió lentamente.

- Sin lugar a dudas estos hechos han dejado huella en todos nosotros... no solo sufrimos por la desaparición de la pequeña, sino que sin la protección de la Trifuerza todo Hyrule es vulnerable al regreso de los monstruos provenientes de la oscuridad - acarició con cariño vuestras manos.

- Por desgracia mi único poder son los consejos que puedo daros... pero tengo uno que en tiempos desesperados podrían resultar prácticos - se mesó el mentón mientras tosía.

- Existe una mujer... una adivina... ella también está rodeada por las artes oscuras pero dicen que solo el mal puede detectar al mal... Baba Yaga... - os miró directamente a los ojos.

- Ella puede tener alguna idea sobre lo que está sucediendo... sin embargo su hogar está en el Pantano Neblinoso... si en tiempos de paz ya era un lugar peligroso... ahora que no está la Trifuerza sería todo un desafío ir a buscarla - ambos conocíais dicho pantano. Es un lugar restringido para todos los habitantes ya que antaño fue refugio de monstruos.

- Sin embargo no hace falta más que ver vuestra mirada para comprobar que tenéis la determinación suficiente para ir allí ha hablar con ella... ¿me equivoco? -

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25/11/2015, 13:39
Link

Link escuchó atentamente las sabias palabras de Impa sin cambiar ni un ápice su imperturbable semblante. Baba Yaga, una pitonisa de no muy buena reputación por estar relacionada con la magia negra, debía ser su apoyo si querían averiguar lo que estaba aconteciendo en el reino. Para llegar hasta ella, antes debían atravesar el Pantano Neblinoso, un lugar que Link conocía bien de sus anteriores aventuras… Un lugar expuesto a una cantidad considerable de criaturas y monstruos. “No hay otra alternativa… El tiempo apremia.”

-No te equivocas, mi  señora. Estoy dispuesto a ir al fin del mundo y enfrentarme a todas las amenazas que depare este periplo por tal de traer de vuelta a casa a nuestra hija y la Trifuerza –comentó enfatizando especialmente sus últimas palabras. De reojo, observó a Zelda esperando que esta se pronunciara.

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25/11/2015, 13:49
Zelda

Zelda volvió a incorporarse sin soltar la mano de Impa, sus palabras eran ese rayo de luz que necesitaba y le daban fuerza, aunque tener que tratar con Baba Yaga no le parecía una buena idea no tenían otra alternativa de momento.
Escuchó a Link responder de inmediato y le lanzó una mirada de reproche.
- ¿Estás dispuesto? Estamos dispuestos, puedes hablar por ambos. Espero que no pretendieras dejarme esperando en el castillo, mi ayuda será útil.

Hizo una leve caricia en el rostro de Link con una sonrisa tranquilizadora y se adelantó unos pasos para dirigirse a los soldados, debían empezar a tomar el mando, en tiempos de oscuridad es cuando Hyrule más les necesita y los reyes deben mostrar seguridad.
- Esto es un comunicado para todos los soldados del reino, Hyrule está en peligro, hay que ampliar las guardias y aumentar la formación de soldados, todo aquel que quiera prestar ayuda en la defensa del reino será bien recibido. El castillo ya no tiene nada de valor que defender pero puede salvar vidas, aquellos que se hayan visto obligados a abandonar sus casas por el ataque de las criaturas serán protegidos en el interior de estos muros.

Miró de reojo a Link esperando una señal de aprobación, debería haberlo consultado antes con él.
- Nosotros debemos partir de inmediato, el castillo y su seguridad queda en vuestras manos.

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25/11/2015, 15:00
Soldado del Castillo

Los soldados escucharon atentamente manteniendo la formación casi sin pestañear. En cuanto la reina dio las instrucciones todos respondieron a la vez con un "¡Sí, su majestad!" y se replegaron para llevar a cabo todas las tareas.

Uno de los hombres acompañó a Impa hasta sus aposentos mientras que otro se acercó hasta ustedes.

- Majestades, la sala de armas está a vuestra entera disposición. Desde la última vez que fueron usadas hemos mantenido su estado impecable por si los tiempos oscuros regresaban - tras dicha información se despidió con el saludo militar y una reverencia. 

Siguiendo sus indicaciones no tardasteis demasiado en llegar a dicha cámara. Tras abrirla comprobasteis con total majestuosidad que las palabras del soldado eran ciertas, aquel lugar estaba conservado como si no hubiesen pasado los años.

La espada de Link estaba colocada justo donde la dejó años atrás, colocada sobre su piedra

Y en una de las paredes laterales el arco mágico de Zelda, un regalo de los mejores artesanos de Hyrule para la aquella entonces princesa.

El resto de espacio estaba adornado con herramientas más viejas u obsoletas: bombas, búmerangs, garfios... artefactos que hoy en día no eran útiles.

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28/11/2015, 18:13
Link

-Aunque intentara dejarte aquí vigilada, hallarías el modo de escabullirte –comentó con una tímida sonrisa-. Además, han pasado tantos años, que necesito como soporte a alguien de confianza. Y no hay nadie como vos en todo Hyrule, querida.

Link apremió a los guardias a que custodiaran mejor que nunca el reino durante sus ausencias, luego se despidió de Impa e inmediatamente después fue directo a la sala de armas. Todo estaba exactamente igual que en la última ocasión que estuvo dentro. Contempló absorto los utensilios y objetos que usó en el pasado con una punzada de nostalgia, pero cuando realmente se impresionó fue, por supuesto, tras detenerse delante de su preciada espada. Ojalá no tuviese que volver a utilizarla, mas la situación lo requería; se acercó lentamente hasta ella y agarró con fuerza su empuñadura para posteriormente sustraerla del pedestal de piedra, observando fascinado el acero mágico que la imbuía de poder. La recordaba más ligera, o quizá era que el paso de los años habían relajado en demasía al rey. Empuñándola con firmeza trazó dibujos en el aire cortando enemigos invisibles que en poco tiempo serían reales. “Te he extrañado..."

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29/11/2015, 10:43
Director

Los reyes de Hyrule recogieron sus armas, símbolos de las luchas del pasado y de la búsqueda de paz.

Era extraño volver a sentir dichas herramientas otra vez bajo su mando, pero era más extraño saber incluso que ahora el objetivo no era simplemente traer la paz, sino poder recuperar un pedazo del alma de cada uno.

Fue inevitable pensar de nuevo en la princesa Zelda... ¿Cómo estará?¿Estará a salvo?¿Estará herida?¿Estará pasando miedo?¿Cuánto tiempo disponen para salvarla?¿Lo lograrán?

La incertidumbre se arremolinaba en sus cabezas, pero no podían permitirse el lujo de dudar... había que salir ya; el objetivo estaba claro.

Notas de juego

Ahora debéis narrar vuestra salida del castillo. Será el último mensaje de esta escena (que ha hecho el papel de introducción)