Partida Rol por web

Me quede escuchando toda la información que daba la elfa respecto a la misión. Era... sencilla, bueno, o al menos para cualquiera que pudiera teleportar de un sitio a otro al cliente. Aunque claro, si eran varios objetivos podía dejarme catatónica en el suelo por el esfuerzo. Aparto de la cabeza esa idea.

Escucho como Yuhona empieza a hablar impaciente por partir a hacer la misión. Supongo que eso era bueno, peor yo acababa de llegar de una que había durado mucho, no quería partir en ese mismo momento.- Yo creo que preferiría pasar un día aquí antes de partir.- Como mínimo poder disfrutar de una cama de verdad durante una noche.

Era mejor olvidarme de hacer ese hechizo, después de todo aquello era una misión para que pudiéramos conocer mejor a nuestros nuevos compañeros, Yuhona y Sora. En ese momento me acordar de algo.- Esto... Ikki... Xamd seguia siendo aprendiz tuyo ... ¿no?.- No añadí nada mas a la pregunta, creo  que se entendía a lo que me refería. ¿Porque no estaba con nosotros?

- Una misión de esta categoría en el gremio? Esto no es muy normal que digamos. Pero dejémoslo por ahora, ya me encargaré de hablar con la directora... No me gusta que tengan secretos conmigo.- Le sonrío a la elfa, aunque algo disgustado al respecto.- Y qué cliente no nos oculta siempre algo? me río.- No es algo que nos preocupe demasiado. Por favor, informe al señor Claudio que mañana al mediodía nos reuniremos con él en su vivienda para proceder a la misión y acompañarlo en el viaje.- Termino la conversación con ella, sonriente, mientras le entrego los papeles necesarios para que se lleve a cabo la petición

Acto seguido y quitándome directamente de la cola una vez la elfa me confirma que está todo listo, me giro hacia mis tres alumnos, los cuales parecen estar un poco confundidos al respecto. - Bueno. La misión está aceptada, pero no la empezaremos ahora mismo, sino que lo haremos mañana.- Les sonrío con amabilidad.- Hoy os doy lo que resta de día libre para hacer lo que queráis. Mañana a primera hora nos reuniremos en mi casa del campo para trazar un plan, aunque ya tengo algo en la cabeza, y nos reuniremos con el barón para empezar el viaje. Así pues... dispersaos, haced lo que tengáis que hacer, descansad apaciblemente y mañana empezamos. No esperéis una misión fácil... nunca suelen serlas y claramente nos está ocultando algo, por lo que Lihl... voy a tener que hablar contigo para ciertos temas que tenemos que preparar. Yo voy a reunirme con MM... no quiero que vengáis conmigo, ya que tanto la información que le voy a pedir como la que estoy planteando darle no es de todos los públicos. Nos vemos mañana.- Termino despidiéndome con tranquilidad, pero no tardo mucho hasta darme media vuelta.- Ah, y hablando de Xamd... os recuerdo que le dije que nos reuniríamos a primera hora en mi despacho. Aunque he de buscarlo cuando termine de hablar con la rectora. Esto podrá venirle bien para acostumbrarse a trabajar en equipo

A continuación me dirijo directamente al despacho de MM, petando a la puerta y entrando cuando tenga su permiso.- Hay varias cosas que necesito hablar contigo.- Le sonrío.- Cuando fue la última vez que nos encontramos a solas?

La carne que sirvió mi nuevo mejor amigo parecía estar deliciosa, y de hecho lo estaba. Me metí en la boca varios trozos a la vez, tan grandes que cualquiera sería capaz de ahogarse si lo intentase, pero, de alguna forma, tenía un "don" para ingerir grandes cantidades de comida. 

Mis mofletes ahora se veían como los de una ardilla que había llenado su boca con nueces y pipas.

Cuando Yusuke comentó el nombre de Ikki me costó un par de segundos darme cuenta de quien me estaba hablando, luego, me quedé estático y mi color de cara empezó a tomar un color blanquecino. - El maestro! Tengo que volver con el! Es verdad, que yo estaba perdido! Señor Yusuke, necesito volver al edificio grande ese en el que aparcamos el barco, todos tienen que estar buscándome. - dije preocupado - Si lo que ha dicho sobre el maestro Ikki es cierto y puede partir montañas me va a matar si no vuelvo pronto. No quiero recibir coscorrones- mi tono de habla había cambiado a uno más formal, me pasaba cuando estaba nervioso.

