Partida Rol por web

Siento como mi hechizo se desvanece a mí alrededor, veo como mechones celestes caen por delante de mis ojos y me quedo congelada. Noto como el pergamino usado para el hechizo se deshace en mi bolsillo.  Mi primer pensamiento es correr, pero por un momento siento como si ya hubiera vivido esta situación y un recuerdo acude a mí. Mi primer encuentro con Ikki, eche a correr cuando me hablo en primer lugar y acabe siguiéndole hasta fuera de una ciudad.

“Pero el tono de Ikki expresaba confianza, no como… *el*” Me doy cuenta que esta reclamándome saber quien soy cuando el siquiera se ha presentado. “Siempre se creen superiores, nunca dejaran de reprochártelo” Una vocecilla resuena en mi cabeza,  esta vez no consigo apartarla. “Deshace tu hechizo y te pone en evidencia ante el resto, ¿vas a permitirlo?”  No han pasado ni un segundo y mi mente ha pasado del miedo e intento de huir, a un estado de enfado. “¿Quien se cree para deshacer mi hechizo y preguntarme quien soy sin siquiera presentarse?”. Mis ojos relucen con cierta molestia, aunque no tengo muy claro si mi sentimiento es por haber sido descubierta o por el modo en el que ha ocurrido.

“No soy de por aquí, y no sé cómo será por estas tierras, pero de donde provengo no suele ser de buena educación deshacer los hechizos de otras personas”.-Mis pensamientos pasan con furia.  “Y mucho menos preguntar sobre su origen a alguien sin siquiera haberse presentado.” Me trago mis palabras con dificultad antes de decirlas.

Con aun algo de enfado desvio la mirada de aquel elfo "No le debo ninguna explicación" y miro avergonzada a Nova, que aun parece algo aturdida por mi cambio de aspecto, con cierta dificultad consigo formular algunas palabras.-Lo… siento… me tengo que ir.- Formulo la ultima parte de forma rápida, mientras me giro y me dirijo por donde habíamos entrado de forma apresurada.

“¿Vas a huir de nuevo? Siempre cobarde”. La voz sigue sonando en mi cabeza, pero esta vez la ignoro e intento seguir mi camino.

Escuchas a Nova gritar un "espera" mientras corres, tratando de salir de aquel lugar lo antes posible. Corres, corres y sigues corriendo hasta conseguir llegar a aquel bello jardin donde apareciste cuando llegaste, sin embargo... Baba no estaba.

Nerviosa, empiezas a observar todo a tu alrededor, buscando algo, cualquier cosa que te de una pista de su paradero, por mas minima que sea. 

Finalmente, en el banco donde se habia sentado el anciano al llegar, encuentras un pequeño papelito dentro de una fisura en la madera

Lihl, el "jefe" me ha convocado, asi que estare un poco ocupado. Tratare de volver pronto, no te preocupes, antes de que se ponga el sol estare contigo... espero

Mira hacia el horizonte... ya se esta poniendo el sol... 

Aun estoy fatigada por la carrera, pero cuando llego a donde me separe de Baba no hay nadie, nerviosa, empiezo a buscar cualquier indicio por el lugar y encuentro una pequeña nota arrugada entre los tablones del banco donde le vi por última vez.  

Me siento en el banco, subo los pies al asiento y descanso la barbilla en mis rodillas. El atardecer… el sol se oculta, los últimos rayos de luz iluminan la parte alta de la ciudad.

Agacho aun mas mi cabeza y me quedo mirando hacia abajo, oscuridad, mis pensamientos y yo nos quedamos a solas “Y de nuevo nos quedamos solas, como siempre ha sido” Una vocecilla empieza a hablar, no me molesto ni en escucharla “¿De verdad pensaste que podrías viajar atrás en el tiempo?”.

“¡Claro que puedo! ¡Hemos viajado a otro mundo!” Intento responderme a mi misma.

“Si, estamos en otro mundo, pero si no te has dado cuenta, te acaba de citar en un momento del día, en un tiempo en concreto… Si de verdad pudiera viajar en el tiempo ahora no estarías aquí esperando…” Intento ignorar mis pensamientos pero no tengo ningún argumento para rebatirlos.

