Partida Rol por web

Ofrezco mi arma a Sauch.

Cojala-susurró-no quiero matarlo...quiero que sufra...que sufra y que nos cuente todo, pero si tengo que estar un segundo más junto a él apretaré el gatillo y le volaré sus malditos sesos

No miro a los ojos al periodista mientras hablo. SImplemente le tiendo la pistola

La poca luz que había en el exterior hizo guiñar los ojos a Joseph. Le había costado una eternidad subir los escalones con Peter en brazos. Le dolían la mano y la pierna, lo suficiente como para tener que tomarse un respiro cuando bajó y a mitad de camino de la subida.
Tendrían que llevar el cuerpo del detective en el coche con ellos.
Mientras Sauch se ocupaba del coche, Hudson se acercó a Samantha.

Tendremos que contar lo que ha pasado aquí. Vamos a volver con un muerto y sin el niño. Habrá que dar muchas explicaciones. ¿Cree que podrá hacerlo?

Sauch aún no ha cogido mi arma. SImplemente se ha quedado mirandome asombrado. Tengo ganas de gritar, llorar, correr....pero sobre todo tengo ganas de matar aquel tipejo.

Ofezco mi arma ahora a Hudson.

Si estoy cerca de él lo mataré, si tengo esto en mis manos acabaré disparandolo-digo señalando a Ambrose-devuelvamela cuando haya pasado todo...

Me quedo en silencio, apoyada en el coche pensando en la pregunta de Hudson. Levanto la mirada y miro directamente a Hudson a los ojos. Tanta rivalidad...si en vez de discutir hubiesemos colaborado un poco más...

Seré capaz, no se preocupe. Lo que sea con tal de que este desgraciado sufra y nos dé una explicación...aunque dudoo que exista una explicación razonable.Ah.. Le tiendo la mano para estrecharsela Y...gracias por todo

Hudson estrechó la mano de Samantha.

Gracias a usted señorita Clark ... Samantha. Lamento su pérdida.

Fueron las últimas palabras que Hudson pronunció. Hasta que no llegaran a la ciudad no volvería a hablar.

En qué clase de mundo estamos.
Nosotros mismos traicionamos a nuestros semejantes.
Algunos venden a sus hijos para su propia gloria.
Nuestras diferencia juegan en nuestra contra, no nos complementan.
Aquellos que creen hacer lo correcto terminan desatando el mal.
No queremos ver lo que se nos muestra como verdadero.
No creemos en aquellos que nos muestran algo de la verdad.
Aquello en lo que creemos se derrumba en unos segundos.
Nuestros seres queridos jamás estarán a salvo por mucho que nos esforcemos.
Aquello que emprendamos puede estar destinado al fracaso desde el primer instante.
Siempre habrá alguien por encima de nosotros.
Y lo peor, nadie creerá jamás la verdad, porque nisiquera quienes conocen una parte quieren creerla.

Sus últimos pensamientos se pierden en su propia memoria justo cuando cierra la puerta del coche.

Me senté en el asiento delantero...yo les había avisado. No sabía si aguantaría el viaje completo sin meter un tiro entre los ojos a aquel maldito bastardo. Sentandome en el asiento delantero evitaría en parte la tentación. Veía a Sauch a traves del retrovisor mirandonos interrogante.

Pero ni Hudson ni yo estabamos de humor para hablar. No se lo dije, pero agradecí profundamente que por primera vez me llamase por mi nombre de pila. Ambos tendriamos que atravesar un infierno para poder recuperar nuestra vida. Puede que manteniendo un contacto nos fuese más facil, o tal vez fuese más dificil, pero no era el moemnto de pensar en ello.

Apoye mi cabeza contra el cristal mientras apretaba el arma. La tentación era muy fuerte, pero tenía que aguantar...el bastardo debía sufrir.

Todos aquellos hombres a los que he amado o podría haber amado han muerto. Lo mejor será que me mantegna alejada de aquellos a quien aprecio.-pienso amargamente. El coche arranca mientras me sumerjo cada vez más en mis pensamientos