Partida Rol por web

Caballería de Saburunda

El ejercito se reúne en la colina cercana a la ciudad. Solo la caballería ha sido convocada para el asalto a Lucrecia. Más adelante te enteras, por parte de los generales que están al mando, que han llegado nuevas noticias. La decisión de llevar solo a los jinetes se había tenido que tomar a última hora. La urgencia que había era tal que no podían permitirse movilizar también a los soldados de a pie. Cabalgando a paso ligero podríais llegar en tan solo 4 días... en vez de 12-14 días que se tarda a pie.

El último informe por parte de los mogu era que los rebeldes ya habían conseguido traspasar las murallas y que solo quedaba el castillo para ser tomado. Según la información que tenéis disponible, las fuerzas rebeldes están capitaneadas por parte de la guardia. Con la milicia como apoyo han conseguido reducir dramáticamente el número de efectivos que defienden al conde. Eran muchos para contarlos y además estaban bien armados. Se habían hecho con la armería en primer lugar tomado por sorpresa a los defensores. Los mogu aseguraban que los que se parapetaban entre los muros del castillo no aguantarían ni una semana...

La cuestión ahora era decidir la ruta a seguir. Los generales confían en tus conocimientos para decidir una de las dos opciones. Al ser tu ciudad debías saber como llegar de forma más rápida y segura a Lucrecia...

Debías tomar una decisión rápida que probablemente afectaría al curso de la batalla.  

Cogeremos la ruta mas rápida.Un escuadron que vaya por el camino mas lento, asi al llegar pronto, prepararemos un ataque sorpresa o defensa del castillo.Al repartir al grupo iremos más rápido.Si tienen exploradores repartidos, podrán ver al grupo del camino lento, teniendo que separar sus fuerzas.- dice Marish a los demas.

Si la suerte esta con nosotros gracias a nuestros Dioses, dividiremos sus fuerzas y no se esperaran que lleguemos tan rápido.- dice con tono firme, mientras estudia la estrategia de como deberían estar preparadas las fuerzas rebeldes.

Una vez alli, tendremos que aún dividirlos mas con alguna distracción, para tomar el control de la armería y los víveres.Sin armas ni comida, se volveran más débiles.- dice ultimando sus palabras.

Tomas la decisión de tomar el camino más lento pero más corto. Ese camino te llevaría a ti y a tus hombres medio día menos que al resto de tropas llegar a Lucrecia. Era un sendero más peligroso por tener que atravesar el rió y el bosque pero valía la pena adelantarse así el máximo de tiempo posible, si con eso salvabas la ciudad.

La primera jornada pasó sin problemas. En la segunda fuisteis sorprendidos por un grupo de bandidos que se había apostado en una cueva. Eso hizo que varios de los jinetes cayeran y perdierais un par de horas de viaje. Por desgracia dejaron heridos a 7 hombres y hubo 3 bajas. (De los 100 hombres ya solo quedaban 90 para luchar) 

La tercera jornada era una de las que más temíais por tener que pasar el río. Para encontrar el camino por el que pasar de forma segura debíais situaros en una parte poco profunda del rió. Ya no podíais arriesgaros a perder más hombres así que bordeasteis el río hasta encontrar un lugar seguro. Eso os retrasó varias horas más...

Finalmente el último tramo por el bosque se pudo atravesar sin problemas. No había rebeldes a la vista ni ningún tipo de campamento montado en los alrededores de la ciudad. 

Llegáis al atardecer del 4 día...

El sol empezaba a ponerse por el horizonte. Los mensajeros mogu os informan de que las tropas que van por el sur todavía no han llegado a la posición acordada. Suponéis que durante la noche llegarán los refuerzos...

♦≈•≈♦≈•≈♦≈•≈♦ Fin del Capítulo 3 ♦≈•≈♦≈•≈♦≈•≈♦

Me llevé la mano al cogote pasando mis dedos y entrelezando el pelo entre ellos. Intentaba asimilar la información y me quedé pensativa. Estaba seguro que Xerina sabría cómo actuar o tendría el conocimiento necesario, yo todavía era una novata y había aprendido lo justo. Si lo que habían encontrado era la lágrima de Yue de la cual nunca había oído a hablar, tendríamos que recuperarla de nuevo. Intenté unir cabos.

