Partida Rol por web

A medida que os ibais sumergiendo, notabais que lo que decia Ikki no era una exageracion: una enorme cara se encontraba en el fondo, observando los alrededores... o por lo menos, esa era la sensacion que producia

Segun os adentrais en las profundidades, la cara, que ya os parecia bastante grande desde arriba, aumentaba su tamaño... 5 metros... 10 metros... 20 metros...

Cuando os encontrais a la misma altura del enorme rostro de 100 metros de alto y 50 de ancho podeis apreciar que se trata de una enorme contruccion metalica y que sus "ojos" no eran sino ventanas para ver el exterior. En ese momento, la gigantesca boca se abre y succiona a los presentes, forzandoos a entrar en su interior

En el interior, algo confundidos por el brusco movimiento, no notais que alguien se os acerca. Sin embargo, lejos de querer atacaros, esa persona os da la bienvenida

-Maestros, bienvenidos al Noah, la nave de la Academia-dice la bella maid que se encontraba frente a vosotros

Voy descendiendo delicadamente con movimientos de piernas, moviéndome por el agua a toda velocidad siguiendo a los grandulones, con Solomon detrás. La cara submarina me hace alzar las cejas con un poco de sorpresa, como que si vamos a tener que pelear contra eso va a estar tan divertido como difícil. Pero no, resulta que no es otra cosa que la nave a la que se suponía que debíamos acudir.

-Bueno, esto es interesante.- Mientras voy caminando vuelvo a colocar las espadas en el arnés y mi ropa se seca al instante, ya volviendo a ser el vestidito de siempre.
Saludo a la maid con una sonrisa gentil. -Y el dueño parece que tiene buen gusto.

-Habrá que regresar a advertirles a los niños. Y a Arryken. Que también es niño.- Miro a los demás, ya saqué mi sombrilla y estoy totalmente seca, con el cabello sedoso como lo es siempre. -Por supuesto que no voy a mojarme de nuevo, ya es mucho para un día. Quién se ofrece a ir~?

Cuan grata fue mi sorpresa al saber que no se trataba de un guardián, sino de una nave. Realmente habría sido muy difícil acabar con una máquina así de grande, incluso para mi. Iba a ser difícil para los otros el poder entrar aquí, a lo que la pequeña gótica hizo mención. más no le di importancia.

Ahora estaba contemplando mi alrededor, casi olvidándoseme el saludar cordialmente.

- Buenas señorita. - Incliné la cabeza a modo de respeto, pregunté y seguí observando. - ¿Noah? ¿Academia? - Dije sin mirarla con mis ojos puestos en todas direcciones.

Por variar, la gente del grupo no ha hecho caso en absoluto... Había dicho que yo iría primero, que guardasen la distancia conmigo, pero cuando aquella gran cara abrió la boca y nos absorbió, claramente todos estaban demasiado cerca mía como para poder evitarlo a tiempo. De todas formas, parece que hemos caído en la nave que estábamos buscando... "Odio cuando la rectora hace esto... deberíamos estar informados de estas cosas" pienso mientras me pongo de pie tranquilamente y estrujo mis ropas, para quitarles la mayor cantidad de agua posible para, después, dirigirme a aquella maid que nos da la bienvenida

- Gracias por la bienvenida. Avisad a vuestro capitán para que envíe algún mensaje a la superficie y que baje el resto.- comento tranquilamente mientras le lanzo una carta a la maid, escrita de mi puño y letra por si algo raro sucediese, que Lihl supiese que las cosas están bien.- Si lo hacéis junto con esta carta, sabrán que las cosas están bien.- Hago una pequeña pausa.-  Por otro lado... Está bien lo de esperarnos aquí abajo, pero si nadie nos informa de ello... tenéis suerte de que fuésemos con precaución y no os tomásemos como enemigos a destruir directamente

De pronto me doy cuenta de que podría hacer algo para que Touda pudiera entrar en el agua.-Esto… creo que quizá… puedo hacer una cosa para que el agua ni siquiera te toque.- Podía crear una barrera de aire que cortara el agua, así, el desde dentro ni siquiera tocaría el agua.  Me agache y abrí la bolsa y saque dos hojas.  Empecé a escribir en una de ellas co cuidado y pulcritud.- No tengas miedo.- Tenia los papeles en una mano mientras la otra sujetaba a Touda, estaba en medio del la formulación del hechizo cuando un escalofrió recorrió mi espalda, y justo antes de acabar el hechizo estornude.

Quizá no fue el mejor momento. La barrera se creo, pero salimos volando hacia el mar. El momento de ingravidez fue interesante mientras ascendíamos, pero este perdió su belleza cuando empezamos a notar como bajábamos.  ¿Soportaría el impacto la barrera? Chocamos con el agua levantando una gran onda a nuestro alrededor y continuamos bajando con potencia, quizá acelerados por la potencia del viento que nos rodeaba.

