Partida Rol por web

Watchmen (Hombres Lobo de Castronegro)

a) La Reunión

Cargando editor
27/05/2014, 16:43
Rorschach

Enero de 1977.

A veces lo he pensado

Llegar a mi casa y ponerme a escribir un diario. A veces es más fácil y sencillo que empotrar a un maloliente ratero contra una pared o aplastar su cara contra unos contenedores y cortarles con la chapa de los cubos hasta que confiesen el crimen... Pero sólo a veces. Un diario te hace pensar, pero no por ello te obliga a actuar con impulso, o a veces sí; no te obliga a escalar por paredes verticales ni correr escaleras arriba hasta las azoteas (a menudo sin salida alguna aparte de una caída tras arrojarse al vacío).

Las hojas no te impregnan de sangre, y no tienes que aguantar sus decadentes súplicas de piedad, justo antes de dejarlos inconscientes o tal vez... Pero ¿dónde quedó la piedad de ellos cuando humillaron, violaron y mataron a otros sintecho, otros niños u otros ancianos? Aquel cabrón que hizo sucumbir a la pequeña Blaire Roche es un ejemplo. Quizá alguna vez lo plasme en un diario... quizá.

Ahora he de marcharme; me esperan en una azotea de Ocean Avenue, en Brooklyn. Muchos de ellos los conozco de oidas, jamás lo he visto. No sé cuáles son sus aspiraciones, sus verdaderos nombres o su procedencia; tan sólo conozco, por lo leído en las noticias, de su modus operandi y el estado en que quedan sus víctimas. Otros diez vigilantes han recibido mi convocatoria. Será mejor que acudan, por el bien de todos... y de esta ciudad.

Cargando editor
27/05/2014, 16:45
Director

Ocean Avenue, Brooklyn. 11 de Enero de 1977, 20:48.

Cada uno de vosotros recibió un mensaje del vigilante conocido como Rorschach, ese espectro de cara caprichosa que hacía las delicias de los más sádicos, y que no gozaba precisamente de buena reputación entre el cuerpo policial de la ciudad y en general de la ciudadanía neoyorkina. De una forma u otra, sabíais que era él por es inconfundible "runa" en el aviso, pues el propio Rorschach a veces dejaba con ella su firma delante de algunos criminales inconscientes o cuando el New Frontiersman publicaba alguna queja pseudofascista (que lo hacía incluyendo su marca) aprovechando la línea ideológica de la tirada...

El caso es que no sabíais si el propio vigilante os había seguido, o si "tan sólo" había obtenido vuestro nombre real y dirección, pero el caso es que bajo vuestra puerta apareció no hace muchos días el siguiente mensaje:

Aquella citación, llamémosla así, os invitaba en el día de hoy a algún lugar de Brookly, sólo dios sabe para qué. No era frecuente que este tipo, cuyo nombre salía a relucir en las noticias y periodicos, interactuara con otros vigilantes (a excepción de unos pocos), pues pensaba que muchos de ellos eran pura farsa y disfraz. Este toque de atención, según ésto, no debía albergar algo bueno.

Es por ello que acudísteis a la cita. Estábais ahora encima del edificio de Ocean Avenue, un bloque de viviendas normales de Brooklyn ¿Qué querría ese Rorschach? Sin duda que sería algo importante, pues otros vigilantes aguardaban cuando íbais lleganado, hasta congregaros hasta un número de diez. Una vez alcanzásteis la azotea, allí le vísteis, con su máscara cambiante, aguardando a que al menos os presentárais, con sus manos en su gabardina oscura.

Era de noche, y la brisa, sobre el tejado, dejaba de serlo y se convertía en un azote helado constante.

Notas de juego

Comenzamos. ESTAMOS EN EL TURNO DE DÍA (Narración).

Cabe decir que esta semana no hay linchamientos (podéis mirar el nuevo calendario que ya he colgado). Esto nos servirá para narrar y que os conozcáis bien antes de "desechar" a alguien.

Sin embargo, desde hoy día Martes 27 de Mayo hasta el Domingo 1 de Junio podréis realizar las tiradas oportunas de Estado físico, Investigación y Carisma, en la escena "a) La Reunión. TIRADAS". Esto designará los roles especiales para la siguiente semana.

Si aún no sabéis qué es o de qué va el tema de las tiradas, ojead la escena de "A. Reglamento" (concretamente el 2º post) y leed para qué sirve (ventajas) de los roles especiales. Ya sabéis: Las TIRADAS son 1 por día y NO OBLIGATORIAS.

