Cuelgas el teléfono violentamente mientras escuchabas la voz de tu sire del otro lado. La habitación se inunda de silencio mientras piensas qué hacer a continuación. John no llegaría hasta mañana, según Eduardo, por lo que tenías tiempo para prepararte para su llegada, aunque sea un poco, pero ¿cuáles serían las medidas apropiadas? Conocías a los ventrue, y a pesar de que Davis te caía bien, no sabías si era buena idea dejar que te viese así, sin un solo bien del que presumir.
Movió los dedos, e hizo que sus dedos tronaran, el ventrue de seguro y tendría todo pensado, es más, de seguro ya sabría como hacerse del "principado" de aquella isla, frunció sus labios, y volvió a masajear su entrecejo, una sola noche, tampoco es que pudiera hacer mucho, se relajó, tampoco era la intensión de la abogada ufanarse de las cosas que poseía, su veta anarquista nunca la había abandonado.
Suspiró, y miró el teléfono, con la clara intensión de volverlo a usar, pero deshechó la idea,molesta. Llamó a sus hombres, y les dio la orden de salir y escoger a algunos hombres dignos de unirse al grupo, primero, habrían muchos que la protegieran, segundo, determinar donde se quedaría y para eso iría a la recepcionista para preguntarle sobre departamentos qué comprar.
Tus dos ghouls entraron a la habitación siguiendo tu llamado. Enrique estaba un poco preocupado por la forma en la que te fuiste de la recepción sin previo aviso, pero Amador parecía tan fresco como siempre. Ambos entendieron, sin embargo, qué era lo que buscabas cuando les diste sus órdenes, dispuestos a cumplirlas, y se retiraron rápidamente.
Luego de darles tiempo para que se adelanten, bajaste hasta la repeción del hotel y le preguntaste a la mujer por agencias inmobiliarias a las que puedas pedir asistencia para encontrar un lugar donde establecerte. Ella te pregunta qué clase de lugar estás buscando y finalmente, después de una búsqueda en su computadora, te ofrece el número de teléfono y dirección de varias.
Que cualidades buscás en tus nuevos criados? ¿Los vas a hacer ghouls? Y qué tipo de refugio querés?
de momento, guardias humanos, sólo los haré ghouls cuando demuestren ser aptos, y deseen, busco tipos fuertes, uno que sea sobre la ciudad, tanto callejeo como bajos fondos, otro que sepa sobre tecnología, y los demás, fuertes. Luego buscaré atrapar a un abogado XD
Hogar, algo un poco apartado, en donde pueda armar una oficina de abogados, y producir fondos.
Generalmente las oficinas de abogados se hacen en los distritos principales y, a veces, en Presidente Mendoza, si es chico. Este es el distrito residencial más que nada, así que no está muy apartado, pero hay lugares que son más tranquilos que otros. Supongo que estás buscando un lugar así.
Luego de que arreglaste todas esas cosas te preparas para dormir. Ya pronto sería el amanecer y tenías que estar bien descansada para el día siguiente, sin contar que no sería bueno desmayarse en medio del hall del hotel, o, peor aún, cerca de una ventana.
No sueñas nada durante el día y cuando te despiertas sientes que acabas de parpadear. Compruebas el reloj y efectivamente ves que es hora de levantarte.
Una vez que estás preparada sales de tu parte de la habitación del hotel y compruebas a tus dos ghouls. Ambos están dormidos aún. Debió haber sido un largo día para ellos, ya que no se fueron a dormir luego de que tú lo hicieses y no tenías manera de saber hasta qué hora estuvieron trabajando. ¿Deberías despertarlos o dejarlos un rato más?
En cualquier caso, era hora de que te dirigieses a las inmobiliarias que te dijo la recepcionista. Seguramente no habría problema en ir hasta ahí sola, ¿o sí? No tenías enemigos en esta isla, aún, y solo era un viaje.
Dormían apaciblemente, así los vio desde la puerta, ambos se habían quedado incluso con sus ropas de diario, los había vencido el sueño, eran humanos después de todo, pero la vampiresa de todas formas se acercó a Amador, sentándose en el borde de la cama, y paso su mano más tibia por su frente, muy suave, inclinándose para besar sus labios, deseaba despertarlo para decirle lo que haría, con él, se comportaba como una humana, a veces por lo menos, le era mucho más cómodo así.
- despierta bella durmiente...- susurró en su oído.
Despiertas al hombre entre caricias. Al sentir tu presencia, Amador te mira con ojos adormilados. - ¿Qué? - Pregunta antes de darse cuenta quién lo estaba sacando de su sueño. Cuando entiende que es su ama, se incorpora de un salto que hace que tengas que aumentar la distancia para que no te pegue un cabezaso. -Ehh, lo siento, señora. - Dice aun no totalmente despierto. - ¿Qué sucede? -
Se echa hacia atrás, dejándolo sentarse en la cama, la vampiresa disfruta de los cambios en si respiración y en los latidos de su corazón, le había dado un ligero susto.
