Valerosamente, la legionaria de acero desenvaina su espada encantada y acomete con todo su ímpetu al dragón de obsidiana, haciendo que vayas esquirlas de piedra volcánica salten por la fuerza del golpe. Pero es como atacar a una pared y, viéndolo, Kylian opta por reemprender su veloz retirada.
Una retirada que se ve frenada por la repentina aparición al trote y en sentido contrario de Ulfgar, justo en una intersección en la que ni uno ni otro se veían mutuamente. Ambos chocan y es un milagro de Gilean el que, de resultas de ese impacto, la sacerdotisa goblin no salga volando hacia atrás y aterrizando sobre sus posaderas o contra la espalda de Ailaserenth.
Sola ante el peligro, empuñando su antorcha en la mano derecha y la espada en la izquierda, Enrielle nota de repente cómo su visión comienza a oscurecerse y nublarse justo en el instante en que su atacante se abalanza sobre ella. Y siente más que ve los afilados colmillos de piedra clavándose en su carne.
Tirada oculta
Motivo: Ataque
Tirada: 1d20
Resultado: 8(+13)=21 [8]
Tirada oculta
Motivo: Daño
Tirada: 2d6
Resultado: 8(+7)=15 [2, 6]
NOTA: Enrielle debe superar un TS de Fortaleza (CD 18) o quedarse ciega.
Enrielle (2) → 11/69 [heroísmo5, resistir energía (fuego)9, ensordecido16; bolsa de supervivencia: 1/5 usos diarios disponibles] ⇒ tu turno
Kylian (17) → 39/63 [protección vs energía (fuego)6, arma mágica mayor11, visión verdadera19; cristal de vida: 5/10 usos diarios disponibles]
Ailas (15) → 33/33 [soportar elementos1, disfrazarse2, armadura de mago3, ojos fisgones4, ensordecido16, invisibilidad17, globo menor de invulnerabilidad18]
Ulfgar (15) → 96/96 [vestidura mágica7, resistir energía (fuego)8, heroísmo5]
Zakhar (5) → ileso
Dragón (5) → ileso
1: Soportar los elementos [permanece confortable entre -10ºC y 60ºC; durante algo menos de 16 h]
2: Disfrazarse (NL 8) [tiene la apariencia de un comerciante humano, durante algo menos de 20 min]
3: Armadura de mago (NL 8) [+4 de armadura a la CA, durante algo menos de 8 horas]
4: Ojos fisgones (NL 8) [12 orbes situados a 350' de Ailas regresarán a él si ven acercarse algún enemigo, durante algo menos de 8 horas]
5: Heroísmo (NL 8) [+2 de moral a las tiradas de ataque, TS y pruebas de habilidad; durante algo menos de 80 minutos]
6: Protección vs energía (fuego) (NL 9) [puede absorber hasta 76 puntos de daño por fuego; durante algo menos de 90 min]
7: Vestidura mágica (NL 8) [su armadura obtiene un bonificador +2 de mejora a la CA, durante algo menos de 8 horas]
8: Resistir energía (NL 8) [RE 20 (fuego), durante algo menos de 80 min]
9: Resistir energía (NL 3) [RE 10 (fuego), durante algo menos de 30 min]
11: Arma mágica mayor (NL 9) [el bastón de Kylian se considera un arma +2, durante algo menos de 9 horas]
16: Ensordecido [incapaz de oír, -4 en la iniciativa, falla automáticamente las pruebas de Escuchar, 20% de fallo al lanzar conjuros con componente verbal]
17: Invisibilidad (NL 8) [durante 13 asaltos o hasta que ataque]
18: Globo menor de invulnerabilidad (NL 8) [protege en un círculo de 10' contra efectos mágicos de hasta nivel 3, durante 10 asaltos]
19: Visión verdadera (NL 10) [ve la realidad a 120', durante algo menos de 10 min]
20: Toque de idiotez (NL ?) [-6 INT, -6 SAB, -6 CAR, durante algo menos de 80 min]
Aquello ya era demasiado. Ella sola no podía contener al dragón, y la última dentellada la había dejado malherida. Pero cuando notó que de algún modo empezaba a perder la visión temió realmente por su vida. Sorda, ciega y devorada por un dragón de piedra.
