Ella que sonrie de nuevo ampliamente cuando dice que lo inentara- estoy segura de que lo conseguiras. es como montar en bici, o eso dicen...- la expresión la conocia aunque no entendia muy bien el significado
En cuato ve que va a abrazarla ella que tambien le pasaba los brazos por el cuello hasta ver que realmente sus manos llegaban un poco mas abajo para elevarla, sin duda se engancha a su cintura, el comentario de la sangre y la reacción de Anubis hace que se incomode por un momento y sus mejillas se enciendien
- Como lo has sabido?- estaba claro el porque pero ella tenia que preguntarlo aunque mas bien como una pregunta retorica
Cuando le mira de esa manera tan intensa comprueba que ambos ahora mismo estan en un terreno peligroso y hecho que hace que ella se incendie tambien por dentro y a hacer que el estomago se inunde de mariposas nuevamente y cuando empieza a besarle por el escote ladea el cuello dejandole pegando un suspirazo alfojandose y acariciandole las rastras hasta que su mano se pierde por ellas mientras con la otra le acaricia el fuerte hombro- Evan nos esta esperando...- suena mas como una sugerencia algo floja ya que el arca acaba de pasar a un leve segundo plano.
-Es un chico muy paciente, seguro que no le importa esperar un rato...- te responde de forma distraida, inmerso en el pequeño escote dado que nunca has tenido un pecho demasiado generoso que digamos pero a él parece resultarte suficientemente atrayente.
Al final uno de tus zapatos acaba por caer al suelo con un ruido seco, momento en el que él se mueve hasta dejarte con suavidad en la alfombra del comedor donde anteriormente se encontraba la mesita.
Has estado mirando varias a lo largo de la semana pero eran muy caras o no te decías a preguntarle si estaría dispuesto a montar alguna...
Sea como fuere, esos pensamientos apenas te asaltan un segundo antes de notar sus grandes manos en tus costados, ascendiendo con lentitud para acariciarte mientras arremanga tu camiseta, esta vez por encima del sujetador.
Una vez termina vuelve a inclinarse, esta vez para besarte el vientre con lentitud pero manteniendo esa insisencia, llegando a notar levemente la lengua en tu ombligo, momento en el que emite un pequeño gruñido gustoso al estar más cercano a tus pantalones.
Es entonces cuando se incorpora para quitarse la camiseta dejándola a un lado, apoyándose parcialmente sobre ti para besarte esta vez en los labios mientras una de sus manos continúa acariciando tu costado con suave calidez.
La reacción sin duda es algo sorprendente e incluso precipitada pero no parece tener mucha intención de detenerse por ahora.
Ella cuando ve que aun esta en el escote no puede evitar sentir verguenza, realmente no tenia nada pero mientras el no se quejara y no parecia que iba a ahcerlo almenos por ahora- vale!- momento en que aprobecha que esta distraido para darle algun beso en la cabeza.
En cuanto la tumba no puede evitar estremecerse, poco puede hacer sino ver como le arremanga la camisa rspirando de forma algo un poco mas acelerada que antes dejando bien visible el movimiento del pexo a medida que sube la camisa. Mientras vas besandole la barriga ella que acaba pegando un pequeño resoplido inquieta y cuando nota la lengua acaba escapandosele un pequeño gemido ahogado, en su mente sabe que no esta bien pero no puede parar.
Cuando se quita la camisa no puede evitar sonreir ampliamente y ambas manos le acarician por todo el torso a la vez que el se va tumbando una vez medio encima le devuelve el beso acariciandole la espalda y incluso arañandole levemente dejando que por el momento se quede ahi.- Grr Ani!!!- suelta a la vez que se separa para coger aire y volver a besarle pero esta vez algo mas apasionada que otras veces
A pesar de haber emepzado besándote sobre los labios, tras separaros apenas un instante y volver a hacerlo su pasión parece aumentar, abriendo cada vez más la boca de forma gradual para abarcar la tuya mientras mantiene apoyado un brazo en el suelo, junto a ti, y con la otra mano recorre tus costillas hasta llegar al sujetador. Una vez alcanzado no le cuesta demasiado posarse sobre tu seno rodeándolo por completo, acariciándolo y apretándolo un poco de vez en cuando mientras vuestro beso ya se ha vuelto totalmente tórrido, llegando a parecer un duelo de quién puede formar más parte del otro.
Tras largo rato decide seprarse nuevamente, lamiéndose parcialmente el labio superior para después sonreír de forma traviesa.
-¿Es la primera vez que estás con un hombre?- te pregunta imaginándose la respuesta, descendiendo por tu cuello a base de más besos hasta llegar a la clavícula, sin darte apenas un respiro.