—Entonces... —comencé a explicar—, ese cristal, esa lágrima de Yue, ¿cómo es? —inquirí curiosa—, ¿lo suficientemente grande como para mirar a través de ella? Tal vez sea una especie de lente con la que mirar las páginas en blanco del libro —comenté al anciano para ver si opinaba lo mismo que yo—. Habrá que idear un plan para recuperarla, ¿qué sugieres?

Doromus te describe detalladamente como es la lagrima de Yue...

Al parecer era un cristal del tamaño de un puño. Según le contó Mariscal a Doromus lo había encontrado en el piso superior de la Torre de los Magos tras pasar una serie de pruebas a las que solo el podía acceder.

- El caballero me dijo que allí en la torre podría volver a conseguir otro. Que los cristales venían de un cristal mayor como del tamaño de dos o tres hombres.

- Si, es posible que funcione como algún tipo de lente. Dice antes de contarte que según sus sospechas la luz lunar le otorgaba un cierto resplandor especial. Quizás esa fuese la clave.

- Tenemos dos opciones... recuperar el cristal que custodia el Magistrado en sus casa o volver a la Torre de los Magos y extraer otro fragmento del cristal "madre".

Doromus también te cuenta que la Torre esta protegida por guardias y que posiblemente el Magistrado no sepa que de allí se puedan extraer más cristales.

- Puede que ahora que tiene el cristal en su poder no vigile la Torre tan de cerca... es probable conseguir un nuevo cristal. Si optamos por eso hay que saltarse la vigilancia de la torre que esta custodiada día y noche. En cambio si intentamos recuperar el cristal que posee el juez, es posible que nos sea más fácil.

- Creo que lo mejor sería volver a la torre y ver si los guardias siguen allí, que opciones tenemos para entrar. en caso de que nos sea imposible podemos intentar colarnos en la casa del magistrado... aunque me temo que eso tampoco sea fácil.

Larey se levanta para retirarse.

- Bueno, sea como fuere debes descansar. Esta noche será el momento de actuar y debes estar recuperada de tu desafortunado encuentro. Hablando de eso... veré si la guardia sabe algo del asesino que te asaltó.

Yo no iba a decidir por ellos, no me correspondía a mí siendo yo la invitada y la "nueva". Así que les deje hablar exponiendo sus ideas y cuando llegó mi turno asentí a la idea de la pelirroja, Larey creo que se llamaba. Llevaba durmiendo casi todo el día y no tenía muchas ganas de descansar salvo que tuviera algún libro o algún medio para distraerme hasta la noche...

—Está bien —respondí a la chica y me acomodé en la cama aprovechando el último minuto en ella, no sabía cuando volvería a echarla de menos—.

Después de todo lo que te han explicado se marchan para descansar. Doromus no había dormido en toda la noche anterior y ya estaba mayor para esas cosas.

Larey regresa al cabo de un rato y te informa de que no ha habido novedades acerca del paradero del asaltante. Los guardias no tienen noticias de él. Entonces te aconseja darte un baño y te acompaña...

Te ayuda a orientarte en el gran palacio, que para ti no es más que un montón de pasillos y puertas que llevan a estancias lujosas y confortables. Finalmente llegas a los baños que están en el piso inferior. Ahí te relajas porfin...

Junto a la suciedad de tu cuerpo se desvanecen también tus preocupaciones. Por desgracia a diferencia de la mugre, estas no tardarían en regresar...

¿En que te estabas metiendo? ¿Los dioses querían que pasaras por todo eso? ¿Y con que finalidad? Demasiadas preguntas... 

Finalmente sales del baño con ropa limpia y seca que te hace sentir mejor que nunca, pese a la herida. Te paseas por palacio sin saber muy bien a donde ir. Te quedas mirando el cielo a través de uno de los ventanales mientras ves pasar el tiempo y te preguntas que será de ti a partir de ahora...

♦≈•≈♦≈•≈♦≈•≈♦ Fin del Capítulo 3 ♦≈•≈♦≈•≈♦≈•≈♦