“Estamos destinadas a estar solas, y lo sabes”. El tiempo empieza a pasar y la voz sigue molestándome. “Siempre que te juntas con alguien le acaban pasando cosas malas, lo mejor es estar solas. Eres débil, y a causa de ello provocas problemas a los que te rodean…”

Empiezo a caer en mis pensamientos “Estas sola, y en un mundo que no conoces. Siempre te avise que no te juntaras con la gente, pero tuviste que seguirle ¿eh?” Mis ojos empiezan a humedecerse y pasado poco tiempo pequeñas lágrimas empiezan a deslizarse lentamente por mis mejillas.

Levanto la cabeza para enjuagarme con la manga y me percato que hay luz a mi alrededor, unos extraños postes de madera, en los cuales no me había fijado anteriormente, tienen una especie de luz mágica en su extremo, iluminan la ciudad completa dando la sensación de ver un mar de estrellas. Hermoso, pero por alguna razón no me resulta de consuelo .

Vuelvo a bajar la cabeza  y sigo esperando con la pequeña esperanza de que Baba aparezca

“No aparecerá…” es el ultimo pensamiento que recorre mi mente antes de quedarme dormida.

El tiempo pasa mientras duermes pero, cuando abres los ojos, un escenario bastante extraño sucede. El sol continua en el mismo sitio que cuando te dormiste, pero los colores... todo a tu alrededor carece de color, esta todo en blanco y negro; pero eso no es el problema principal: ¡Esta todo como congelado! Los animales no se mueven, hojas no se mecen con el viento, es mas, el viento no se mueve, se pueden ver algunos petalos de flor suspendidos en el aire... Es como si el mismo tiempo estuviera detendio.

Sin embargo, la cosa no termina ahi. En este extraño mundo monocromatico, un destello irrumpe el cielo. Como si de un rayo se tratara, un imponente Dragon, brillante como la misma luz, desciende de entre las nueves en tu direccion, volando majestuosamente entre las nubes.

A medida que desciende, reduciendo la velocidad, por lo que decides que una gran idea seria salir de ahi. Sin embargo, al momento que tratas de moverte, notas que algo te paraliza, como si estuvieras tambien congelada, pero manteniendo la conciencia. 
El dragon continua su avance, lento pero inexorable, hasta sobrevolar la zona donde te encuentras. Mientras da vueltas en circulos sobre tu posicion, una sombra, negra como la oscuridad mas oscura, parece que salta de su lomo y cae frente a tu persona

Esta entidad, totalmente oscura, como si el elemento fuera su misma esencia, se levanta, mostrando la unica parte de su cuerpo que no es Oscuridad: sus ojos. Unos ojos extraños, como si tuvieran varios iris superpuestos, que parece que estan mirando mas alla del mundo terrenal, como si mirara... algo mas profundo... 

-Lihl...-la misteriosa entidad se acerca a ti a paso tranquilo. No "habla", pero sus palabras se transmiten igual-Hace tiempo que te he estado observando... Una humana que atrae mala suerte... eso no es algo muy comun, pero no por ello imposible...

A continuacion, sucede algo bastante extraño: como si un espejo se tratara, la realidad se fragmenta y rompe, cayendo fragmentos de "cielo" y "horizonte" de forma lenta a tu alrededor. Pero no acaba ahi la cosa, esos fragmentos, mientras caen, van reflejando sucesos de otro lugar, escenas de un pasado muy conocido por ti

Una aldea pequeña, pasto de llamas... Un mercado de esclavos... Un grupo de humanos viajando a una pequeña fortaleza... Un escritorio con varias ofudas... 

-Poco tiempo tras nacer, tu aldea fue atacada y casi todos sus habitantes asesinados o esclavizados... sin embargo, tu sobreviviste y lograste liberarte...

Mas fragmentos siguen cayendo, esta vez muestran escenas de una batalla perdida y una fortaleza destrozada

-Sin embargo, un posterior ataque erradico tu nueva familia, dejandote sola otra vez... pero por poco tiempo...

Imagenes mas recientes, de una chiquilla algo asustada siendo salvada por otro humano pelirrojo. Mas tarde, un castillo de hielo y una reunion con los habitantes, mas personas como ella

-Si, es un pasado bastante trágico, pero no el que mas: Tu has sobrevivido. Por desgracia, la suerte no es algo equilibrado, la mayor parte de las veces, si alguien tiene buena suerte, es porque otros han tenido mala. Tu crees estar actualmente en ese lado de la balanza.