—¡Grrr!— gruñò con fuerza, sobreponiéndose de algún modo a la ceguera.
No. Enrielle ya había mirado a la muerte a los ojos y no estaba dispuesta a morir allí. Con la espada por delante y manteniendo la guarda alta, la Legionaria de Acero se batió en retirada.
Motivo: TS fortaleza
Tirada: 1d20
Dificultad: 18+
Resultado: 16(+13)=29 (Exito) [16]
Acción de retirada a todo lo que de el movimiento por donde habíamos venido.
─¡Umpf! ─exclamó el enano al notar el impacto del "gnomo" contra él. No dijo nada más, pese a que hubo varios apelativos poco cariñosos que su mente dedicó a Kylian.
La estabilidad propia de los enanos, o puede que el más que considerable peso propio del equipo de batalla que portaba, impidió que Ulfgar perdiera el equilibrio. Pero el impacto hizo que frenara su paso, para no causar daños. Y eso era un error: No había tiempo que perder, sus amigos lo necesitaban. Enrielle, según veía, estaba a punto de sucumbir al nuevo dragón. Haciéndose rápidamente a un lado, el Yunque Poderoso de Reorx volvió a avanzar con paso decidido, llevándose la mano a su nuevo y flamante símbolo sagrado.
─¡Enrielle, retrocede! ─dijo mientras invocaba el calor de las forjas de su dios.
La magia divina, convocada por Ulfgar, tomó forma de una imponente muralla de fuego enfocada hacia el dragón. Incluso aunque el daño de un fuego normal no pudiera ocasionar grandes daños en un monstruo de piedra, aquello era un fuego mágico y aquel, desde luego, no era La Llama Negra. Aunque sirviera sólo para relentizar su avance, sería suficiente y de todas maneras él no alcanzaría todavía la posición de la humana.
─Reorx, que sea suficiente para salvarle, os lo ruego.
Avanzo y Lanzo Muro de fuego enfocado hacia el monstruo y justo a continuación de la posición que ocupaba Enrielle.
- ¡Maldita loca! - Exclamó la goblin aterrada por la situación. - ¿Qué está haciendo? ¿Ha perdido el juicio?
A decir verdad, Kylian estaba muy mermado mentalmente. No podía hacer demasiado lastrado como estaba de su habitual sabiduría. Por desgracia, sin las bendiciones que Gilean le otorgaba, poco podía hacer en el cuerpo a cuerpo y en la situación mental en la que se hallaba, le era imposibles reclamar sus dones.
- Soy un complemento inútil... - Se dijo a si mismo. - Sólo tengo ganas de llorar...
Agarró si bastón y sin pensar demasiado cargo contra el dragón. Morir matando sería lo último que haría. Al menos iba a intentarlo, pues conseguirlo iba a ser otro tema bastante más complejo, mas cuando el ataque que realizó fue torpe y con fuerza escasa.
- ¿Por qué me abandonas ahora Gilean? - Se preguntó a si mismo. - ¡Te imploro el perdón de mis pecados! ¡Te serviré con más ahínco aún si cabe, si inrercedes por mí y mis agentes de la neutralidad!
Motivo: Carga
Tirada: 1d20
Resultado: 5(+11)=16 [5]
La visión de este nuevo dragón me sobrecoge, a pesar de que no es mucho mayor que un caballo grande. Lo que más me inquieta es que no lo reconozco como ningún otro dragón sobre el que haya leído. Evidentemente no es un dragón de metálico, tampoco es uno cromático, pero es que ni siquiera es un dragón del Caos como lo era la Llama Negro.
Esto es otra cosa, pero no parece que vayamos a tener oportunidad de investigarlo en profundidad a juzgar por el estado en el que se encuentran Kylian y Flechas de Muerte. Que ambos hayan retrocedido tan deprisa que prácticamente me han arrollado, me parece lo más juicioso. Por eso no puedo dar crédito cuando veo que nuestro gnomo da media vuelta y embiste de nuevo contra la criatura de la que escapaba hace tan solo unos segundos.