Y nosotros en la orilla haciendo el capullo…

Desata la bolsa del cinturón y extrae de ella una pequeña toalla con la que comienza a secarse para, acto seguido, volver a vestirse.

¿Y bien? ¿A qué esperabais para avisarnos y ponernos en marcha?

Con la nave lista para partir a su próximo destino, todo parece indicar que le rencilla con el usuario de poderes psíquicos tendrá que esperar un poco. Al fin y al cabo, la urgencia con la que su misión debe ser resuelta es, por mucho, prioritaria a cualquier cabo suelto que pueda quedar en su camino.

Miré con suspicacia a la chica mientras revolvia y sacaba pergaminos.

---No estoy asustado- replico ante su comentario, pero guardé silencio a continuación, los hechizos debian de ser pronunciados con tranquilidad y sin interrupciones...o eso deberia, veo como se estremece y abro los ojos alarmado- Ni se te ocurra es...

No termino la frase...ya que es tarde...con un estornudo salimos volando por los aires hasta caer en el mar, al ver donde estaba me muevo con cierto aire de desesperación para ver mi "zona de acción" .

---¿!PERO TE HAS VUELTO LOCA?!- le grito sin poder contenerme aunque no sabia por que le gritaba en el fondo, sí por haber estornudado en mitad del conjuro o haberme lanzado en medio del mar sin avisarme siquiera-¡¡¡No vuelvas a hacer eso nunca!!!

Pe…perdón.-Digo mientras me limpio un poco la nariz descuidadamente y empiezo a mirar a mi alrededor.-Mi…mira, ha funcionado.- Digo sonriendo. El hechizo había funcionado, estábamos bajando hacia el fondo a bastante velocidad y me distraje mirando el fondo marino. Todo se veía como si observara  a través de un cristal opaco los peces esquivaban la trayectoria que habíamos tomado hacia… Me quede mirando el fondo donde una gran cara miraba hacia arriba, quizá por la opacidad del hechizo pero no veía a nuestros compañeros cerca

¿Esto… que hacemos?.- Pregunto mientras la esfera en la que nos encontramos va acercándose poco a poco al fondo y a esa cara.

A medida que os ibais sumergiendo, notabais que lo que decia Ikki no era una exageracion: una enorme cara se encontraba en el fondo, observando los alrededores... o por lo menos, esa era la sensacion que producia

Segun os adentrais en las profundidades, la cara, que ya os parecia bastante grande desde arriba, aumentaba su tamaño... 5 metros... 10 metros... 20 metros...

Cuando os encontrais a la misma altura del enorme rostro de 100 metros de alto y 50 de ancho podeis apreciar que se trata de una enorme contruccion metalica y que sus "ojos" no eran sino ventanas para ver el exterior. En ese momento, la gigantesca boca se abre y succiona a los presentes, forzandoos a entrar en su interior

Un sonido metalico se escucha sobre vuestras cabezas, al mirar arriba, una compuerta termina de abrirse y una nueva tanda de agua baña a los presentes, ademas de dejar pasar a las tres personas que faltaban despues, vuelve a cerrarse y el agua es filtrada

Entre la confusion, la maid vuelve a repetir el saludo

-Maestros*, bienvenidos al Noah, la nave de la Academia

-Creo que ya no esperamos a ningun invitado mas, asi que si tienen la amabilidad de seguirme...-la bella mujer se da la vuelta y empieza a caminar por el largo tunel metalico que se encontraba detras de ella

Después de un largo silencio, esperando la respuesta de la maid, parece que aquellos que faltaban por entrar al fin lo hacen. Da la impresión de que les había costado lo suyo el decidirse tirarse al agua detrás nuestra, algo normal, teniendo en cuenta que son simples estudiantes en su mayoría, pero lo de Arryken, como siempre, no tiene nombre.

- Os ha costado decidiros venir al agua eh?.- comento con una risotada mientras escurro la camisa después de que vuelva a caerme tal cantidad de agua encima y me voy acercando a la maid para recuperar la misiva que le había dado.- señorita, esto me lo quedo yo para otra ocasión, gracias.- me doy media vuelta, esperando tanto a que la maid se decida a caminar como observando a los recién llegados, su cara de asombro al sufrir que una cara se los haya tragado... eso debe ser impresionante, aunque parece que la mayoría ya ha conseguido mantener la calma y están observando a su alrededor.- Vamos chicos... ya que estamos en el lugar indicado para empezar la misión será mejor darnos prisa.- miro hacia arriba, imaginándome como está la superficie.- esto no lo olvidaré... volveré cuando terminemos.- termino susurrando, acompañando a la maid hasta donde espero que nos presente al capitán del navío

Cuando llegan los otros me pongo a secar las ropas de todos, con solo acercarles la mano uno por uno van quedando como si en ningún momento hubieran tenido que pasar por agua.

