Como si fuera una de esas pelis donde, llegado a un punto, los secundarios deciden quedarse atrás a modo de sacrificio, la contacto de Anonymous decidió encarar a la policía, dándoles una oportunidad de marchar. Y al cabo de unos minutos, Christopher también se les quedaba por el camino.
Al llegar a la catedral, El Rey Ezekiel frunció el ceño al ver a tanto cardenal junto. No le gustaban los hombres con sotana y, entre los miembros del KKK y aquellos religiosos, casi mejor que se quedaba con los del KKK.
-Habría que matarlos antes de que pusieran huevos... -comentó el afroamericano, mientras sus ojos comenzaban a buscar la gárgola.
Ezekiel no tardó en divisar la gárgola, señalándosela a sus compañeros. Echó a correr tan rápido como un judío en el 39 hasta llegar junto a la cornisa, arrastrándose por ella hasta llegar hasta la posición de la gárgola. Ayudado por su poderío físico, heredado de sus antepasados mandingos, el afroamericano trataría de arrancarle la cabeza a la gárgola, golpeándola repetidas veces con su escudo.
Motivo: Mente
Tirada: 1d10
Dificultad: 8+
Resultado: 6(+2)=8 (Exito) [6]
Motivo: Físico
Tirada: 1d10
Dificultad: 8+
Resultado: 6(+3)=9 (Exito) [6]
-¿Uh ese es el bicho feo? ¡Venga a ver quien llega primero!- dice animado por la competición que existía, al menos para él en su imaginación- ¡Vosotros podéis escalar pero yo puedo volar!- animado como si hubiera encontrado "combustible" bajo la sotana de un cura, Peter Pank salta detrás de Ezquiel y trata de seguir sus pasos, recordando cómo en sus tiempos mozos, hacía más o menos dos semanas, hacía esto mismo en las calles de BarnaCity huyendo de los antidisturbos...¿o era del capitán garfio?- ¡tic tac tic tac tic tac!
Motivo: fisico
Tirada: 1d10
Dificultad: 8+
Resultado: 10(+3)=13 (Exito) [10]
Los hombres quieren hacer su acto de valentía y yo quiero estarme mirando una película de Netflix, así que por ello prefiero mejor que ellos vayan mientras los guío desde aquí junto al asiático que se come las "r".
—Envío mis energías positivas, ustedes pueden con la gárgola. ¡Destruyan el monopolio católico de una vez!
Y así tras decir aquello como si fuera un grito de guerra completamente fuera de lugar, me quedo de pie observando el espectáculo que se trae aquellos hombres en la búsqueda de la máscara de nuestro querido Darth. Que bien vendría el sonido estridente del órgano de la iglesia, pero nada. Esto es a pelo.
Correr tan rápido como un judío en el treinta y nueve, no importa en el treinta y nueve de qué siglo leas esto. El Rey Ezequiel se hizo con la cabeza y volvió con sus compañeros por la cornisa.
Mientras, en la planta baja...
¡Tachán! Y con eso terminamos el primer acto. ¿Uh? ¿A dónde ha ido todo el mundo? ¡Richelieus, rápido, id a la torre antes de que se hagan con el Lado Oscuro!
Escaleras abajo, ya podían escuchar el "hop, hop, hop, hop" de los cardenales con las porras. Estaban atrapados, no podían escapar.
Ejecutando la orden sesenta y seis-dijo el reloj de pulsera.
Se disparó un dardo por el lateral del reloj, desplegando un cable al que estaba unido. Salió por la ventana de la catedral y sobrevoló Cathedral Avenue (no se lo curran demasiado los yanquis poniendo nombres a las calles) clavándose en algún lugar en la oscuridad formando una tirolina. Todos se agarraron al único que tenía el reloj tirolina y saltaron al vacío. Detrás de ellos los cardenales se iban agarrando al cable y superponiéndose hasta hacer un puente humano que se les iba acercando cada vez más.
El dardo explosivo hará pum en cuatro, tres, dos, uno...
¡PUM!
La explosión del dardo rompió el agarre y la cuerda se desplomó. Los cardenales llovieron, llovieron hombres, como la canción compuesta por el Fantasma, ¡hallelujah! Se estrellaban sobre los coches o el asfalto de la avenida. Los héroes estaban un poco más adelante, sobrevolando el zoo del Smithsonian, y se cayeron en blandito sobre el agua del foso de los monos.
Lukanikos II salió del agua y se agitó para secarse, dejando a los aventureros preguntándose cómo se había agarrado el chucho en la tirolina sin dedos oponibles. Mojados pero vivos, volvieron andando hasta el National Mall. La policía ya se había ido, no se veía por ningún lado a la contacto ni a Chris, y la furgo tenía un cepo en la rueda y una multa por hippismo en el parabrisas.
El Monumento a Washington estaba cerrado a esas horas. Echaron la puerta abajo y entraron con la ley Solchaga en la mano. Descubrieron que la electricidad del monumento se cortaba por las noches, así que no tenían ascensor. Tocaba subir escaleras. Muchas escaleras. Puto mcguffin.