Cargando editor
27/05/2014, 16:58
Macho Alfa

Un enorme y musculoso individuo con calzones y mascara dorada sube majestuosamente a la azotea. Su porte es magnifico, su torso, desnudo, parece esculpido siguiendo unos patrones apolineos.

A pesar de su, bastante escasa, indumentaria y sus intensas actividades antidelictivas, su piel no presenta ninguna cicatriz, tal es su magnifica trayectoria y su destreza.

Macho Alfa flexiona sus poderosos brazos, realzando sus musculos, cualquier estudiante de anatomia podria haber escrito un ensayo solo mirandole, sin necesidad de biopsia.

- Buenas noches

Dice con una voz distorsionada por medios naturales(basicamente forzando la garganta)

 

Notas de juego

Para que veais la voz, es la ultima, la definitiva

.

Cargando editor
27/05/2014, 22:03
Alone

La noche es fría y oscura, pero Alone sigue corriendo. La velocidad le despeja la cabeza, y después de la última sesión de entrenamiento mental lo necesita. Pero no es solo eso, Alone adora correr, es la única libertad que conoce. Hasta hoy.

Una señora cambia rápidamente de acera al verla aparecer por la esquina.

Alone está muy emocionada, hoy es la noche en la que conocerá a Rorschach. "¿Qué querrá de mí?" piensa mientras empieza a subir por la escalera de incendios del edificio donde se han citado, sin parar de correr.
Al llegar arriba abre la puerta de una patada y cae de rodillas jadeando.

- Ya estoy aquí, necesito un minuto- musita mirando al suelo.
 

Extrañada por haber dispuesto de ese minuto sin interrupciones levanta la vista, ya completamente recuperada a excepción de un ligero temblor en el labio inferior, justo a tiempo para ver una figura emerger de la oscuridad.
Alone aprieta los puños preparada para conocer...

A un tipo extraño semidesnudo.

- Buenas noches - Alone se pone tensa sin saber qué hace ahí ese tipo que parece un Vigilante.

La compañía de gente con poca ropa le hace sentir incómoda, pero intenta parecer indiferente.

Es entonces cuando el vello de la nuca se le eriza al notar un movimiento en la penumbra; la máscara cambiante. Alone acude rápidamente ante él.

- Sin duda es usted todo un maestro del mimetismo, me llamo Alone. - No quiere delatar su emoción, pero la sonrisa en su cara, confiada y abierta, no deja lugar a dudas. - Es un placer.

Cargando editor
27/05/2014, 22:45
ZurraLey

La mujer amante de la lucha libre de pelo rosa y atuendo azul, hizo acto de presencia en aquella azotea.

Que el gran Rorschach le hubiera citado allí era algo que había deseado desde que conoció de sus hazañas, era un tipo duro, misterioso y de voz profunda, el tipo de hombre que podía llegar a llamar "compañero". Claro que el trabajaba solo, y lo respetaba. Por lo que no tenia muy clara la razón de su llamada, seguramente alguna crisis importante y como era de esperar no fue a la única. Una oportunidad ideal, para darse a conocer entre el resto de los vigilantes auténticos, por estrafalarios que fueran.

Se paro un paso por delante de otro luchador, le curioso que dos amantes del wrestling se cruzaran justamente delante de ese poderoso hombre de mascara cambiante, le sonrió, pero no le dio mas importancia.
En otro punto no muy distante otra mujer; una adolescente en realidad, haciéndole la competencia, pero no se quedaría atrás, era su momento.

-Buenas noches, Rorschach. Soy ZurraLey y estoy encantada de que hayas acudido a mi. Dime que quieres que haga.-Su voz sonaba dura por muy dulce que quisiera ponerla, sin duda no era una mujer delicada.

Cargando editor
27/05/2014, 23:00
Inquisitor

La noche, aquella noche hacia una brisa que me ponía los pelos de punta, me recordaba cuando mataron a mi hermana a sangre fría, mire aquella luna que destellaba en el cielo intentando imponerse al resto de la noche sin conseguirlo, era como me sentía, en una lucha constante contra aquellos que usando trucos sucios conseguían evadir la justicia con toda su oscura red de tráfico de influencias.

Cuando subí a la azotea vi que no era el primero, por un momento pense que estaría solo en esto, pero grandes tipos musculosos me lapidaron rápidamente la idea. Estaría bien, más cabezas para pensar y más brazos para repartir. Seguro que sería dífícil la tarea encomendada, si no, no estaríamos tantos aquí. En un principio conté tres, pero seguro vendrían más.