El cielo vuelve a estar entero, gris, pero entero. El Dragon de Luz, por su parte, habia desaparecido mientras la entidad estuvo hablando, en su lugar, cierto anciano, ya muy conocido por ti, camina en tu direccion sonriendo, como diciendo que todo iba bien

-Sin embargo, yo pienso que estas en el lado opuesto. Estas viva, tienes buena salud, no vives en la cale, tienes amigos y, por encima de eso, has conocido a Bahamut-señala a Baba- Y, por si fuera poco, estas ante mi presencia, siendo la unica persona que ha logrado tales hazañas.

-Sin embargo, a cierto viejo testarudo pareces caerle especialmente bien, asi que me ha pedido que "mueva discretamente" la balanza para ayudarte en tus aventuras. Mis reglas dictan no interferir directamente con el mundo creado, solo preparar un escenario y sus actores, nada de actos de protagonismo, asi que no puedo hacerlo. No obstante...

Frente a ti, y separandote de esta entidad, se manifiesta una mesita con cuatro dados de 10 caras

Te voy a dar un escenario: "Desafiar a Dios". Elige un campo, cualquiera que quieras, ya sea habilidad de ataque, algun saber extraño o lanzar un simple conjuro, lo que mejor se te da o donde creas que tendras mas suerte, y luego tira el dado. Yo respondere despues. Si tu puntuacion supera la mia, te habras ganado un favor, de lo contrario... ya veremos que se puede hacer si eso sucede

Baba, o mejor dicho, Bahamut te guiña un ojo mientras sonrie, parece que te anima a hacerlo.

Al  abrir los ojos me encuentro confusa y desorientada. “¿Porque se ha parado todo?” Antes de que pueda empezar a formular ninguna pregunta más veo un dragón entre la nubes bajando, nunca había visto uno, y me quedo observando sus movimientos con emoción.

El dragón cada vez se acerca más y se dirige hacia mi. Intento correr, pero simplemente mi cuerpo no me hace caso, no puedo moverme, tengo el cuerpo completamente paralizado.

Una sombra cae delante de mi y empieza a hablar, o a comunicarse mejor dicho. Todo me parece un sueño, pero se torna pesadilla cuando imágenes de mi pasado empiezan a aparecer, uno tras otro caen mostrándome sucesos y quedan hechos añicos contra el suelo.

En ese momento veo como Baba viene caminando hacia a mi con una sonrisa en la cara  sigo escuchando las palabras de aquella sombra, no tenia muy claro que estaba ocurriendo, pero cuando termina de hablar una mesita con unos dados esta colocada entre los dos.

““Desafiar a Dios” En un campo… Y tenía que superarle…” Como si un sueño se tratara intente no hacerme demasiadas preguntas de porque estaba ocurriendo esto y empecé a pensar en que habilidad debería de gastar mi tirada. “Si puedo estar orgullosa en algo es en identificar los objetos que sean mágicos, pero claro, no es algo poco común, un dios fácilmente tendrá mas capacidad” Mi mente maquinaba intentando saber que debería escoger “Puedo recordar libros fácilmente al leerlos… pero Dios seguramente recuerde mas que yo.” Empiezo a pensar en cosas que se me dan bien cuando una idea pasa por mi cabeza “Ciencia, no he estudiado mucho pero los libros que leía decían que la ciencia se llevaba mal con los dioses”

Me he decidido por elegir la ciencia como campo cuando veo los dados en la mesa. No tengo muy claro para que sirven, debo lanzar uno y sacar mas puntuación que aquella sombra? “Pero entonces… todo depende de la suerte”

Esa última palabra resuena en mi cabeza Suerte . Al fin y al cabo era de lo que la sombra hablaba, según ella, yo tenía suerte, pensamiento que no compartía.

Mi cabeza empezó a reír. “¿Por qué no eliges la suerte como capacidad? Resolverías dos cosas, el juego que te ha propuesto y saber quién tiene razón, si ganas el demostrara que tenia razón, pero ya te abras ganado su favor… Si por el contrario pierdes entonces tendrás razón y … bueno…”

-¿Se considera la suerte como una habilidad?- Mis palabras flotaron por el aire, esperando la respuesta de la entidad.