Asentí a la propuesta de Ikki, al menos tendría un día para mi misma. Aunque prácticamente seria lo que me llevaría preparar las cosas para el viaje.- Creo que ire a comprar al distrito comercial algunas cosas que puedan sernos útiles y luego iré a descansar.- Dije a mis compañeros.- Iré a ver como llevan la construcción de la casa mis pequeños y si no esta lista, podría dormir en la tuya Ikki?.- Pregunte insegura. Hacia poco había dicho que estaba abierta si queríamos ir, pero era mejor pedir permiso.

Después de su respuesta y si nadie quería acompañarme a comprar me despedí con un leve movimiento de brazo y partí.

Comida para el viaje, una cantidad suficiente para los ofudas que tendría que hacer, viales para mezclas y... ¿Era mercurio? Saque de mi bolsa un libro el cual empecé a pasar hojas rápidamente. Si. mercurio mezclado con ceniza. Cerré el libro y lo volví a guardar.

–Aw... yo ya quería partir... –La ilusión desaparece de mi rostro, pero no por eso dejo de sonreír, puesto que la idea de tomarnos un día para prepararnos me parece muy apropiada. –De todas formas, tienen razón, sería mejor también... em... –A decir verdad... no tengo nada qué preparar, o al menos nada que se me ocurra en este momento. Siempre traigo todo conmigo todo el tiempo, así que... bueno.

–Vas a ir al centro comercial? Puedo acompañarte? –Voy hasta donde está Lihl y le pregunto con alegría, sería una buena chance para conocer aquél sitio. –Necesitarás ayuda si vas a comprar muchas cosas.
–Vamos, Sora, tú también quieres venir?

Escuché la información de Ikki y asentí, sin saber qué podía hacer hasta que partiésemos a la misión. Al parecer las chicas iban a ir de compras, y Yunoha me invitó a ir con ambas. Yo sólo con ambas chicas de compras... La imagen cambió de pronto en mi mente hasta recordarme a mis amigos del pasado, haciéndome dar un paso atrás.

- No. Yo... -la pausa fue algo más larga de lo esperable y cerré los ojos un instante, abriéndolos de nuevo para mirarlas directamente (o lo más directamente que podía, mejor dicho)- Tengo cosas que hacer. -añadí, aunque se me daba tan mal que quedaba claro que en verdad no era nada concreto.

Sí, darte de cabezazos contra el hormigón mientras piensas "tendría que haber ido" suena a planazo... Me regañé a mí mismo, aunque claro, ¿qué podía hacer si no? Sin darme cuenta, estaba aterrado de algo que ya no me podía suceder.

-Mmmm... entonces no me equivocaba cuando lo pense al verte, estas perdido...-termina de comer su pedazo de carne, que,  diferencia de Xamd, se lo tomo con calma, y recoje los platos, dispuesto a lavarlos-Bueno, pues habra que solucionar eso, no te parece?-te dedica una calida sonrisa

Tras dejar los platos, avanza hasta lo que parece un armario hecho enteramente en piedra, o mejor dicho, en la piedra de la pared de la cueva, y saca un modesto orbe de color negro.

-Ademas de una bonita medalla.-señala su gabardina, donde se encontraba esa peculiar "moneda" con las 4 bestias cardinales grabadas alrededor de un circulo yin-yang-a cada GoY nos dan uno de estos. Sirve, a grandes rasgos, para transmitir mensajes urgentes entre nosotros, asi que vamos a preguntar a ver si alguien ha visto a tu maestro, si? ¿En que area fue la ultima vez que lo viste? Si preguntamos directamente al GoY de esa seccion sera mas facil de ubicar, que nuestro trabajo consiste en tener vigilado cada area, a fin de cuentas, ¿no te parece?-te viene a la cabeza el momento en que llegaste al norte y casi de inmediato llego este formidable hombre a tu encuentro

Tras despediros de los chicos, os dirijis al famoso centro comercial. Es un extraño edificio que desentona entre los demas de la zona, esta construido con muchos cristales en el exterior, permitiendo ver lo que las tiendas del interior venden, ademas de que dispone de una enorme plaza exterior que siempre esta llena de diversos tenderetes donde la gente trae, habitualmente, cosechas para vender. Por suerte, es media tarde, asi que la plaza exterior esta casi vacia, los alimentos se suelen traer por la mañana, pero el interior del edificio posee sus propios "tesoros"

Un enorme camino se abre ante vosotras nada mas cruzar el umbral de entrada. A ambos lados, numerosas tienas se pueden ver, con mercancias de lo mas variadas en sus escaparates: ropa, armas, alimentos, objetos inusuales, libros y miles de cosas mas, a cada cual mas extraña que la anterior. Sin embargo, pese a estar el exterior practicamente vacio, frente a vosotros se haya un laberinto de gente observando o transportando diversas mercancias de lugar, dificultando el caminar

La mujer te mira algo incomoda cuando mencionas lo de " a solas". Algo sonrojada, se da la vuelta y mira por la ventana

-No llevo la cuenta de los dias que pasan... tengo una ciudad que proteger...-dice medio susurrando, siendo golpeada por su propia timidez.-Eee... estoy ahora mismo tomando un breve descanso, pero luego tengo que seguir trabajando en... un proyecto...-parece que no va a dar muchos detalles al tema-te puedo dar unos 10 minutos de mi tiempo, si te parece bien... ¿Que deseas decirme?