Después se mueve hasta dejar tus piernas entre las suyas, quedándose a la altura de tus rodillas para empezar a desabrocharte los tejanos mirándote de reojo, por si quisieras decir o hacer algo antes de que sea "tarde" para arrepentirse.
Cuando el comienza ese torrido beso ella que intenta devolverselo de la misma manera sujetandole als mejillas con las dos manos impidiendo que se separe y tan ocupada en hacerlo bien que tampoco puede moverse de otra manera, sin embargo va sintiendo cada caricia que que el hace resoplando y quedandose medio atontada, como si estuviese flotando, los instintos se van volviendo mas subjetivos y comienza a acariciar cada hombro, brazo con extrema delicadez.
Cuando se separa ella ques suelta un pequeño sonido lastimero de queja mientras estira el cuello para volver a besarle, confusa aún porque haya "parado" hasta que formula la pregunta, apunto estubo de responder antes de que los besos por el cuello le despistaran sin embargo entre ruidillos de gusto consigue musitar- si, es la primera vez...- lo cual es algo curioso jamas se lo habia imaginado en estas condiciones.
En el momento en que baja y comienza a desabrocharle el pantalón ella que pega un suspiro largo ahora abarcandole un monton de preguntas sin respuesta y haciendo que sus musculos se tensen, pero a la vez lo desea tanto que no le pide que pare.- Apaga la luz no?- a la vez que se quitaba la camisa ya del todo
Cuando afirmas ser la primera vez te vuelve a observar con una ligera sonrisa, bastante seductora, acabando de desabrochar los tejanos con algo de torpeza para después empezar a tirar de ellos con lentitud hasta dejar tu ropa interior visible.
-Entonces sólo iremos un poco más allá...- comenta acabando de retirar los pantalones apartándolos un poco, sujetando una de tus delgadas piernas para besarla y lamerla hasta llegar a la rodilla, momento en el que se detiene repentinamente con ambas cejas arqueadas.
-¿Apagarlas?, ¿por qué?- pregunta aturdido y al parecer realmente sin comprendelo, bajando tu pierna con cuidado hasta que tu pie toca el suelo, pero dejándola doblada -Yo quiero verte con claridad...- susurra en tono meloso, volviendo a besarte la rodilla y deslizando entonces una mano por ella y el muslo, volviéndola a subir para hacer descender tu pierna, exponiéndote así a una postura cómo mínimo algo vergonzosa.
Se inclina entonces y parece ser totalmente tarde para que te arrepientas, ya que no parece dispuesto a detenerse y de hecho no lo hace aunque lo intentes.
Su rostro se hunde hasta tu ingle, momento en el que emite un gruñido placentero antes de darte un "pellizco" en dicha zona con sus colmillos y empezar a beber sin excesiva prisa, disfrutando de cada gota de tu cálida sangre pasando a formar parte de su torrente sanguíneo, acariciándote las piernas con insistencia llegando a apoyarse una sobre la espalda con una postura de lo más extraña.
Cuando le sonrie de forma tan seductora la poca tensión que podia existir en el cuerpo de Kari se desvanece hasta tal punto de aflojarse entera momento en que aprobechas para quitarle los pantalones que no opone ninguna resistencia sin embargo ahoga un grito al acordarse que ropa interior lleva y eso hace que se vuelva a poner roja- si lo llego a saber me pongo otras mas sexys...- ahora incomoda pero de todas formas tampoco se ven tan mal, braguitas blancas con rayas rojas y un pequeño lazo rojo en el centro.
- un poco solo?- entorna los ojos pero esta tan encendida que ya lo deja hacer mientras va pegaundo suspirillos de vez en cuando le va besando la pierna le va mirando mordiendose el labio con ruidillos de gusto mientras se limitaba a cerrar los ojos para sentir mejor dado que su petición era bien logica y no tenia ganas de discutir.
En cuanto siente el mordisco una oleada de calor que la invade ya descontrolandose y agarrandose a la alfombra doblandola mientras sin querer de su boca escapan mas que sonidos sonoros dejando bien claro que le gusta y que por ella que no pare.
Anubis bebe, controlando su propia ansiedad por hacerlo más rápido sólo para poder disfrutar más de ésa plena sensación, que parece aumentar al comproba cómo te estremeces y disfrutas tanto cómo él, que no deja se apretar tus piernas contra sí mismo hasta que finalmente accede a separarse, lamiéndote la herida rodeada de sangre antes de incoporarse con un jadeo sonoro.
La imagen resultante podría resultar incluso seductora para otra vampira, pero para ti probablemente no tanto.