La entidad no dice nada, se limita a esperar tu decision.

Baba, desde una distancia prudencia, como si no se atreviera a dejarse ver para no interrumpir de ninguna manera, hace un gesto de agarrar dos dados, agitarlos y lanzarlos sobre la mesa, animandote en silencio a hacerlo

Tímidamente me acerco a la mesita con los dados y recojo dos de ellos, uno de ellos negro con números de color blanco del 0 al 90 de diez en diez y otro rojo numeración del 0 al 9

No tengo muy claro que representan… - Que sea a la suerte entonces.- No aplico ninguna fuerza, simplemente los dejo caer, veo como caen hacia el tablero en un instante que se hace eterno, finalmente el dado negro choca contra el tablero y pronto se le añade el tintineo de su compañero. No tengo muy claro en qué consiste aquella prueba, pero aun con esas estoy nerviosa.  Supongo que gana el que más puntuación saque.

Los dados empiezan a girar y cierro los ojos temerosa del resultado, el sonido para, abro poco a poco los ojos y… sonrío tristemente… lo que me esperaba, un numero bajo, fácil de superar, un 17.

Suelto un soplido de resignacion, me aparto de la mesita y espero a que la entidad actue.

Tu adversario, sin decir palabra, agarra el dado rojo y el blanco que quedaban y, tras marcar el rojo como decenas, los lanza. 

Los dados caen girando, parecen trompos. Tras unos segundos que parecen el dado rojo pierde potencia y...

-Un ocho...-murmura, impasible, mientras el otro dado sigue girando.

Un ocho en decenas significa un ochenta, lo que frente a tu simple 7 es una victoria segura, no hace falta ni siquiera esperar a ver el resultado del otro dado. Sin embargo, parece que la suerte si que esta de tu lado...

¡El dado de las unidades ha golpeado al de las decenas, cambiando su resultado!

-Asi que el resultado es de 2 1 contra 7, parece que, tal y como dije antes, eres muy afortunada.

Baba, que ya no parece poder contenerse mas, se te acerca corriendo y te da un abrazo y un beso

-Sabia que lo conseguirias, estaba seguro. Cuando te vi llorando en aquel callejon ya senti algo en ti, como si un poder latente estuviera llamandome. Este sujeto, cuando me llamo a echarme las cuarenta por interferir, cuando le conte lo que vi, ya ves que rapido se apresuró a venir a conocerte en persona ¡Y eso que tiene un sin fin de personas que cuidar y atender!

-Bahamut, no hace falta que hables de mas-le dice en tono monotono. El anciano, obedece, pero te revuelve el pelo una vez mas, felicitandote-

-Ahora, hablemos de ese... "favor"... -el hombre (si es que tiene genero) pasa su mano alrededor de la zona donde deberia estar su cuello y una extraño collar se manifiesta. Entonces, agarra una de las piezas que lo componen y te la entrega

-No voy a cambiar el pasado para ti (es una lata, sobretodo luego actualizar a las almas que se resucitan) pero te voy a permitir a ti cambiar tu futuro.-notas un poder bastante fuerte proveniendo de la extraña joya-Y ya que Bahamut parece haberte cogido bastante cariño, que te explique él lo que hace. Y ahora...-agita su ... ¿capa? Como todo su ser parece ser una misma cosa, es dificil de definir cada parte.-creo que tenias una reunion con tus amigos, no deberias llegar tarde-detras de ti, una especie de agujero negro se abre, succionando tanto a tu persona, como al anciano que estaba a tu lado

Cuando abres los ojos, te encuentras de nuevo ante un paisaje bastante familiar: el pueblo de Terhel. Aunque no es de noche, de hecho, tienes la sensacion de que es "ayer"

“¡Sí! Estoy de vuelta” El sol está en lo alto y ilumina mi alrededor, estoy en el puerto, las olas chocan contras la parte inferior de los muelles y el olor a sal se respira en el aire. Estoy bastante confusa, no sé que acaba de pasar. “¿Acabo de ganar en un juego de suerte?  Quizá ambos tuviéramos razón, quizá yo tengo suerte, pero quizá sí que llevo la mala suerte a los que me rodean.” Me quedo pensando un momento y miro el objeto que me ha dado, parece una especie de gema con forma de lágrima y un pequeño agujero “¿Para qué será?” En ese momento me doy cuenta de que Baba vino conmigo. Me giro hacia el otro lado y le encuentro mirándome aun sonriendo.