- iré a una reunión con el corredor de propiedades, para buscar nuestro hogar, sé que se quedaron durante el día despiertos, así que no es necesario que me acompañen, a menos que quieras... claro - murmuró, pasando su mano por su mejilla, sólo la punta de sus yemas tibias.
Al escucharte, el hombre se incorpora en la cama. -No, por favor, permítame acompañarla. - Te dice mientras se para y busca su ropa. -¡Enrique, levántate! - Llama a su compañero una vez que se puso la mayoría del atuendo menos el saco. -La señora nos necesita. -
Un par de minutos después ambos guardaespaldas estaban levantados y ya casi listos para acompañarte. Se notaba el cansancio en sus caras y probablemente mejorarían si desayunaban, pero sabías que podían sacrificar eso si se los pedías.
Los ve cansados, las sendas ojeras que asomaban en los ojos de ambos era indicio de que los pobres estaban demasiado agotados, luego, cuando consiguieran a otros hombres, les ofrecería la vida eterna, pero tendría que meditarlo aun. La vampiresa mueve la cabeza, de lado a lado pero se pone de pie y camina hacia la puerta,
-les tendré dos copas listas, arréglense- se refería a la sangre, con eso recuperarían mas fuerzas y se sentirían plenos, tampoco habían tomado desde el día anterior a viajar, ya era el momento. Fue hacia la sala de estar en la habitación y sacó dos copas, ahí, mordió su muñeca y vertió un poco de sangre en cada una, lamiéndose, necesitaba también encontrar la forma de conseguir más alimentos.
Aguardo por sus guarda espaldas, de pie ante la ventana, con un gesto solmne, averiguaría los eventos donde el alcalde de esa ciudad estaría, y se reía de si misma, parecía una ventrue mas que una anarquista brujah, John pronto llegaría y podría dejar en sus manos los jueguitos del principado, que para ella no eran tan entretenidos. Alma libre después de todo.
Les llevas las copas a tus ghouls con una sonrisa en tus labios. Cuando se las ofreces la agarran sin pensarlo mucho y dan un largo trago. Tan solo un minuto después, estaban listos para acompañarte.
Mientras bajan por el ascensor, te van contando sobre los hombres que pudieron reunir. -Yo me encargué de la fuerza manual. - Dice Enrique. -Estuve buscando en lugares como gimnasios, clubes deportivos y otros lugares por el estilo por gente que pudiese servirnos para nuestra empresa. - Hizo una pausa. -Desgraciadamente solo pude encontrar una persona que pudiese tener el perfil que necesitamos. Un boxeador de un club. Tiene buen peso y anda buscando laburo. -
Luego de eso, es el turno de Amador. -Yo estuve buscando al tipo de tecnología y al de los bajos fondos. Los especialistas. - Te dice. -Sobre el primero, encontré un tipo que podría ayudarnos. Un profesor de universidad en sus 40. Se especializa en redes de computación. - Hizo una pausa. -También hay un ex detective de la policía, también en sus 40, que podría ser nuestro enganche en los bajos fondos. Estuve haciendo un poco de investigación y si es cierto, parece que fue despedido por lios de faldas hace un par de años. Se gana la vida como puede actualmente. -
Para cuando Amador termina de hablar, ya están saliendo del hotel, buscando por un taxi.
Tirada oculta
Motivo: Percepcion-Callejeo
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Éxitos: -1 Pifia
Bajate un punto de sangre.
¿Supongo que vas en taxi?
El informe que le dan sus pequeños le gusta mucho, incluso el policía, a pesar de encargarse de los bajos fondos, debe tener conocimientos de armas, así que sería un elemento mixto. Acarició la mejilla de ambos, y siguieron bajando hasta el hall, y de ahí, a la entrada, en donde pidieron un taxi. Ella, sentada entre los dos guardias, suspiró.
- me gustan las opciones, trataran ustedes con ellos, hasta comprobar si son dignos de saber más, - apoya su cabeza en el hombro de Amador - además, tendremos pronto otro sujeto... un antiguo amigo, así que tan solos no estaremos.. ah, por cierto, hay que buscar algún abogado, para poder meternos en eso... hay que trabajar mis pequeños - sonrió, y pasó su lengua por su labio inferior. Ocupó su habilidad, y su piel se sintió más cálida, quizás, así sería más agradable para los dos humanos.
Ambos hombres asienten y, antes de entrar al taxi, te preguntan si quieres que se pongan a ello ahora. Después de eso terminas de subirte al auto y le das la dirección de la inmobiliaria.
El lugar es una oficina discreta, con una gran ventana que daba a la calle en lugar de fachada. Dentro se podía ver una recepción de color blanco aniz con una mujer en un escritorio moderno. También estaban disponibles una serie de cartelitos con algunas propiedades que estaban en venta o alquiler y eran promocionadas por el lugar.
Entras a la recepción y le pides a la mujer detrás del escritorio por una entrevista con uno de los agentes del lugar. La misma te dice que esperes por unos minutos y serás atendida.
Gastaste un punto de sangre.
Por cierto, ¿dónde estás tomando nota de los puntos de sangre?
Si les decís a tus guardaespaldas que lo hagan ahora, no te siguen hasta la inmobiliaria, obviamente.