En el mirador en lo alto del obelisco había una columna en la que dejar la cabeza de gárgola de Darth Vader. Encajaba. Al examinarla con detenimiento vieron que había un agujero de entrada y otro de salida, como si alguien le hubiera pegado un tiro al bueno de Vader.
Función linterna-dijo el reloj, encendiéndose. El haz atravesó el agujero de la cabeza de piedra y siguió su curso en dirección a otro punto del parque del National Mall. Si se iban de allí, al acercarse al edificio señalado no quedaría nadie iluminando desde el obelisco. Había unos prismáticos que funcionaban con monedas, para que pudieran ver dónde terminaba el haz, pero funcionaba con monedas de cincuenta céntimos de dólar.
Podéis buscar por el suelo monedas para los prismáticos con una tirada de MENTE CD 8.
El Rey Ezequiel, por el hecho de ser americano, además de la tirada de MENTE también puede hacer una tirada de SUERTE CD 8 para ver si lleva alguna moneda en los bolsillos.
Motivo: Suerte
Tirada: 1d10
Dificultad: 8+
Resultado: 2(+4)=6 (Fracaso) [2]
Greta había estado inesperadamente callada, sumida en una especie de letargo mental o en un trance producido por un fallo de su ordenador interior, como si hubiera muerto y no le hubiera dejado intervenir en aquella etapa de la aventura. Afortunadamente, no la habían necesitado, algo sorprendente por otra parte viendo lo maulas que podían ser.
Y en el presente, mojada de agua y pis de mono, se escurría las coletas mientras contemplaba el haz de luz atravesando como un láser la cabeza de Darth Vader. Ante la necesidad de saber dónde estaba su objetivo, rebuscó en los bolsillo de sus pantalones de franela a los que dio la vuelta. Cayeron un par de preservativos femeninos, unas pipas, pelusas varias pero no dio con una sola moneda para activar los prismáticos.
-AN...AN....AN....AAAAH....- Peter Pank subia las escaleras si resuello y jadeando con unas onomatopeyas un tanto extrañas, pero son las que wordrefenrence le ha dicho que debe utilizar. Los primeros treinta segundos de subidas, Pank habia ido corriendo, saltando, brincando e incluso haciendo el pino puente...tal vez fuer apor eso que sus compañeros lo encontraron 50 escalones más arriba luchando por mantener sus pulmones dentro de su pecho y de ahí en adelante la cosa no mejoró, pues el punky se arrastraba como una cucaracha aferrandose a cada escalón para tirar de su cuerpo hasta el siguiente con expresión de estar escalando el everest.
Cuando finalmente todos llegaron arriba, Peter lo hizo unos dos minutos después continuando con su agónica y avergonzante respiración.
-AAAN...AAAAN...AAAAAAN...seguid sin mí...solo soy un las...anda si ya hemos llegao.
Tankman subió a la tirolina cuando le llegó el momento y su silueta se pudo ver contra el oscuro cielo al grito de
WIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII
Entonces cayeron al agua del foso de los monos del Smithsonian. Cuando salieron de este, totalmente empapados, el siempre alegre Tankman (sobre todos después de su reciente fallecimiento) volvió a lanzar un barniz de su sabiduría.
Me cago en Buda, que flio. ¿Desde cuando los monos necesital tanta agua? Deben sel monos malinos...
Al salir del espacio de los primates, no pudo evitar girarse hacia ellos y desearles una buena noche y mucha paz interior.
Calado hasta la artrosis y congelado hasta la artritis, Tankman instó al resto de chicos a hacer algo para entrar en calor.
Como no movel un poco, van a tenel que volvel a leanimalme en menos de una hola.
Entonces llegaron al obelisco.
¡Menos mal! ¡Un poco de ejelcicio pala entlal en calol y secalse!
Y, efectivamente, a medio camino ya estaba totalmente "entrado" en calor y seco. El problema fue que a partir de entonces empezó a sudar como un pollo y, cuando llegaron a arriba, ya estaba otra vez calado hasta los huesos y enfriándose.
Esto sel la maldita montaña lusa del consumo enelgético. Un momento, ¿qué sel esto? ¡¡Pelo si sel colega Abraham!! - Dijo recogiendo una moneda de centimo de dólar del suelo - Estal de suelte amigos, pasal del "Ape" al "Abe"
Motivo: Buscar monedas
Tirada: 1d10
Dificultad: 8+
Resultado: 7(+2)=9 (Exito) [7]
¡Click!
La moneda bajó por la ranura, rodó hacia la izquierda, cayó a un panel con pinchos, cayó de pincho en pincho mientras bajaba, llegó hasta el agujero, cayó a una cuchara que del peso se inclinó hacia abajo, haciendo que rodara por un cable hasta caer en un cesto, que giró en el extremo de un palo, y se volcó al chocar con un tope dejando caer la moneda en una hucha de cerdito. Entonces los prismáticos se abrieron.