Su comportamiento es tan sumamente idiota y errático, que solo puedo asumir que se encuentra bajo el influjo de algún encantamiento; uno que gobierna sus actos o bien que ha reducido su capacidad de raciocinio a niveles simiescos. Por desgracia, en estos momentos no puedo hacer nada por su dolencia más que intentar sacarlo de aquí. Sacarnos a todos de aquí, por más que se empeñen en ponérmelo imposible corriendo en direcciones opuestas.
«¡Solinari, qué difíciles me hacen las cosas estos niños!»
Sin ser capaz de oír mi propia voz, pronuncio las palabras para deshacer el sortilegio de invisibilidad que me protege, maldiciendo para mis adentros por tener que exponerme de este modo solo para que mis compañeros sepan en torno a quién deben agruparse.
—¡AGARRAOS A MÍ, VOY A SACAROS DE AQUÍ! —digo, o al menos creo que lo hago, pues los sonidos continúan llegándome distorsionados como si estuviera dentro de un mar de melaza—. ¡ULFGAR, SUJETA A FLECHAS DE MUERTE, QUE NO SE VAYA!
Mientras espero a que obedezcan las sencillas indicaciones, comienzo a rebuscar en mi estuche para rollos de pergamino el que debería ponernos a salvo. Suponiendo, claro está, que sea capaz de pronunciar correctamente las palabras del complejo conjuro de teleportación.
Motivo: Saber (arcano)
Tirada: 1d20
Resultado: 6(+20)=26 [6]
Motivo: Deshacer invisibilidad
Tirada: 1d100
Dificultad: 21+
Resultado: 80 (Exito) [80]
Acción estándar: deshago mi invisibilidad, mientras me cago por lo bajini en los muertos de todos por tener que hacerlo xD
Acción de movimiento: echo mano a mi pergamino de "teleportar", mientras me sigo cagando en todos por tener que malgastarlo de este modo.
Al límite de sus fuerzas pero resistiendo el embrujo que trata de cegarla, la legionaria de acero retrocede unos pocos pasos blandiendo su antorcha frente al dragón de piedra antes de dar media vuelta y echar a correr hacia vosotros.
Al ver que Enrielle deja de cubrir la retaguardia de vuestro grupo para unirse a los demás, Kylian decide inmolarse en un acto de valeroso sacrificio final, lanzándose una vez más a por el dragón para daros a los demás la ocasión de escapar. Su bastón sagrado golpea una vez más a la criatura, haciendo que se fragmenten unas pocas esquirlas de obsidiana, pero poco más.
Ailaserenth, empeñado en cumplir su juramento al Cónclave de manteneros a todos con vida, abandona entonces su invisibilidad mientras imparte instrucciones a voz en grito de que todos os reunáis a su alrededor; aunque sin grandes esperanzas de que vuestro caótico grupo siga sus indicaciones.
Motivo: Kylian. Daño
Tirada: 1d4
Resultado: 4(+3)=7 [4]
NOTA: Turno de Ulfgar. Paro el asalto antes de su acción porque entiendo que las acciones de Kylian (y/o de Ailas) pueden condicionar las que él ha declarado.
NOTA 2: Aunque los turnos de Ailas y de Ulfgar ocurren de forma concurrente, asumo que el enano ha oído al elfo y, si quiere, puede realizar una prueba de presa para tratar de agarrar a Enrielle (que acaba de pasar por su lado trotando alegremente).