Tu propia sangre sigue cubriendo sus labios al completo otorgándoles un brillo carmesí llamativo, recorriendo su barba y su grueso cuello para rozar su tatuaje y seguir el recorrido de los músculos de su tórax, ahora más tensos y apretados de lo habitual.
Se relame con lentitud y sonríe entonces de forma casi peligrosa, pasándose el antebrazo por la boca para poder eliminar y dispersar la mayor parte de tu sangre antes de besarte nuevamente en los labios, mordisqueándote un poco los labios sin provocar herida mientras se tranquiliza por momento.
-Tan dulce como tu propia alma. Maravillosa- empieza a incorporarse nuevamente con tremenda lentitud, saciado y más relajado.
Acabé por perder el control completamente entregada a el Beso, sin hechar cuenta en mi alrededor, aflojandome lentamente hasta quedarme totalmente tumbada sobre la alfombra, momento en que se aparta anubis soltando ese pequeño jadeo que hace que sonria ampliamente al comprobar que por primera vez su mordedura le ha resultado placentera.
La imagen de Anubis y la forma seductora en que mi sangre recorria sus formas hizo que deseara ser todas esas gotas y no puede evitar acariciar el torso ahora mas apretado que antes y soltar otro pequeño jadeo. El mordisco la habia dejado medio mareada pero aún asi lo veia, como si fuera un dios pagano y peligroso, todo lo de alrededor estaba borroso y solo existia el. Le devolvi el beso el se calmaba pero yo en mi interior queria mas, sin embargo eso no llegaba y mi respiración se iba calmando muy lentamente.
Cuando dijo lo de maravillosa no pude evitar sonreir tanto como cuando entré y soltar una pequeña risa entre timida y infantil, me alagaba- y tu, tan fuerte y taaaaan...poderoso y peligroso, GRR!- intente imititar sin exito a un león, el mareo ya estaba haciendo efecto.-quiero que me conviertas Ani...- me mordi la uña del dedo indice mirando a ver que expresión ponia.
Él se limita a reír por lo bajo cuando detallas sus "puntos fuertes" de forma algo infantil, besándote la frente cariñosamente y más casta.
Anubis: -¿Y me lo pidas ahora que estás extasiada y mareada? Creo que no es el momento más apropiado para hablar de ello... Y de momento tienes que acabar tus estudios, ¿no?- te coge entonces en brazos, haciéndote botar un momento para sujetarte mejor y conducirte hasta el baño para que te asees.
Te sientes algo mareada pero aún así puedes moverte con normalidad, así que te limpias y quizá te das una ducha superficial volviéndote a vestir.
Él hace lo mismo y al cabo de unos minutos vuelves a salir de casa... aunque está clarísimo que llegarás "tarde" a la cita con Evan pero en realidad no es que hubierais quedado a una hora determinada así que quizá no se enfade demasiado. Al menos eso esperas.
Llegáis nuevamente hasta la mansión de Anastasia, esta vez con Anubis, volviendo hasta el amplio despacho de investigación de Evan en el cuál sigue el arca.
Evan:- Vaya, creía que ya no vendriais...- admite arqueando ambas cejas, mirándoos alternativamente antes de componer una expresión traviesa que disimula centrándose en el libro que tiene delante para disimular.
Por su parte la expresión de Anubis se vuelve más seria en cuánto distingue los primeros destello dorados del artefacto, acercándose a él sin apenas parpadear para, mostrándose extrañamente sorprendido y fascinado. Al menos más de lo que cualquiera de los dos esperabáis.
Apoya una mano con sumo cuidado sobre una de las esfinges de la cubierta y la acaricia resiguiendo su forma sin pronunciar palabra.
Cuando me beso la frente de forma tan cariñosa volvi a sonreir acariciandole yo esta vez la mejilla contraria en plan fugaz, me cogio en brazos y me dejé llevar, al igual que mis pensamientos.
-Uff!! aún me queda mucho para acabar...- ahora estaba en plan quejica pero el tenia razón el mareo y todo lo que sentia me hacian delirar y una vez me deja en el baño- tienes razón Anubis...- ahora de forma mas seria. Me di una ducha rápida pero la sonrisa ya no me la quitaba ni el jabón que entraba en mis ojos.
Cuando Evan replicó que llegabamos tarde ya empece a buscar una escusa creible, habia estado barajando muchas durante el camino de vuelta pero cuando le vi la cara a Evan y esa expresión de "te he pillado" hizo que mi cara se incendiara, volviendose completamente roja de forma involuntaria- si, esto, el Bus pincho una rueda...- vaga escusa pero ya señale el arca en plan disimulo para no continuar esa charla algo bochornosa
La forma de actuar de Anubis hizo que los pelillos de la nuca se erizaran de golpe, un escalofrio recorrio mi cuerpo y ahora mi ansia de saber lo ocupaba todo, me acerque a el y le mire como esperando que el mismo me contara sin necesidad de palabras sin embargo no llegarón:- conoces el arca verdad? que dice?