Sin previo aviso me lanzo hacia él y le abrazo. “Creo que a veces pienso demasiado las coas, sabía que volvería” Unas pequeñas lagrimas brotan de mis ojos, pero esta vez por una razón que no ocurría hacia mucho, felicidad.

Un momento después me doy cuenta de que quizá me he propasado y me alejo un par de pasos de él con una tímida sonrisa en la cara y un gesto de disculpa.

-Tranquila pequeña, no pasa nada-te dice el anciano mientras te revuelve el pelo.-Y ahora, veamos lo que tenemos aqui~~-te pide la gema y la obserba-Vaya, si que le has caido bien... ¿Has oido hablar de los Chaos Meister?-ante tu rostro de desconcierto, prosigue con una explicacion- Mmm, lo dudo, hay menos de una docena sobre el mundo en esta epoca... Los Chaos Meister, o tambien llamados Los Maestros del Caos, son artistas marciales, por llamarlos de alguna manera, cuyo poder ha trascendido las reglas de la existencia, pudiendo alterar la propia realidad durante sus combates. Este peculiar artefacto posee la singularidad de poder emular de manera mas limitada esas habilidades-mientras habla, el anciano saca un pequeño cordel y lo pasa por el agujero de la joya, convirtiendolo en un collar bastante bonito-Si mi interpretacion es correcta, con esto podrias corregir uno o dos hechos que consideres mal al dia, "cambiando tu futuro", como dijo Él antes-con delicadeza, te pone el collar al cuello

-¿Sabes? Realmente creo que eres muy afortunada, ademas de conocernos a mi y a Él, que se podria decir que somos "unicos", tambien has podido conocer a un Chaos Meister, que son los siguientes en la lista de seres extraños. Tal vez podrias pedirle que te enseñe a usar el 100% del poder, si te gusta. Creo que actualmente utiliza el nombre de Miracle Maker, la Hacedora de Milagros, o, acortado, MM

Tras ponerte el collar, da unos pasos atras para ver como te queda. Tras una breve observacion, asiente con la cabeza, como si fuera un critico de arte contemplando un cuadro.

-Ahora, mucho me temo que tendremos que separarnos. Desgraciadamente, he incumplido las reglas de no alterar la Historia, asi que toca ahora un castigo por mis actos-apoya la mano sobre tu cabeza-Aunque, si te soy sincero, lo volveria a hacer, no todos los dias se puede encontrar una chiquilla tan especial como tú

El anciano, con una sonrisa, se da la vuelta, dispuesto a irse

-Si te enteras de ese detalle, me buscare un problema, asi que simplemente hablare conmigo mismo.-te dice de espaldas, fingiendo hablar solo-"Double hit"... Una tecnica extraña que solo se puede usar con dados de 8 y 10 caras... Al estar los numeros separados en las dos piramides que lo forman, al tirarlos como una peonza, te aseguras de que las probabilidades sean 1 de 5 de sacar el numero deseado. Ademas, al haber dos dados, tiras el de las decenas con menos impulso, haces que se detenga antes y, si no es el numero correcto, el dado de las unidades colisionara contra él, cambiando su resultado. Esto es posible gracias a la orbita que describe el dado al girar, pues es facilmente controlable moviendo discretamente la mesa, consiguiendo que choque o no las veces que sea necesario-con una sonrisa, se da la vuelta para verte una ultima vez-Te hicieron trampa en el juego.

Dicho eso, el hombre desaparece, dejandote sola en las calles de la ciudad. Unas ultimas palabras todavia se pueden escuchar cuando el cuerpo ya no esta

-Realmente... le has caido bien...

En el momento que Baba desaparecía alargo la mano hacia el, pero cuando termino el movimiento ya no está. –Adiós… - Murmuro para mi misma, sabia que acabaría separándome de él pero no por ello iba a ser más fácil.

Me llevo la mano al cuello y acaricio la gema que cuelga de manera inconsciente, miro a mi alrededor. Los muelles, me había citado aquí a Ikki por la noche, pero… Miro el sol y veo como esta amaneciendo. “Aun tengo tiempo para… ¿Qué? Podría buscar a mis compañeros pero... por donde?”