Tankman giró el soporte para seguir el haz de luz hasta el Museo Smithsonian del Aire y el Espacio. Trump nunca contaría con ello porque nunca ha pisado un museo, no lo vería venir. Por su cristalera se veían un monton de aviones con los que poder sobrevolar la zona de seguridad alrededor de la Casa Blanca.
Habría sido todo mucho más rápido si AOC les hubiera dicho que robaran un avión del Smithsonian, pero mucho menos divertido. Tocaba volver a bajar las escaleras del Monumento a Washington y pasear por el National Mall hasta llegar allí.
Por supuesto, a esas horas el museo estaba cerrado, pero nada que no se pudiera solucionar arrojando un cubo de basura contra la cristalera.
¡CRANCH!
Había una grúa para subir a los aviones que estimaran oportunos. Uno de ellos, el más sencillo de pilotar por Gretta, era el Espíritu de San Luis, con espacio para todos. Colgaba de unos cables que llegaban hasta el techo, pero seguramente los enganches se soltarían en cuanto arrancasen los motores. El modo más fácil de salir de allí en avión era el mismo por el que entraron: cargando contra la cristalera para que se rompiera en mil pedazos como mi corazón por Elliot Page.
Al igual que con la furgo: ¿alguien quiere ir encima de las alas? Quien pilote debe hacer una tirada de suerte CD 8.
Yo me he quedado allí en el limbo existencial de la nada, estoy de pie, la gente vuela, se moja y grita mientras yo sigo estática. ¿Qué ha pasado? Pues al ruedo, también hago lo propio y me lanzo cual tarzán en medio de todo ello hasta terminar empapada. No sé como estoy aquí y no sé que debemos hacer, he perdido el hilo de esto. ¡Perdida total!
Pero tengo ganas de más y ese obelisco nos dice hola. Y allí voy, hay que subir escaleras subimos y si debemos pilotar, lo haremos.
—Yo voy a pilotear este bebé. ¡Vamos!
Y no lo dudo, allí me subo y voy recordando mis momentos de aprendizaje en la Academia militar.
Motivo: pilotar
Tirada: 1d10
Dificultad: 8+
Resultado: 7(+3)=10 (Exito) [7]
Supongo que iré colgada de uno de los alerones. Todos en el entorno reaccionaban como si fueran hormigas a las que un niño, con retraso pateo el hormiguero, y por lo que la rusa vio no era la única. ¿Estaba en modo automático?, oye ¿Carola también estaba estática?. Habría y cerraba los puños para comprobar que se podía mover. ¿Acaso el Punky me inyecto algo?. Sin hacer más preguntas astrales e innecesarias, fuera de la trama, se agarro de uno de los alerones de la avioneta que parecía tan vieja como su abuela.
Agárrense fuerte, por que creo que esto será Free Style. La razón de las palabras, eran que no estaba segura que la piloto supiera lo que hacía, pero si instinto femenino estaba por encima de su sentido común. Haciendo gestos al resto, para que se montarán, espero a que la piloto encendiera a la bestia.
Motivo: Espiritu Sovietico
Tirada: 1d10
Dificultad: 10+
Resultado: 5(+2)=7 (Fracaso) [5]
Mi error, confusión con los dados XD. Pero mejor se queda así.
Psdt: Ya me puse al día, que si no me conectaba hoy, me harían auto kill XD
El Rey Ezekiel estaba alucinando cuando vio que se disparó un dardo por uno de los laterales del reloj de pulsera, formando una tirolina. Aquello le recordaba a las películas de Indiana Jones o al videojuego Uncharted, al que le había echado bastantes horas.
Cuando finalmente llegaron al Museo Smithsonian del Aire y y el Espacio, el afroamericano lo flipó aún más al ver aquellos aviones que tendrían que pilotar. Se dirigió a la cabina del Espíritu de San Luis para comenzar a pilotar, pero algo le dijo que aquella podía no ser la mejor opción cuando hizo arrancar los motores.
-Eh... Esto... Greta, ¿pilotas tú? -le preguntó a la adolescente con TOC, viendo que seguramente fueran a estrellarse si seguía él a los mandos de la nave. No obstante, al ver que Carola ya se ocupaba, supo que Greta no era necesaria-. ¡Así se hace, hermana! -felicitó a Carola.
Motivo: Suerte (Pilotar)
Tirada: 1d10
Dificultad: 8+
Resultado: 3(+3)=6 (Fracaso) [3]
Me pisaste, Carola. Auch!
-AJA! Ahora si que vamos a volar...si Campanilla me viera ahora...¡dijo que sin ella no podría hacerlo! Ahora verá. ¡Vamos Wendy!- no estaba muy claro a quien se refería pero sube sin dudarlo al avión con los brazos extendidos y haciendo sonidos de motor a reacción- FUUUUUUUUUU FUUUUUU FUFU FUUUUU- grita al tiempo que juega con los mandos que Carola tiene agarrados...por suerte ve que eso va a salir mal y los suelta a tiempo de tener complicaciones mayores.- ¡vamos niña perdida!
Motivo: volarás volarás!
Tirada: 1d10
Dificultad: 8+
Resultado: 4(+2)=6 (Fracaso) [4]