Partida Rol por web

- Diablerie...!

Gruñe adana escandalizada y luego mira a su compañero que parece no afectarle nada de lo que dices. Sin embargo, este último, haciendo un ademan con su mano y casi decepcionado por el resultado suelta un breve:

- Dice la verdad.

Ante esas palabras, Adana prosigue

- Has hecho lo correcto, y mereces una explicación sincera de los motivos que mueven nuestra empresa.- La mujer se pone de pie y empieza a caminar de un lado a otro con los brazos cruzados sobre el pecho.- Como ya os contamos, nuestro grupo que cada vez adquiere más adeptos, persigue la creación de una confederación de clanes por el própio interes de estos mismos y su protección.

Sus palabras toman fuerza por momentos

- Unidos los clanes pueden reaccionar a la creciente amenaza de los humanos, cuyo número es sorprendentemente alto a pesar de la reciente Peste Negra y las Cruzadas. Castigaremos a nuestros enemigos sin piedad y aplastaremos a cualquiera de esos egocentricos antiguos que se ponga en nuestro camino; aun que con ello debamos destruir enteros linajes de los mortales que se alian con ellos y con esos rebeldes anarquistas.

El fervor empaña su discurso cuando de repente se detiene para lanzarte una mirada penetrante

- Con sus planes Claudius Giovanni amenaza a nuestra unión y por ello será detenido, juzgado y reducido a cenizas!

Se hace un silencio sepulcral en la sala, y ni Rafael recostado en una de las mugrientas sillas abre la boca

- Acudirás a Claudius y le darás la respuesta a su misiva, luego volverás a nosotros a este mismo escondite. No podemos desaprovechar esta oportunidad.

Disculpad , pero eso no sera peligroso?.Por lo que veo sois capaz de ver si digo o no la verdad y es de suponer que ese poder también lo tendrán alguno de los conspiradores, no?Levanto las manos antes de que contesten y sonrió sardónico :Bueno , supongo que solo tendré que evitar mentir diciendo lo estrictamente necesario.
Vuelvo a ejecutar una reverencia antes de decir: vuestras ordenes son mi deber.Se hará como decís aunque me cueste la vida o lo que sea esto

La vieja asiente en un gesto lleno de una extraña harmonía perturbante.

- Los Giovanni han estado convocando y congregando a espíritus de vampiros y mortales. Y a espíritus de criaturas más allá de nuestros conocimientos. Ese día, del que incluso los vástagos hablan en susurros, cuando los antediluvianos se alcen para devorar a su progenia, los nigromantes podrían ser todavía más poderosos. Ni siquiera Hardestadt lo comprende, pero yo os digo que los Giovanni deben ser vigilados... y detenidos. Sobre todo, hay que impedirles que cometan una fechoría con el alma de Japheth Cappadocius

Su mirada firme se posa en ti y puedes percibir orgullo en ella cuando entorna una valiente sonrisa

- Si alguna duda más corroe tus entrañas formulala ahora, pues cuando volvamos a vernos no habrá tiempo más que para salir al encuentro de ese cobarde traidor. Si no, parte rápido junto a él antes de que sospeche de nuestro encuentro.

Oigo y obedezco mi señora.Me levanto  y me dirijo hacia la puerta con aire decididogiro el cuello  para decir  a modo de despedida ..Se hará como habeis dicho espero estar de vuelta lo antes posible para daros  noticias frescas.

Asiento  según la anciana va hablando, esto es mucho mas comprensible que intentar discernir la voluntad de dios, aunque sigo sin entender todo lo que dice. Pero de todos modos me parece como si mi madre asintiera a sus palabras, con eso me basta.

-si, detener a la conspiración que se sello con nuestra sangre. Entiendo. ¿entonces tu no ves peligro en las pretensiones del padre de Japhet? A mi me pareció algo igualmente terrible y maravilloso. Pero ahora no estoy tan seguro sobre la voluntad de dios-

Que quiera ser un mesias para los vastagos para redimirnos suena bastante bien, aunque para querer redimirnos el debe pensar que si estamos condenados, lo cual ahora no tengo tan claro. Es todo muy confuso

- Entiendo el peligro que intuyen algunos: Si hace inmortales a todos los mortales, ¿de qué nos alimentaremos? Sin embargo, dudo que alguien sepa del cierto lo que planea el cappadocius, y hay un sentimiento mortal que prevalece en las mas inhumanas criaturas como nosotros. El miedo a lo desconocido.

