Partida Rol por web

Os empezasteis a aproximar a la base de la torre en busca de una entrada en su interior y no tardasteis mucho en ver la puerta principal del edificio que os detuvo en la entrada. En su mano portaba una extraña pistola y la punta de un cigarrillo encendido brillaba en su boca.- Id entregándome los cilindros por parejas y diciéndome vuestros nombres. Ambos cilindros.- Parecía una profesora así que decidisteis hacerlo. De dos en dos fuisteis pasando y fuisteis entregando los cilindros a la mujer la cual iba cogiendo por orden un cilindro de cada color y lo colocaba en el arma como si de cartuchos se trataran, hacia algunos cambios en el arma y posteriormente disparaba el arma haciendo saltar una chapita de escasos 3 milímetros de grosor con vuestras iniciales inscritas en ella y otras letras en la parte posterior.- Podréis usar  la chapa como tarjeta electrónica en la academia dándoos acceso a algunas secciones de esta. Biblioteca, arena de entrenamiento, el taller, etc. También os dará acceso a una de breve  descarga de información en vuestro móvil que podría seros de utilidad. Simplemente acercándola a este. Nada que no podáis encontrar en la biblioteca o preguntando un profesor. - Dijo la mujer mientras daba otra calada a su cigarrillo.

-Ahora subir hasta la azotea y entrar a uno de los trasporte, cuando este esté ocupado totalmente partirá hacia la academia. Allí podréis descansar y por la mañana Oz os estará esperando para felicitaros por la llegada y explicaros el funcionamiento de las clases.- Dijo dándoos paso al interior del edificio mientras os entregaba la chapita del tamaño de una moneda. Cuando agarrasteis dicha chapa visteis la inicial de vuestro nombre y en la parte inferior las letras STRS, las cuales carecían de significado para vosotros en ese momento.

Quien se dio la vuelta de camino al interior del edificio pudo ver como la mujer sacaba una pantalla, se quedaba mirándola para posteriormente soltar un chasquido. Caminasteis hasta la parte superior del edificio y entrasteis en una nave exactamente igual que en la que habíais llegado a excepción de que esta estaba diáfana en el interior, esta vez no había compartimientos.

Estuvisteis un rato esperando hasta que finalmente llegaron dos muchachas, una de pelo azul y portando una espada del mismo color y otra con lo que parecían unas tijeras gigantes colgadas a su espalda. Tras llegas ellas el trasporte se puso en marcha hacia la academia.