Pese a que apenas acababa de amanecer cuando Mangred fue reprendido por ayudar a escapar al ladrón, el joven sacerdote no se atrevió a salir de su habitación pese a que el día fue tremendamente agitado.
Ni siquiera salió cuando, pasados unos pocos minutos después de su "encierro", sintió como toda la ciudad se agitaba debido a un terremoto que abrió numerosas grietas a lo largo de toda la urbe. El asunto era demasiado serio como para pensar en desobedecer de nuevo las órdenes de Ferdinan. No, el joven estaba decidido a esperar a que le llegase el castigo que tuviese que llegar y por tanto esperó, rogando a Lazhánder, a que éste llegase.
Pero lo único que llegaba eran otros novicios, al parecer muy excitados por lo que estaba aconteciendo en la ciudad. Según le contaron, gran cantidad de magos estaban sufriendo unas terribles visiones. En ellas veían a Halaster, “el Mago Loco de Bajomontaña”, gritando y fuera de sí, además de cavernas que se venían abajo. Había ocurrido algún tipo de desastre en la mazmorra debajo de la ciudad y la gente temía que Aguas Profundas sufriese las consecuencias.
Mas la sentencia condenatoria no llegaba. Mangred pasó todo el día y toda la noche esperando, alimentándose de sus reflexiones y dormitando a todas horas pero casi sin descansar hasta que finalmente el momento llegó.
El joven sacerdote esperaba ver a Ferdinan por lo que se sorprendió cuando quien apareció a llamarle fue su tutor, Lionel, cuyo semblante reflejaba una honda tristeza. Con su diestra aguantaba, a duras penas, una pesada cota de bandas que dejó caer sobre el lecho del muchacho antes de sentarse junto a él. Además, en una mochila de grandes dimensiones, traía una maza de armas, un escudo de acero con el sol del Señor del alba dibujado en él y multitud de otros útiles.
En un principio todo parecía apuntar que iba a ser su tutor el que se iba de viaje, pero eso era imposible ya que acababa de retornar de casi un mes de travesía y todavía se mostraba cansado.
«- No Mangred, eres tú el que te marchas y ésta vez no puedo hacer nada por evitarlo»- afirmó Lionel mientras se iba descargando de los objetos-.«Varios de nuestros compañeros han estado sufriendo unas extrañas visiones durante el día de ayer y durante toda la noche... y no sabemos porqué. En principio todo parecía apuntar únicamente a los usuarios de magia arcana, pero no, numerosos sacerdotes, de distintas fes, también se ven acosados por extrañas visiones. No sabemos mucho de qué significan. Únicamente sabemos que el viejo Halaster necesita que se haga algo pronto y que de ello puede depender que la ciudad siga en pie. Nuestras oraciones se estrellan contra las protecciones mágicas de la mazmorra, incapaces de poder atravesarlas para ver qué ha sucedido realmente, ni en qué podríamos ayudar nosotros. Por ello se ha decidido que tu misión expiatoria será precisamente ésa: averiguar qué ha pasado ahí abajo.»
«Me consta que hay un gran número de aventureros dirigiéndose hacia Bajomontaña. Te recomiendo que trates de unirte a algún grupo y hagas lo posible por mantenerte a salvo. De todos es sabido que el mal acecha en cada recodo de esa apestosa caverna, así que ten cuidado: el destino de la ciudad podría estar en tus manos.»
«El Portal Abierto»- le comentó mientras se alejaba lentamente de el joven, tratando de no darle tiempo a súplicas que el sacerdote no podría responder-«es el principal punto de reunión para aquellos que quieren adentrarse en Bajomontaña. Sólo puedo desearte suerte Mangred. Suerte... y hasta pronto.»-
CONOCIMIENTO EXTRA DE LA CIUDAD:
La Iglesia de Lazhánder
Aunque la humanidad ha morado a la sombra del monte Aguas Profundas desde tiempos inmemoriales, la ciudad del Esplendor ha conservado la energía de un joven y prometedor centro comercial lleno de expectaciones generación tras generación. Este espíritu de renovación está en armonía con las enseñanzas del Señor de la mañana, y es la principal razón por la que muchos agundios abrazan las enseñanzas de Lazhánder. Como resultado de ello, la Iglesia de Lazhánder es una de las principales de Aguas profundas.
La Iglesia de Lazhánder está dividida en tres facciones, aunque hay poco desacuerdo entre las tres: el clero de Lazhánder, la Orden del Aster y la Orden del Alma solar. El clero se dedica principalmente a defender a los fieles, mientras que la Orden del Aster comprende a los combatientes sagrados del Señor del alba, dedicados a la destrucción de los muertos vivientes malignos y a la defensa del clero. Por su parte, la Orden del Alma sola formalmente no es parte de la Iglesia del Señor del alba, y proclama una alianza idéntica con las Iglesia de Selûne y Sune, pero en realidad esta hermandad monástica lleva mucho tiempo asociada principalmente con los seguidores de Lazhánder.
REGLAS ADICIONALES
Clero de Lazhánder: En torno a los trescientos miembros.
- “Base de operaciones”: las Agujas de la Mañana (en la frontera entre el barrio del Castillo y el barrio Marítimo, justo en frente del Campo del Triunfo {un enorme estadio al aire libre donde suelen realizarse exhibiciones y todo tipo de competiciones}).
- Figura de máxima autoridad: gran resplandor Ghentilara: es la anciana suma sacerdotisa de las Agujas de la mañana. Pese a que todavía retiene la suave complexión aceitunada de una joven de su Khóndazh nativo su largo cabello trenzado se ha vuelto blanco como la nieve con el paso de los años. Aunque es estricta y tiene poca paciencia con la malicia o la blasfemia, es muy querida por su congregación.
- Requisitos: debes dar un diezmo de un 10% de los beneficios de cualquier nueva empresa o 50po, lo que sea menor. Esto además de una cuota mensual de 2po. Debes seguir los dogmas de la fe de Lazhander.
OTROS:
- En tu historia, Ferdinan ha pasado de ser el que mayor cargo ostenta a ostentar uno de los puestos mayor importancia dentro de las Agujas de la Mañana.
- Preparar conjuros diarios
- ¿Te falta la descripción o es cosa mía?
Pero Lionel , intenta interrumpir el impetuoso Manged que se detiene en su protesta ante un leve gesto del tutor .
Cuando este acaba , la cara del joven lejos de mostrar tristeza , refleja una mezcla de alegria , sorpresa y alivio .
Maestro , no imagino cuanto habeis tenido que rogar a Ferdinan para que no solo no me castigue sino que me premie . Si se que pensais que esto es un castigo y por lo que veo en vuestro rostro incluso llegais a pensar que es una sentencia de muerte , mas yo veo clara la mano de Lazhánder que me empuja hacia la lucha contra la oscuridad y me da la oportunidad de demostrar mi valia . Dice mientras no para de observar los pertrechos que ha traido su tutor .
Mas me honrais , al traerme vuestra vieja cota de bandas y estos magníficos enseres . Los llevare con honor haciendo que os sintais orgulloso de mi .Termina añadiendo el joven casi con lagrimas en los ojos .
Me falta la descripción , y los conjuros en cuanto pueda los miro y los pongo .