La mujer aparta la mirada a un lado

- Asegurate de conocer los peligros, y aceptalos con un corazón puro. Importunar a los nigromantes te hará ganar poderosos enemigos.

Tu partida no se hace esperar y Finalmente tus pasos te llevan de nuevo ante la imponente y ya conocida posada del león, donde habías visto a tu sire y el grupo de Giovanni por última vez.

Estos no tardan en deshacer su juego de sombras para manifestarse ante ti y la sala común del lugar se queda tenue, dejandote a solas en frente de los 12 poderosos vástagos.

Claudius fija sus ojos en tí con un rictus en los labios esperando recibir las noticias de lo ocurrido

 Me llevo la mano al pecho   bajo los ojos   hasta fijar la mirada en la punta de  mis pies y  digo con voz firme.  Mi señor Claudius os traigo noticias  del  llamado Japhet. El anciano  os emplaza  dentro de 6 días  en   el monasterio   donde os recibirá.

El aristócrata se levanta ante tus palabras y empieza a caminar alrededor de la mesa en tu dirección. En la sala solo se escuchan sus botas de cuero repicar los adoquines del suelo de la posada

- Al fin y al cabo, a pesar de tu origen bastardo parece que puedes convertirte en auténtica progenie

Observas a Lady Amisa a un lado de la mesa, mas cerca que los demás. Su aspecto de nuevo, recuerda al de una araña o una serpiente, fascinante y extremadamente peligrosa a la vez. La mujer que te creo observa la escena con la misma seriedad que los demás.

- Esta es la recompensa prometida. Serás reconocido por nosotros y nos acompañarás al monasterio llegada la hora

Claudius pone la mano sobre tu hombro en simbolo de agradecimiento y su sonrisa perfila unos largos y letales colmillos en la comisura de los labios que te provoca un escalofrio

- ¿Hay algo más que debamos saber?

Me encojo de hombros antes de contestar: Japhet habla con palabras misteriosas   pero por lo que pude entender  no esta de acuerdo con que  vayais pero   obedecerá las ordenes  de su padre y os recibirá.

Señores - digo hacia los vástagos haciendo una leve reverencia - Creo que hemos descubierto algo que debais saber. La intención de ese loco de Japhet es alimentarse de los vampiros para avanzar un paso más hacia la divinidad, ¡Cree que puede convertirse en Dios o al menos rivalizar en poder con Él! Nos explicó de forma un poco críptica pasajes de un libro malkavian: si comes de las plantas te elevas sobre las plantas, si comes de los animales, te elevarás sobre los animales convirtiendote en  el Señor de los animales, si te alimentas de los hombres, te convertirás en el Señor de los Hombres... Siguiendo esta sarta de palabras cree que, como nosotros nos alimentamos de los humanos, somos superiores a ellos, cosa en la que estoy de acuerdo, pero el paso siguiente, siguiendo esa lógica es alimentarse de los propios vampiros para elvarse sobre nosotros.
En verdad creo que el hombre está loco de atar, que su perturbada mente ha urdido una mentira tanto tiempo que ahora el mismo se lo ha creido, eso.... o el hombre que está con él, un hombre joven de melena rubia e hipnóticos movimientos, lo ha convencido para ello - observo la reacción de los presentes, sobre todo de Claudius y luego termino- No obstante, nos ha pedido que vos os reunierais con él dentro de una semana, en su monasterio, cosa que sin duda me parece una trampa.
 

El aristócrata se levanta ante tus palabras y empieza a caminar alrededor de la mesa en vuestra dirección. En la sala solo se escuchan sus botas de cuero repicar los adoquines del suelo de la posada

- Al fin y al cabo, a pesar de vuestro origen bastardo parece que podéis convertiros en auténtica progenie

Observas a Lady Jadviga a un lado de la mesa, mas cerca que los demás. Su aspecto de nuevo, recuerda al de una araña o una serpiente, fascinante y extremadamente peligrosa a la vez. La mujer que te creo observa la escena con la misma seriedad que los demás.

- Esta es la recompensa prometida. Seréis reconocidos por nosotros y nos acompañareis al monasterio llegada la hora

Claudius pone la mano sobre tu hombro en simbolo de agradecimiento y su sonrisa perfila unos largos y letales colmillos en la comisura de los labios que te provoca un escalofrio

- ¿Hay algo más que debamos saber?