-Buenas noches, me llamo Inquisitor. Un placer conoceros a todos- digo mientras evalúo con la mirada a cada uno de ellos, pues debería confiar en ellos para el trabajo que nos encomendaría en breve.

Cargando editor
28/05/2014, 06:33
Zateen

Zateen había estado observando el lugar de encuentro desde un lugar cercano. No desconfiaba del todo de la carta de Rorschach pero tampoco debía fiarse por completo de ella. Nunca se sabe. Alguien que logra dar con el domicilio de un Vigilante debe ser alguien de cuidado y sin duda, Rorschach era legendario en cuanto a eso.

Baja con gracia y sin hacer ruido, hasta que toca la azotea. Mira que hay seres muy extraños y unos cuantos bastante peculiares pero la gracilidad con la que ella se movía, hacía que pasara desapercibida más fácilmente. Aquel hombre llamado Inquisitor parecía tener un poco más de presencia que aquellos luchadores extraños o que la joven que no podía controlar sus impulsos. Con un tono neutro y una mano en su cintura, se acerca al grupo y trata de analizarlos uno a uno.

Su traje completamente negro llamaba la atención por los tacones altos que tenía y aquel antifaz que sólo hacía parte de un excelente maquillaje. Se acerca y hace su presentación igualmente - Zateen, mucho gusto - su voz era gruesa y sutil, como si de una melodía nocturna se tratara.

Cargando editor
28/05/2014, 11:21
Arcklite

Tras recibir la carta sucedieron varios cambios. Para empezar cambié de domicilio. No desconfiaba de Roschard, simplemente no me gusta que otras personas sepan donde vivo. Si un escondite lo conoce una persona es seguro, si lo conocen dos, ya puede haber problemas. 

Inmediatamente procedí a estudiar la ubicación a la que nos había remitido el legendario vigilante. Un apartamento. Situado en una zona residencial llena de bloques de apartamento y alguna que otra tienda de ultramarinos. Nada reseñable. En las bases de datos de la policía no había referencia a ningún grupo de narcos, bandas o cualquier otro nido de delincuentes que pensara en hacerle una gracia a un grupo de vigilantes.

En ningún momento pensé que Rorschach solo quisiera verme a mi. Lo más plausible es que buscase hablar con un grupo de nosotros. Aunque el motivo fuera del todo desconocido. Cuando me presenté vi que ya se habían presentado un nutrido grupo de vigilantes, se estaban presentando entre ellos, lo cual no dejaba de ser una ironía.

-Arcklite.- Dije tras subir a la azotea y acabar junto con el resto. Un nombre tan bueno como cualquier otro.

Cargando editor
28/05/2014, 22:46
Sir Rory

Cuando Sir Rory encontró la citación, supo que era legítima. Conocía las capacidades de Rorschach y suponía que, quizás él, sería capaz de llegar hasta el portón de su residencia con vida.

No le importó el autor de la carta, solo la legitimidad de esta. Hubiera acudido a cualquier aviso de ayuda.

Llegado el día y una vez alcanzada la parte alta del edificio, miró su reloj de bolsillo y se aseguró de haber llegado momentos antes de la reunión. 

-Puntualidad inglesa. -Dijo, y su voz rasgada sonó alterada por su máscara de gas. La puntualidad era para él uno de los pilares del comportamiento y el buen hacer. Y él jamás los rompería.

Sospechaba no ser la única persona citada a la reunión, por lo que permaneció en un lugar de la azotea donde los demás no pudieran distinguirlo. Vio como hacían acto de presencia mientras asentía. Imaginó una hipotética realidad en la que aceptara un acompañante y pensó que la mente de la pequeña hiperactiva aún sería maleable. Sonrió. Sacudió la cabeza y se concentró en el resto.

Cuando consideró oportuno, se acercó al grupo:

- Buenas noches, soy Sir Rory de Picadilly. Estoy encantado de conocerles a todos y cada uno de ustedes. Dijo, mientras hacía una reverencia y levantaba su sombrero. Pueden llamarme Sir Rory.