Camino lentamente los muelles del puerto, los tablones de madera húmeda resuenan a cada paso que avanzo, finalmente me siento en el borde con los pies al aire y me quedo contemplando el horizonte del mar.

“Según lo que pude escuchar se supone que iremos en barco hasta nuestro destino… un barco rápido modificado… tendría que poder identificarse por los astilleros… No espera, seguramente no esté a la vista, no creo que nuestra tarea sea algo habitual como para tener el barco en el puerto… ¿o sí?”

Me encojo de hombros ante mis propios pensamientos “Bueno, por algo se puede empezar” Me levanto de la húmeda madera con intención de ver los barcos anclados en las proximidades.

Mientras camino tranquilamente abro mi cartera para buscar uno de los dulces que había comprado con Nova el día anterior, ¿o fue hoy? Suspiro tristemente, “Nova… Me habría gustado despedirme de ella mejor.”  Saco una pequeña bolsita con esferas de color verde, saco una con cuidado y la introduzco en mi boca. El sabor me hace recordar los momento divertidos por el mercado de Elvengard, suspiro de nuevo y introduzco la bolsita en mi cartera, cuando la estoy sacando mi mano roza  con algo y extrañada lo saco. Una moneda… una moneda del otro mundo… “Pensaba dárselas a Nova antes de venir, ni siquiera me dio tiempo a agradecerlo por el pastel…”

Finalmente acabo de andar el muelle, pero no he visto ningún barco que llame mi atención.  Pero esa moneda me ha dado una ligera idea de que puedo hacer mientras espero a que pase el tiempo.

Me introduzco en la ciudad en busca de un orfebre o algo parecido. Mientras saco unas cuantas monedas más de mi cartera. “Si pudiera colgarlas de alguna manera en el bastón… así no olvidaría a Nova…Además, no creo que sea caro…”

Antes que me dé cuenta camino por las mismas calles por las que antes me sentía insegura con naturalidad.

Tras dar una larga vuelta buscando una forja, encuentras a un hombre que acepta a poner la decoracion en tu baston. Al poco de darselo y pagar el importe, em hombre se da la vuelta y se pone a trabajar... aunque no llegas a verle dar el primer martillazo al metal.

De la nada, un chico aparece y, tras agarrarte la mano, te fuerza a correr con él. Tras dar varias vueltas, te arrastra a un callejon oscuro, donde te lanza contra la pared mientras él se queda un momento mirando en la esquina, como si vigilara que no le siguieran.
Cuando se da la vuelta, ves que lleva una especie de mascara, ocultando su rostro, ademas de una capa negra para pasar desapercibido.

-Tu... eres humana, ¿verdad?-es lo primero que te dice, aunque apenas te mira, esta mas preocupado por lo que hay a su alrededor-Este sitio es peligroso, deberias irte antes de que te descubran

Después de muchas vueltas consigo encontrar un sitio donde poder añadir la decoración que quería al bastón. Le doy el bastón, las monedas del otro mundo, y un buen puñado de platas. “Al final no es tan barato como pensé”

Suelto un suspiro, según me ha informado no va a tardar mucho en hacer el arreglo que le he pedido. Antes de empezar a pensar que puedo hacer noto un tirón de brazo y me veo arrastrada por las calles. “Pero… mi baston…” Estoy tan aturdida por el suceso que cuando me quiero dar cuenta estoy en un callejón y un chico que parece humano me está hablando.  En ese momento recuerdo que ya no estoy en Elvengard y esto es gaia, la misma que me había dado tantos problemas, había bajado la guardia, cosa que no había ocurrido en años.

 Estoy completamente en tensión, pero al notar el tono de nerviosismo del chico y ver que no quiere hacerme nada me relajo un poco, lo suficiente para asentir ante su única y apresurada pregunta. Después de ello empieza a advertirme de que es un sitio peligroso. “No se en que estaba pensando, claro que es peligroso. Un fallo como este en otra situación…”  Aun así creo que el chico no se refiere a eso, está nervioso, “Casi tanto como yo… ayer… no espera…. ¿Como yo dentro de unas horas?” No tengo muy claro como pensar en ese lapsus de tiempo. “¿Si de verdad había vuelto al pasado ahora estaba en dos sitios?” Sacudo la cabeza intentando despejar mis pensamientos. No era en eso en lo que debería estar pensando, me encontraba en un callejón oscuro con un chico desconocido y por lo que parece, intenta alertarme de algo.