Ulfgar (15) → 96/96 [vestidura mágica7, resistir energía (fuego)8, heroísmo5] ⇒ tu turno
Zakhar (5) → ileso
Dragón (5) → ileso
Enrielle (2) → 11/69 [heroísmo5, resistir energía (fuego)9, ensordecido16; bolsa de supervivencia: 1/5 usos diarios disponibles]
Kylian (17) → 39/63 [protección vs energía (fuego)6, arma mágica mayor11, visión verdadera19; cristal de vida: 5/10 usos diarios disponibles]
Ailas (15) → 33/33 [soportar elementos1, disfrazarse2, armadura de mago3, ojos fisgones4, ensordecido16, globo menor de invulnerabilidad18]
1: Soportar los elementos [permanece confortable entre -10ºC y 60ºC; durante algo menos de 16 h]
2: Disfrazarse (NL 8) [tiene la apariencia de un comerciante humano, durante algo menos de 20 min]
3: Armadura de mago (NL 8) [+4 de armadura a la CA, durante algo menos de 8 horas]
4: Ojos fisgones (NL 8) [12 orbes situados a 350' de Ailas regresarán a él si ven acercarse algún enemigo, durante algo menos de 8 horas]
5: Heroísmo (NL 8) [+2 de moral a las tiradas de ataque, TS y pruebas de habilidad; durante algo menos de 80 minutos]
6: Protección vs energía (fuego) (NL 9) [puede absorber hasta 76 puntos de daño por fuego; durante algo menos de 90 min]
7: Vestidura mágica (NL 8) [su armadura obtiene un bonificador +2 de mejora a la CA, durante algo menos de 8 horas]
8: Resistir energía (NL 8) [RE 20 (fuego), durante algo menos de 80 min]
9: Resistir energía (NL 3) [RE 10 (fuego), durante algo menos de 30 min]
11: Arma mágica mayor (NL 9) [el bastón de Kylian se considera un arma +2, durante algo menos de 9 horas]
16: Ensordecido [incapaz de oír, -4 en la iniciativa, falla automáticamente las pruebas de Escuchar, 20% de fallo al lanzar conjuros con componente verbal]
18: Globo menor de invulnerabilidad (NL 8) [protege en un círculo de 10' contra efectos mágicos de hasta nivel 3, durante 9 asaltos]
19: Visión verdadera (NL 10) [ve la realidad a 120', durante algo menos de 10 min]
20: Toque de idiotez (NL ?) [-6 INT, -6 SAB, -6 CAR, durante algo menos de 80 min]
¿Por qué le pedía Ailas que sujetara a Flechas? Ella misma podía parar su... demonios, la humana estaba ensordecida por el conjuro que el túnica blanca había activado de forma tan despreocupada hacía sólo unos minutos.
─¡Enrielle! ¡Para! ─exclamó Ulfgar, lento de reflejos y cuando la humana le rebasaba haciendo caso omiso de sus voces y su intento de detenerla.
Aquella situación no tenía ni pies ni cabeza: acababan de derrotar a un enorme y famoso dragón contra el que apenas nadie había sobrevivido y ahora la arquera se había dedicado a enfrentarse al cuerpo a cuerpo, el que había conducido a la arquera a una emboscada había primero huído y ahora se lanzaba de cabeza hacia una muerte casi segura, el elfo gritaba como una verdulera y él, bueno, él sólo estaba aturdido por la situación.
─Maldición, Ailas, quedamos tú y yo... ─dijo el enano colocándose entre el elfo y la contienda.
Un túnica blanca sin hechizos y un viejo enano embutido en una armadura contra un dragón de piedra. Otro dragón de piedra. Y si no acaba aquel monstruo con ellos lo haría la exasperación por la estúpida situación en la que se habían visto envueltos, otra vez. ¿Por qué no podían los jovenzuelos estarse quietos por una vez?
Motivo: Prueba de presa
Tirada: 1d20
Resultado: 2(+9)=11 [2]
Intento detener a Enrielle, pero me parece que como ella no quiera parar la retirada, me esquiva y sigue su camino...
La carga de Kylian contra el dragón y inesperada la reaparición de Ailaserenth como salido de la nada, pillan al pobre Ulfgar con el pie cambiado cuando ya se disponía a levantar un muro de fuego entre sus compañeros y su monstruoso perseguidor. Como puede, con las dos manos ocupadas, trata de agarrar a Enrielle cuando ésta ya ha pasado por su lado pero ella tiene las piernas más largas y lo único que consigue el veterano clérigo de Reorx es rozar el camisote de malla de su compañera. Apenas lo justo como para atraer su atención.
Entretanto, el dragón ha respondido al ataque de Kylian pero su dentellada se ha encontrado con la coraza encantada de la sacerdotisa goblin y sus colmillos de piedra no han sido capaces de atravesarla. La mano fantasmal también ha tratado de alcanzar a la enviada de la Neutralidad pero ella, una vez más, ha logrado evitarla en un auténtico alarde de agilidad.