Sonrío ante la imagen sonrojada de MM cuando se da la vuelta. Siempre me gusta tocar la moral a la gente, pero rara vez tengo la ocasión de hacerlo a la mismísima jefa de la ciudad, así que hay que aprovechar toda ocasión que se pueda

- 10 minutos... Si me das la respuesta corta de ambas creo que será suficiente. Qué tal va el juguetito que te hemos traído?.- Le comento con risa burlona. Conozco a MM y sé que muy probablemente esté disfrutando el pergamino que le hemos traído de esa misión tan importante a la que nos había enviado, aunque varios de nuestros nuevos reclutas acabaron en el camino. No aceptaba que fuese así, pero son gajes del oficio después de todo

- El primer punto... la misión de categoría zen que hay en el gremio. Me extraña mucho que la mantengas ahí a la vista de todos cuando solo cuantos... una decena de personas tienen autoridad para conocerla?.- Hago una pausa, esperando a ver su reacción al respecto.- De qué se trata? No es común que a los maestros se nos restrinja la información cuando hay algún peligro. Y este tipo de misiones solo pueden significar que hay algún problema muy grave.- Mi tono de voz es más serio. Este tipo de situaciones no son para nada comunes y claramente es un aviso a los que conocemos un mínimo el sistema de este lugar.

- El segundo ya es más de tu agrado.-  Comento con tono interesante mientras comienzo a sacar el guantelete de mi mochila.- Una de mis alumnas, Lihl, ha conseguido este objeto en un... como lo llamaría... viaje espacio-temporal fallido cuando intentó viajar solo en el tiempo. Parece que fue a otra dimensión en la que parece que la plata es un recurso muy valioso. Todos detectamos gran poder en el guantelete, pero no sabemos muy bien cómo funciona.- Continúo con la verborrea, explicando detalladamente todo lo ocurrido, desde mi punto de vista como el de Lihl cuando ella y Yunoha fueron transportadas a lo que parecía ser un punto en el espacio tiempo muy lejano. Explicándole también como llegamos a activarlo, con los elementos necesarios para hacerlo- Lo admito, tengo mucha curiosidad y quiero tu permiso expreso  para experimentar con él como es debido. Tanto con tu compañía.- Le sonrío directamente mientras observa el guantelete. Estoy convencido de que está extremadamente interesada en el artefacto de otro mundo.- Como solo o la compañía que estime necesaria para esto. Parece que todos los que estén a cierta distancia del guantelete son transportados también.

La mujer, todavia sin girarse, contesta a tus dudas:

-Bueno... estaba en ello actualmente-dice refiriendose al pergamino-tiene demasiada antigüedad y hay que tratarlo con cuidado, asi que se lo he dejado a una... persona de confianza para que haga una transcripcion a un formato menos... "fragil"

Por otro lado, las personas de nivel alto no son precisamente muy localizables, asi que dejando la mision en un lugar que si o si van a visitar cuando esten libres aumentan enormemente las posibilidades de que alguno la localice. Respecto a su contenido... en parte es culpa tuya: se trata de cierta persona de tu pasado, un no-name, ¿te suena? -se gira para verte, en su rostro, mas calmado, se muestra preocupacion y, en parte, culpa, por no haber podido arreglar el asunto antes de que fuera demasiado tarde-En la actualidad se encuentra perdido, pero confio que aun haya esperanza, por eso la mision es de captura, si no se resiste y esta dispuesto a pagar por su actos, podria volver con nosotros... pero la seguridad de mis ciudadanos es mas importante, no voy a arriesgar casi 22.000 vidas por solo una, asi que si el no-name muestra hostilidad... bueno, captura... eliminacion

Cambiando de tema, ¿Un viaje espacio-temporal? Apenas hay 20 personas en todo el mundo que dispongan de magia temporal o similar ¿y tu alumna ha logrado usarla? Seria interesante saber si puede usarla, podria... mmmm... no, tal vez no sea buena idea usar dicha magia... pero si se pudiera detener a Rah antes de que usara la maquina, la situacion actual...