Cargando editor
28/05/2014, 23:51
Vorian Eagleson

Aquella noche se había puesto a beber un poco de vino mirando el horizonte metálico que se extendía ante él, la ciudad había cambiado por completo su visión de la vida, y esa fresca y fría brisa le llenaba de tantos recuerdos que era casi un problema respirarla, porque las imágenes del pasado no lo dejaban, no desde que había muerto ella. Cuando había recibido aquella extraña nota, no sabía qué pensar de aquel hombre, porque pensaba que era un hombre, ¿qué podría ser tan importante ahora?. Su desértico traje le permitía moverse con bastante agilidad, ese color ocre que poseía le recordaba su lugar de nacimiento y un pasado que no podría volver, sin más, salió por la ventana, saboreando el frío de la noche rumbo a esa extraña reunión.

Saltando de azotea en azotea, Vorian se acercaba al lugar de reunión que le había citado, al aguzar su vista, pudo darse cuenta no era el único citado, habían más personas allí; al llegar respiró un poco recuperando el aliento y luego caminó hacia donde estaban los demás, supuso que el hombre que estaba mirándolos a todos era el artífice del mensaje, los miró a todos inclinando su cabeza a cada uno en forma de saludo, y luego se dirigió al hombre:

- Vorian Eagleson - Dijo  observándolo directamente, tratando de encontrar una mirada - manera extraña de convocar una reunión, eh?.... es un placer.

 

 

Cargando editor
29/05/2014, 00:28
Sadira

Patear culos. Para eso se había metido la joven modelo a heroína. Y nadie pateaba más culos que Rorschach, así que, ¿podía decirle que no al vigilante cuando les citó a aquel lugar? Se decía que era oscuro, violento, que se pasaba, y puede que fuera verdad todo eso... pero no podía culparlo. La escoria criminal también se pasaba y aunque Sadira se centrara hasta ahora en casos no demasiado violentos no iba a desaprovechar la oportunidad de conocer a una leyenda.

Sin embargo, no estaba sola, el vigilante veterano había convocado a diez enmascarados. No sabría decir si los demás habían salido en la prensa o no, a ella no le sonaban demasiado, pero Rorschach los había elegido y eso le valía a ella para confiar en ellos. Si alguien de su experiencia convocaba a varios tipos sería por algo.

-Mi nombre es Sadira- dijo cuando el resto se presentó. Como la mayoría optó por su nombre de héroe y no el real, decidió hacer lo mismo. Además, ella a veces pensaba que la fachada era la otra vida y que la real era cuando se enfundaba en ese traje que marcaba sus curbas y cubría su rostro.

Cargando editor
02/06/2014, 15:44
Rorschach

Rorschach oía presentarse a cada uno de aquellos vigilante (bueno, no a todos), y observaba detenidamente sus llegada, su movimiento, su forma de hablar y expresarse... Y todo ello con las manos en los bolsillos, con un gesto sobre su ros... sobre su máscara de, seguramente, indiferencia.

Buenas noches... -repitió la frase más pronunciada por vosotros-. ¿Son en realidad... buenas? -su voz característica era ronca y gutural-. Nada de buenas noches, no hemos venido aquí a hacer amigos...

Fue entonces cuando dio unos pasos, se encaramó al borde de la azotea, y comenzó a divisar la calle abajo, observando a transehúentes como si tuviera la potestad completa sobre ellos, como si fueran pequeñas hormigas.

Mirad las calles. Mirad ahí abajo. Uno de esos -dirigiéndose a cualquiera de los viandantes- sabe que estamos aquí arriba, sabe que os he convocado esta precisa azotea. Las calles murmuran, las personas... apestan -su tono era melancólico, como resentido con la vida-. Cualquiera de los habitantes de esta ciudad camina por la aceras iluminadas y escupe barbaridades sobre los vigilantes, y lo que debería hacer la Justicia con nosotros; pero en cuanto cruzan la calle para regresar a casa y toman el callejón más cercano que los conduce a su hogar, se topan con tres criminales, todos ellos con navajas. Es entonces cuando nos suplican, ¡y lo hacen!, que aparezcamos como de la nada, aunque ni siquiera lo pronuncien. Somos en ese preciso instante su única salvación y no les importa entonces lo que piensan de nosotros...

Rorschach se colocó el sombrero.

Lo curioso es que, tras haber arrancado el brazo a uno de los asaltantes y matado a los otros dos, no te lo agradece; y ni siquiera se digna a mirarte, sino que se preocupa por correr y esconderse cual rata. Al día siguiente, te enteras de que el tipo que salvaste es un periodista que te señala en su columna semanal como el peor de aquellos bandidos que casi le abren en canal -aquello parecía ser contado como si el vigilante lo recordase muy de cerca-. Y es entonces cuando te arrepientes de no haber dejado que lo despellejasen vivo.

Acto seguido Rorschach se dió la vuelta, mirandoos a todos.