Para entonces, el mago elfo ha conseguido dar con el pergamino que estaba buscando.
Motivo: Enrielle. Evitar agarrón
Tirada: 1d20
Resultado: 10(+11)=21 [10]
Tirada oculta
Motivo: Ataque
Tirada: 1d20
Resultado: 2(+13)=15 [2]
Tirada oculta
Motivo: Ataque toque
Tirada: 1d20
Resultado: 3(+5)=8 [3]
Enrielle (2) → 11/69 [heroísmo5, resistir energía (fuego)9, ensordecido16; bolsa de supervivencia: 1/5 usos diarios disponibles] ⇒ tu turno
Kylian (17) → 39/63 [protección vs energía (fuego)6, arma mágica mayor11, visión verdadera19; cristal de vida: 5/10 usos diarios disponibles]
Ailas (15) → 33/33 [soportar elementos1, disfrazarse2, armadura de mago3, ojos fisgones4, ensordecido16, globo menor de invulnerabilidad18]
Ulfgar (15) → 96/96 [vestidura mágica7, resistir energía (fuego)8, heroísmo5]
Zakhar (5) → ileso
Dragón (5) → ileso
1: Soportar los elementos [permanece confortable entre -10ºC y 60ºC; durante algo menos de 16 h]
2: Disfrazarse (NL 8) [tiene la apariencia de un comerciante humano, durante algo menos de 20 min]
3: Armadura de mago (NL 8) [+4 de armadura a la CA, durante algo menos de 8 horas]
4: Ojos fisgones (NL 8) [12 orbes situados a 350' de Ailas regresarán a él si ven acercarse algún enemigo, durante algo menos de 8 horas]
5: Heroísmo (NL 8) [+2 de moral a las tiradas de ataque, TS y pruebas de habilidad; durante algo menos de 80 minutos]
6: Protección vs energía (fuego) (NL 9) [puede absorber hasta 76 puntos de daño por fuego; durante algo menos de 90 min]
7: Vestidura mágica (NL 8) [su armadura obtiene un bonificador +2 de mejora a la CA, durante algo menos de 8 horas]
8: Resistir energía (NL 8) [RE 20 (fuego), durante algo menos de 80 min]
9: Resistir energía (NL 3) [RE 10 (fuego), durante algo menos de 30 min]
11: Arma mágica mayor (NL 9) [el bastón de Kylian se considera un arma +2, durante algo menos de 9 horas]
16: Ensordecido [incapaz de oír, -4 en la iniciativa, falla automáticamente las pruebas de Escuchar, 20% de fallo al lanzar conjuros con componente verbal]
18: Globo menor de invulnerabilidad (NL 8) [protege en un círculo de 10' contra efectos mágicos de hasta nivel 3, durante 9 asaltos]
19: Visión verdadera (NL 10) [ve la realidad a 120', durante algo menos de 10 min]
20: Toque de idiotez (NL ?) [-6 INT, -6 SAB, -6 CAR, durante algo menos de 80 min]
Enrielle corría mirando hacia atrás, aún con la espada en mano. Era totalmente ajena a los gritos a su alrededor, ocultos tras el molesto y persistente pitido incrustado en su cerebro. Estuvo a punto de arrearle un espadazo a aquel otro zakhar que salió de ninguna parte tratando de agarrarla. Afortunadamente vio que se trataba de Ulfgar.
—¡ULFGAR, GRACIAS A LOS DIOSES! — le gritó a la cara —¡HA APARECIDO UN DRAGÓN! ¡TIENE A KYLIAN! ¡RETROCEDIÓ, PERO LUEGO ME LO CRUCÉ PORQUE REGRESABA Y...! ¡NO IMPORTA, TENEMOS QUE AYUDARLE, VAMOS!
Enrielle regresó por donde había venido, envainado su espada y descolgándose el arco. Se situó al lado de Ailaserenth disfrazado de gordito mercader.
—¡AMIGO, AGUANTA! — gritó a Kylian.
Acción de movimiento: vuelvo y me pongo una casilla al N-E de Ailas. Guardo la espada durante esta acción.
Acción de movimiento: saco el arco.
─¡Kylian, por los dioses, retrocede! ─exclamó el enano.
