Partida Rol por web

Dorian te mira aun preocupado apesar de tus palabras y se acerca a la barra para poder verte mas de cerca, incluso tomandose la libertad de acariciar tu mejilla.

- Alice es muy problematica, le gusta ser el centro de atencion siempre... - Te comenta sin dejar de mirarte - No creo que haga falta que te diga que para mi o eres un juguete, pero... ella no entiende el concepto de amar... - La gente del bar por alguna extraña razon no es prestan la menor atencion, casi como si el no hubiera entrado siquiera...

Bajé un poco la mirada cuando me acarició la mejilla, pero porque aquel gesto me gustó y tras sus palabras volví a levantar la vista pues no sabía si lo que acababa de decir lo había dicho a posta o es que le había salido sin más, pero me había dejado como sin saber cómo reaccionar.

- Ya le he explicado que no era tu juguetito pero no sé si le ha quedado demasiado claro, me ha dicho que descuidabas tus deberes por mí..

Salí de la barra y me acerqué a él sentándome en el taburete que estaba al lado de donde se había quedado él.

- ¿ Quieres tomar algo? - Me ofrecí a invitarle a algo, pero suponía que no tomaría nada.

El te mira y ahora fuera de la barra te abraza con cariño - Hechice mi presencia ellos no se percatan de nosotros... - Te dice en un susurro para despues colcer acariciar tu mejilla apartandose un poco, aunque puedes notar que le cuesta - Alice es una niña caprichosa, tenia que darme cuenta de que esto pasaria, lo siento Claudia, no queria meterte en este mundo ni que tuvieras que preocuparte de vampiras que son como niñas... - Realmente parece preocupado porque te pueda pasar algo o estes molesta con el.

Le sonreí pues aunque no había pasado nada y yo estaba bastante tranquila pues en ningún momento me había sentido " demasiado amenazada " por aquella mujer, era agradable que alguien se peocupara de aquella manera por mí. Lo que sí que hice fue darme cuenta de que todo lo que no quería, todas aquellas complicaciones, ya me las había ganado sin ir buscándolas, pues nada sería fácil por ninguna parte así que hice precisamente lo que me apetecía en aquel momento.

Me acerqué a Dorian, quien ya se había separado un poco de mí y sin decir nada, le besé, a fin de cuentas, el resto del bar ni se enteraría, pero ni siquiera pensé, simplemente me apetecía.. y sin pensar en ninguna consecuencia.. busqué sus labios y su lengua.

Pudieste ver la total y absoluta sorpresa de Dorian cuadno te acercaste a besarlo, como casi le costaba reaccionar pues no se esperaba aquello para nada, pero cuando su mente se centro, uno de sus brazos paso a rodear tu cintura apretandote a su cuerpo mientras otra sujetaba tu nuca.

Su boda devolvia cada movimiento a la tuya, su lengua jugaba dejando de nuevo clara su maestria mientras el beso cobra mas y mas pasion por momentos.

El beso fue largo y muy agradable y sin que fuera necesaria su sangre para ello, pues realmente le besaba porque me apetecía hacerlo, porque por alguna razón, a una parte de mí le gustaba sentirse protegida y segura, con toda la seguridad que me daba él y porque cuando se hacía de día, echaba de menos esa misma protección que llegaba a darme.

Eso sí, no había pensando en qué era lo que prodría ocurrir tras eso, pero no importaba, al menos no en aquel momento, sino que lo que lamentaba ahora era el tener que seguir trabajando en vez de tener más tiempo libre aquella noche, pues lo pasaría gustosa con él.

Prácticamente en mis labios se dibujó la misma sonrisa que antes de besarle en cuando mis labios se separaron de los suyos y aún, tardé unos instantes en separar mi cuerpo del suyo, pues ahora la que no quería alejarse era yo.

- Me jode bastante, pero tengo que seguir trabajando.. - Dije con tono de pena. - Y cuando salga hoy será cerca del amanecer..

Si sus pulmones funcionaran su respiracion se habria parado por completo, notabas como le costaba dejarte ir y como un deseo irrefrenable aparecia en sus ojos, haciendote recordar como se sentia el siempre por su sangre, y ahora con tu contacto aun mas...

- Te recogere y acompañare a casa si quieres... y... ¿cuando tienes la noche libre? - Te prgeutna con el mismo ansia de un niño pequeño que espera los regalos de papanoel.