-Lihl, ahora que la situación está algo más calmada, qué era lo que querías decirme?- Quedo charlando con ella mientras seguimos a la maid por el túnel.

Me quedo sentada en el suelo encharcado con una mirada confuso a todo lo que me rodea. Antes de que pueda recuperarme veo como una chica vestía de criada nos saluda cordialmente hablando sobre algo de que es la nave de la academia.

No entiendo nada, ¿No estábamos persiguiendo a aquel hombre que parecía el jefe del que me había capturado? ¿Porque se supone que hay una nave en el fondo del mar?

Aun confusa me levanto con cuidado de no resbalarme, mis ropas están empapadas, había cancelado el hechizo ante el susto de ser tragada por el interior de la boca, quizá de  no haber caído con el trasero hubiera podido permanecer ligeramente sea, pero todo sea dicho, no me esperaba esos acontecimientos.

Termino de ponerme en pie cuando Ikki recupera algo parecido a una carta de la criada.-Pero… ¿Dónde estamos?-Pregunto confundida al escuchar hablar a mi compañero. “Empezar la misión. ¿A que se refiere?”

Me quedo quieta analizando la situación. ¿Quizá este era el barco que debíamos tomar? Pero… Entonces no íbamos a vengar a nuestros compañeros… y en ese caso Ikki nos había engañado guiándonos hasta allí.

De pronto noto como la profesora Al’Amune nos seca las ropas y empieza a hablarme mientras seguimos a aquella sirvienta. Al escuchar sus palabras me empiezo a poner nerviosa ya que el resto de los profesores estaba presente y no tenia claro como se lo tomaría mi maestro.- Esto… yo…-empiezo a tartamudear levemente.-Te vi usar esa magia y… era poderosa… llevo mucho mirando los mismos libros y me pregunte si podrías…- “Llevo estudiando y practicando los mismos conjuros y hechizos de mis libros años, Quiero aprender cosas nuevas y volverme útil…”  Mis pensamientos empiezan a atormentarme ante la presencia de tanta gente y mi incapacidad de hablar en publico.

Casi no había terminado de pedir explicaciones a la sirvienta cuando el estruendo metálico sobre sus cabezas anuncia una nueva tromba de agua y, a su vez, la llegada de los más rezagados. Edvard echa un rápido vistazo a sus ropas, secas de milagro al haber sido resguardadas en la bolsa durante el escaso tiempo de buceo, y seguidamente alza la vista hacia la ola que se aproxima con rapidez. Entendiendo que a estas alturas el impacto es inevitable, cierra boca y ojos, preparado para su destino.

Rápido e indoloro, la masa de agua termina bañando el suelo y desapareciendo por los conductos de filtrado. Con la marcada expresión de alguien que ha perdido una fracción de su fe en la humanidad, Edvard escupe repetidas veces para deshacerse del desagradable gusto a sal, mientras farfulla improperios entre dientes.

Al poco de empezar a escurrir sus ropas sobre los filtros, siente un toque tras el cual todo rastro de humedad desaparece. Al mirar a su alrededor, puede ver como Mune se está encargando de arreglar la “bienvenida” que han recibido. La versatilidad de la magia nunca dejará de sorprenderle.

Se agradece –exclama con su voz grave usual.

Cuando se dispone a seguir a la sirvienta a través del pasillo, nota las caras confusas de algunos de los recién llegados, por lo que les brinda una rápida aclaración.

Al parecer esta zona vacía no pertenece al refugio de nadie, sino a la nave que nos transportará por mar al próximo destino. Y el “largo viaje” de nuestro contacto bien podría ser su marcha en solitario hacia Gabriel… Quien esté al mando podrá aclararnos la situación, o eso espero. –se encoge de hombros.- En resumen, todos por aquí.

Ahora sí, sigue a la sirvienta por el pasillo.

Bajar con Lihl y Touda fue bastante mas facil de lo previsto, y el joven Sombra a su vez, durante el viaje, se lo agradecio a la aprendiz de Ikki. Sin embargo, nada lo preparo para lo que los esperaba abajo: Era una maravilla de ingenieria, y aun maravillado como estado no podia dejar de preguntarse de donde MM habia sacado algo asi.

-Tu me conoces, no me gusta meterme en una lata en medio del oceano sin tener idea donde estoy. Soy asi de raro respondio sarcasticamente a Ikki encogiendose de hombros, cuando este mando la chanza. Sin embargo, aun con ese tono pudo notarsele el alivio en la voz. Al fin algo se daba segun lo previsto por la Academia.