Si el gnomo esperaba acabar con el monstruo de piedra a bastonazos tenía algo más que simple fe. ¿Era acaso la neutralidad un lugar donde poner las vanas esperanzas y darle alas? Haría falta un buen martillo encantado o un poderoso pico enano para perforar aquella piel pétrea. O al menos algunos poderosos hechizos. ¿Por qué no estaba lanzándolos?
Negando para sí, Ulfgar ocupó una posición defensiva, frente a Ailas e invocó, ahora sí, el poder de la forja de su dios para plantar una muralla de fuego ante él. Puede que no sirviera de gran cosa, pero al menos así esperaba poder ganar unos segundos para el pequeño clérigo...
Avanzo hasta colocarme una casilla a la derecha de Ailas.
Lanzo Muro de fuego para tratar de contener a la criatura, justo ante ella. Imagino que Kylian retrocederá, pero incluso aunque no lo haga el hechizo no es tan potente como para que, Protección contra la energía mediante, suponga un verdadero problema para él.
- ¡Voy! - Accedió el clérigo.
Enseguida emprendió la huída. Dejó atrás al dragón de piedra, la mano fantasmal y al arcaico enano oscuro, regresando junto con el elfo, Enrielle y el clérigo de Reorx. No siempre el combate era la mejor posibilidad y a veces huir era la única opción razonable.
- Espero que ese elfo estirado, valga la redundancia, nos saque de aquí. - Pensó. - Le estaré eternamente agradecido...
—¡AGARRAOS A MÍ Y ENTRE VOSOTROS! —creo que digo, pues no me oigo a mí mismo, al ver que mis compañeros finalmente se agrupan obedientemente a mi alrededor.
Yo tengo las manos ocupadas desenrollando el pergamino mágico y agradezco la luz que me proporciona Flechas de Muerte. Ahora solo espero que mi sordera no nos traicione a todos.
Este es el momento definitivo. Mientras pronuncio con cuidado las palabras escritas en tinta plateada, pienso en la seguridad de mis aposentos en la fortaleza voladora y destierro de mi mente cualquier pensamiento ominoso sobre la posibilidad de que haya sido tomada por fuerzas hostiles en nuestra ausencia.
Motivo: Teleportación
Tirada: 1d100
Dificultad: 21+
Resultado: 88 (Exito) [88]
Vagamente consciente de que la victoria es cuanto menos dudosa, la desorientada sacerdotisa de Gilean retrocede para reagruparse con sus compañeros mientras Ulfgar levanta un muro de fuego entre vosotros y el dragón de piedra.
La inmaterial barrera seguramente no pueda detener a la criatura pero es más que suficiente para darle a Ailaserenth unos pocos segundos, suficiente para que pueda terminar de pronunciar su sortilegio y sacaros a los cuatro de las profundidades de Thoradin.
Cuando las náuseas os permiten abrir nuevamente los ojos descubrís que os encontráis en las habitaciones que una vez fueron del caballero de Neraka sir Kragger Nelish, restauradas por la magia del túnica blanca y acondicionadas con el mobiliario que ha ido sacando de aquí y de allí.
Motivo: Objetivo de teleportar
Tirada: 1d100
Dificultad: 97-
Resultado: 16 (Exito) [16]
El pergamino se deshace en cenizas entre mis manos y con él, los cientos de piezas de acero que me costó transcribirlo. Por fortuna, el gasto no ha sido en vano; siento la magia bullendo en mi sangre y sé que he pronunciado bien el hechizo incluso antes de notar la extraña sensación en la boca del estómago que anticipa el viaje instantáneo que estamos a punto de realizar.
Cierro los ojos para evitar las nauseas y cuando los abro me encuentro frente a la imagen hinchada y desagradable de un humano con aspecto de mercader. Tardo un par de segundos en reconocerle como mi reflejo en el espejo de pared que tengo detrás de la puerta de mi dormitorio.
Una puerta que solo se abre por mi mano y yo me apresuro a abrírsela a mis compañeros en señal evidente de que la mejor forma que tienen de agradecerme el que haya salvado sus vidas es abandonando sin demora mi sanctasanctórum. Sin embargo, ellos no parecen darse por aludidos a juzgar por el inaudible chachareo de mis invitados.