Baja la cabeza y se vuelve a girar, por un momento te parecio ver una lagrima en su ojo, pero como puso su mano en el rostro, puede que haya sido una alucinacion, aunque la bondad de esta mujer es legendaria, no seria muy raro que llorara por las vidas perdidas a lo largo de esta maldita situacion.

-Pero no nos desviemos del tema ¿Donde esta dicho guantelete?

Y entonces, una terrible noticia se aparece ante ti: el guantele, eso que recibiste de Lihl, el que tenias en la mochila hace apenas 10 minutos... habia desaparecido

Tras dejar a las chicas, te dispones a volver a tu singular "casa". No es un trayecto dificil, solo es un breve paseo, aunque volver a un almacen vacio, sin nadie que te espere, es algo que hace que se alargue demasiado, como si inconscientemente no quisieras llegar. Cuando te das cuenta, no estas en tu casa, sino en otro lado de la zona industrial, aunque a primera vista no logras darte cuenta de cual es, ni donde, puede que en la zona sur... o en el este... lo unico que tienes claro es que era un barrio con muchas calles, pues cada vez que sales de una bifurcacion, te encuentras con otra, parece un autentico laberinto urbano

De repente, un chico sale de un callejon, muy alterado. Al verte, se acerca rapidamente a ti.

-¡TU! Huye antes de que sea demasiado tarde!-te ha sujetado por el cuello y te agita repetidamente-Estas en un barrio muy peligroso para gente como tu y como yo. Yo ya estoy perdido, pero tu aun puedes salvarte ¡Corre por tu vida!

Mientras dice eso, se escuchan unas fuertes pisadas del callejon de donde salia. Se lo que sea que viene por ahi, o son muchos, o muy pesados... o ambas opciones

Vagué por las calles de la ciudad, aún desconocidas, llegando a la zona industrial como pretendía, pero perdido en mis pensamientos terminé en algún lugar que poco tenía que ver con mi destino. Un tipo que salió de un callejón me interceptó, cubierto de marcas que a primera vista no me dijeron nada hasta que razoné Todas esas marcas de carmín, ¿qué serán...? Espera, en algún libro leí algo de marcas de Merlín con forma de... Entonces terminé de reparar en la forma de las marcas... Y mi cara prácticamente explotó en rojo.

Dejando de lado lo raro que eso debió suponer para el chico, no parecía tener intención de huir... Más bien me dio algo de curiosidad.

El chico que te asalto, al ver que no reaccionas, te deja y sala corriendo. En ese entonces, del callejon salen tres entidades de dudoso... genero

-¿Donde se ha ido el hooombree?-dice una de las "mujeres"

-Lo vi venir por aqui, Margaret, no debe de andar lejos-dice la segunda

-Elizabet, Margaret, mirad-dice la tercera, señalandote-Otro hoooombree~~

Las tres entonces clavan tus ojos en ti. Por alguna razon, tus instintos mas primitivos, los propios mas de los animales que de los seres inteligentes, gritan que salgas corriedo, que sigas al otro chico o en cualquier direccion, pero lejos, muy lejos de estas tres extrañas criaturas que avanzan hacia ti, lenta e inexorablemente... espera... no vienen lentamente ¡Estan corriendo hacia ti!

- Oh, por el amor de... -fue mi única expresión antes de darme la vuelta y correr por mi vida.

¿Sabes ese momento en el que alguien tira atletismo para subir su Tipo de Movimiento por encima de 13? Pues la voz de narración decide exactamente eso en ésta ocasión, aunque no pueda revisar el manual para saber si es posible. Fijo que para Sora es posible en este momento.

Cuando Yousuke me preguntó por el lugar en el que podía estar el maestro Ikki empecé a pensar tanto que parecía que de mi cabeza fuese a salir humo. - Pueeessss dijo que estaba en su despacho, y que tenía que estar con el en el patio principal de la academia. También dijo que si preguntaba me dirían donde estaba, así que con ir a la Academia creo que me vale. - terminé de explicar al anfitrión.

Ahora que lo pensaba no tendría que ser muy difícil volver y encontrar a mi maestro, después de todo la academia se podía ver desde todos los lados. Aunque mi padre siempre me decía que tenía un don para acabar en los sitios más raros y perderme en un pasillo recto. - ¿Podría acompañarme hasta la academia? Si luego grito un poco seguro que el maestro Ikki me escucha y sale en mi ayuda

Mi semblante se torna lúgubre mientras escucho hablar a MM sobre la misión en la que estaba interesado. Mis instintos no me habían fallado esta vez. Realmente se trataba de mi primer aprendiz, que no había conseguido que volviese a la senda de la paz. Había escogido a ese alumno para intentar conseguir su paz interior... al igual que yo, tenía la sangre del primer Aeon en su interior y aprendía a dominarlo a una buena velocidad, incluso mayor que la mía. Probablemente sea uno de los enemigos más poderosos a los que la orden se puede enfrentar, ya que no sería de extrañar que juntase a un pequeño ejército de humanos para vengarse de todas las razas mágicas del mundo que lo habían atormentado desde pequeño.