-¿O… Ocurre algo?- Mi voz suena trémula y las palabras resuenan por el callejón vacio. Que lleve el rostro tapado no me da mucha confianza pero... era parecido a lo que yo hacia con los hechizos ¿no?

-¿Ocurrir algo?-repite tu pregunta, sorprendido, como si le preguntaras una obviedad del tipo "1+1"-¿Cuando no ocurre algo? Secuestros, asesinatos, esclavismo, tortura... y en la mayoria de los casos es por simple "diversion"-se apoya contra la pared, claramente cansado-Apenas quedo yo de mi grupo...  y solo porque los demas se sacrificaron para protegerme...

Tras un breve silencio, te mira fijamente.

-No se si te has dado cuenta del detalle, pero eres muy linda-tras decir esas palabras, parece que se ha avergonzado un poco y desvia la mirada-Llevas un rato dando vueltas por la ciudad y atraes muchas miradas, deberias prestar algo de cuidado...-por el tono de voz, es un chico joven, tal vez un año o dos menos que tu

Yo…- intento iniciar la frase cuando sus últimas palabras resuenan en mi mente “…y solo porque los demas se sacrificaron para protegerme...” Me quedo congelada al oírlas, no es una frase desconocida para mi, se lo que se siente al tener ese pensamiento. “Esta solo, igual que yo hace dos años” Estoy empezando a empatizar con el y empiezo a pensar las palabras que diría Ikki si estuviera en mi lugar, cuando el empieza a hablar de nuevo.

Me empiezo a poner roja como un tomate. “¿Linda? Pero…” Aun estoy intentando reaccionar cuando empieza a explicarse. “Ah llamar la atención, ¡El pelo, claro! ¿Pero como no me había dado cuenta antes?”. Lo normal en esta situación es que hubiera lanzado un hechizo para ocultar mis rasgos antes de hacer nada. “¿Pero como estoy tan embobada?”

Ti...tienes razón…- Aun sonrojada emito las palabras tímidamente. “Seras tonta… si esta solo deberías intentar ayudarle” Quiero invitarle a la academia de la misma manera que Ikki hizo conmigo pero de mis labios solo salen unas breves palabras.- ¿E...estas solo?

El chico te mira de nuevo, es pregunta le ha hecho reaccionar, aunque si eso es bueno o no es algo que no se puede saber.

-¿Solo? Mis compañeros y yo somos como una familia, nunca nos abandonamos, estan todos aqui-apoya su puño en su pecho, sobre su corazon.-Nunca estoy solo

Tras decir esas palabras, vuelve a mirar por la esquina, lo que hace que te pongas mas nerviosa.

-En este pueblo hay... "cosas"... cosas malas, deberias irte de aqui cuanto ant-te vuelve a mirar, aunque esta vez no es "a ti"-Eres de nivel 4... no lo aparentas... e incluso pareces mas fuerte que yo... mmm... tal vez podrias ayudarme, uno de mis amigos fue secuestrado, pretendo ir a salvarlo antes de que sea demasiado tarde ¿podria contar con tu ayuda?

Tras decir eso, te vuelve la imagen de ayer, o mejor dicho, de mañana, cuando aquellos soldados estaban recogiendo aquel cadaver de un niño. Ahora, un pensamiento cruza tu mente ¿el rostro de este chico que tienes delante no es el mismo que el del cuerpo? Con la mascara puesta es dificil de decir, pero los rasgos que recuerdas de aquella vision son preocupantemente similares

Sonrío  ante  su  respuesta.  “Mismos  pensamientos  diferentes  formas  de  expresarnos”. A  mas hablaba  mas  me recordaba  a  mi  misma.

El  chico  empezaba a  hablar  de  nuevo,  pero  esta vez  sus palabras  me  resultaban  mas oscuras y sombrías.  “Un  amigo  secuestrado?¿Ir  a  salvarlo?”  Intento  encajar  las palabras de  toda la conversación  pero  hay  algo  que  no  me  convence.  “¿Si tiene  tanta  prisa por  salvarlo  porque acaba  de  decir  que  yo  llevaba un  rato  llamando  la  atención?  Eso  es  que  llevaba  un tiempo siguiéndome.”  Mis  pensamientos  me  hacen  desconfiar  del  chico,  todo  parecía  demasiada coincidencia.