- Bien... - Dijo la sacerdotisa mirando a todos lados, mientras comprobaba que todas las partes de su cuerpo estaban en su sitio. - Parece que estamos en casa... - Dijo entre desconcertada y aliviada.
Se acercó entonces a Ailas y le miró a los ojos. Sonrió levemente y asintió con la cabeza. Debía reconocer que había hecho un gran trabajo. Sin él no lo hubieran contado. No obstante, le tenía ganas a ese estúpido enano pustulario.
- Le daremos su merecido a ese bastardo... - Pensó para sí mismo.
- Tenemos que volver a por ese jodido martillo. - Declaró el gnomo. - Pero antes... - Miró a Ulfgar. - Dime qué tienes algo para restaurar mis capacidades mentales. Me siento con la cabeza embotada... Confuso... Y... Estupido...
"Al fin en casa" ─pensó por un momento el enano al reconocer las paredes de piedra de Mem─ "Todo lo «casa» que puedo llamar a este lugar. Y además estamos en las estancias privadas de Ailas, no deberíamos estar aquí".
─Gracias... ejem, ¡Gracias, Ailas! ¡Descansad ahora, mañana volveremos a Thoradin! ─dijo el enano a voz grito para que le oyeran los ensordecidos.
El ingeniero hizo señas a todos menos al elfo para que fueran saliendo de la habitación. Ailas se había ganado el descanso. Como todos, seguramente. Tal vez más que los jovenzuelos inconscientes, que no dudaban en buscar nuevos problemas a la primera de cambio. Aunque había que reconocerles el mérito de enfrentar a La Llama Negra con tanta entereza y efectividad. Sin ellos, sin duda, no lo habrían logrado. A veces el sentido común no era suficiente. Aunque solía ser de ayuda...
─Sí, tenemos que volver a por el "jodido martillo", sí, y habría que restaurarte las capacidades perdidas, por supuesto, Kylian, pero ahora mismo no me veo capacitado. Mañana, tras haber descansado, puedo probar una forma de restablecimiento menor para ver si surte resultado. De no ser así me vería obligado a ofrendar al menos unas 100 monedas en polvo de diamante a Reorx para que vuelvas a ser tú mismo. Así que deberás descansar. Es duro, lo sé, yo también pasé por lo mismo, pero es necesario que descansemos para poder resolver el problema...
Y vaya problema, lo de Kylian era lo de menos. A Ulfgar se le ocurrían todo tipo de ellos para completar la auto-impuesta misión. Tendrían que volver sobre sus pasos, superar a los posibles enemigos (ogros) del camino, ser reconocidos y no abatidos ante las puertas de Thoradin y arriesgarse con una nueva conversación con el fanático rey de la ciudad. Con suerte no tendrían problema alguno... pero ¿cuándo habían tenido ellos esa clase de suerte?
Enrielle parpadeó varias veces con el cuerpo revuelto, y miró a su alrededor. ¿La alcoba de Ailaserenth? ¿Qué había pasado? La sensación familiar del viaje instantáneo hasta allí hizo que al momento lo comprendiera. Mientras ella preparaba su arco, el elfo los había traído hasta allí sin previo aviso, pero salvando sus vidas.
Maltrecha, levantó una mano y se sentó en una de las sillas que tenía en el centro de la habitación con un resoplido. Necesitaba un descanso.
—VAMOS A TENER PROBLEMAS CON ESE REYEZUELO IDIOTA. — comentó a voces—PERO NOS HAS SALVADO, AILASERENTH, GRACIAS. TENEMOS QUE VOLVER EN CUANTO PODAMOS. BRUMA GRIS SE HA QUEDADO ALLÍ, Y LOS DIOSES SABEN DÓNDE ESTÁ KLUNURIG Y SI PODEMOS HACER ALGO POR ÉL.
Se quedó mirando la alfombra de Takhisis y se le puso la piel de gallina.
—DEBERÍAMOS TIRAR ESA COSA... AVISARÉ A BUGAMBILIA DE QUE ESTAMOS AQUÍ.— dijo levantándose con una mueca de dolor, camino a la puerta que pacientemente el elfo mantenía abierta.