- Debo discrepar señora.- Señora... un término que solo utilizo cuando la situación es completamente formal y seria.- Admitiría misiones para buscar información, pero capturar a Ronald es un asunto mío. Ha sido mi aprendiz y es mi responsabilidad.- Espeto firme, como si un soldado estuviese actuando en contra de las instrucciones de su general.-  Su rostro, aura y esencia son conocidos, no podrá entrar a la ciudad con los guardianes protegiéndolo. La información debería venir a mí para encargarme cuando sepamos algo.

Cambiando de tema. No debemos jugar con el espacio-tiempo. Sabes las consecuencias que ello podría acarrear si no se hace con extrema cautela.- comento calmado. Había demasiadas teorías de lo que podría ocurrir si hay algún cambio drástico en la historia. Desde que no ocurra absolutamente nada hasta que simplemente el mundo estalle. Echo mi mando al bolsillo, en busca del guantelete, pero este ha desaparecido. ¿Me lo habrán quitado? No... Solo alguien extremadamente habilidoso podría hacerlo y nadie con esas habilidades se infiltra en el castillo.- Tenemos un pequeño problema... O me han robado el guantelete o ha desaparecido... Conoces mis habilidades, así que o tenemos un gran espía en el castillo que nadie ha visto o apuesto por la segunda opción.- Termino, con voz preocupante. No sabemos de donde procede el guantelete, que es lo que puede llegar a hacer ni a donde había llevado a Yunoha y Lihl en su momento. ¿Habremos desencadenado algún problema del que nos vamos a arrepentir o simplemente el guantelete ya ha tenido su uso?

–Este sitio es inmenso! –No sé para dónde mirar, ni tampoco por dónde comenzar a escudriñar vidrieras. –Au.. –Y está tan conglomerado que apenas se puede avanzar.
Apretujada entre la gente intento tomar la mano de Lihl para no perderla. –Lo siento, es que está todo demasiado lleno y tengo miedo de perderme.
–A dónde tenías pensado ir primero? Te sigo. Yo no tengo nada en mente, ni siquiera traje dinero.

Le dedico una Sonrisa a Yunoha, realmente aquel lugar era enorme, me esperaba menos gente a las horas que eran, pero parecía que no iba a haber suerte. Cuando note como me agarraba de la mano no pude mas que sentirme aliviada por una parte y melancólica por otra. La ultima vez que había estado en un lugar tan lleno de gente me había separa del grupo y había acabado perdida durante un día... o quizá fueron varios. Bueno aquello daba igual, era el pasado.

-Quiero comprar algunas semillas para plantar en la que será mi nueva casa. Siempre me han gustado las plantas y me gustaría tener un pequeño huerto.- Le respondo tranquila con sinceridad cuando me doy cuenta que había venido a comprar cosas para la misión.- También tendremos que comprar algo para el viaje. No mucho ya que no sabemos que se nos proveerá durante el encargo, pero nunca esta de mas estar preparadas ¿no?.- Comento intentando arreglar mi comentario anterior.- Demos una vuelta a ver que podemos encontrar.- Le digo mientras tiro de ella levemente de la mano para dirigirnos hacia los puestos.

El gigante suelta una carcajada ante tu ocurrencia.

-Asi que si gritas un poco te escucha-te da una palmada en la espalda que casi te tira al suelo-Eres un chico divertido, si algun dia te sientes solo, vente a hacerme una visita y me cuentas tus aventuras, algo me dice que pasariamos una tarde con muchas risas

El extraño orbe que tenia en la mesa, en ese entonces emite un ligero parpadeo. Sin darte tiempo a contestar, te agarra con una mano y te levanta, dejandote en su hombro

-Bueno, si vas a gritar, creo que lo mejor seria que fueras a un punto mas elevado, como el despacho de la Directora, ¿no crees?

Y contigo de paquete, empieza a correr al exterior y, literalmente, pega un enorme salto que cualquiera diria que logra volar

-Te recomiendo cerrar los ojos y la boca, ademas de sujetarte fuerte-comenta en mitad del improvisado vuelo mientras una mosca se estrella en tu frente