Las calles comienzan a arder, aunque no haya fuego. Las manifestaciones sindicales están organizando algo gordo: nuevas movilizaciones civiles marcharán en breves contra los vigilantes, apoyadas por numerosos sectores: los periódicos más progresistas, el cuerpo de bomberos, el gremio de médicos y cómo no, el cuerpo de la Policía. Incluso las bandas radicales aprovecharán para causar más jaleo y presión contra nosotros, está claro... Por eso, os aviso. Alguno de vosotros... Alguno de vosotros está entre ellos. Alguno de vosotros solo vigila de pasada las calles y seguramente planee vendernos a unos cuantos... o a todos. A algunos os he vigilado a fondo, a otros no tanto. Por eso quería tener esta reunión, antes de contaros lo que vamos a hacer: así podré estudiaros un poco mejor.

La noche se estaba volviendo fría, tan fría como las palabras de Rorschach. Ciertamente, sus palabras eran chocantes, pero sus formas y expresión eran las de siempre.

Quizá antes dije que no estábamos aquí para hacer amigos... -continuó-. Quizá me equivoqué. Veamos: contadme cada uno vuestra última batalla, yo acabo de contaros una de las mías; nos divertiremos un poco escuchando qué tenéis que decir... ¿Quién empieza?

Y se quedó expectante, con su característica y particular postura: las manos dentro de los bolsillos de la gabardina parda.

Cargando editor
02/06/2014, 21:16
Alone

Las palábras de Rorschach han sido escuchadas en absoluto silencio, cuando acaba invitando a los demás a contar sus batallitas Alone cierra los ojos unos instantes.

*Alone venía a aprender todo lo que pudiera, pero ahora su plan se había roto. La situación era peligrosa, pero también se parecía a algunos de los "juegos" que su abuelo había usado para entrenarla. Se debatía entre lo moral y el ego juvenil, quería demosttrarle a su ídolo que sabía jugar, que QUERÍA jugar.*

Sus ojos se movían debajo de los párpados tan rápido como sus pensamientos. Abrió los ojos preparada para poner toda su atención en cada una de las palabras de los supuestos vigilantes, pero la exaltación por contarle a Rorschach su última batallita ganó el combate y la boca de Alone empezó a hablar rápido y atropelladamente.

- Bueno, si, si, si, si puedo tomar la palabra me gustaría empezar a mí. - sacude la cabeza varias veces. - ¿Por dónde empiezo? La verdad es que tengo poca experiencia real, ya que he sido sometida a un entrenamiento para ser Vigilante durante toda mi vida.

Alone se pone de puntillas sin darse cuenta.

- Empecé a vigilar hace dos semanas, y desde entonces he tenido que intervenir en media docena de situaciones anómalas, así las llama mi abuelo. La última, si, si, la última fue hace tres días, llovía, llovía mucho, en esta ciudad siempre llueve, pero esa noche llovía un montón, tanto que mi abuelo no me dejó salir. Yo estaba estudiando cuando escuché gritos y llantos. No me pude contener, me vestí y salí sin ser vista.

Hizo una pausa y miró a los ojos a Zateen, y luego a Sir Rory.

- Seguí los gritos hasta un portal cochambroso que olía muy mal. Me daban ganas de vomitar, pero si me concentro se me pasa. Subí las escaleras hasta la puerta desde donde salían los lloros. Llamé una vez y otra y otra y otra y nadie quería abrir, así que la derribé a patadas y entré.

Mirando a Rorschach: - La violencia está en todas partes.

Se acerca a ZurraLey y sigue hablando.

-Lo que allí encontré no dejaba lugar a dudas, ese hombre era un demonio. Su víctima estaba en un estado lamentable, no le quedaba mucho tiempo de vida. Mi abuelo dice que una cosa es justicia y otra compasión. Así que al niño le partí el cuello, y al demonio le arranqué los ojos y la lengua, lo até y lo tiré al río. Dulces noches para los niños que nunca temerán a ese tipo.

Alone dejó de temblar. Su cara se fué relajando en pocos segundos hasta volver a su tono habitual.

-Alguien tenía que hacerlo, ¿verdad? - pregunta a Sir Rory.

Bueno, el plan había salido al revés, pero aún estaba usando sus habilidades para medir las reacciones a sus gestos y palabras.
 

Cargando editor
02/06/2014, 22:50
Arcklite

Escuché las palabras de Rorschach con un nudo en la garganta. ¿No se refiere a mi verdad? Yo no soy ningún esquirol. Soy un tio legal... Me gusta tomarme mi tiempo, eso es todo.