El hecho de recordar como se estaría sintiendo hizo que le mirara como queriendo que todas y cada una de las cosas que había visto en aquella visión sucedieran, y eso, hizo que me excitara casi al instante, sin necesidad de su sangre, pero no podía decirle qué noche libraría porque había librado la anterior y no sabía cuándo me volvería a tocar con el problema de las camareras.

- No lo sé. Ayer estuvo cerrado y falta una camarera.. así que mis horarios son trabajar todos los días de momento hasta que se me diga lo contrario, pero cuando venga Joe se lo preguntaré.

- ¿ Por qué esperar hasta entonces?

- Y.. ¿ Cómo duerme un vampiro a parte de sin que le de el sol? Se queda totalmente dormido o.. - No sabía si se quedaban totalmente K.O. cuando llegaba el día o podían hacer como nosotros, que dormíamos menos cuando nos metíamos en la cama acompañados.

Mis palabras me sonrojaron un poco, pero no aparté de él la mirada, pues una vez llegado al río.. sólo era cuestión de cruzarlo.

Te miro y nego con la cabeza ocn toda la angustia del undo - Hacia tiempo que no volvi a aver esto como una maldicion... - Murmura antes de volver a besarte como queriendo asegurarse de que eso realmente estuvera pasando.

- Yo... necesito dormir en mi casa Claudia... es el echo de la seguridad, de saber que alli no me tocara el sol... - Te explica sabiendo que eso es algo bastante terroritario pero dejando eso duerme como una persona normal.

Respondí a aquel beso, casi feliz por que lo hiciera, pero luego, escuchando sus palabras, las entendía a la perfección, aunque no sabía si lo que me estaba diciendo era que prefería dormir él solo en su casa o que yo no podía quedarme en la suya, pero por si acaso, pregunté, pues quizás no nos hubiéramos entendido o al menos, saber cosas que quizás debería saber.

- El que ha dicho que debía dormir en mi casa has sido tú.. Tengo la moto aparcada fuera así que si quieres puedo.. podemos.. - aquello era difícil de explicar así, me daba hasta vergüenza decirlo. - Vamos que luego podría ir de tu casa a la mía sin problemas.. total, Nicole ya se ha ido a su casa y en la mía no va a haber nadie. - Añadí esto último como si tuviera la menor importancia.

- Solo tienes que decirme la hora de recogerte o... pedirme que te espera qui, y tus deseos seran ordenes para mi mi lady - Te dice con una sonrisa enorme, como si ahora mismo con solo decirle que querias pasar la noche con el le hubieras echo el hombre mas feliz del mundo, cada vez le cuesta mas separarse de ti, ves como mira el local con ganas  echar a todos para que pudieras cerrar.

Sus palabras me hicieron gracia, pues estaba segura de que casi podría esperarme ahí de verdad si se lo pidiera, pero no haría eso ni mucho menos, aunque tampoco esperaba que en vez de decir que no quería que se cumpliera aquello que había visto estuviera ansiosa porque sucediera.

- Jamás pensé que me fuera a gustar un vampiro.. pero es tan tierno conmigo..

Salí de mis pensamientos mientras le miraba y luego asentí.

- Puedo avisarte un poco antes de que vaya a salir y así puedes pasar por aquí, total, llegas en seguida y no necesito ni usar el móvil.. - Ya había visto como era capaz de moverse. - Luego seré yo la que te lleve en moto..

Sonreía por lo ridículo que tenía que parecerle usar un vehículo para moverse.

- Pues me voy a preparar unas coasa y en cuanto me llames vuelvo... - Y algo te dice que lo de preparar se refiere para ti... Se acerca una ultima vez para besarte con una pasion e ilusion desmedida. Casi te roba el aliento y como siemrpe tan rapido como vino se fue. En el momento en el que salio por la puerta el bar volvio a la normalidad y te volvieron a pedir copas como siempre.

Me quedé sonriendo como una idiota mirando a la puerta cuando se fue, pues la verdad era que aunque no lo creyera, estaba contenta por lo que acababa de suceder y ya tenía unas ganas tremendas de salir de trabajar.

Algunos clientes casi tuvieron que gritarme para que saliera de mi estado de " embobamiento " y al final, suspirando, volví tras la barra respondiendo.

- Ya voy! Ya voy! Tampoco hace falta insistir tanto que no estoy sorda! ¿ Quieres un trago o los tres qué me has pedido? - Era una respuesta un poco borde, pero le guiñé un ojo al que lo había repetido tantas veces y estaba protestando. Estaba acostumbrada a lidiar con la clientela.