Sacudo  una vez  mas la cabeza.  Con  Baba  también  había  desconfiado  de  si  volveria,  y  ahora me arrepiento  de  no  haber  confiado  en  el. Si  habían  secuestrado  a su  amigo  debía  ayudarle. Fuera mentira  o no.

Levante  la  cabeza  para mirarle  a los ojos a  través  de  la mascara.-No  soy  muy  fuerte.-  Me revuelvo  incomoda  mientras  le  miro.-  Pero  si  de  verdad  necesitas ayuda  para  salvar  a  tu amigo  puedo  echarte  una  mano.  

Justo  cuando  me  empiezo  a  perder  en  mis  pensamientos  recuerdo  la  imagen  del  día  anterior. El  cuerpo  de  un  muchacho  rodeado  de  soldados. Esto  hace  que  me  revuelva  nerviosa,  tanto  la altura  como  el pelo  del  cadáver  coincidían  con  el  chico  que  tenia  delante… Suspiro.  No  se si  podremos  salvar  a  su  amigo  pero  si  aquel  muchacho  iba  a  morir…  No,  había viajado  al  pasado,  podía  cambiar  los sucesos…¿No?  No  dejare que  muera.

-Lo  primero  es lo  primero,  cuéntame  que  ocurre,  quien  le  secuestro, como  ocurrió,  pistas  de donde  puede  estar,  o  directamente  su  localización  si la  sabes.-  Hablo  con  calma  intentando saber  donde  me estoy  metiendo.  No  soy  muy  fuerte,  si  de  verdad  quiero  ayudarle tendremos que  hacer  un  buen  plan.

Me callo  al  haber  empezado  a  hablar  tan  rápido.-  Perdón,    antes  de  eso...-  Le tiendo  mi  mano a  modo  de  saludo  y  empiezo  mi  presentación.-  Me llamo  Lihl,  ¿tu eres…? 

El chico se te queda mirando, como sorprendido por el hecho de que aceptaste ayudarlo. Luego, cuando le tiendes la mano, todavia medio embobado, se queda mirandola unos segundos hasta que vuelve en si

-Yuto, mi amigos me llaman asi-dice mientras te estrecha la mano-o eso era cuando estaban conmigo...

Despues, vuelve a tirar de ti y te acerca a la esquina, desde donde señala un edificio, una posada, llamada Rosa Rosa

-Rosa Rosa... un nombre muy propio para un lugar de esa categoria...-esta hablando entre susurros sin mirar a nadie, lo que te hace dudar si habla contigo o solo-Mis amigos y yo, tras escapar de un... traficante-notas que en sus palabras hay una mezcla de miedo y odio- fuimos a parar a este pueblo. Buscamos refugio, pero desconfiabamos de todos. La "dueña" de este local parecia humana, asi que bajamos la guardia. Cuando cayo la noche y desperabamos, estabamos en una celda bajo tierra y dos de los mios ya habia muerto. 

Eramos un grupo bastante grande, pero muy jovenes todos, nuestros niveles eran ente 3 y 4 todos y nos confiamos, pues la ancina parecia inofensiva. Gran error. El sotano o mazmorra donde nos encerro era un nido de trampas y otras cosas que no pudimos identificar, pero que, lentamente, fue acabando con todos mi compañeros. Cuando solo quedamos dos, él me dijo que corriera mientras los retenia, casi declarando que se iba a sacrificar... y le obedeci...

Hace una pausa mientras se levanta las gafas de la mascara para secarse las lagrimas. En ese momento puedes verle los ojos, unos ojos cargados con un gran resentimiento, pero tambien con una gran fuerza de voluntad.

-Pero él es fuerte. El mas fuerte de nosotros, ¡era un nivel 6! Estoy seguro de que no morira facilmente, no es algo propio de él-te mira de nuevo-Por eso quiero ir a rescatarlo. Iba a ir tan pronto como estuviera recuperado, pero cuando te vi caminar por el pueblo, tan vulnerable, no tuve mas remedio que ir a avisarte de lo que pasa. _{No quiero que otros vivan lo que yo...}