Mi ritmo de procesamientos era algo lento, mas meditado de lo que otros tomarían, estaba seguro. Sin embargo prefería las pruebas empíricas a las intuiciones. No me bastaba con que el tío fuera un cabrón, si no atracaba bancos ni se dedicaba a nada malo, no me importaba que luego fuese el mismísimo Satán.

-Bueno, mi ultimo evento relevante... Fue hace dos semanas.- Dije lentamente.- En Manhattan. Me llevó dos meses reunir la información necesaria, pero cuando investigué las cuentas bancarias de ese tipo descubrí la verdad. Durante varios años, el hombre se había dedicado a recibir fondos de un prostíbulo de las afueras. Por lo visto era de esos cabrones que compran y venden a chicas jovenes para prostituirlas.

Medité las palabras mientras recordaba los pasos que me llevaron a atrapar a ese canalla. La pista de Belmont, las cuentas de banco, y la pobre chica sin lengua de Delawere.

-Le esperé en su casa. Cuando llegó le dejé KO de un buen golpe en la cabeza. Cuando se despertó atado a su sofá y me vio trató de escupirme. No estaba muy hablador. Un par de horas mas tarde se mostró mucho mas hablador al perder un par de dedos. El resto fué facil. Una denuncia formal de desaparición y al cabo de unos 10 dias los policías le encontraron comiéndose su pie derecho con una confesión grapada a la frente.

Cargando editor
04/06/2014, 20:38
Alone

Alone abrió la boca impresionada.

- Comiéndose su propio pie...-dijo lentamente mientras imaginaba la escena.

Y esperó a que alguien más hablara, estaba aprendiendo mucho y no había nada que le gustara más en el mundo que aprender.

Cargando editor
04/06/2014, 23:43
ZurraLey

Ese hombre, era todo un honor estar a su lado y mas todavía escucharle hablar y saber como impartía justicia aunque no se lo agradecieran, siempre velaba por la ciudad era admirable, directo, brutal... increíblemente atractivo.

Después de su presentación empezaron a hablar los demás, primero la niña, sin duda una niña que no conoce el perdón. Impresionante su película, no parecía capaz de hacer tal cosa con ese cuerpo delgado y sin desarrollar pero si Rorschach la había llamado no seria unicamente fachada. Una temporada en un ring le enseñaría cuando hacer que cosa en cada momento, tal vez debiera hablar con ese abuelo suyo.

Después otro personaje raro entre los raros, un tío que bien daría entre los focos del estadio, pero tras su relato y su cuestionables métodos, solo valdría para la Xtreme.

Y silencio, sin duda el resto estaban aun asimilando las historias de esos dos vigilantes, tan o mas brutales que el propio Manchas.

-Bueno ya que nadie mas se atreve a hablar lo haré yo.-La luchadora dio un paso adelante -Yo no soy tan brutal como estos dos.-Les sonrió a ambos, nadie intimidaba a ZurraLey.-Yo me dedico a pasear las calles poco iluminadas en busca de maleantes, violadores y mexicanos.-Miro a Macho Alfa-Eso ultimo era broma cariño. Pero si es cierto que les zurro a los tipos que intentan pasarse de listo con parejas, mujeres o abuelos con niños. Lo ultimo que recuerdo no sera hace mucho, una noche completa.

-Una pareja de pipiolos estaba paseando por calles poco transitadas y dos navajeros les salieron al paso, por suerte para ellos, estaba al otro lado de la acera así que aparecí para darles una buena a ese par de idiotas, un dropkick al primero por estar en carrera, acabo aplastado contra la pared, al segundo un bigfoot seguido de un facebuster contra la acera, creo que hay es cuando le saltaron los dientes, la nariz para entonces ya la tenia rota. Y el primer tipo listo intento atacarme ahora que estaba en el suelo, así que barro sus pies y le hago una nelson hasta quedarse sin aliento.-Parecía estar muy orgullosa de sus hazañas.-De la pareja no supe nada hasta mas tarde, supongo que aprovecharon para irse corriendo olvidando agradecerme la ayuda.-En ese momento quedo pensativa un momento.-Luego mas tarde esa misma noche, me los cruce de nuevo y el tío intentaba propasarse con su pareja, así que aparecí para preguntar si necesitaba realmente ayuda, ya sabéis que algunas parejas son muy fogosas.-Codeo a Inquisitor.