Evan levanta la cara de entre el amasijo de libros y papeles que le envuelven, mostrándose sorprendido y observándoos con expectación sin decir nada.
Anubis entrecierra ligeramente los ojos, ladeando un poco la cabeza en actitud pensativa, forzándose a recordar unos tiempos lejanos, quizá incluso demasiado.
-No... lo recuerdo- acaba pro decir claramente frustrado, lamiéndose un poco el labio inferior y bajando nuevamente la mano -Pero me es familiar, no cabe duda- sigue observando el arca mientras Evan se limita a emitir un pequeño suspiro, algo decepcionado, volviendo con sus apuntes.
-Nebpehtyra Ahmose...- musita por lo bajo el nombre completo y verdadero (no adaptado) del faraón al que sabéis perteneció la reliquia, llevándose la mano derecha al bajo de su espalda, de la cuál desenfunda con rapidez una preciosa y llamativa daga con empuñadura en forma de halcón.
Apenas te da tiempo de verla, pues en un gesto rápido la clava y hunde en la espalda de la esfinge que acariciaba hace un instante, provocando que ésta emita un pequeño sonido bajando ambas alas hasta tocar la cubierta, momento en el que se distingue el sonido de un chasqueo y la tapa queda algo más suelta, pero sigue quedando la otra "cerradura".
Cuando le vi tan pensativo pegue un leve suspiro, sin embargo me daba pena porque el esfuerzo lo estaba haciendo.
-Puedo ayudarte a recordar si quieres, con tiempo...- los estudios que ella estaba haciendo bien le servirian a el para recordar
Cuando dice el nombre ella que sonrie, si, estaban en lo cierto y el, el lo habia dicho- si, Amose I, fundador de la dinastia XVIII- sin embargo mis palabras no le impresionarón pero a mi si, esa daga- pero que?- no me dio tiempo a mirar, directamente la clavo y me dio tiempo a ahogar un grito- que haces Anubis? no- sin embargo el sonido de la cerradura abierta ahogo mis palabras- no, no, no, Oh! dios mio, Anubis no sabemos que puede haber dentro, esque no has visto la momia?- alarmada y mirando de reojo a Evan.- no podemos abrirla sin saber que pone en los geroglificos, podriamos estropear lo que sea que haya en el interior- en teoria basijas funerarias pero aun asi no queria estropearlas
-Lo... lo siento- se limita a disculparse y retroceder un par de pasos cuando le reprendes cómo a un niño pequeño, y de la misma forma no parece comprender demasiado bien el motivo hasta que explicas que desconocéis lo que puede haber dentro.
-No creo que sea nada tan peligroso pero tienes razón, nunca se es lo suficientemente cauto- se mesa la barba con cierta insistencia y finalmente aparta la vista del arca, tomando asiento en una de las diversas sillas distribuidas por toda la estancia y cogiendo una de tus muchas notas, releyéndola con aparente interés.
Evan mira algo atónito la escena, después señala las esfinges con la pluma que todavía tiene entre los dedos.
-Es de suponer que para abrirla del todo nos faltaría otra daga de ése estilo... Y a saber dónde podemos dar con ella- mira a Anubis todavía sorprendido por tamaña casualidad, aunque en realidad no cree demasiado en esas cosas, así que tras componer una expresión de total decisión, vuelve a enfrascarse con la extraña y difícil traducción con tu ayuda, aunque ambos sabéis que tardaréis varios días en conseguir algo útil.
*Cómo van a pasar varios días haremos lo de la Exposición entre medias, ¿te hace?
Cuando se disculpo arqueé ambas cejas, y ahora me sentia mal- vale, no pasa nada...- resoplé de nuevo mirando el arca de reojo, ahora lo que sea que hubiese dentro le entró aire eso estaba claro, esperaba que no el suficiente como para oxidar el interior.
- Exacto, prudencia, es mejor que morir a manos de una momia...- un escalofrio me recorrio el cuerpo al recordar la pelicula, la habia visto mas de mil veces y aun seguia haciendome el mismo efecto
Mire a Evan de reojo- muy facil podemos empezar preguntando al unico que sabe donde encontro la otra?- volvi los ojos a anubis el cual estaba inmerso en mis notas y me acerque- de donde sacaste esa daga?- completamente intrigada mientras me sentaba al lado