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Siendo uno de los enfrentamientos más duros de cualquier torneo, el combate individula enfrentaba a cada uno de los contendientes entre sí, de uno a uno. Ambos debían tener mucho cuidado y derribar pronto al rival para llevarse la honra y conservar la vida. Tras el duelo por Lady Morgana, comenzaron las luchas.

Manfred había salido vencedor de la justa. Y no solo eso si no que su golpe había derribado fatalmente a la mujer caballero. La sangre y el drama habían excitado a las masas y ahora una pequeña multitud se agolpaba para verle combatir contra el anciano caballero Sir Olaf.

Entró Manfred en la liza portando un enorme espadón y un escudo con su divisa. El toro dorado miraba furioso y amenazador desde el escudo, como pidiendo aún más violencia por parte de Manfred en esta prueba. El publico aulló esperando ver correr de nuevo la sangre y a modo de saludo dió Manfred dos poderosos mandobles que silbaron en el aire.

Acabados los saludos se volvió hacia su contrincante. Había oido que la suerte no había favorecido al anciano caballero en algunos de los lances previos pero no dudaba que un veterano como él probablemente guardaría golpes ocultos. Así que trato de refrenar su furor y atacar sin exponerse demasiado. Pero la cautela no era su estilo y rapidamente su arrojo le hizo traicionar su guardia mientras asestaba espadazos como un loco.

Su victoria sobre Dylan se llevó una importante muerte para él. Y aunque la trágica muerte de Lady Morgana le había molestado, sobre todo por no poder recuperar el honor perdido tras sus dos derrotas consecutivas ante ella, había otra muerte que le había afectado todavía más.

En el último lance contra Dylan, Argider consiguió romper su lanza contra la armadura de su oponente. Sin embargo, tuvo tan mala suerte que las astillas de la lanza salieron disparadas e impactaron contra los pulmones de su corcel. Tras el combate, rápidamente se lo llevaron al médico del torneo quien realizó diversas medidas de primeros auxilios. A pesar de ello, poco pudo hacer pues a las tres horas, el corcel que le había regalado su padre y que le había acompañado durante toda su juventud, había muerto. Había ganado la justa pero ¿a qué precio?

La noche antes del combate individual, Argider apenas pudo dormir pues los recuerdos de su caballo de la infancia le atormentaron durante toda la jornada nocturna. Sin duda, era un símbolo de mal presagio de cara a los días que estaban por venir.

El caballero noble acompañado por su escudero, se dirigió a la zona donde tendría su próximo combate. Mientras le ponía la armadura, el escudero notó que su señor estaba visiblemente cansado y le preguntó por su estado.

- Habré dormido 2 horas en toda la noche. La pérdida de Tormenta es un mal presagio... En estos momentos el torneo es lo que menos me interesa, pero aún así tengo que defender el honor de mi familia. Dame mi escudo y mi espada.

A pesar de las advertencias de su escudero sobre dejar la competición, Argider hizo caso omiso y se dirigió al combate. Allí simplemente le dedicó una reverencia a su oponente y comenzó a pelear. Daba espadazos torpes, más típicos de un joven que estaba empezando a dominar la espada que de un curtido caballero. Y su armadura y tamaño eran lo único que estaban impidiendo que su rival estuviera tomándole el pulso por el momento. Aunque probablemente no tardaría mucho en encontrarle un punto débil y aprovecharlo.

Había pasado la noche entre dolores que ni el Whisky pudó mitigar. Ese estirado caballero le había tirado del caballo como a ún saco de paja y ahora le volvía a tener en frente. Quería venganza y esperaba que su malherido cuerpo le permitiera tomarla.

- Oliver, espero que hayas afilado bien mi espada.

Dylan caminó hacia la arena confiado lleno de energía pese al dolor con el escudo de la langosta negra en la mano izquierda y una espada de empuñadura negra en la otra.

Aún no podía dar crédito a los hechos acaecidos el día anterior, varios incidentes fueron provocados y uno de ellos fue la muerte de un caballero, una mujer ni más ni menos, había escuchado rumores acerca de ella, Lady Morgana de Piedrasblancas le hizo saber su escudero, por lo visto había logrado varias victorias y no iba mal encaminada a tener una puntuación envidiable, pero el fatal destino que la aguardaba impidió que Alliranthe pudiera descubrir finalmente su desenlace, exceptuando su muerte prematura. Era una verdadera lástima, esperaba poder conocerla, no suelen encontrarse a mujeres caballero así como así y su curiosidad hacia aquella mujer incrementó... Seáis de donde seáis Lady Morgana, descansad en paz y que vuestro espíritu halle descanso más allá de este mundo.

Después de derrotar nuevamente a Sir Olaf al menos pudo descansar para su próximo combate, el caballero desde luego se mostraba mucho más afable y parece que entre ambos había nacido un mutuo respeto. Pero una vez que volvió a ponerse aquella armadura de placas para la próxima contienda, volvió a sentir aquel dolor que sufrió el día anterior, pero no fue un contratiempo como para impedirle reunirse con su siguiente oponente. Percival Donother.

Desconocía la procedencia o historia de este caballero, aún no había coincidido con él. Tras dedicarle un breve saludo ausencia de palabra Alliranthe, portando su espada y escudo, se preparó ante su adversario.

Era el caballero de repuesto. Había sido recién nombrado, pero aun no estando en la "línea principal" ésta era mi oportunidad. Había servido como escuderos a otros caballeros de renombre y ésta era mi oportunidad de darme a conocer.

El primer enfrentamiento tenía como protagonistas Dylan vs Argider

Dylan: 16
Argider: 9

Dylan vence a Argider con 1 victoria mayor

Puntos de Honra en este juego para Dylan: 7
Puntos de Honra en este juego para Argider: 0
Daño de Argider en este juego: -2 pv.

El segundo enfrentamiento tenía como protagonistas a Olaf vs Manfred

Olaf: 16
Manfred: 14

Olaf vence con 1 victoria.

Puntos de Honra en este juego para Olaf: 4
Puntos de Honra en este juego para Manfred: 0

El tercer enfrentamiento tenía como protagonistas a Alliranthe vs Percival

Alliranthe: 12
Percival: 17

Percival consigue 1 victoria.

Puntos de Honra en este juego para Alliranthe: 0
Puntos de Honra en este juego para Percival: 4