-El tipo se puso tonto, hasta llego a insultar mi hermoso atuendo o acusarme de ser una entrometida, yo que les había ayudado esa misma noche. Así que lo cogí por el pescuezo y le practique un chokeslam contra un contenedor de basura y me fui de allí, mas cabreada que nunca y dejando al otro con el problema de su novio bocazas.

Para entonces se percato que había hablado de mas pero ya estaba hecho y el silencio roto.
-Bueno ¿Y quien es el siguiente?

Cargando editor
05/06/2014, 00:20
Sadira

Por fin el justiciero famoso les comunicó sus intenciones, y le contó una de sus batallitas. Los presentes eran todos héroes, más heroico o menos todos tenían algo que contar. Sadira también tenía alguna para compartir con el resto.

En realidad, a ella le gustaba más ocuparse de casos que requerían su inteligencia, como ladrones de joyas o secuestros menores... la investigación y la paciencia le habían hecho resolver algunos casos que traían de cabeza a los policías, aunque rara era la vez que ellos o la prensa le agradecían nada.

Pero la historia que contó era de la que menos orgullosa se sentía, no tenía nada de heroico, era una señal de lo bajo que puede caer la gente. Así que comprendió a Rorschach cuando hablaba de esa manera, cuando la gente que defendían a veces se convertía en el mal que debían combatir. No era tan pesimista como el enmascarado de la vieja escuela, aún quería creer que había algo bueno por lo que luchar, aunque a veces fuera algo difícil de comprender.

-Reconozco que este traje es algo provocativo, y que a veces hace más fácil acabar con los maleantes al causarles una distracción- nunca había negado estar en forma y ser atractiva, parte de su otra vida, la que algunos llamaban real, era la de ser modelo e incluso se servía de sus encantos femeninos para obtener información- pero hace un par de noches, cuando iba de patrulla tres tipos borrachos, tres "ciudadanos" se pasaron de la raya. Me siguieron hasta un callejón y comenzaron con palabras obscenas, e intentando hacerse los gallitos y los graciosos, como intentando demostrar cual de ellos llegaba más lejos, ver quien era el más "machote"- miró al resto de heroínas... como mujeres seguro que comprendían lo idiotas que a veces se ponían los hombres- yo les ignoré hasta que uno de ellos me agarró y comenzó a pasar su mano por mi cuerpo. Como hienas ante una presa fácil sus dos compañeros se le unieron uno cogiéndome del pelo y otro intentando tirarme al suelo. Cuando el primero que me agarró intentó bajarse los pantalones pude zafarme y darle un puntapié en sus partes.

Esa imagen mental seguro que dolería a los hombres que estaban allí, pero hizo lo que tenía que hacer.

-Por supuesto, al darle en su "preciado cerebro" cayó al suelo gritando como una nena. Pero, si creéis que sus compañeros comprendieron que se estaba desmadrando la cosa estáis equivocados. Se volvieron más agresivos, uno quiso darme puñetazos y el otro se lanzó para hacerme un placaje como si fuera un jugador de fútbol. Como veis, no peso mucho, pero con una llave adecuada, el adversario más pesado cae. Lo que me dejaba solo a uno... esta vez sí que se dio cuenta de la situación y pidió perdón. Claro que no lo sentía, no se arrepentía de nada, solo quería protegerse al ver de lo que era capaz. No le sirvió, fue con él con quién más me ensañé... los arañazos y cicatrices que tiene ahora le valdrán para que se lo piense antes de hacer lo mismo. Y si me entero de que vuelve a hacer algo así, no habrá una tercera.

Se rascó la cabeza tímidamente al terminar. En realidad ella no era un ser salvaje, pero había veces que tenía que ser dura... que tenía que frenar en seco a los que se lo merecían.

Cargando editor
05/06/2014, 23:29
Zateen

Zateen no era de hablar mucho de sí misma, al fin y al cabo, había personas de las cuales no quería saber nada. Ella siempre había ocultado todo de sí e ir hablando de esas cosas no le hacía mucha gracia, más porque ella no entendía bien de qué se trataba el compartir.

Era Rorschach quien pedía compartir la historia y por este motivo se lo estaba planteando. Francamente, alguien que quisiera imitarlo terminaría muerto por el verdadero, así que se planteaba qué podría contar.

A diferencia de los otros, ella siempre trató de no llamar la atención y permanecer oculta lo más posible. Actuaba siempre desde las sombras y sólo aquellos menos desfavorecidos habían escuchado de ella.

