Partida Rol por web

Yorash se limitaba a revisar sus cosas, contar su dinero, atender a su caballo, y sobre todo, buscar una buena compañía para pasar su más que posible última noche. Y en un campamento lleno de mujeres... debería ser más fácil.

Salí de la sala del maestre y me dirigí a un lugar reposado donde pudiera descansar. Fui hasta el río en donde me había bañado aquella vez y traté de concentrarme, recostada cerca de la orilla, en todo lo que más adelante iba a pasar. Puse la cabeza sobre mis manos, recostada boca arriba, observando el oscuro manto del cielo nocturno. Respiré hondo, tomando fuerza del aire, aspirando su pureza, teniendo mi vista fija en las estrellas.

Mi equipo estaba bien, mis fuerzas recuperadas, la misión se había decidido ya. Sólo restaba esperar. Ya faltaba poco, muy poco. Estaba contenta de algún raro modo. Pero supongo que es normal que una O'shar se ponga así antes de enfrentar una batalla, o algo tan díficil como lo que nos iba a tocar mañana...

Andrith va junto a las sacerdotisas de Hareth para que acojan temporalmente a Rent con ellas mientras dura la misión y luego a comunicarle a Rent las novedades y decirle que sayude pero sin ponerse en peligro, ni acercarse al frente de batalla para nada.

Las Sacerdotisas y Sacerdotes de Hareth no te ponen ninguna pega por dejarles al cuidado de Rent, te promoten que lo cuidaran muy bien.

Otro asunto es Rent, en cuanto le cuentas que se tiene que quedar con las sacerdotisas por que tu te vas, notas como su rostro pasa de una decepcion y tristeza inicial a un monumental enfado despues.

Se te queda cruzado de brazos delante, moviendo la cabeza a uno y a otro lado en señal de negativa.

- Me prometiste que cuidarias de mi, que me llevarias contigo y que me convertiria en un Hijo de Ihvist.... y ahora me quieres abandonar como el resto...

No te pienso abandonar y precisamente porque quiero cuidar de ti debes esperarme con las sacerdotisas. El Maestre me ha encomendado una misión que muchos considerarían suicida y aún no he tenido tiempo de entrenarte lo suficiente como para que nos acompañes. Contesta en tono autoritario pero dulce Además un futuro buen hijo de Ihvist debe saber obedecer las órdenes sin rechistar.... tras una breve pausa suspira

Te prometo que me emplearé hasta el último aliento para volver junto a ti y cuando regrese nos emplearemos más a fondo en tu entrenamiento para que no tengas que volver a quedarte atrás... al terminar le abraza Prométeme que te quedarás a salvo en la retaguardia..

Tenía por aquí apuntado que eran más de 600 monedas, pues me puse a apostar con todo lo que robaba. Si no es así, corrígeme. Total, los muertos poco me van a comprar :P

No sabía lo de las mujeres, pero bueno, algo se intentará. Viendo las posibilidades de éxito es mejor morir habiendo compartido el lecho que solo y abandonado.

Cualquier cosa ya me dices. Gracias.

A medida que le vas hablando, la actitud de Rent se va ablandando, hasta que al final rompe a llorar y se te abraza... - No quiero que tu tambien te mueras - Te dice lleno de pena.

Te alejas del Poblado, de tus nuevos compañeros, incluso de Garland, para estar a solas, incluso a la distancia a la que te encuentras ahora, aun escuchas el ruido producido por las miles de personas que habitan el pueblo, pero como un lejano murmullo.

Poco a poco va oscurenciendo, quedando una placida noche que te relaja por completo, tanto que pronto un calido sueño se apodera de ti, bajo el cielo de aquella noche estrellada.

Parece que la vida de vuelve a sonreir, apenas un dia atras eras el objeto de las toturas de los Hijos de Orlayaut, en la que dabas por sentado tu muerte, y aqui estas ahora, recorriendo las calles de este pueblo abarrotado de soldados, saboreando un dia mas, con la bolsa llena de dinero y en busca del calor de una mujer.

Poco a poco va atardeciendo, y con la llegada de la noche, las Posadas y Tabernas se llenan mas si cabe de soldados dispuestos, como tu, a sacarle el maximo probecho a la vida.

No tardas en encontrar una Posada de aspecto esperanzador... en su letrero se lee "Las Damas Coquetas" bajo un sugerente dibujo de una mujer en paños menores...

¿Cuánto había pasado? ¿Era verdad que la noche anterior sentía cómo se le desgarraba la piel y los huesos se le partían? Quizá por ello, por haber sentido la muerte tan cerca y ahora poder disfrutar de un día más, el pequeño hombre sonrió pasándose la mano por el cabello ya aseado.

Paró frente a la taberna, y puso sus manos en sus caderas. Se relamió con solo leer el título del lugar, y tanteando su bolsa nuevamente adquirida, entró en el lugar intentando pasar desapercibido como hacía siempre. "Un hombre puede vivir poco o mucho, pero un hombre que no existe vive eternamente".

Antes de entrar en el lugar se aseguró de sentir el frío tacto del metal en su muñeca. Chasqueó la lengua, y finalmente comenzó su "búsqueda".

No me moriré... al menos no mañana, tenemos muchas cosas que hacer y mucho que entrenar aún.. dice con un tono más informal para intentar animarle.

Cuando ya está bien de nuevo le dice Anda, ve a decirles a los de la caballeriza que tengan listo a Irthos para un poco antes de amanecer

Nada mas entrar en la Posada tu olfato se inunda con los aromas de diversas fragancias, mezclado con incienso asi como con la bebida y comida que estan saboreando sus clientes.

Desde luego no es la tipica Casa de Señoritas a la que puedas estar acostumbrado, ya que la planta en la que te encuentras poco se diferencia de una taberna normal, con mesas y una larga barra, donde se sirve todo tipo de comida y bebida. Claro esta, que las camareras no suelen ir tan escuetas de ropa, ni suelen tener esta apariencia tan juvenil y traviesa... dudas mucho que ninguna pase de los 25 años, todas mas bien pequeñitas (para nada lo que estas acostumbrado ultimamente con Breielssa y Sahsnot) ni delgadas ni gordas, justo en su punto, y llenas de curvas.

La Posada se encuentra a mitad de capacidad.

Yorash se limpia las lagrimas de su rostro y tras permanecer unos segundos mas abrazado a ti, se aleja para cumplir tu mision, algo mas aliviado.

Cuando se ha alejado unos 50 metros se gira y te dice: - !Lo has prometido! - Tras esto continua su camino.

Duermo y sueño. Es mi poblado, la nieve cubre los páramos, pero a la gente no le importa: salen a cazar, entrenan, aman, ríen, lloran. Es hermoso. Es un lugar familiar, cálido a pesar del frío que lo rodea. Soy feliz, sé que es sólo un sueño pero es tan bueno volver a ver a mi gente aunque sepa que no es real. Entonces, en mi sueño, el maestre aparece y me habla de una misión. Debo aceptarla, además no hay nada aquí para mí. El sueño cambia y estoy con mis compañeros, enfrento algo oscuro y lloro, lloro porque sé que mi pueblo no volverá jamás.

Marçao estaba de un humor de perros y no tenía muchas ganas de aguantar al "guapo" durante el largo día siguiente hasta la torre, así que por lo pronto decidió que debía darse una buena noche antes de empezar un mal día. Voy a ver si encuentro algo de juerga antes de acostarme, me gustaría relajarme un rato antes de dormirme, me acompañais?? Sahsnôt?? vamos estoy seguro que podríamos disfrutar de las ganancias de ayer antes de marcharnos de la ciudad.