Los miró con una ceja levantada y les dijo que era obvio que lo harían después, que debían primero resolver aquel asunto y luego, podrían realizar lo que les encomendaba. la vampiresa, ya arriba del taxi, dio las indicaciones, y este los llevó a la inmobiliaria, serían atendidos y la vampiresa sentía una impaciencia algo infantil, siempre le había gustado comprar cosas, en esa vida con mas tiempo, se podía vivir en muchos lugares distintos. espero ser llamada y revisó el celular para ver si había llegado algún mensaje importante.
Impaciente, te fijas en tu celular a ver si tenías una llamada o mensaje de Eduardo, o mejor aún, de John. Sin embargo te encuentras con una casilla vacía. Frunciendo el seño, guardas tu teléfono en la cartera. Más le valía a tu sire no estar ofendido por lo de ayer. Después de todo, fue su culpa el que te enojes, reclamándote resultados en tan poco tiempo.
En eso pensabas cuando la recepcionista los llamó. Te acercaste al escritorio y hablaron unos segundos. Te dijo que el agente de inmobiliaria ya estaba disponible y que los recibiría en ese momento. Con una sonrisa, te indicó por dónde ir hasta llegar a su oficina.
El despacho del agente ya no estaba hecho de marmol, sino de un material más común para un lugar de trabajo, un tanto menos lujoso pero también bastante limpio. Detrás del escritorio había un muchacho trajeado, de aspecto joven, que se levantó para recibirlos. -Buenas noches, soy Raúl. - Anunció estrechando tu mano. Luego volvió a sentarse en su lugar y les señaló un par de sillas para ustedes. -Ahora, cuéntenme qué buscan. - Propuso.
Che, te lo vuelvo a preguntar, dónde guardás los puntos de sangre? d:
Debiendo nuevamente calentar su cuerpo, la vampiresa estrecha su mano con el hombre, estudíandolo, era sólo un trabajador más, no había lujo en su despacho, quizás no era precisamente el más sofisticado, pero era suficiente, o eso estimaba. Sonrió, era tan encantadora, que era imposible saber su naturaleza.
- pues, soy abogada, y deseo crear una firma aquí, y busco algo elegante, céntrico, agradable para atender a clientes, y claro, que sirva de casa para mi y mis guarda espaldas - expone claramente acariciando sus manos.
en mi ficha, mira, en puntos de sangre.
El hombre no deja de sonreír mientras le hablas y finalmente te dice que tiene algunas propiedades que te podrían interesar. -Bueno, la mayoría de los estudios grandes están dispuestos aquí mismo en el distrito 7 de Mayo, pero eso no quiere decir que sea el único. - Hizo una pausa antes de seguir. -Aquellos más pequeños generalmente se asientan en Presidente Mendoza, y, naturalmente, en Don Fabrizio también se pueden encontrar, aunque, según tengo entendido, la cartera de clientes de esos estudios se limita a multinacionales y empresas grandes, y generalmente trabajan en equipos. -
Se levantó de su escritorio y fue hacia unos archivos que tenía detrás, sacando carpetas de diferentes cajones. -Si quiere algo céntrico, le recomiendo empezar por 7 de Mayo. - Dijo mientras te entregaba una de las mismas, la cual tenía el nombre del barrio junto con la etiqueta "departamentos/complejos 01". -Los apartamentos están organizadas por ambientes, así que busque el número que usted desee y dígame. - Dijo mientras se recostaba en su silla, esperando tu respuesta.
La inmobiliaria tiene varios pisos para ofrecerte. Más o menos describime lo que buscás y vemos cómo hacemos. Recordá que un departamento virtualmente igual en Presidente Mendoza saldría más barato, por si se te va de presupuesto. Claro, siempre podés transmitar un préstamo, pero lleva tiempo.
Recordá que sos gen. 9, así que tenés 14 puntos de sangre máx.
- pues...- miró las opciones, - empezaremos con algo pequeño, hemos recièn llegado, y ya sabe - no termina la frase, por considerarla redundante - me parece ver los de Presidente Mendoza, busco un despacho y dos oficina, y una planta donde exista donde vivir con mis guarda espaldas, dos o tres habitaciones, y todo lo necesario... ¿què tiene en ese estilo? - pregunta mirando uno de ellos, de lineas modernas que le parecìa muy agradable.
El hombre, un poco sorprendido por la ligereza con la que usabas el término "guardaespaldas", te ofrece la otra carpeta, la cual tenía el nombre del otro distrito, y la abre más o menos donde vos buscás. -Bueno, tenemos lugares de cinco ambientes, por supuesto. - Hizo una pausa. -Sin embargo, en Presidente Mendoza la mayoría de lugares así son casas, no hay muchos apartamentos con tanto espacio. Claro que podemos buscar uno que se ajuste a sus conveniencias. - Fueron pasando las páginas una a una mientras vos te fijabas en las características de los lugares, las fotos, el precio, y otras cosas. La mayoría de los inmuebles estaban valuadas en 200mil a 500mil dólares. Por supuesto, había aquellos que superaban esa cantidad con creces.