Estaba poniendose el abrigo sobre la ropa humeda cuando Mune se la seco con solo un toque. Le dedico una sonrisa y y le dio las gracias antes de seguir a la maid y Edvard, curioseando con la vista aquella maravillosa nave, el Noah...

Tras un rato caminando por el interminable tunel, la maid decide explicar algo sobre la nave, pues las caras de sorpresa no hacian mas que aumentar

-El Noah es un artefacto de nivel 5 creado por La Dama de Blanco*. Actualmente nos encontramos en el camino inferior, un largo pasillo que recorre todo el Noah de proa a popa, conectando todas las ubicaciones. 

Como si quisiera demostrar sus palabras, saca un extraño objeto de un bolsillo y lo activa, creando una proyeccion ilusioria de la nave con aspecto reducido

-El Noah mide 500 metros de largo, 50 de alto y unos 25 de ancho, pero en ciertos puntos se han instalado receptores para teletransporte, asi que es facil llegar de un lado a otro sin perder mucho tiempo

La mision principal-la mujer habla de forma muy monotona, parece que ha memorizado esa informacion al pie de la letra y la esta recitando-consistia en que el Amo Fate os esperara en cierta taberna de la ciudad y, tras reunirse con vosotros, traeros al Noah; sin embargo, ignoramos lo que sucedio en la superficie, pero el Amo Fate volvio practicamente inconsciente y aun no ha despertado, por lo que mantuvimos nuestras ultimas ordenes: esperar y permanecer ocultos

Tras eso, se detiene frente a la pared, delante de un extraño circulo.

-El teletransportador-informa-El destino actual seria el camarote del Amo Fate, esperamos que alguno de los presentes tenga la habilidad de sacarlo del coma en el que se encuentra. De lo contrario, tomaremos las medidas secundarias y uno de los maestros asumira el mando durante el viaje ¿alguna pregunta antes de teletransportarnos?

No me esperaba que esto fuese una nave, pero las distancias de la maid coindicen bastante bien con lo que había visto desde la superficie "Donde se encontrarían esos malditos que la estaban liando en el exterior?" La duda recorría mi mente, pero encontrándonos ya en la nave principal, es algo que debemos pasar por alto. Puede que Fate, si conseguimos despertarlo, sepa algo más al respecto, aunque tengo el presentimiento de que estará en blanco en cuanto a este tema.

- ¿Hay alguien en el navío además de Fate y tu? Dudo que algo tan grande y complejo esté siendo controlado por una única persona. Eso sin contar que hablas en plural, por supuesto...- pregunto tranquilamente mientras voy avanzando hacia el circulo de teletransporte- En cuanto si a alguien tiene que coger el mando de la misión... me presento voluntario, pero necesitaría más datos concretos sobre la misión y creo que Edvard es el que está al tanto de esto.- termino, esperando a que el resto se suba y que la maid me conteste

-Sin contar a mis hermanas, hay cerca de 20 personas, 16 alumnos y 4 profesores.-viendo la cara de sorpresa, se apresura a añadir-En el ultimo viaje, fuimos atacados por un Varuna y varios elementales de agua, por lo que los maestros se tuvieron que esforzarse y no todos sobreviveron. Por suerte, los maestros, pese a perder la mayoria la vida, cumplieron su mision de proteger a los alumnos y el Noah no resulto del todo dañado, aunque uno de sus motores ha dejado de funcionar, por lo que no se podra ir a maxima velocidad hasta que se repare, pero la unica persona que conoce el funcionamiento de dicho artefacto es la persona que creo el Noah, que logicamente no esta aqui y el Capitan, que actualmente se encuentra en coma

-Oh vamos, no seas así de tímida. Llevamos tiempo viajando juntos, a estas alturas ya deberías poder soltarte un poquito, no?- Tranquilizo risueña a la pequeña, que es más alta que yo. -Si quieres que te enseñe lo que sé, basta con que lo pidas. Pero debes pedírmelo, vamos anda.- Le pienso enseñar de todos modos, pero voy a tratar de hacerle perder algo de esa timidez.

Los pasos resuenan por el túnel mientras la maid explica cosas... sí, artefacto, aja, es enorme, teletransporte... Fate está aletargado... tal vez pueda ayudar con eso, sería prioritario tener disponible al capitán de la nave... y que el viaje será lento... bueno... -Ni Shio ni Edvard se harán cargo de la nave.- Me llevo una mano al pecho con un gesto delicado y airoso. -Porque voy a recobrar la consciencia del capitán. Dónde se encuentra?