Partida Rol por web

Las luces azules y verdes del escaparate de la tienda de tatuajes reflejados en los charcos de lluvia y la escasa iluminación de la calle, hace que parezca una pelea de discoteca. 

El japonés se aparta de la pelea mientras busca su móvil perdido en el fondo del mar. Noel busca algo para ayudar en la pelea. Estela le ha quitado las ganas de tener sexo esa noche al tipo que la acosaba y Peter en un giro rápido, interpuso el codo en la trayectoria del macarra. El aire se llenó de un CRAAK¡¡ y las gotas de sangre saltaron de la nariz del mohicano haciéndolo retroceder con el cuchillo en la mano. Momento que aprovechó Gabriel para destrozarle de una patada la rodilla.

El acosadsor está fuera de combate, aunque intenta huir sujetándose las pelotas con las manos y el otro, gimiendo de dolor con la pierna derecha en una posición antinatural y el rostro lleno de sangre.  

Todavía no se ve el bar. A unos veinte metros la calle desemboca en una mas grande.

Legaste tarde a ver un madero en el suelo. Los dos individuos están fuera de combate.

Cojo un madero que he encontrado pero cuando me dispongo a ayudar a mis compañeros veo como estos han sabido defenderse y aquellos individuos ya se alejan de nosotros entre gimoteos por lo que simplemente me encojo de hombros y tiro de nuevo el madero al suelo - Buenos reflejos chicos...

 - Necesitamos sus ropas y todo lo que tengan encima... - Respondí en tono seco, mientras me dispuse a desvalijarles y dejarlos en paños menores. Si se resistían, les daba de hostias hasta en el carnet de identidad. Así aprenderían a no molestar a la gente.

Totalmente de acuerdo "Descarado". Es innegable quien de nosotros llama mas la atención. Si. Incluso mas que nuestra compañera.
Dicho esto, me inclino sobre el capullo al que he contribuido a tumbar, y con tono cabreado, bastante cabreado, añado.
Un solo movimiento sospechoso, y con que me resulte sospechoso a mi, sera suficiente, y te rajo el cuello.
Y mientras digo esto, empuño el cuchillo con el que el imbécil había tratado de atacarnos.

(algo así mismamente. Lo primero que me ha salido en Google)

Y mientras le enseño al tipo su propio cuchillo muy muy cerca de su cara, giro un poco, solo un poco, la cabeza para prestar atención al resto de mis compañeros.
Que uno de vosotros agarre el otro cuchillo y le de el mismo trato al otro imbécil. Vamos, que nos toca ir mejorando nuestra situación.

 Cojo el otro cuchillo y obligamos, entre todos, a que se quiten la ropa y nos den todo lo que tengan...

Entre los cinco conseguís quitarles la ropa y todo lo que tienen encima. El macarra del pelo mohicano se queja de dolor al intentar sacarle los pantalones pero una buena hostia de Gabriel lo deja inconsciente y tras unos chasquidos de su rodilla, conseguís quitarle los vaqueros.
El otro, viendo como tratáis a su amigo, decide directamente daros todo por las buenas y correr en pelotas calle abajo tapándose sus partes. Ahora podéis ver bien su tatuaje, una cadena enroscada sobre un cuchillo plateado. El otro macarra inconsciente tiene el mismo tatuaje en el homoplato. 

Mas adelante, la calle desemboca en una mas grande y también algo mas iluminada.

Una vez que hemos reunido el botín, me limito agarrar unos vaqueros y ponermelos. Mi cuchillo, lo sujeto con el cinturón de cuero y digo a mis compañeros.
El resto, usadlo. Yo de momento, voy servido. Propongo usar esos eurodolares, para meternos entre pecho y espalda, algo caliente. Por ejemplo, un buen trago de ron.
Tras estas palabras, palmeando la empuñadura de mi cuchillo, observo a los que se han convertido en nuestras presas.
Los observo, con un atisbo de sonrisa y añado.
¿Que hacemos con este par de imbéciles?. ¿Matarlos?
Y hay cierto tono de deseo en mi voz al soltar esa palabra.
Pero volviéndome hacia Descarado y nuestra particular dedos ágiles, añado.
Vosotros habéis sido los que mayor riesgo habéis asumido en esta ocasion. Aceptare vuestra decisión respecto al destino de este par de capullos.
Pero mientras digo esto, los miro de reojo, mi diestra juguetea con la empuñadura de mi cuchillo, y mi sonrisa, aumenta.

 Me limito a quedarme el otro cuchillo y comentar:

 - Los que les vale la ropa, que se la queden, los demás podemos ver si podemos comprarnos algo de vestimenta con el dinero, tal vez en un 24 horas...

 El que queda inconsciente no supone una amenaza y matarlo no me supondría ningún beneficio, así que se quede como está...

Mientras nos repartimos el botín, uno de los fulanos corre calle abajo.
Es en ese momento cuando me percato de un detalle. Su tatuaje. Compruebo que el otro tipo lleva uno igual y la conclusion es obvia.
Muchachos. Estos imbéciles son miembros de una banda. Os reafirmo mi decisión de respetar vuestro criterio. Pero recomiendo, agarrar al otro, perdernos en un callejón oscuro e interrogarlo para saber quien va a venir a por nosotros. Numero, capacidades y zona de influencia. No quiero mas sorpresas esta noche.

Prefiero gastarnos el dinero en algo de ropa para no ir con estas pintas y llenos de sangre - Observo como desvalijan a los 2 matones y un escalofrio recorre mi espalda al ver los tatuajes... Mierda... Lo que nos faltaba... Tener mas gente que quiera matarnos detras... 

Ja! ..... respetarás nuestra opinion? como si de verdad hubiera otra opción! Pero me di cuenta y me callé... les dije esto en voz baja  dios.... joder.... Claro que tenemos que matarles. Pero no nos dirán nada si saben que les vamos a matar igualmente. O les cogemos ahora mismo y les interrogamos en ese callejón, o si por si alguien nos ve, les rajamos y nos piramos!!  Intentaba stener la mente fria, pero la verdad es que estaba temblando por la adrenalina. Rapidamente me agencié unos pantalones, y con la camiseta que Noel me ofreció, ya iba vestida.
Observé la situación de alrededor para asegurarme de que no nos miraban y decidir que hacer con los matones.