No creo que sea muy importante - digo ante la pregunta - pero he visto con mis propios ojos como alzaban entre los muertos a unos hombres que nos atacaron por el camino, como zombies. Desconozco el potencial en combate de esas criaturas y si en su monasterio tienen un ejercito de ellos a la espera. No lo dije antes porque suponia que era uno de los poderes de Japhet, pero algo me dice que, aunque para vos pueda ser algo conocido, si que debería haceos participes de ello.

Una sensación de satisfacion me recorre cuando digo las últimas palabras, información que habia guardado para una pregunta de este tipo, un intento de enmascarar la doble traición cuando Hardestat aparezca en acción, una manera de que si habian descubierto que algo me quedaba en el tintero, puedan pensar ahora que era lo de los hombres resucitados

-¿conocer los peligros?- repito sus palabras lentamente, lo que me pide es imposible, hablar con la anciana me ha servido para aclarar mis ideas, pero lo que se de cierto es prácticamente nada. Me siento mas preparado para afrontar mi futuro, pero no creo tener ninguna respuesta, y no me parece que Durga Syn me vaya a ser de mas ayuda

-intentare hacer como decis. creo que ya os he molestado bastante de todos modos, y tengo mucho en que pensar-

Me levanto sacudiéndome de las piernas un polvo imaginario

-gracias por vuestra ayuda, espero ser capaz de hacer lo correcto-

Dicho esto me despido de ella con una inclinación dispuesto a partir una vez mas, inseguro de mi destino

La anciana se despide de tí con un leve movimiento de cabeza y se levanta a tu lado para perderse entre las chavolas y carretas del poblado gitano.

Cuando vuelves al monasterio Japheth no parece muy contento de verte po allí, pero sin dudarlo te acoge en sus aposentos dándote una habitación y pidiéndote que no te alimentes de ninguno de los huéspedes del recinto.

Las noches pasan algo más entretenidas en compañía del enigmático a la vez que fascinante Japheth, quien conversa contigo con un infinito conocimiento de tu nueva naturaleza. Sin embargo, cuando tratas de hablarle del plan en contra de Cappadocius el hombre se pone a la defensiva

- Mi padre no aceptará nada de esto... permitirá que el chiquillo de su chiquillo venga aquí, independientemente de las intenciones de Claudius. Se me ha prohibido intervenir. Tan sólo puedo perdonar.

Durante tu presencia en el monasterio te percatas de algo más. Es cuando en la tercera noche, de camino a los aposentos de Japheth divisas en el claustro bajo la luz de la luna a una mujer de apariencia sobrenatural, pero antes de que puedas ver su rostro, su figura desaparece entre las columnas.

Claudius aparta el brazo de tu hombro en lo que interpretas como una expresión de satisfacción

- Antes de convertirnos en vástagos, invocamos las almas de los vampiros y aprendimos sus secretos.

Dice dispuesto a compartir parte de la antigua historia que esconde su linaje.

- Eso nos hizo lo bastante sabios como para saber qué ofrecer a los Capadocios a cambio de un lugar en su clan: aportamos nuestro conocimiento esotérico del otro mundo. Podemos ayudarles a reunir almas. Tenemos distintas utilidades para estos espíritus errantes. 

El antinguo ahora se deja caer de nuevo en su silla presidencial

- Los asaltantes que viste renacer de la muerte son el fruto de las enseñanzas que mi familia ofreció a Japheth, no hay nada que temer.

Luego mira de nuevo a sus compañeros y dice en tono de cierre

- Si no hay más que añadir, seguiremos con los preparativos pertinentes, podéis quedaros aquí en nuestro refugio los días restantes hasta el encuentro con Japheth.

Pasan dos noches en compañía de los conspiradores, realmente no parecen sospechar nada y finalmente la llegada de un roedor con una nota enlazada a su cola trae las sencillas palabras que lees con atención.

"Finge seguir al lado de Claudius hasta la noche del encuentro. Estaremos preparados. Hardestadt"

Pasan las noches y los conspiradores os acogen como iguales mostrandoos su conocimiento de vuestra recién adquirida naturaleza y disipando las dudas sobre sus motivos en la traición a Japheth hasta el punto en que sus argumentos incluso parecen razonables.

Es en el anochecer del cuarto día cuando un viejo conocido cruza las puertas del dormitorio que ambos compartís: User Kuk