Una hora despues o asi llego Joe bastante renovado y con un olor que te inundo pues estaba recien duchado y su colonia era super fresca. Al verte sonrio comenzando a "gritarte" - Venga quitate ese delantal y vete de aqui - Te decia con tu habitual tono de agradecimiento por cubrir tantos problemas.

Aun quedan unas dos horas y algo para el amanecer.

Hice el gesto de oler como si fuera un perrito cuando pasó al lado mío, pero claramente era para decirle que ese aroma a limpio no había pasado desapercibido, quizás porque yo ya olía a cualquier cosa después de llevar allí desde antes de las cenas.. pero Joe ya sabía que aquel negocio era como en parte mío ya aunque tan sólo fuera una empleada, pues incluso a él lo quería como un hermano, aunque a su " parienta " eso no le sentara demasiado bien.

- Eso no me lo tienes que repetir.. - Prácticamente salí corriendo a cambiarme y aunque el olor a acabar de salir de trabajar no me lo podía quitar allí, esperaba que no le fuera muy molesto a Dorian o que me dejara darme una ducha.

Una vez puesta la ropa con la que había ido a trabajar, es decir, unos vaqueros y una camiseta, como siempre, pensé en Dorian tratando de concentrarme, queriendo decirle que ya salía que viniera que tenía muchísimas ganas de verle y cuando creí que ya debería haberme oído salí y me senté en la barra para decirle a Joe los que aún no habían pagado los tragos que había servido, cosa que se hace siempre en un bar en un cambio de turno.

- Oye Joe, por un casual no sabrías decirme cuál será mi próxima noche libre ¿ no? No la estoy pidiendo, es sólo para hacer planes para cuando me toque.. - Puse cara de buena, pues nunca preguntaba más que cuando tenía algo que hacer.

Joe te mira y sonrie mientras nota lo que le dices - Claudia como si me pidieras tus vacaciones, con todo lo que me has ayudado puedes escoger el dia que quieras - Te dice con una sonrisa dandote una caricia despues para comenzar a ordenar algunas cosas.

En ese momento entra Dorian por la puerta y se acerca a ti por detras acariciando tu cintura y susurrandote - Me encanta tu olor no hace falta que te duches hasta que nos vayamos juntos a meter bajo el agua... - Parece que cuando pensaste en lo de tu olor del trabajo el ya te habia oido, quizas hoy estaba mucho ams atento que nunca a tu mente.

Negué con la cabeza ante lo que decía Joe, pues sabía que si se lo pedía me daría la noche libre, pero no quería dejarle allí todo el día, pues si no iba yo, no habría quien le hiciera ningún relevo.

- Revisa los horarios, no voy a dejarte currando un día desde que se abra hasta que se cierra.. puedo esperar.. ! Ya me dirás algo..

Conocía demasiado bien a Joe y aunque pudiera pasar mucho tiempo en el bar, tampoco era plan.

- No puedes caer enfermo antes de tu boda..

Sonreí al notar como Dorian me agarraba y giré la cabeza con una sonrisa al escuchar sus palabras, aunque me puse un poco roja porque me hubiera escuchado.

- Hasta mañana Joe! - Cogí el casco de la barra y luego junto a Dorian salí del bar, en busca de mi moto, aunque en la puerta del bar me di la vuelta para pararme a besarle pues casi era algo que necesitaba hacer.

- ¿ Preparado para un paseo en moto? - Susurré aún sin separarme de él.

Dorian te devolvio el beso con el mismo ardor que sentia antes y te miro con ansia...

- Y si te llevo a ti y a la moto... ni te imaginas las ganas que tengo de llegar... - Te susurra acariciando tu cintura y tu cuerpo con cariño, notas lo mucho que le cuesta contenerse para no tomarte alli mismo, como todo s cuerpo responde a ti cercania.

Le miré con un gesto muy divertido ante sus palabras, pues sentirme así de deseada era tremendamente agradable y desde luego, levantaba la moral de cualquiera, sin duda, pues podía notar su excitación de tal manera que me excitaba yo sólo con tenerlo cerca.

- Vamos.. que el paseo no es tan largo, en moto llegamos en nada.. - Divertida le agarré de la mano y lo llevé hasta mi moto, aunque fui yo la que se puso el casco antes de sentarme en ella. - Sube y agárrate bien a mí!

Esperé a que lo hiciera pues deseaba sentir sus brazos rodeándome y una vez estuvo sobre la moto, puse rumbo a su casa, segura de que el podía sentir que yo también deseaba llegar cuanto antes para poder perderme entre sus brazos.