Partida Rol por web

Joder, con la tontería, te avisé y no la colgué en la ficha. Aquí la tienes XD

Hazme el favor de repasar una vez más la ficha, que no estaba terminada del todo. 

Al final me he puesto Ofuscación 3... Espero que me lo permitas, que sino las voy a pasar muy putas. Aunque en verdad, con la reserva de mierda que tengo para tirar la Máscara de las Mil Caras, va a dar lo mismo XD

Vale, algo rápido.

Esa mañana estábamos ante un caso que conmocionaba al departamento, un niño había desaparecido en extrañas circunstancias dos noches atrás y el único testigo, un amigo de la familia, se aferraba a la presunción de inocencia por falta de pruebas y motivos aunque todas las direcciones apuntaban a él.

La ley tiene puntos exactos, normas que estipulan que sin un cadáver o una confesión no hay delito y estaba seguro que al menos una de ellas podría conseguir. El abogado, un hombre de baja estatura posiblemente colocado de oficio no hacía más que repetir lo que todos ya sabíamos, mareando a los agentes e intentando archivar el caso donde posiblemente en un par de años quedaría en el olvido.

Sin embargo había algo en mi interior que me decía que era culpable. Puede que fuera su falta de empatía con los padres, la sonrisa hacia nosotros cada vez que llegábamos a un callejón sin salida o el papel de víctima que en ocasiones daba a la prensa, haciendo que me hirviera la sangre y palpitara las venas en mi puño cerrado, prometiéndome que me encargaría personalmente de que el muchacho pudiera descansar en paz.

Esa noche me presenté en su casa. Aquél capullo no esperaba que un policía armado se colara a través de una ventana y le sacara una confesión mientras le partía el brazo. Cantó todo lo ocurrido entre lágrimas y gritos de dolor, detalles que nadie más que la policía sabía y definitivamente le delataban. Me aseguré de que no apareciera mi nombre ni lo que había ocurrido en esta conversación y el caso se cerró satisfactoriamente.

Ahora el tío está en prisión cumpliendo condena, ¿yo? Sentado en la oficina con una sonrisa, sabiendo que había hecho bien mi trabajo.

Genial vuestra conversación, en serio, me encanta. La idea del personaje de Olivia me pareció un poco rebuscada y que podía chirríar mucho pero te está quedando formidable. El contrapunto de Jacobo en esa escena como atadura a la realidad y redactor del pasado me ha puesto los pelos de punta. 

Ok a vuestras fichas. Jacobo, estoy de acuerdo con Ofuscación 3, sin ella los nosferatu solo pueden ser pnjs. Pero sí, con dos dados en tu reserva de dados lo vas a tener complicado, jeje. Con el tiempo, si eliges un aspecto que lucir una y otra vez te iré bajando la dificultad para esa forma.

El relato es el mejor que me ha llegado. Podéis subiros una cosa que queráis en la ficha. 

Perfecto, me gusta. Súbete un punto en la ficha en algo que tenga que ver con el relato. 

Si se puede subir Atributos, me subo Fuerza (el tema de partirle el brazo), sino me subiría Intimidación.

Ya me dices cuál de las dos :)

Una cosa, en la conversación decís que venís huyendo de Valladolid porque allí gobierna el Sabbat y justo da la casualidad de que en Valladolid gobierna la camarilla. Bien podéis cambiar la ciudad o haber decidido cambiar de ciudad porque el principe de Valladolid no ve bien la forma en la que fuisteis abrazados ninguno de los dos que no encaja del todo con las formas camarilla y os ha estado molestando un poco. 

Preferiría algo que tenga que ver con lo segundo, así podemos aprovechar la parte de vuestro trasfondo allí. 

Intimidación suena bien. 

¿Y si era una manada del Sabbat de esas que tanto odia el Príncipe de Valladolid? Ya sabes, un ataque relámpago. 

Te refieres a que os trasformara una manada Sabbat? Y que luego os cambiásteis a la camarilla pero que os seguían sin ver bien? Creo que no hace falta definirlo tanto. Lo podemos dejar en vampiros no alineados que no le hacían gracia el principe de Valladolid pero que no os dificulte mucho más la historia. Pero con que me lo expliquéis y sea coherente con que al final sois neonatos camarilla en Madrid y que Valladolid se mantenga como la he descrito me vale. 

Perdón, no sé si se ha llegado a decir, ¿con qué reserva de sangre empezábamos?