- Tal vez mi historia los aburra un poco - mira a Sadira y asiente. - Yo me he encargado siempre de mantener el control en los barrios bajos de la ciudad. Es obvio que no soy omnipresente pero hago lo que me es posible -.

- Hace poco, unos pandilleros, extranjeros de la zona, quisieron hacer de las suyas y atacar una de las pocas zonas tranquilas con las cuales nadie se mete. En general, el descontrol se sentía en el barrio y era algo que yo no podía permitir. Se hacían llamar grupo pero sólo eran tres hombres y el jefe era el más desagradable. Decidí hacerle entender las reglas y me escabullí en su hogar mientras tenía sexo con su mujer y lo saqué de su cama, dejando que la esposa huyera. La mujer sabía qué sucedía y no se lo planteó mucho para escapar. El hombre desnudo trató de defenderse y me disparó pero estaba tan nervioso que fue fácil evitar el disparo - se río levemente pero continuó después de un momento, hablando con una voz bastante profunda.

- Lo alcancé y fracturé su brazo derecho con una torcedura del pliegue, logrando que soltara el arma. Era bastante obeso, así que fue desagradable - mira a Sadira. Era algo más de mujeres y ella podía comprender a qué se refería más fácilmente. - Cuando hubo soltado la pistola, fracturé sus rodillas, impidiéndole ponerse de pie y quebré su nariz para que se ahogara con su sangre. Sólo por aumentar un poco la teatralidad, le disparé en su enorme estómago y dibujé una E. Todo para decir "Extranjero", pero no creo que lo hayan comprendido cuando lo encontraron. Salí de allí y el resto se retiraron, comprendiendo el mensaje. Donde vivo es menor la influencia de la policía que aquí, así que creo que no gozo con tanta suerte como muchos de ustedes -.

Cargando editor
06/06/2014, 18:15
Li Peng

- Hola a todos, y disculpen plofundamente mi taldanza, pero esta ciudad es glande y no me la conozco en profundidad... Oohhh, que maleducado soy, me llamo Li Peng... Dijo llegando desde un azotea cercano con un gran salto una figura a todas luces oriental, no demasiado masiva pero si muy musculosa con ropajes vistosos que contrastaban con lo oscuro y apagado de la noche.

- Quizás no me conozcan demasiado, yo suelo moverme por Chinatown, un barrio en donde cualquiera que no sea de mi laza llama mucho la atención. Allí la vida no es fácil y mucho miran de aprovechalse de los pobles incautos que venimos a esta ciudad poloque dicen que aquí se vive más mejol. Es muy tliste pala mi decil que casi nadie se pleocupa pol nosotlos y pol eso vi como una lesponsabilidad ponel mis habilidades al selvicio de mi comunidad, de toda la ciudad polque incluso entle los mios ahi quienes no tienen honó y plincipios.

Lo último que me oculió tuvo que vel lamentablmente con un complatiota mio, que aplovechaba y esclavizaba madles y niños a los que engañaba con plomesa de tlabajo. No ela tlabajo, sino esclavitud; tlabajaban todo el día y amenazaba con llamá a inmiglación si no trabajabande sol a sol. Mis compatliotas cleian que Yao Ming ela mu podeloso pelo no ela así y acabé con él y su gualdia. Ahola ellos tienen una coopelativa de tlabajo y sonlien de nuevo. Dijo Li Peng acabando con una sonrisa de oreja a oreja.

Cargando editor
06/06/2014, 21:46
ZurraLey

ZurraLey se puso en guardia al escuchar una voz desconocida en la azotea, una que no venia de ninguno de los presentes, y fue una sorpresa mayor cuando apareció un vigilante mas, ¿Cuantos mas faltaban para llegar?

Destenso los músculos y lo miro de arriba-abajo, otro curioso personaje, como aquellas dos chicas que acababan de contar su ultima trifulca, si ese era el método por el que su preciado manchas esperaba que encontrasen a la oveja negra, era un tanto difícil. Todas hasta el momento eran bastante... negras, incluso la suya propia, de elegir alguna puede que la peor seria en aquellas que muere gente, pero que salgan gente inocente dañada también era malo. Claro que aun faltaban muchos por hablar, ¿Quien le decía a ella que los que no hablaban era porque querían ocultar su verdad?

Esto era un tanto difícil, no era detective, era luchadora. Tendría que estar mas atenta que de costumbre, seguramente su instrucción no valdría de mucho para pillar al descarriado, pero si para patearle el culo y hasta ese momento, estaria atenta, como Buho nocturno.