¿ A cuántos de más apuntas ?
-Bene est, voto a Dios que alla estaré.
Creí que eramos 4 jugadores.
¿ le falta mucho al siguiente?
màximo 2
Jose y Antonio Gonzalez o perez, con los apellidos mas comunes castellanos del momento, al igual que sus nombres.
-Ningún problema tengo con su nombre amigo Queitano, si lo ofendí no fué esa mi intención. Y ahora si me disculpa, tengo que comprar algunas armas que me hacen falta.- Y despues de coger el pagaré hago un saludo firme con la cabeza, me doy la vuelta y me dirijo hacia la puerta. Pero antes de irme deténgome y busco con la mirada a Ignacio. Este hombrecillo curioso que encontré en la cola para el alistamiento.- Bien me vendría la compaña de un buen hombre en esta tierra, y no estar tan solo.- Pienso, así que vuelvo sobre mis pasos y me dirijo hacia Ignacio.- ¿Ignacio Lopez, le gustaría acompañarme?. Llevo poco tiempo en esta tierra, y me vendría bien la compaña de un buen hombre, y a mi parecer vos lo sois. Tengo que comprar armas y quizás vos sepais donde encontrarlas mejor que yo.
Haz una tirada de 1d100 ( y tienes que sacar tu Habilidad x2 o menos para que nadie se dé cuenta de que estás mangando dinero.
- No es gueno que el homine este solo. Ego tambien queria comprar alguna cosa más, pues la aventura y la sorpresa, mejores son con los zurrones llenos et colmados.
-Vayamos pues et yo el primero, a comerciar con el rufian ese que vende aperos, pues la sangre de ladrones más honestos derramé yo en la vieja España. Ese truhan fecho se ha de oro, con unos precios de abuso et unicos , pues unicos son.
20 alcanzan para poco en aquesta tierra.
Claudio e Ignacio abandonan la escena.
jejeje, no crei que la sacara ;O)
Motivo: sisa
Tirada: 1d100
Dificultad: 28-
Resultado: 8 (Exito)
Metiendo la mano en la bolsa, sacas 40 Reales de Plata el equivalente al adelanto de dos de los soldados. Mientras tanto, Don Diego sigue hablando y animando a los que ya se han apuntado.
Al poco tiempo, la gente empieza a marcharse de la taberna y Diego te mira y te hace un gesto para que empieces a desmontar el tenderete mientras él sale fuera.
Una vez terminados los apuntes y reclutamientos procedo por orden de Almagro a retirar todos los enseres, documentacion y demás; despues ya en mi habitaculo descansare un rato, por lo que pueda acontecer. Cuando me levante ire poniendo las cuentas al día.
Te hace un gesto para que salgas fuera, siguiéndole al exterior donde refresca ya a la caída de la tarde, te espeta
- Vamos Queitano, a casa del gobernador. Hemos sido citados para cenar y hablar sobre aquesta empresa. Sígueme presto. - y diciendo ésto camina en dirección a la gran villa de piedra propiedad del gobernador de Panamá.