Un poco de vuestra historia...
Eres el conde de Aderno, una pequeña región en la isla de Sicilia, donde gobiernas sobre los mortales y los amos de la noche. Dicha posición te fue concedida por el príncipe de Florencia, como recompensa por tu ayuda al sofocar una revuelta en sus tierras.
Llevas más de cien años sobre este mundo pero es la primera vez que ocupas un puesto de tanta categoría e importancia.
Vives en un castillo situado en lo alto de una colina, desde donde tienes una magnífica vista de tu ciudad, Adrana y de las tierras que la rodean hasta varios kilómetros a la redonda.
Recientemente hubo un incendio que arrasó una vasta extensión de campos de cultivo entorno a la ciudad y acabó por llegar a esta arrasando un barrio entero incluyendo la antigua iglesia que quedó reducida a cenizas.
Este desastre os ha obligado a gastar más dinero del habitual para evitar la hambruna entre la población y reparar los desperfectos ocasionados en la ciudad. Por esta razón el oro de las arcas del condado se ha visto drásticamente diezmado.
Han pasado más de dos meses desde el incidente pero las calcinadas ruinas de la iglesia aún están esparcidas por la plaza de la ciudad como vivo recordatorio de lo ocurrido.